Por Ricard Alapont Montañola
Nuestro país recibe cada año millones de visitantes de otros países. Son los llamados guiris, que incrementan su número con la llegada del buen tiempo y por su búsqueda de sol y playa.
Dado el contexto actual de crisis económica, no se deberían poner demasiadas trabas a los pequeños empresarios y empleados del sector servicios que viven precisamente de los guiris.
Los turistas extranjeros, junto con la hostelería, el turismo y las actividades lúdico-culturales relacionadas con ellos son uno de los principales motores económicos de este país, y desengañémonos, es prácticamente lo único por lo que se nos conoce fuera de nuestras fronteras y en lo que somos competitivos.
Hay muchos municipios y ayuntamientos que justamente ahora aprueban ordenanzas relacionadas con rótulos e información de los establecimientos, tamaño y forma de las terrazas —e incluso el color de algunos de sus elementos— con un afán presumiblemente recaudatorio y oportunista cuanto menos. Aunque soy consciente de la situación económica de los consistorios e instituciones públicas, sería mejor abandonar estas políticas hasta que las aguas amainen por lo menos.
Los guiris generan ingresos y empleo. Debemos salvaguardarlos y protegerlos, y especialmente a las empresas y personas que trabajan y proporcionan servicios para ellos.
el turismo es la principal industria española, es nuestro petroleo arabe o nuestra fabrica alemana, yo pienso que los ayuntamientos y el gobierno central deberian evitar el lamentable acoso que sufren nuestros turistas por pedigueños , descuideros , taxistas estafadores,etc,etc,
03 mayo 2013 | 21:19
Y que hay de esos guiris, es decir, alemanes, franchutes, belgas, italianos, ingleses, etc etc que vienen y dejan esto peor que la casa de un gitano?
Donde yo vivo, cuando la industrialización, había trabajo de sobra, quitaron todas las fábricas para ponerlo bonito para los turistas y se jodió la cosa
06 mayo 2013 | 0:21