Sí, amigos, un nuevo hatajo de famosos se mete en la casa de Guadalix para nuestro recreo y esparcimiento. Qué majos son. Así se sacrifican para hacer un mundo mejor.
¡Ya empieza!
Ojo, que la casa es súper nueva. Hay muchas estancias y parece más una fábrica que una casa.
El año que viene lo mismo hacen Gran Hermano VIP minería edition. El siguiente será Gran Hermano Dobla el Lomo en la Huerta VIP.
Entra Irma Soriano con un abrigo de piel. Ya me entra mal esta mujer. Y encima parece piel de rata camboyana. Va vestida como si fuera a un cásting de un anuncio sobre la menstruación. De un rojo que podrías soltarla en lo alto del Everest y la verían desde abajo.
Vemos su vídeo de presentación. Llevaba un escote en el que se puede hacer salto base. Nos dice que ha hecho muchas cosas en eso de la tele y de la radio. Dice que una vez rompió una radio a ver si había gente dentro. Joder, eso lo haces con una pantalla plana y te caen hostias de tus padres hasta en el cielo de la boca.
«No sé decir que no, me cuesta», dice la mujer. Joder pues vaya panorama. «Porque el ser humano es extraordinario», dice, siendo muy original, que da igual que lo haya usado Acuarius durante años.
Irma Soriano pone voz de «su tabaco gracias» y «gracias por respostar, buen viaje» cuando quiere promocionarse.
OJO: el concursante secreto es un reguetonero, una «estrella latina». Madre del amor hermoso. ¿Qué será lo próximo, Luis Cobos?
El premio es de 100.000 euros.
Entra Toño Sanchís. Vídeo de presentación. Dice que es representante artístico. Teniendo en cuenta que era el representante de Belén Esteban lo de artístico se lo podía ahorrar. Dios mata un gatito cada vez que se une a la Esteban con el Arte.
Joder, Toño se atribuye cualidades que le hacen parecer un santo. Es más, es posible que le suene el móvil y sea Juan Pablo II para pedirle consejo de parte de Dios. Es la perfección hecha persona. Tiene tanto amor propio que es posible que se empiece a copular a sí mismo de un momento a otro.
Ahí le vemos. Ha entrado a la sala del maletín. Va vestido como Tino Casal en una comunión. Ahora mismo está Belén Esteban en su casa echando espumarajos por la boca y cerrando los ojos mientras dice en bucle «mentiendes? mentiendes?».
Ahora en el plató Jordi González entrevista a su hermana y le pregunta por su familia, como si estuvieran en un ascensor. La mujer dice que en su familia han pasado por «problemas laborales».
Vamos con Aless Guibaja. Joder. Dice que es «influencer». Se me acaban de retorcer los intestinos haciéndome un nudo marinero. Tiene más tontería encima… Es como una caricatura. Se pone los pantalones tan apretados que creo que ha vuelto a la infancia porque los testículos han vuelto a metérsele en el cuerpo.
Es una especie de Flanders rebozado en brillantina. Encuentra a Irma Soriano y se ponen a hablar de su maquillaje. Del de ambos. Irma Soriano lleva diez minutos en la casa y es la tercera vez que cita a alguien de su familia.
Los dos deben buscar en el despacho en el que están tres llaves para poder entrar en la casa. El caso es que hay un ventilador industrial que llena de papeles volando el despacho.
No hacen ni puto caso al Súper. Irma aprovecha un parón para preguntar a Aless: ¿Y tu acento mexicano por qué es?.
OJO: Entra Marco Ferri. Es un guaperas que siempre va en ferri y nunca en tren.
Vídeo de Marco. Debe dolerle la cara, pero no de ser tan guapo, si no de fruncir el entrecejo para parecer profundo y misterioso. «Soy bastante cabeza dura», dice de sí mismo. Guay, siempre puede trabajar en una empresa de demoliciones.
Los tres entran a la casa. Salen al patio. «Es súper cool», dice Aless. Irma mira la luna. Marco se mira a si mismo en el espejo.
«Hay muy poco rosa… no hay jacuzzi», dice Aless, que es muy de fijarse en las cosas importantes.
NOTA: La cazadora de cuero de Marco Ferri es más fea que empujar a una vieja al paso de un camión. Qué horror. Eso lo llevas a la pasarela Cibeles y los diseñadores empiezan a morir como moscas con insecticida.
A Irma le preocupa que sólo hay un retrete. Al parecer Irma es muy de caca a menudo.
Habla en el plató la novia de Marco. Lleva puesta una blusa transparente con pegatinas que parece un filtro para saltarse la censura de pezones del Instagram.
Vamos con Alejandro Abad, el doble de Bigote Arrocet. Dice que es muy músico y mucho músico. Y dice que él no hace canciones, que hace «hits, canciones pegadizas». O sea, canciones de esas que harían llorar a Beethoven.
Habla de Juan Camus y dice que él era un aficionado en OT y que él compuso Mi música es tu voz. Bueno, pues nada, hostia que te crió. Juan Camus respondiendo en Twitter en 3, 2, 1…
El gran compositor se arrodilla en el confe y besa el suelo. Tiene complejo de Papa. Se ha puesto unas gafas de color verde fosforito que cuando se vaya la luz la gente va a correr hacia él pensando que es la salida de emergencia.
TUTTO DURÁN es el concursante sorpresa… dicen que es súperfamoso… Y UNA MIERDA. NO LE CONOCEN NI EN SU CASA A LA HORA DE COMER
A este tío lo paseas por Gran Vía un sábado a las ocho de la tarde y no le reconoce nadie. Antes se hace la gente un selfie con una farola que con él. No digo yo que no haya compuesto muchas cosas de mucho oírse, pero no. No es famoso.
A Tutto no le conoce Naddie.
Efectivamente: ES UN FAKE
O sea, que no es famoso. Es una especie de prueba para el resto de concursantes. Es un chaval canario que hace música y esas cosas pero que no es famoso. Vídeo lacrimógeno en el que nos dice que tiene menos dinero que el monedero que Carpanta.
Total, que en la casa tiene que mantener la mentira de que es súperfamoso. Eso sí, se llama Tutto Durán igualmente.
Tutto entra en el confe y ve a Alejandro Abad. JA JA JA JA
Alejandro le saluda como si le conociera de toda la vida «qué sorpresa, qué sorpresón».
JA JA JA JA JA
Abad está flipando y tratando de recordar si le conoce de algo. Me descojono.
«Por supuesto, conozco su trabajo y me parece un gran exponente de la música», dice Alejandro Abad. JA JA JA JA JA JA
LA MADRE QUE LO PARIÓ. En el DNI de Alejandro Abad como padre aparece Disimula Gutiérrez y como madre Hipocresía Gómez.
El Súper le cuenta la trola a Alejandro Abad y él la escucha haciéndose el sueco, como si no acabara de mentir como un descosido hace dos minutos.
Nuevo post.
CAMBIOOOOOO DE POST. REFRESCAD. CAMBIOOOO.
Esto…todo bien lo leído, excepto que Atajo es sin H…Gus.
El resto me gusta.
08 enero 2017 | 23:45