¡Que paren las máquinas! ¡Que paren las máquinas!

¡Que paren las máquinas! El director de 20 minutos y de 20minutos.es cuenta, entre otras cosas, algunas interioridades del diario

El descrédito sindical lo paga la sociedad entera

El goteo de corrupciones, corruptelas y prácticas poco éticas por parte de algunos miembros de UGT y CC OO –sobre todo, cuadros altos y medios- está colmando la paciencia del común de los militantes de los dos grandes sindicatos, que son gente honrada, y probablemente del conjunto de la opinión pública. Nadie se da por aludido, nadie da explicaciones, nadie asume responsabilidades. Solo se mira hacia otro lado, probablemente a la espera de que la tormenta amaine.
El problema es que, aunque la tormenta de revelaciones amaine, la erosión en su credibilidad que están sufriendo UGT y CC OO la está pagando la sociedad en su conjunto. Al no depurar responsabilidades internas, al no cortar y limpiar lo podrido, los sindicatos están cayendo en el descrédito y se están atando de pies y manos en su principal función social –la defensa de los trabajadores- justo cuando más se los necesita, en este periodo de penurias económicas y de recortes de casi todo.
Uno de las principales defensores de la parte más débil de la sociedad está –por sus propios errores- exangüe y casi desaparecido, circunstancia que aprovechan los Gobiernos para recortar, agredir o menospreciar -casi con impunidad, o al menos con poca resistencia ciudadana– las pensiones, la sanidad y la educación públicas, los salarios o los derechos básicos de muchos ciudadanos.
Uno de los equilibrios del sistema democrático se está rompiendo.

24 comentarios

  1. Dice ser Got

    Totalmente cierto; me quedo, de todas maneras, con la parte que dice: «por sus propios errores»

    Mala noticia para los trabajadores.

    07 noviembre 2013 | 14:13

  2. Dice ser Pepe

    Los sindicatos son necesarios para el equilibrio laboral de la sociedad actual….. pero otros sindicatos; estos están «podridos» y si no caen más es porque el trabajador de la calle sigue pensando en el fondo romántico con el que nacieron en su momento. Actualmente están vendidos, con cuotas de poder y económicas independiente de su labor, y con la amenaza constante de una huelga o movilizaciones de turno

    07 noviembre 2013 | 14:25

  3. Dice ser sinvivirenmi

    ya, pero el descrédito se lo han ganado a pulso

    07 noviembre 2013 | 14:36

  4. Dice ser ciudadanokane

    Estos sincatos estan podridos desde el inicio de la democracia, no son mas que unos sindicatos verticales de unos partidos politicos que todos conocemos.¿Defender al trabajador? JAJAJAJAJAJA

    07 noviembre 2013 | 14:43

  5. Dice ser Angelines

    Se lo han ganado a pulso, todo lo que les pase, por ladrones, perdon, POR LADRONES, por manipular la información, por hacernos creer que son piquetes informativos y no piquetes destructivos, que amenazan, destruyen, queman, ensucián, Se portan como autenticar ordas bandalicas. y lo peor de todo, como están amparados por los partidos, quedan inmunes de todos los destrozos que hace. por cietyo ¿Hay alguien es España que haya recibido un curso impartido por un sindicato?. Y no se si sabreis que de cada eexpediente de despido, le llevan un pasta de cada trabajador, LO HE SUFRIDO EN MIS PROPIAS CARNES. lo dicho, BANDA DE LADRONES

    07 noviembre 2013 | 14:45

  6. Dice ser Marisa

    es verdad pero lo han provocado un grupo de sindicalistas chorizos ( de los dos grandes sindicatos) que creyendose superiors y con la sarten por el mango, hasta han hundido a muchos trabajadores, por favorecer a los suyos.

    para server asi no hay difierencia con los mafiosos, no sirve de nada.

    07 noviembre 2013 | 14:50

  7. Dice ser javi

    dentro de poco todos cobrando el S.M.I. y les hecharemos la culpa a los sindicatos manda huevos

    07 noviembre 2013 | 14:50

  8. Dice ser Elestel

    ¿Sólo existen dos sindicatos?

    07 noviembre 2013 | 15:01

  9. Dice ser Brizna

    La verdad es que los dos sindicatos mayoritarios han caído en la trampa que les han tendido la patronal y el Partido popular desde que gobierna. Les costará mucho volver a remontar el vuelo y ser otra vez sindicatos sin polvo y paja. Lamentable para la clase trabajadora, asediada por regulaciones abusivas, por la carestía de la vida y la impunidad empresarial.
    Veremos qué pasa entretanto..

    07 noviembre 2013 | 15:19

  10. Dice ser elaguelo

    Es la triste verdad, la izquierda vendida al mejor postor…asi estamos! por que son ellos los que tienen que dar ejemplo en todo y no lo dan…iremos a pique!

    07 noviembre 2013 | 15:38

  11. Dice ser Sin duda

    Ni los sindicatos han caído en una trampa ni la izquierda se vende al mejor postor. Primero por que no ha habido tal trampa, y menos de la patronal y las derechas. Sus dirigentes se dieron cuenta de lo bien que se puede vivir cobrando de la teta del gobierno llegando a tal punto de cobrar por los despidos y los eres. Si de verdad fueran sindicatos no habrían permitido tal cosa, pero se han convertido en organizaciones mafiosas intocables cubiertas por la palabra «izquierda» que a tantos os gusta y de la que parece que deberían cambiar la definición en el diccionario. Y esta es la segunda. ¿La izquierda se vende al mejor postor? Si aquí no hay izquierdas, ya no quedan. Solo son una panda de caraduras que levantan el puño izquierdo, ponen la mano derecha para que se la llenen de dinero y pronuncian la palabra «izquierda» mientras te escupen en la cara trozos de marisco. ¿ Solución? Cortar las subvenciones a los sindicatos y que vivan de los afiliados. Así tendrían que defender por fuerza los derechos de sus afiliados o desaparecer, y de esta forma podrían aparecer verdaderos sindicatos. Pero estos, los de siempre, les vienen de perlas a las «derechas» y las «izquierdas». Por dinero, lo que sea.

    07 noviembre 2013 | 16:19

  12. Dice ser La manzana

    La manzana política está podrida mires por donde mires la manzana. Antes miraban por las personas ahora mira por la sociedad y piensan que ellos también pertenecen y viven igual que todos los políticos. Aunque el traje se dé un trabajador.

    07 noviembre 2013 | 16:21

  13. Dice ser Sin duda

    Rectifico: «de esta forma podrían crecer verdaderos sindicatos.» Que otros sindicatos hay.

    07 noviembre 2013 | 16:21

  14. Dice ser JUAN

    Aquí todo el mundo se ha llevado lo que ha querido y ha podido, con total impunidad, nos va a costar salir de ésta.
    http://xurl.es/k2wij

    07 noviembre 2013 | 16:22

  15. Dice ser yo

    si esto tiene muy facil arreglo, FIN DE LAS SUBVENCIONES A LOS SINDICATOS Y PARTIDOS POLITICOS Y QUE SE FINANCIEN CON SUS AFILIADOS, es asi de sencillo.

    07 noviembre 2013 | 16:22

  16. Dice ser MARISA

    Nadie ha controlado nada, nadie se ha preocupado por auditar las cuentas y supervisarlas, y ahora es tarde para recuperar todo el dinero perdido.
    http://www.lafoliemadrid.com

    07 noviembre 2013 | 16:23

  17. Dice ser MANUEL

    Control de los gastos, supervisión de las subvenciones y ayudas públicas etc etc etc, ¿alguien ha hecho algo de esto con los sindicatos?
    NO NO NO

    07 noviembre 2013 | 16:25

  18. Dice ser manuel

    Comparto la preocupación del director de 20minutos, como muchos otros. Necesitamos dos grandes partidos, un sindicato independiente cuyo afán e intereses sean no los de partido sino el de los obreros, y una justicia asimismo independiente que evite las corrupciones. Somos muy deficientes en lo que se ha dado en llamar democracia de partidos. La democracia directa está casi ausente, y la verdad es que no hay razón para que esté tan ausente; porque si bien es verdad que el ciudadano medio no está preparado ara decidir muchas cuestiones, sí lo está para muchas otras, ¡que tampoco decide!. Se tiene inevitablemente la sensación, incluso la certeza, de que los partidos gobiernan en connivencia con jueces y sindicatos, y de espaldas al sentir y necesidades del pueblo.

    07 noviembre 2013 | 18:16

  19. Dice ser ecoloJeta

    Sindicatos o politicos = CLOACA

    07 noviembre 2013 | 20:17

  20. Dice ser Lola

    Además de la patada en el trasero a los políticos hay que darla a todos estos sindicalistas que tienen de sindicalistas lo que yo de Nikita Kruschev.
    Habría que echar a todos los que hasta ahora han estado metidos en política, sean del color que sean, y que empiece gente nueva con nuevas ideas y sobre todo que no estén contaminados por el poder, éste termina pasando factura.

    07 noviembre 2013 | 20:36

  21. Dice ser Oleg

    Hace mucho, pero que mucho tiempo que los sindivagos están muy desacreditados. Por mucho que diga el Sr. Escolar, los sidicalistas en su mayoría viven del cuento y de la subvención y el que puede meter mano a la buchaca, la mete.
    Hace tiempo que debieron eliminar las subvenciones a esta banda de vividores. Que sufraguen todos sus gastos con las cuotas de sus afiliados, y si no llegan, que desaparezcan.
    Hoy en día el sindicalismo es algo anacrónico, inservible y que nos sale muy caro.

    08 noviembre 2013 | 11:53

  22. Dice ser democracia

    Democracia española donde se pueden casar seas hombre con hombre. Esto es pura democracia. Ahora bien un voto no es para todos un voto. Tampoco se puede decidir sobre las raíces de la sociedad, educación, sanidad, justicia. Se tiene mayoría absoluta y se decide todo. Pura dictadura ya que puedes opinar, pero no tienes ningún peso, aunque sea toda la sociedad. Los sindicatos están metidos en esta democracia española. Con la dictadura más fuerte de poder, reflejando democracia en el espejo, donde nos miramos los españoles y no lo comprendemos.

    08 noviembre 2013 | 17:47

  23. La Transición consistió en desmantelar las instituciones de la dictadura franquista dejando intacto el poder económico y religioso que la sostuvo y la clase política que las gobernó a cambio de dar entrada a nuevos actores políticos que no cuestionaran ese cambio.

    Para conseguirlo, por un lado se instituyó un bipartidismo de facto gracias a las normas electorales menos democráticas de nuestro entorno que garantizaban el gobierno, bien por mayoría absoluta o con el apoyo de las derechas nacionalistas cuando fuese necesario, de UCD y después del PP o del PSOE.

    Por otro lado, fue preciso asegurar una paz social difícil, pues se sabía que los avances sociales serían forzosamente limitados al mantenerse los privilegios y el poder fáctico de los grandes grupos económicos del franquismo, los “ricos por la Patria”, como los denomina Mariano Sánchez en uno de sus libros.

    Para atar a los partidos se les financió generosamente, aunque de un modo tan irregular que se han multiplicado los casos de corrupción, como los de Filesa o Bárcenas u otros tan vergonzosos como los de los sobresueldos recibidos por dirigentes del PP, que han terminado produciendo un gran desafecto social. Y la paz social se logró manteniendo con dinero público a una patronal que ha conseguido confundir los intereses de todos los empresarios con los de las grandes empresas, y protegiendo a dos sindicatos mayoritarios de cualquier otro sindicalismo más reivindicativo.

    La financiación a los sindicatos no ha sido tan generosa como la destinada a los partidos o la patronal pero se diseñó inteligentemente para atraparlos, pues los obliga a estar constantemente en la cuerda floja de la legalidad para beneficiarse de ella.

    CC OO y UGT se han convertido así en grandes aparatos sindicales pero esclavos de la financiación gubernamental y con una actividad de provisión de servicios que muchas veces se sobrepone a la auténticamente reivindicativa y laboral. La consecuencia ha sido su excesiva docilidad, bien por falta de capacidad o de voluntad combativa, y un acomodo en los ámbitos del poder (en las cajas de ahorros, por ejemplo) que en ocasiones los ha contaminado de clientelismo, de prácticas muy irregulares o incluso a veces mafiosas y de corrupción. Vicios ciertamente no generalizados pero que hacen mucho daño y que no se resuelven precisamente gritando en las puertas de un juzgado, sea cual sea este o su titular.

    Pero dicho esto, es igualmente evidente que los casos de corrupción sindical se han dado en menor número y con mucho menos daño económico que en el caso de los partidos o de las grandes empresas o bancos privados. Una evidencia que obliga a preguntarse por qué entonces se ataca a los sindicatos tan duramente, mucho más que a otras instituciones claramente más corruptas.

    La razón me parece que está clara. Vivimos una etapa de ataque sistemático y constante a los derechos sociales y humanos con el fin de favorecer aún más el reparto de las rentas hacia los de arriba. Los datos no dejan lugar a dudas: el peso de los salarios en el conjunto de las rentas cae sin cesar y las condiciones laborales se deterioran continuamente. En consecuencia, la desigualdad se multiplica y para que ello sea posible hay que vencer la resistencia de los trabajadores, lo que depende fundamentalmente de la fuerza que tengan los sindicatos.

    Porque la realidad demuestra sin lugar a dudas que ni uno solo de los derechos que hoy disfrutamos se ha conseguido sin sindicatos. Ni uno solo. Y al mismo tiempo la lógica indica que si lo que se busca es que desaparezcan o se limiten esos derechos, lo conveniente es evitar la fuerza sindical, pues allí donde hay un sindicato hay trabajadores organizados y no cada uno por su lado, que es como el capital los vence mejor y consigue más ventajas a su costa.

    No nos engañemos, pues. Los sindicatos deben corregir sus defectos, por supuesto que sí. Pero tiramos piedras sobre nuestro tejado si lo que hacemos es ayudar a destruirlos.

    Juan Torres López | Economista
    Seguir a @juantorreslopez

    nuevatribuna.es | 22 Octubre 2013

    08 noviembre 2013 | 20:16

  24. Dice ser Julian Martinez

    Si estos sindicalistas estan podridos por esto:

    Esto de los sindicatos es otro manipuleo que están comprados siendo su misión eso, «unas veces dicen adelante y otras basta ya», algo así como se hace con los toros bravos que se emplean los cabestros para meterlos en el corral.

    También quiero recordar y a los que no lo saben, que las CC.OO fueron fundas por el «Opus-Dei para servir accion Catolica comenzando sus labores como defensores de la clase trabajadora en Villa Verde bajo, en Madrid, esto en la dictadura de Franco. Mas tarde se fueron filtrando miembros del Partido Comunista, que mas tarde se nobraron como los fundadores.

    Hoy, la lucha en relación al pasado en defensa de la clase trabajadora, NO es ni sombra al pasado en plena dictadura de Franco, porque todos se hacia bajo la clandestinidad y eso si era una lucha de verdad.

    El problema que hoy tenemos con la perdida de derechos sociales comenzó después de muerto Franco, que fue cuando se hicieron múltiples de pactos entre los lideres de los ganadores y perdedores de la guerra civil, de 1936, los últimos en reconocerlos fueron a los comunistas, donde en tiempos de Adolfo Suárez, quien mantuvo ciertas reuniones con Santiago Carrillo, en casas de campo concertados.

    El acuerdo mayor fue el llamado, «Pacto de la Moncloa» que todo se soluciono con mucha pacta en millonadas de las antiguas pesetas y fuertes pensiones a lideres de los derrotados de las fuerzas rojos. Los fascista de la dictadura que estaban ocupando las ventanillas de los distintos Ministerios, los pasaron a los despachos y los enchufados de privilegiados de los derrotados los pasaron a ocupar las ventanillas, y los distintos sindicalista fueron comprados siguiendo todo este tinglado hasta nuestros días.

    Espero que muchos de hoy que no conocisteis estos acuerdos clandestinos donde todos se repartieron abrazos de arrepentimiento, os deis cuenta el porque de la perdida progresivamente de derechos sociales entre otras circunstancias del sistema financiero Internacional de nuestros días, y los medios tecnológicos de los que hoy dispone el sistema capital.

    Sres. nos quieren y están llevando a una dictadura tecnológica, donde con tanta droga y corrupción quieren descerébral la sociedad obrera y como ojos ponerles dos uvas, pero eso si, muchos con múltiples de diplomas como grandes lumbreras de obediencia y buenos ciudadanos que les hipotecamos, privatizamos todo y hasta les reducimos los salarios y están incapacitados para luchar contra estas barbaries salvajes sin precedentes, etc. etc.

    Si levantaran la cabeza, los millares de hombres y mujeres nuestros padres y abuelos que tanto sufrieron en presidios del dictador y murieron luchado para conseguir los derechos mínimos para la vida, volverían a quedar muertos instantáneos al ver el caos social que hoy tenemos caminando a peor, quedando su lucha y martirios en la nada para las siguientes generaciones.

    Es muy lamentable, tener que reconocer que las ultimas dos, décadas del mandato del dictador Franco, eso fue el cielo al compararlo con lo actual y no teniamos peligro el andar de noche por cualquier lugar de Madrid ni tanta droga y corrupcion en las propioas familias como hy tambien se esta sufriendo a niveles escandalosos.

    09 noviembre 2013 | 09:49

Los comentarios están cerrados.