Por Rafael Rodríguez Rodríguez
Cuando recibí mis datos fiscales del año 2013, la Agencia Tributaria me envió una hoja adjunta en la que me comunicaba que tendría que declarar una pensión de 1.200 euros anuales que cobro de la Seguridad Social francesa. Por este motivo presenté una declaración complementaria en junio de 2014.
A día de hoy recibo una nueva comunicación (sin fecha ni certificada) de la citada agencia en la que me informa que tengo de plazo hasta el 30 de junio de 2015 para regularizar esta situación de los años anteriores.
A lo largo de los años todos los españoles que hemos trabajado en el extranjero hemos recibido informaciones de diferentes asesores de que estas pensiones públicas no estaban sujetas a IRPF en España. Ahora, y con su afán recaudatorio, el señor Montoro hace oídos sordos a todo lo anterior y nos obliga a declarar y, para más inri, con carácter retroactivo por estas pensiones.
Quiero avisar a todos los pensionistas que se encuentren en esta situación de cómo los responsables de la Agencia Tributaria, al igual que su jefe, son tan sibilinos que no aclaran en su comunicación qué años son los que se ven obligados a ser regularizados. Porque cuanto más nos quiten, mejor. Que deben tener en cuenta que la prescripción para la declaración de estas pensiones es de cuatro años, a contar desde la fecha de declaración efectuada sin incluir estas pensiones. Es decir, que en el año 2015 (declaración del 2014) ya no pueden reclamarles y, por tanto, solo deben incluirlas en la regularización las pensiones recibidas desde el año 2010 puesto que las anteriores ya han prescrito.
A mí se me caería la cara de vergüenza hacer esta reclamación a un jubilado de 73 años como yo que ha percibido una pensión pública de 1.200 euros anuales del extranjero.
¿Por qué no se dedican a perseguir a los verdaderos defraudadores de cantidades millonarias? Pues tenemos a cientos en este país. Deseo de corazón que en las próximas elecciones, tanto municipales como generales, se den el mayor batacazo de la historia, que es lo que de verdad se están ganando a pulso.