Por Marta
En una sociedad como la nuestra hace 25 o 30 años si te regañaban en el colegio en casa te decían: ‘Algo habrás hecho’. Ahora en muchos casos si al niño/a le regañan en la escuela al que se le cae el pelo es al profesor, porque el papá o la mamá de turno van al colegio indignados a reclamar los ‘derechos’ de sus hijos.
¿A qué estamos jugando? En mi opinión estamos creando verdaderos tiranos para el futuro, por supuesto que un profesor nunca debe pegar a un niño ni gritarle, pero si enmendarle y corregir sus aptitudes negativas, a la vez que debe fomentar y aplaudir las positivas.
En cuanto a otro ámbito, el jurídico, tenemos una ley del menor ‘estupenda’ que exime a los menores de cualquier responsabilidad penal hasta los 18 años.
Hay un cambio de papeles que se sienta delante de un juez a un padre por darle una colleja a un hijo pero que exime a un chico de 13 años por matar a un profesor. Un cambio de papeles completamente absurdo en el que en muchos casos manda el niño y el adulto obedece.