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El morbo en la televisión

Por Juan Afán Muñoz

Juicio por el crimen de Asunta.

Rosario Porto y Alfonso Basterra, padres de Asunta. (EFE/Lavandeira)

Durante los 2 últimos meses todas las televisiones de cobertura nacional nos han bombardeado con extensas y diarias crónicas que narran el desarrollo del juicio por el asesinato de la niña Asunta Basterra, presuntamente cometido por sus padres. Ahora continúa este culebrón con el tema del jurado, su composición, el veredicto y las apelaciones. Después será con una serie para la televisión, imagino que ya rodándose en secreto por una «avispada» cadena, y como colofón se hará una película, por supuesto subvencionada.

Mientras tanto a los televidentes y delincuentes se les ofrece un curso acelerado para delinquir informando de todas las pruebas pormenorizadamente, para que evolucionemos hacia el conocimiento del crimen perfecto; el objetivo es profundizar en el morbo y llevar a nuestra sociedad a interiorizar en el ADN lo más rancio de las crónicas de sucesos y de paso conseguir que no se conozcan y debatan lo suficiente los grandes y graves problemas que tiene la sociedad española, entre los que destaco el paro, la corrupción política, el desafío soberanista catalán, la inmigración, la desigualdad social, etc.

Estoy seguro que cuando este tema se aplaque nacerá otro que nos mantenga «informados» de lo que le interesa al poder establecido y su ministerio del morbo adjunto. Por supuesto en toda esta crónica negra la comunidad andaluza es líder destacado, aportando varios de los últimos grandes «sucesos»: primero el crimen de Mari Luz Cortés, en Huelva (2008); después el de Marta del Castillo, en Sevilla (año 2009); y posteriormente los niños Ruth y Jose en Córdoba (año 2011) entre otros, a los que se les da la notoriedad necesaria para convertirlos en seriales por muchos años.

Dice Bernice Buresh: La televisión puede darnos muchas cosas, salvo tiempo para pensar.

2 comentarios

  1. Dice ser Antonio Larrosa

    tLo más morboso desde mi punto de vistta es la ineptitud del gobierno ante una conspiración contra la soberanía nacional. Parece mentira

    Clica sobre mi nombre

    06 noviembre 2015 | 21:17

  2. Dice ser Pepe Carrillo

    ¡MORBO ENFERMIZO!
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    …Usted lo ha dicho, amigo Afán Muñoz: ‘el objetivo es profundizar en el morbo.’ ¿Para qué? Muy sencillo. Para vendernos más horas de televisión, más periódicos, más revistas… El objetivo es vender. Y nosotros los ciudadanos, meros espectadores de la vida a través de los medios, mordemos el anzuelo. Porque hace ya más de 40 años nos vendieron unos televisores para eso. Para controlarnos. Para controlar nuestra opinión política, nuestros gustos de consumo, nuestros hábitos…
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    …Le escribo, querido amigo, cuando ya este matrimonio ha dejado de ser ‘presunto culpable’ para convertirse en asesino de facto de la niña Basterra, Dios la tenga en su Gloria. Más de 18 años le ha caído a cada uno. Ahora por fin descansaremos todos en paz. Los asesinos por supuesto en la cárcel. Y el resto de ciudadanos a otra cosa. Pero mire; hasta el último día de juicio, a todos nos han tenido en vilo estos de la tele. Y es lo que dice usted: esto lo han querido plantear como un culebrón, como un serial, a costa del morbo ciudadano.
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    …¿Ha leído usted la entrevista publicada en 20Minutos el pasado viernes al juez intructor del caso, el señor Vázquez Taín? Si no es así, léala, no tiene desperdicio. Comprenderá las causas del morbo suscitado en todo esto. Según el propio juez, ‘El ser humano está lleno de temperamentos y vicios’. Y más adelante dice: ‘Basta el anonimato de un ordenador para que la gente se vuelva pederasta, ludópata…’ ¿Se da cuenta? Las propias instituciones son conscientes del morbo, de los deseos ocultos, que se despiertan detrás de un ordenador o de la tele. Cuando nadie nos ve, como diría el otro.
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    …Sólo hace falta tratar maliciosamente la noticia. Como aquí se ha tratado. Ahora comprenderá por qué la asesina de la niña, esa tal Rosario Porto, ha tenido tanta atracción sexual para los televidentes. Ojos y boca grandes, pelo corto, bajita, de apenas 60 kilos de peso, pequeños senos, desequilibrada, capaz de matar a una hija y de controlar psicológicamente a su marido. Por cierto, el marido con pinta de cornudo. Hablamos, por tanto, de una mujer apasionada, caprichosa, bipolar. Y de un marido dependiente, consentidor y miserable. Muchas películas se han rodado con este argumento. ‘Instinto Básico’, ‘Fuego en el cuerpo’, etc.
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    …¿Y se acuerda, amigo Afán, de cómo amaban en la cama las mujeres de estas películas? Haga memoria. Sharon Stone y Kathleen Turner. Ahora imagínese a la Porto lamiendo su cuerpo, mordiéndole como un verdadero animal, demandándole ese fuego que usted lleva dentro. Y usted, claro, lo propio. Demostrándole su mayor envergadura, su poder viril, la musculatura de su cuerpo al sostenerla en vilo mientras la posee. Ella grita a cada empellón, le araña con sus largas uñas rojas.
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    …Y después. Después ella encima de usted en la cama, cabalgando. Con sus pequeños senos al aire, sin vello púbico, saltando encima como una niña malcriada. Y cuando usted, amigo Afán, va a eyacular, imagine la escena, ella le trata de ahorcar con las manos. Dolor y placer. Usted ya no puede parar y se derrama. Quizá haya un cuchillo o un picahielos escondido en alguna parte. Por supuesto, el marido está detrás de una cortina mirando y consintiéndolo todo.
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    …Pues así nos han vendido todo el juicio, amigo Afán, como un thriller de suspense con escenas de pasión incluidas. Y todo para crear audiencias. Una vergüenza.

    09 noviembre 2015 | 1:32

Los comentarios están cerrados.