Miren escuchaba el nuevo trabajo de David mientras yo probaba la luz… estábamos en una habitación de hotel, a las afueras de Madrid… esperando nuestro turno.
Llegó el momento. Pasamos a la suite de David, que tomaba un refresco y comía algo entre entrevistas. “La promo de su nuevo disco va ajustada al máximo de tiempo” – me dijeron. “No le saques de la habitación, no hagas fotos en la terraza, no le muevas mucho… está agotado…” (está de promo, es su trabajo… pensé)
Saludamos a David. No era la primera vez que nos veíamos. Con la misma simpatía de siempre, nos recibió sonriente, y receptivo. ¿Hacemos alguna fotografía? ¡Donde quieras! – contestó. ¿En la terraza…? – insistí…
Tuve suerte. Salimos a la terraza un par de minutos. Volvimos a entrar a la habitación. Y seguimos haciendo fotografías, como si por un momento fuésemos los únicos periodistas que atender…
Valora su trabajo, y el nuestro. Y la apretada agenda no le cambia el carácter ante los medios. Pasados treinta minutos de reloj, se agotó nuestro tiempo de fotos, entrevista y video. Nos despedimos, y entraron los siguientes…
Ayer martes, Bisbal presentaba su nuevo trabajo primero en Madrid, luego en Cancún y después en Miami. Tres ruedas de prensa en algo más de 24 horas. Todo un tipo…