La concejal de ciudadanos salió de GH VIP para demandar a sus compañeros por «jueguecitos sexuales»

Madre del amor hermoso de todos los santos y sacramentos.

¿Sabéis lo de hacer una montaña de un grano de arena? Pues hay gente que es capaz de hacer el puñetero Everest con un trocillo de moco seco.

Anoche en El Debate Carmen Lopez, concejala expulsada de Ciudadanos, dijo que se había ido de la casa porque quería emprender acciones legales contra sus compañeros (sobre todo contra Carlos Lozano) por el episodio del embalsamamiento.

Lozano, Rappel y Carmen López, en el momento del embalsamamiento. (TELECINCO).

Veréis, lo de la sensibilidad en un tema sexual es cosa de cada cual, pero la realidad es la realidad y esta muchacha, en mi opinión, está escurriendo el bulto. Me refiero a que quiere eludir responsabilidades, no a que haya metido la barriga de Gérard Depardieu en una secadora.

«Quiero tomar medidas legales», le dijo al Súper, porque «los temas sexuales, no».

Y después se puso a soltar un discurso entre lloros y respiraciones del tipo vaca con asma, en el sentido de «mi dignidad no se vende, ni mi cuerpo se vende, yo no provoqué que me hicieran jueguecitos sexuales por hacer una portada reivindicativa en Interviú».

A ver… tiene toda la razón. Salir desnuda en una revista, vestirse con ropa corta, ni ir desnuda por la calle es excusa para que nadie te toque, te insulte, te veje o similares. La libertad de cada uno se respeta y la nuestra no es excusa para quebrantar la de los demás… sólo que en este caso no hubo nada de lo que ella dice. (Recordemos que Liz lo presenció todo y negó que hubiera «vejaciones»).

Jo, lo que más me ha gustado es lo de la «portada reivindicativa en Interviú«. Sí, era eso o la portada del New York Times, lo que pasa es que en Interviú tenían cátering en la sesión de fotos.

Espero que a Rita Barberá o Julián Muñoz no se les ocurra hacer una portada reivindicativa en Interviú porque me da el telele. Pensándolo bien, eso sería más bien una portada amenaza.

«No se ve ni una teta», dijo de su posado. Pues vaya reivindicación. Yo es que si una teta, una nalga o el ciruelo libre no reivindico nunca. No veáis las que se armaban en el colegio cuando iba a hablar con el tutor para que me subiera la nota en un examen. Salía del despacho siempre gritando «¡LIBERAD A WILLY!» con el badajo meneándose como si estuviéramos en misa de 12 y estuvieran repicando las campanas. No me subían la nota, pero qué risas.

Total, que la concejala dijo que había «causa legal» y que se había cometido «un delito» con ella y que quería «reparación inmediata» y que se la «desagravie». En la próxima gala mandará a un padrino que retará a Lozano a un duelo a pistola fuera de las murallas de la ciudad al amanecer. Qué moderna esta mujer.

Para acabar de reivindicar, hizo una huelga de hambre y sed que duró un rato. 

En El Debate no quiso dejar claro nada y se fue por las ramas como si fuera un mono tití con prisas. Dijo que quería poner una denuncia, pero que no podía hablar. Y que si tenía responsabilidades por ser electa y no sé qué…

Pues yo soy presidente de mi comunidad y si me meto en Gran Hermano no me sacan ni para poner una derrama para una piscina en el ático.

La realidad es que en la casa no la aguantaban ni los cimientos. Salió nominada, su archienemigo Carlos Lozano no y ella se cogió un berrinche. Tenemos imágenes exclusivas:

Y es que los «políticos» están en esta edición cubriéndose de gloria pura. Hacen que el Emperador Nerón, el Emperador Calígula y el Emperador Palpatine parezcan buenas opciones para darles un cargo.

Porque el otro elemento relacionado con la política, El pequeño Nicolás, ha hecho política a pequeña escala, reproduciendo lo que les pasa a los políticos en la vida real: ya le odia todo el mundo menos los que le lamen el culo.

En la política todo se mueve por detrás, como en un cuarto oscuro, y Nicolasín no se ha dado cuenta de que está en GH, donde no hay despachos con olor a puro y madera rancia (sí, los despachos son como las cantinas portuarias del siglo XVIII), sino tropecientas cámaras.

Así que después de que todos sus compañeros le vieran dar indicaciones a sus esbirros sobre cómo nominar, ahora todos piensan que él manipula a Javier y a Alejandro. Joe, los demás menudos genios, por otra parte, casi les tienen que hacer un esquema para que se dieran cuenta…

Total, que hay dos grupos en la casa: todos y los tres jinetes del nominalipsis. Pena más grande, oye.

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