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¡Tongo! Feijóo golpeó con herradura en su guante

Cuando hagamos la digestión de las mentiras de Feijóo, veremos quién ganó el debate de anoche. Hubo tongo porque Feijóo golpeó a Sánchez llevando una herradura en su guante: una sarta de mentiras dichas con aplomo, cinismo, sin inmutarse y con la cara más dura que el cemento. ¿Habrá recibido clases de Aznar o del trío Pinocho de ETA en el 11-M? Sánchez, ingenuo, crecido y confiado, no pudo ganar un debate tan desigual. Perdió su oportunidad. Feijóo le cabreó, le sacó de sus casillas.

Cartel de seguidores de Sumar en las redes

Mi amiga Blanca Vila nos ofrece este sabio mensaje: «Alguien dijo: no discutas sobre verdades con adictos a las mentiras». Si te pones al nivel de un mentiroso, él te gana ya que tiene más costumbre que tú a la hora de mentir con aplomo. Sánchez y la verdad perdieron el debate.

Ana Pastor y Vicente Vallés los presuntos moderadores de la Sexta y Antena3

Lástima no haber estado allí para poner un poco de orden.

Entrevista preelectoral con Aznar en TVE

¡Vuelve Manuel Campo Vidal! Anoche te echamos de menos.

Un mensaje recogido en las redes sociales

Fraga evolucionó desde la Falange y el franquismo a la Democracia. Feijóo y Abascal van hacia atrás como los cangrejos. Me quedo con Fraga.

Minuto de oro de Pedro Sánchez. Lo mejor de su intervención.

 

Feijóo, si gana, no podrá despedir a los moderadores del debate

A esto le llamo yo progreso. Aunque quisiera, si Feijóo gana las elecciones de 23-J no podrá despedir a Ana Pastor ni a Vicente Vallés de sus cadenas privadas de televisión. No está en su mano. Los moderadores del único debate televisivo de esta noche no dependen de él.

En el año 1996 no fue así. Aznar tuvo miedo y no quiso hacer debates. Solo entrevistas individuales a los candidatos a la presidencia del Gobierno. Por tercera vez (1986, 1993 y 1996), a mí me tocó la china como entrevistador oficial del Reino. Y eso me costó el puesto. A Aznar no le gustaron mis preguntas, ganó la elecciones, por muy poco, y me despidió de su TVE.  Yo no tenía cargo político sino contrato laboral como corresponsal en EE.UU. Aquella entrevista me llevó al paro. Gané el pleito a la TVE de Aznar por despido improcedente y cobré una buena indemnización que mis hijos llamaron «la beca Aznar».

Me refugié en el «sagrado académico» hasta que, pasada la persecución, pude fundar el diario 20 minutos.  El 14-M de 2004, Aznar huyó por la gatera de la Historia como un mentiroso ruin y miserable. No fue ETA la del 11-M, señor Aznar. Fue Al Qaeda. Solo 20 minutos lo publicó en su portada el 14-M. Engañó a los demás diarios. Y eso le costó el puesto al PP. Justicia poética.

Con Aznar, candidato ala presidencia del Gobierno, en TVE.

Para más detalles, remito a mis queridos lectores a las páginas que dedico a este asunto, de triste memoria, en mi libro «La prensa libre no fue un regalo».

Pag. 500 de «La prensa libre no fue un regalo»

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Las primeras entrevistas a candidatos presidenciales que hice en TVE fueron en las elecciones del 1986 cuando yo dirigía el informativo Buenos Días. En aquella ocasión, me tocó entrevistar a Fraga. Mucho más simpático (y demócrata) que Aznar. Dónde va a parar. Claro que entre Fraga y Aznar reconozco que no soy objetivo. A pesar de los pesares, prefiero a Fraga.

Portada de 20 minutos el 14-M de 2004. El único diario de España que desmintió al presidente Aznar. El presidente del Gobierno y del PP engañó a los demás.

Portada de mi libro

¿Soy anti español si voto al PSOE? ¡Sosegaos!

¿Soy anti español si voto al PSOE?

El eslogan maquiavélico y perverso “Sanchismo o España” de Feijóo, el derogador, (“que le vote el del bote”, digo yo) es enemigo de la España que construimos entre todos con la Constitución del 78. Dudo que alguien de la derecha me gane a patriotismo. Sin embargo, por sentirme socialista a fuer de liberal, la derecha dura me coloca en la anti España, junto a los heterodoxos de Menéndez Pelayo. Desentierran el hacha de la dos Españas. Ya veo por qué. Todo le vale y el fin justifica los medios. A algunos les resulta rentable la tierra quemada con tal de alcanzar el poder. A mí no. Y a muchos amigos y conocidos de derechas, tampoco. ¿Qué hacer?

Lo primero, escuchar a los que no piensan o juegan como yo. Si pierdo al tenis es porque he jugado peor que mi adversario. ¿Qué hice mal y qué hizo bien el vencedor?

Mensaje de Manuel Saco que hago mío.

El coste de pacificar la parte sediciosa de Cataluña, de arreglar los platos rotos por los separadores Rajoy y Aznar, antes de la declaración de independencia de los separatistas del Parlament, ha sido muy alto. Quizás no había alternativa, pero en el resto de España el acercamiento de Sánchez a ERC (quitar la sedición, reducir la malversación, etc.) ha tenido un coste electoral muy alto en municipales y autonómicas. Lo entiendo. No hay mal que por bien no venga. Cataluña se separa hoy de España mucho menos que en tiempos de Rajoy.

No digamos el gran error de la Ley del “sí es sí” y el empecinamiento de Podemos para no remediar inmediatamente el desaguisado. Ahí creo que murió la coalición PSOE-Podemos. El PP tuvo el acierto genial de votar con el PSOE contra Ione Bellara e Irene Montero, dos nombres quemados y que serán disuasorios en cualquier lista electoral. Con el “sí es sí” acertó el PP y erró el PSOE.

A mi juicio, acierta el PSOE cuando vota con el PNV para cerrar el paso a Bildu en Álava, por ejemplo. Aunque el eslogan le fue muy rentable, a fuer de hipócrita, se equivocó el PP con eso de “que te vote Chapote”. Iba dirigido, con mala fe, a las tripas, no al cerebro ni al corazón de los españoles. Las emociones (y las tripas) son traicioneras. ¿Acaso no negoció Aznar con ETA a la que definió como Movimiento Vasco de Liberación y autorizó cientos de traslados de etarras al País Vasco? ¿A qué viene ahora eso de “que te vote Chapote” contra el partido que acabó, de verdad, con el terrorismo de ETA?

El PSOE acertó con sus medidas de fondo de carácter social (subida del salario mínimo, pensiones, reforma laboral, etc.). Muy oportuno el artículo sobre “¿Qué hicieron los romanos por nosotros?” Se equivocó al vender chuches de última hora (cine más barato, inter rail para jóvenes, etc.). Ir del brazo del populismo de Podemos (que critica a los empresarios con nombres y apellidos, que se emperra en dividir al feminismo con minucias de la ley Trans, etc.) ha tenido un coste electoral muy alto para el PSOE. Dime con quien andas y te diré quien eres.

Para mí el error más gordo del PSOE es no haber sumado a los socialistas liberales que, aunque ya van rozando la ancianidad, adelantaron la civilización y cambiaron España durante 14 años: Felipe González no puede faltar en la foto con Pedro Sánchez. Y algo habrá que hacer para que Alfonso Guerra, artífice principal en la sombra de la Constitución del 78, junto con mi amigo y maestro Fernando Abril Martorell, no vuelva a recomendar nunca más que votemos en blanco.

Muchos vecinos de mi pueblo (Villanueva de la Cañada) nos seguimos queriendo después de votar al centro derecha o al centro izquierda, y me pregunto ¿qué les pasa a nuestros dos grandes líderes políticos emperrados en radicalizar y tirar de nosotros hacia los extremos?

Ni Feijóo es un narco ni Sánchez un etarra. ¿A qué esperamos para luchar decentemente por el centro? Y que gane el mejor. Tengo envidia por las grandes coaliciones derecha/izquierda que los alemanes hacen en caso de apuro. Imaginemos un debate en televisión sobre el futuro de la economía española entre las dos cabezas más singulares del PP y del PSOE, Luis Garicano (ex Ciudadanos) y Nadia Calviño (nº 2 del PSOE en el Gobierno). Sus márgenes de maniobra serían pequeños y sus discrepancias no tendrían nada que ver con las “gamarradas” de Cuca, la rabiosa monja alférez del PP, o los golpes bajos que MAR (Miguel Ángel Rodríguez, el Rasputín de Aznar y Ayuso) dirige, sin pudor, a las tripas de los españoles más ignorantes o apáticos.»¿Comunismo o libertad?» ¡Vamos, hombre!

Falta alguien como Adolfo Suárez, Felipe González, Fraga Iribarne o, incluso, Santiago Carrillo (padres de la Democracia) que les diga a los suyos, a voz en grito: ¡Sosegaos!

Amén.