Lo último: usar el sufrimiento de los niños para quedarse en Gran Hermano 15

Fran se ha convertido en el nuevo Luis y Luis, en el nuevo Fran. Es como la sanchificación del Quijote y viceversa. Solo que sin saber tantas palabras. Ahora es Luis el que se dedica a darle charlas al apoderado, que está más cagado que un bebé comiendo kiwis.

El estratega se ve ahora al borde del abismo y es lo suficientemente listo como para saber que se va él. Y se ha pasado estos días preguntando a todo cristo en la casa que si le ha nominado y porqué. Incluidos los maceteros, con los que se ha picado porque no le han respondido.

¿Y cuál es ahora su plan maestro? Pues ha decidido ponerse en plan Teresa de Calcuta y le ha propuesto a Luis que si alguno de los dos gana hagan un contrato para que el dinero se vaya a una fundación benéfica para los niños necesitados de su «comarca».

JA JA JA JA No se lo cree ni él. Eh, España, no me echéis, tengo que quedarme porque lucho por los niños hambrientos… ¡¡QUE CARADURA!! El tío hasta se echó a llorar en el confe y dijo que llamaría a la fundación «Pequeño Hermano».

«Te ruego encarecidamente que quedara entre nosotros», le dijo al súper en el confe. ¡¡PREMIO MAX DE TEATRO PARA ÉL!! Señor bendito, tiene más morro que Yola Berrocal con una reacción alérgica al gloss.

Pero el tiro le salió por la culata, porque Luis le dijo que y una mierda, que él su pasta se la queda y que ya ayudará luego si hace falta.

Estoy viendo a los niños necesitados de su comarca votando para que Fran sea expulsado.

Luego está Paula, que esta semana ha entrado en erupción. ¿Y porqué?, bueno, más que nada porque ha sido abandonada por su familia.

Fran acaba de cavar su propia tumba. Es lo más ruin que he visto en Gran Hermano. Y mira que Gran Hermano ha dado muchos ruines…

Como bien sabéis, a los concursantes les llevan ropa. Esa ropa se la llevan al programa los familiares a sus seres queridos y como hace frío, pidieron a los familiares ropa de abrigo. Pues esta semana a Paula nadie le ha llevado ropa.

Y se cogió un rebote de tres pares de cojones, chillando por toda la casa si nadie de su entorno podía ir a su casa a cogerle ropa. Pero no fue un enfado de «oh, qué contrariedad sufro«, no, fue más de «hijos de puta que suerte tenéis de que no tenga una bomba atómica, porque os la metía por el recto y la detonaba».

¡¡NO HAY NADIE AHÍ FUERA QUE PUEDA IR A MI PUTA CASA!! chilló. Pegó tales berridos que los habitantes del pueblo de Guadalix se miraron entre sí y salieron echando hostias a casa de Paula a ver si podían llevarle algo para que dejara de gritar.

Según dijeron en el Debate, la organización cometió un error y le llevó a Paula la caja de ropa que debería haber recibido Shaima si no la hubieran echado.

Los demás se dedicaron a olisquear la ropa que les habían llevado. Una de dos, o son unos nostálgicos y querían olores familiares, o los seres queridos habían impregnado los jerséis con cocaína.

Porque a ver, si llevas ropa a tu hijo / hija / hermano / novio… lo menos que puedes hacer es lavarla. Que Yoli rebozaba hocico por el jersey de su madre diciendo que olía mucho a ella que lo mismo la señora llevó el jersey puesto y se fue a Guadalix corriendo.

Pero fue peor el remedio que la enfermedad, porque en directo en el debate le dieron su ropa. La de Paula no tenía coca. Tenía LSD caducado. Se puso a chillar y a correr alrededor del sofá del confe agitando los brazos. Por dios. Que sonidos más desagradables es capaz de emitir esta mujer.

Y ya de por sí venía calentita la Paulizza hawaiana, porque se libró de la nominación y al final le tocó pringar porque sus archienemigas las primas pillaron inmunidad y ella subió.

Ay, las primas… Se han pasado al lado oscuro. Siendo el lado oscuro ChulOmar. Bueno, es el lado oscuro menos el trozo de la lejía de al lado de la boca.

Ahora son las más amiguitas del mundo de él. Lo cual es muy inteligente como saber que alguien tiene una soga al cuello e ir a meter la cabeza en el lazo con él. Las primas, con lo pijitas que son, se están rebozando en el barro como dos gochos profesionales.

Por si fuera poco, han despertado las iras de sor Azahara, que está celosa porque Alejandra se arrima mucho a su Juanma. Lo bueno es que las iras de Azahara no se notan. Las emociones de la pelocha albina son como la H. No se pronuncian.

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