Quién fue… Jock Stein: el mítico entrenador que murió en un vestuario

Jock Stein (WIKIPEDIA).

Pasado mañana juega el Atlético de Madrid contra el Celtic en Champions, y este domingo vamos a recordar a un personaje clave en la historia de este club escocés: Jock Stein.

John Stein nació el 5 de octubre de 1922 en Burbank, Escocia, en una zona de minas de carbón. Stein, al que todos llamaban ‘Jock’, empezó a jugar en 1940 en el Blantyre Victoria, un equipo de su zona. Stein compaginaba el fútbol con su trabajo en la mina. Precisamente por ser minero se vio exento de participar en la II Guerra Mundial, al ser su profesión considerada de primera necesidad.

En 1942, Stein, que jugaba de central, se incorporó al Albion Rovers, un equipo de mayor categoría, donde estuvo ocho temporadas. Tras un breve paso por el Llanelli galés, en 1951 fichó por uno de los dos grandes de Escocia: el Celtic.

Con los Hoops jugó más de 100 partidos y llegó a ser capitán, pero una grave lesión de tobillo forzó su retirada en 1957. Ese mismo año se hizo cargo, como entrenador, del equipo reserva del Celtic, donde cuajó grandes resultados.

Pero el presidente del club le dijo que no progresaría en el club por un detalle: Jock Stein era protestante. Así, el exminero se hizo cargo en 1960 del Dunfermline, al que hizo campeón de la Copa de Escocia en su primera temporada y al que hizo llegar a cuartos de la Recopa en su segundo año. En 1964 lo contrató el Hibernian edimburgués, que estaba por aquel entonces de capa caída.

Stein lo revivió y lo convirtió en uno de los mejores equipos de Escocia. Stein llegó invitar al todopoderoso Real Madrid sesentero para disputar un amistoso en Edimburgo ante el Hibernian. El equipo blanco aceptó y los Hibs ganaron 2-0, lo que fue un espaldarazo a la fama de Stein.

Los buenos números de Stein en el Hibernian despertaron el interés de algunos clubes ingleses, pero Stein rechazó las ofertas, sabedor de que no tardaría en llegar la que a él le interesaba: la del Celtic. En efecto, el club de Glasgow rompió su tradición y contrató a un protestante para hacerse cargo del club en 1965. Dejó el Hibernian como el entrenador con el mejor porcentaje de victorias de su historia.

Lo curioso no es que Stein fuera el primer técnico protestante de la historia del Celtic, sino que era solamente el cuarto entrenador de su historia. El primero, Willie Maley, estuvo ¡43 años! al frente del club, mientras que el tercero, Jimmy McGrogy, fue entrenador durante 20 temporadas (en 135 años, el Celtic solo ha tenido 19 entrenadores, unos pocos más de los que, por ejemplo, ha tenido solo Florentino Pérez como presidente del Madrid).

Stein aportó conocimientos de táctica a un club que no pasaba por su mejor momento, y en su primer año ganó la Copa de la Liga y lo llevó a semifinales de la Recopa. Stein compuso un equipo de jugadores nacidos todos en los alrededores de Glasgow, liderados por Jimmy Johnstone, y propuso un juego de ataque que pronto dio grandes resultados.

En 1967, el Celtic llegó a la final de la Copa de Europa ante el entonces todopoderoso Inter de Milán de Helenio Herrera, y en un partido que se disputó en Lisboa, los Hoops se impusieron por 2-1 tras remontar un resultado adverso. Stein se convirtió en el primer entrenador británico en ganar la Copa de Europa y además, fue la coronación de un año glorioso: el Celtic ganó también Liga, Copa y Copa de la Liga. «John, ahora eres inmortal», le dijo su paisano Bill Shankly tras el éxito en Lisboa.

Los años siguientes siguió cosechando éxitos a nivel local, y en 1970 el Celtic pudo ganar otra Copa de Europa, pero perdió en la final ante el Feyenoord. En esa época, el Manchester United quiso ficharlo, pero Stein lo rechazó. En 1974, el Celtic ganó su novena liga escocesa consecutiva, y en 1975 Stein sufrió un grave accidente de coche que casi acaba con su vida y que lo tuvo apartado de los banquillos casi un año.

Nada dura para siempre y en 1978, el Celtic empezó a flojear y empezó a quedar claro que la era de Stein llegaba a su fin tras 13 temporadas. El club le ofreció un puesto directivo, pero el técnico quería seguir entrenando. Se le concedió el privilegio de elegir a su sucesor (Billy McNell) y se le hizo un partido homenaje. Dejó el club con 10 ligas, ocho copas, seis supercopas y una Copa de Europa.

Tras estos datos, llegó el momento de entrenar al sur del Muro de Adriano y Stein aceptó una oferta del Leeds United. Pero no tuvo mucho tiempo de demostrar su valía, porque cinco semanas después de firmar por los de Yorkshire, el puesto de seleccionador escocés quedó vacante. Todo el mundo pensó en que no había otro candidato mejor que Stein, incluido el propio técnico. Tras 44 días como entrenador del Leeds United, exactamente el mismo tiempo que pasó Brian Clough en ese banquillo, Jock Stein se hizo seleccionador escocés.

Estatua de Jock Stein en Celtic Park (WIKIPEDIA).

Hay que decir que no era la primera vez que ocupaba el cargo, ya que en 1965, Stein dirigió a la selección escocesa en algunos partidos simultaneando su papel en el Celtic. Pero ahora llegaba otra época. Se hizo público su fichaje el día de su 56 cumpleaños, y una multitud fue a ver su debut ante Noruega en Hampden. Aunque fracasó en su intento de clasificar a Escocia para la Eurocopa de 1980, sí logró meter a la selección en el Mundial de España 82, en un grupo con Brasil, la Unión Soviética y Nueva Zelanda. Escocia no pasó a la segunda fase por la diferencia de goles.

El siguiente reto fue clasificarse para el Mundial de 1986. El 10 de septiembre de 1985, Escocia visitaba Ninian Park, en Cardiff, para enfrentarse a Gales, con el objetivo de obtener un resultado que le permitiera jugarse un play-off contra Australia para estar en México. Stein llevaba años medicándose para controlar una dolencia cardiaca, pero días antes del partido de Gales, decidió dejar de tomar la medicación para evitar los efectos secundarios y concentrarse mejor en tan importante cita, ante la que se sentía muy presionado por la federación. Algunos jugadores escoceses lo notaron especialmente pálido y sudoroso antes del partido. En el primer tiempo, los galeses se adelantaron con gol de Mark Hughes, pero Davie Cooper pudo empatar de penalti. Este resultado le daba a Escocia la posibilidad de jugar el play-off.

Tras un segundo tiempo de mucha tensión, el partido acabó con ese resultado, para regocijo tanto de jugadores como aficionados escoceses. Pero de repente, un revuelo se montó en el banquillo: Jock Stein se había desmayado. La prensa y el público pensaron que era un efecto de la emoción del resultado, y el técnico fue llevado al vestuario, donde se le tumbó en una mesa y donde el médico de la selección le atendió. Pero pronto perdió de nuevo la consciencia y aproximadamente media hora después del pitido final, sin salir del vestuario visitante de Ninian Park, Jock Stein fallecía. Tenía 62 años. Su segundo entrenador en la selección escocesa se quedó en shock: se llamaba Alex Ferguson.

Aunque se informó de que la muerte se había debido a un fallo cardiaco, en realidad Stein murió a causa de un edema pulmonar. Fue cremado en Glasgow ante una multitud.

Ferguson sería elegido su sustituto y logró clasificar a Escocia para el Mundial, donde dirigió al equipo. Poco después se hizo cargo del Manchester United y el resto es historia, pero Ferguson siempre ha citado a Jock Stein como su gran referente y maestro.

Con Stein se fue el mejor entrenador escocés de la historia y una estatua de bronce en las puertas de Celtic Park así lo atestigua. En Ninian Park, por cierto, también hay una placa en su honor.

Espero que os haya gustado el artículo. Hasta la semana que viene.

2 comentarios

  1. Dice ser Laiko

    Muy interesante. Historia humana, en el futbol actual cuesta muchisimo encontrar estas situaciones, todo es dinero, marketing, publicidad…

    06 noviembre 2023 | 09:44

  2. Dice ser José Andrés

    Como buen (o mal) «indio», no podía faltar la puyita ponzoñosa contra el Madrid. ¡¡Acomplejado!!

    15 noviembre 2023 | 15:21

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