Hola a todos. Sigo con la costumbre de traer grandes leyendas de deportes que no asoman por esta vuestra bitácora. Hoy vamos a hablar de uno de los deportes olímpicos de más solera y de dos de sus más grandes practicantes de todos los tiempos: Se trata de la esgrima y de los hermanos Nedo (dcha.) y Aldo Nadi (izda.).
Viajamos a la Toscana, en concreto a la ciudad de Livorno, en los últimos años del siglo XIX. Allí, Beppe Nadi, maestro de esgrima, tiene dos hijos, Nedo, nacido el 9 de julio de 1894 y Aldo, nacido el 29 de abril de 1899. De pequeños, ambos se inician en este tradicional deporte y destacan por su destreza. Ambos se especializan en dos de las tres modalidades de la esgrima: florete y sable (la otra es espada). Su padre desecha la espada porque cree que es una modalidad menos disciplinada que las otras dos, pero los hermanos Nadi aprenden por su cuenta.
El mayor, Nedo, logra con 14 años su primer triunfo sonado, al ganar un trofeo en la competición de esgrima que se celebra en Viena con motivo del Jubileo del Emperador Francisco José de Austria.
El joven Nedo es tan buen tirador que llega a los Juegos Olímpicos de Estocolmo en 1912, con 18 años, y se convierte en el más joven de la historia en conseguir un oro. Lo hace en la competición de florete, por delante de otro italiano, el siciliano Pietro Speciale, y del austríaco Richard Verderber.
La carrera de Nedo Nadi, no obstante, se ve interrumpida por la I Guerra Mundial, en la cual participa y por la que es condecorado por el Rey Victor Manuel III gracias a su valentía.
Llega 1920 y a las hazañas de Nedo habrá que sumar un aliado más, su hermano pequeño Aldo, que con 21 años acompaña a Nedo a los Juegos Olímpicos, que se disputarían en Amberes.
El dominio de los hermanos Nadi es abismal. Nedo logra el oro en florete y sable individual (en esta última competición, derrotando a su hermano Aldo en la final, quedándose el pequeño la plata) y el equipo italiano, liderado por los hermanos toscanos, logra el oro en las tres competiciones por equipo: florete, sable y espada.
Ambos y, sobre todo Nedo, se convierten en los mejores tiradores de la historia. De hecho, el logro de Nedo Nadi (lograr un oro en cada modalidad de esgrima en unos únicos Juegos Olímpicos) no ha sido superado. Y hasta 1972, cuando Mark Spitz batió todos los registros en la piscina olímpica de Munich, era el atleta con más oros en una misma edición olímpica. Sin embargo, hay que decir que a los Juegos de 1920 no acudieron los países derrotados en la I GM ni la URSS, por lo que se quitaron de enmedio a los húngaros, que como sabréis, son los grandes especialistas de la esgrima mundial.
Tras sus éxitos olímpicos, los hermanos Nadi emigraron a América. Nedo se trasladó a Argentina para hacerse cargo de un puesto de entrenador en el Jockey Club de Buenos Aires. Regresó a Italia en 1923. Fue seleccionador italiano en los Juegos de Los Angeles 1932 y luego ejerció desde 1936 como presidente de la Federación Italiana de Esgrima, hasta el 29 de enero de 1940, cuando falleció en Roma víctima de un ictus.
En cuanto a Aldo, al principio se estableció en Nueva York, para luego, tras la II Guerra Mundial, trasladarse a California. En Los Angeles abrió su propia escuela de esgrima y también colaboró con la industria cinematográfica. De hecho, apareció en una película de Humphrey Bogart y Lauren Bacall, Tener y no tener (1949). No se movió de Estados Unidos y falleció el 10 de noviembre de 1965 mientras dormía en su casa de Los Angeles.