Tu blog Tu blog

Este es tu altavoz

¿Obligarles a qué?

Por José Morales

Imagen de un partido entre el Real Madrid y el FC Barcelona. (ARCHIVO)

Imagen de un partido entre el Real Madrid y el FC Barcelona. (ARCHIVO)

El expediente de Bruselas a España por un supuesto trato de favor a siete clubes de fútbol, entre ellos Real Madrid y Barcelona, mete en el mismo saco dos objeciones muy diferentes: las ayudas públicas que hayan podido recibir varios equipos valencianos y la estructura societaria de aquellos que no son SAD (Sociedades Anónimas Deportivas).

Las primeras, en efecto, resultan atípicas, pero los reparos a lo segundo son más que discutibles. El fútbol necesita limpieza y transparencia, cierto, pero no inquisidores que siembren de sospechas los éxitos. Si el Real Madrid y el Barcelona están entre los mejores equipos del mundo, no es debido a las ayudas públicas que no tienen. El estatuto de estos clubes (grupos deportivos) es el que siempre habían tenido todos, sería absurdo obligarles a transformarse en sociedades anónimas. El caso de Athletic Club y el Osasuna, aún es más llamativo.

4 comentarios

  1. Dice ser realidad

    ayudas públicas que no tienen?

    Si los derechos de television del futbol estaban hasta hace poco en manos de las cadenas de TV autonomicas, quien coño pagaba a los clubs?

    Por cierto, hay bastantes equipos de 1 y 2, cuyos estadios no son propiedad de los clubs, sino de sus respectivos ayuntamientos.

    No se puede pedir sacrificios a la poblacion, y que por subterfugios se este pagando a los clubs de futbol, via impuestos de los ciudadanos, por mi, me importa una mierda que el Madrid o el Barcelona desaparezca o que jueguen en 3 o 4 division, prefiero mil veces que se invierta en sanidad o en becas productivas de investigacion , y digo productivas… no gilipolleces de doctors/catedraticos sacando los dineros y pegarse vacaciones en la R. Dominicana o estancias en donde sea.

    03 enero 2014 | 18:22

  2. Dice ser LINCE 1

    En el fútbol hay mucha basura; en el Madrid y Barcelona, también. ¡Menudo pelotazo el de la Ciudad Deportiva! Y las deudas a Hacienda y a la Seguridad Social; y la pasta que nos cuesta la policía en los partidos…. y tantas y tantas cosas, en un país que las está pasando put…

    05 enero 2014 | 14:29

  3. Dice ser Carla

    Hacienda no me permite ni un solo euro de deuda, a mi hermano que es autónomo, tampoco. Por favor, que se eliminen este tipo de «ayudas» a los clubs de futbol. No estamos hablando de ayudas a deportes minoritarios, a ambientes rurales o a barrios desfavorecidos. Hablamos de ayudas a clubs que pagan decenas de millones todos los años en el salario de sus deportistas.

    Carla
    http://www.lasbolaschinas.com

    06 enero 2014 | 19:28

  4. «Hubo un tiempo, añorado hoy por los conservadores más melancólicos, en que los manuales de urbanidad nos enseñaban la obligación de ceder el asiento a los mayores en los autobuses. Y en los botes salvavidas a las mujeres y los niños en los casos de naufragio. Pero los tiempos cambian y las normas se hacen mucho menos rígidas. Sobre todo ahora que los expertos en buenos modales a sueldo de cualquier think tank neocons parecen haber llegado a un consenso para reducir las normas de buenas maneras a una sola regla: los ricos primero.

    La norma, por otra parte, no es más que la aplicación estricta de aquella otra ley no escrita que dictaminaba que quien paga manda. Nos lo recordaba estos días el profesor de Filosofía Política de Harvard, Michel J. Sandel, al advertirnos de los perversos efectos que la creciente desigualdad tiene en la democracia. Y es que las salas VIP de los aeropuertos comienzan a ser un inocente recuerdo ahora que los clientes que pueden permitirse asumir el sobrecoste pueden experimentar el placer de acceder sin colas a la sala de embarque, ni listas de espera, viajando siempre en primera. Pero la priorización de los adinerados no se reduce a las agencias de viaje. De hecho, fue Marx quien hace ya bastantes décadas alertó de que con el capitalismo todo tiende a convertirse en mercancía. La diferencia está en que hoy se perdió el pudor por la compraventa de algunos productos cuya adquisición antaño sonrojaba.

    Así, hoy es posible contaminar más de lo permitido por el módico precio de pagar 13 euros la tonelada de dióxido de carbono. Y en el presidio de Santa Ana, en California, el reo tiene la oportunidad de pernoctar en celdas de lujo por el módico precio de 82 dólares la noche, una oferta sin duda atractiva para ser implantada en España con la que se podría hacer más llevadera la breve estancia en prisión de tanto prevaricador, corrupto y malversador mientras espera el indulto gubernamental. Por faltar no faltan ni las ofertas de amigos de alquiler gestionados, sin duda, por las más serias y competitivas empresas.

    Todo ello le lleva a preguntarse a Sandel sobre dónde está el límite a la total mercantilización de nuestra cotidianidad y nuestras necesidades. La disquisición tampoco es nada nueva si pensamos que mientras la ética protestante trabajaba de firme para sentar las bases del capitalismo, el catolicismo realmente existente en la época hacía sus pinitos, mucho antes de poner en marcha el Banco Vaticano, con la venta al por mayor de aquellas acciones preferentes para el Paraíso a base de bulas y misas de difunto.

    Así pues no resulta extraño que España se sume a las nuevas modas. O Catalunya. Por lo pronto, los trabajadores del Hospital Sant Pau de Barcelona denunciaban la pasada semana que la dirección del centro priorizó la intervención quirúrgica de un paciente privado de pago a una urgencia de un enfermo perteneciente al sistema público de salud. Pues eso, lo dicho, los ricos primero convertido en norma única de urbanidad. Aunque con excepciones, claro. Ahí está, por ejemplo, la nueva legislación de seguridad ciudadana que quiere aprobar el PP y sus planes para privatizar el orden público. Seguro que, en este caso, las dos primeras hostias de un segurata no se las va a llevar Amancio Ortega».

    por José Manuel Rambla | Periodista
    nuevatribuna.es | 13 Diciembre 2013

    06 enero 2014 | 20:16

Los comentarios están cerrados.