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ERC ‘esconde’ a Marta Rovira para frenar la sangría en los sondeos y refuerza el protagonismo de Rufián, Romeva y Tardà

La dirección de Esquerra Republicana de Catalunya ha decidido ‘esconder’ durante la campaña electoral a Marta Rovira, (número dos de la lista de ERC) señalada por Oriol Junqueras -líder de la formación independentista y actualmente encarcelado en la prisión de Estremera- como posible próxima presidenta de la Generalitat.

Marta Rovira en un acto electoral de ERC

La secretaria general de Esquerra Republicana, Marta Rovira, durante su intervención en un acto electoral en Girona. EFE/Robin Townsend.

El motivo es la sangría en las encuestas, en las que ERC ha pasado de tener la victoria prácticamente asegurada con unos 40 escaños en noviembre, a ver amenazado el triunfo en votos no solo por Ciudadanos e Inés Arrimadas, el principal adversario político del llamado bloque unionista, sino a poder verse superados incluso por Junts per Catalunya, la formación que lidera Carles Puigdemont, que está remontando.

Por ello, la formación independentista va a dar más protagonismo mediático durante la última semana de campaña antes de los comicios del 21D a otros dirigentes de la formación, como el portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardà, quien ha recalcado que el candidato de su formación a la investidura es «Oriol Junqueras» (y no Marta Rovira).

También está recobrando protagonismo el diputado en el Congreso Gabriel Rufián, quien ha calificado de «carceleros» al PSC (para frenar las expectativas de revalidar un tripartito de izquierdas con los socialistas y los Comunes de Ada Colau), hipótesis defendida por Podemos pero que estaría beneficiando a Puigdemont a costa de ERC.

Otros dirigentes que están ganando protagonismo son Raül Romeva, ex conseller de Exteriores y número tres de ERC -quien ha augurado un «desastre colectivo» si gobierna Ciudadanos-, y el ex conseller de Justicia Carles Mundó, quien puso en duda que Puigdemont pueda ser el próximo president de la Generalitat -por sus problemas judiciales-. Ambos ex consellers, Romeva y Mundó, también fueron encarcelados, aunque posteriormente fueron puestos en libertad.

Tanto Tardà como Rufián, Romeva y Mundó están participando, y van a seguir haciéndolo, en comparecencias con los medios de comunicación y entrevistas, mientras que la figura de Marta Rovira se va a reservar más para mítines y actos de campaña de ERC.

No en vano, la excesiva exposición en público de Rovira está mostrando las carencias de la candidata y está perjudicando las expectativas electorales de ERC. En el programa de Jordi Évole -en el que se enfrentó en un debate frente a Inés Arrimadas- evidenció que no sabía la cifra de parados en Cataluña -tampoco Arrimadas-.

Por otra parte, dijo que la vía unilateral era un invento del Estado español, pero a los pocos días ella misma aseguró que ERC volvería a la vía unilateral si el Gobierno de Rajoy no aceptaba un referéndum pactado. Por otra parte, también subrayó que el eslógan de ‘Espanya ens roba‘ era una «mentira» de los partidos políticos que defienden la unidad de España para «generar división» entre los catalanes, pero se acreditaron tuits de dirigentes de ERC utilizando ese eslógan.

Incluso, el diario británico The Guardian cuestionó la idoneidad de Marta Rovira para ser aspirante a presidenta de la Generalitat de Cataluña e incluso criticaron que no sabe expresarse en castellano, la lengua que utilizan habitualmente la mitad de los catalanes.

Por otra parte, fuentes de la formación independentista admiten que Rovira está sumamente preocupada ante la posibilidad de resultar incriminada, y encarcelada, por su participación en el ‘procès’. De hecho, el juez del Tribunal Supremo Pablo Llanera ha ordenado a la Guardia Civil que detalle el grado de implicación de Marta Rovira en la estrategia para tratar de dejar sin efecto la Constitución Española y el Estatut de Autonomía en Cataluña.

Fuentes de ERC admiten el desgaste electoral del partido y lo atribuyen, fundamentalmente, al encarcelamiento de Junqueras, el verdadero líder del partido, y su imposibilidad de poder hacer campaña electoral en igualdad de condiciones, según aseguran. Además, niegan que estén escondiendo a Marta Rovira: participa en la campaña en primera línea, como otros dirigentes del partido, aseguran desde ERC.

 

Puigdemont, lanzado, puede noquear a la débil ERC de Rovira… y beneficiar a C’s

La retirada de la orden de detención europea contra el ex president Carles Puigdemont puede permitir al candidato de Junts per Catalunya hacer campaña electoral por los municipios catalanes, mientras Oriol Junqueras continúa en la cárcel de Estremera y su partido, ERC retrocediendo en las encuestas.

Puigdemont

El expresident Carles Puigdemont en su intervención por videoconferencia desde Bruselas durante el acto electoral de inicio de campaña. EFE/Susanna Sáez.

Mientras Puigdemont ha podido realizar entrevistas y actos continuamente desde su ‘exilio’ en Bélgica, Junqueras apenas ha podido transmitir mensajse al exterior y el liderazgo de Esquerra Republicana ha sido asumido por Marta Rovira, quien se está diluyendo como un azucarillo en medio de una campaña electoral inédita por todas las circunstancias.

Puigdemont está remontando en los sondeos -la prueba más cercana es el sondeo del CIS– que sitúa ya al ex president en tercera posición. El ex alcalde de Girona decidió desterrar las siglas de su partido, el PDeCAT, y hacer una candidatura al Parlament a su gusto, provocando críticas internas en el partido que todavía trata de tutelar Artur Mas.

Pero la apuesta parece ir dándole buenos resultados, a tenor de la remontada electoral que está protagonizando a costa de la debilitada ERC, quien parecía tener la victoria asegurada. Ahora, sin embargo, es Ciudadanos y su candidata, Inés Arrimadas, quien se perfila como la candidata más votada en Cataluña y disputando la victoria en escaños a ERC.

Paradójicamente, en la medida en que Puigdemont remonte a costa de ERC estará facilitando la victoria de Ciudadanos y, en caso de confirmarse esta la noche del 21D, el mensaje al mundo podría ser pésimo para el independentismo: la victoria de un partido que nació en Cataluña para defender la unidad de España.

Arrimadas erige a Cs como la garantía para acabar con el procés interminable

La candidata de Ciudadanos Inés Arrimadas durante el inicio de campaña para las elecciones del 21 de Diciembre que el partido celebró en Barcelona. EFE/Enric Fontcuberta

Puigdemont solo podría salvar los muebles si las candidaturas independentistas (Junts per Catalunya, ERC y la CUP) lograran revalidar la mayoría absoluta en escaños (en votos lo dan ya casi por perdido).

Mientras, en Moncloa y en la sede central del PP en la calle Génova se ve con suma preocupación el resultado de su partido en Cataluña: según el CIS quedará último perdiendo cuatro escaños. Y creen que el resultado podría ser incluso peor si cala la llamada al voto útil a Inés Arrimadas. El único consuelo, y no menor, sería que el independentismo perdiera la mayoría absoluta en primer lugar, y el segundo que se pudiera conformar una mayoría de gobierno constitucionalista.

En este supuesto, fuentes del PP consideran que será muy complicado, en el caso de que se confirmaran los resultados que augura el CIS, lograr un gobierno de corte constitucionalista, ya que la llave la tendría Catalunya en Comú-Podem, quien muy difícilmente apoyaría la investidura de Inés Arrimadas.

Creen más probable en el PP un gobierno socialista presidido por Miquel Iceta, y apoyado por Podemos, C’s y el PP -además de la antigua Unió Democràtica de Catalunya de Josep Antoni Duran i Lleida, ya semi engullida por el PSC-. En cualquier caso, la decisión que tomen Ada Colau y Pablo Iglesias será muy difícil: apoyar un gobierno independentista o un gobierno constitucionalista. La vía intermedia deseada por Pablo Iglesias (un tripartito de izquierdas presidido por ERC pero condicionado por su partido y el PSC) no sumaría mayoría absoluta. Si necesitaran a la CUP, el PSC nunca entraría en ese ya de por sí complicado gobierno tripartito.

El mensaje que se prepara desde Moncloa, más de cara al resto del Estado -y del mundo- que hacia Cataluña, es ‘vender’ que gracias a la aplicación del artículo 155 de la Constitución el Gobierno de Mariano Rajoy ha restituido la legalidad y el orden en Cataluña, y todo ello ha sido ratificado democráticamente en las urnas. Además, creen que una victoria de un partido constitucionalista en Cataluña -Ciudadanos- sería la estocada mortal al procés independentista.

Miquel Iceta

El candidato del PSC Miquel Iceta abrió su campaña electoral para las próximas elecciones del 21D en un acto celebrado en L’Hospitalet de Llobregat. EFE/Andreu Dalmau

En el PSOE, por su parte, esperan un muy buen resultado del candidato del PSC, Miquel Iceta, pero al mismo tiempo saben que, en el caso de que llegara a gobernar, podría suponer un gran problema para la estabilidad interna: sus mensajes a favor de un estado plurinacional, competencias blindadas para Cataluña, un hacienda propia catalana o la condonación de la deuda, podrían provocar ipso facto el rechazo del resto de federaciones socialistas, especialmente de la andaluza (Susana Díaz), la aragonesa (Javier Lambán) o la castellano-manchega (Emiliano García-Page). Todo ellos barones que se enfrentaron abiertamente a Pedro Sánchez en el proceso de primarias.

Así las cosas, la recién iniciada campaña catalana se juega en el tablero catalán, pero tiene consecuencias directas, y decisivas, en el tablero español. Y, por extensión, en la estabilidad de la Unión Europea de los Estados (cuestionada por Puigdemont) y las relaciones entre Estados Unidos, la UE y Rusia (a quien los dos primeros acusaron de interferir en los asuntos internos de España favoreciendo la causa independentista promoviendo noticias falsas en las redes sociales).

La jugada de Junqueras para derrotar a España: reeditar Junts pel Sí (él sería president) y fichar a Fachin (Podem)

Oriol Junqueras, líder de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y ex vicepresidente del Govern, quiere jugar muy fuerte su última baza para ser el próximo president de la Generalitat de Cataluña.

Para lograrlo, Junqueras está tratando de convencer a dirigentes del PDeCAt de que está dispuesto a reeditar la coalición Junts pel Sí, siempre y cuando quede claro que él sería el próximo president de la Generalitat. Para ello, argumenta, según fuentes de toda solvencia de ERC, que él ha sido «generoso» y «leal» tanto con Artur Mas como con Carles Puigdemont. «Esta vez debe ser a la inversa», sostienen las fuentes de ERC.

Manifestación independentista

Senyeras y esteladas en la movilización de la ANC y Òmnium el 11-S en Barcelona. (ACN)

Sus argumentos, según el partido histórico del independentismo catalán, son rotundos. ERC sería, según todas las encuestas, el claro ganador de las elecciones autonómicas, por lo que considera que el PDeCAT no estaría en estos momentos para reclamar la presidencia ya que, los mismos sondeos, les otorgan un hundimiento histórico. Además, el PDeCAt está inmerso en una crisis interna absoluta, con Carles Puigdemont huido en Bélgica, Artur Mas moviendo hilos pero inhabilitado y hasta tres dirigentes con deseos de ser los candidatos (Josep Rull, Santi Vila y Neus Munté). Todo en un clima de riesgo de escisiones internas.

Junqueras se presentaría como el salvador del ‘procés’, ahora herido de muerte, y también del independentismo. Además, las organizaciones sociales independentistas (la Assemblea Nacional Catalana -ANC- y Òmnium Cultural),debilitadas tras la detención de sus líderes, los Jordis (Jordi Sánchez y Jordi Cuixart), también podrían estar a favor de la operación para evitar a toda costa que los partidos defensores de una Cataluña unida a España pudieran hacerse con el Govern.

Desde ERC tienen claro que Raül Romeva, el destituido conseller de Exteriores, no podrá ser esta vez el cabeza de lista de la coalición tras el estrepitoso fracaso respecto al reconocimiento internacional de la ‘república catalana’. Ni un solo país, ni siquiera la extravagante Osetia del Sur (satélite de Rusia), ni Eslovenia, ni Andorra, ni Venezuela… ni ningún país africano, ningún país del mundo ha reconocido a Cataluña como un país independiente tras la DUI.

Carles Puigdemont

El president de la Generalitat, Carles Puigdemont, con Oriol Junqueras, vicepresident, y otros miembros del Govern.

Todo lo contrario, el varapalo ha sido tremendo en favor de la unidad de España y la defensa del orden constitucional. La Unión Europea, con Alemania, Francia, Italia y Gran Bretaña a la cabeza; Estados Unidos, China, Japón y todos los países latinoamericanos han cerrado filas con España.

Ni siquiera Escocia (parte de Reino Unido) ni Quebec (nación cultural de Canadá) han avalado la declaración unilateral de independencia.

En ERC da por completamente descartado a Romeva como cabeza de lista. Pero Junqueras, igual que hizo lanzando una OPA hostil a Iniciativa per Catalunya (ICV) incorporando a Romeva, quiere ahora dar también una estocada a la coalición de Ada Colau y Pablo Iglesias incorporando a Albano Dante Fachin, todavía líder de Podem, que está coqueteando abiertamente con los partidos independentistas.

Pablo Iglesias, consciente del hundimiento que está sufriendo Podemos en el resto de España a raíz de la posición del partido sobre Cataluña, ha dado un golpe encima de la mesa y ha pedido a Fachín que abandone Podemos si se siente más cercano al independentismo. Por su parte, Carolina Bescansa, una experta en análisis demoscópicos, vio pronto la deriva de fuerte caída de respaldo social que estaba sufriendo Podemos fuera de Cataluña justamente por no exhibir con nitidez un relato de defensa de una España unida, plurinacional y federal, pero unida.

Manifestación a favor de la unidad de España en Barcelona

Cientos de miles de catalanes se manifestaron a favor de la unidad de España en Barcelona. EFE

Y Junqueras está dispuesto a aprovecharse de la crisis interna de Podemos arrebatándole a su principal dirigente soberanista en Cataluña, Albano Dante Fachin, así como a algunos cuadros medios del partido y, si es posible, pegarle un bocado llevándose a una parte de sus votantes.

El dirigente de ERC cree, según las fuentes del partido independentista, que si se reedita la coalición Junts pel Sí, con él de candidato, podrían mantener, o casi, los 62 escaños que lograron en 2015. Para salvar un gobierno independentista, necesitarían que la CUP lograra unos 8 escaños (obtuvieron 10 en 2015). La mayoría absoluta son 68. Con 61-62 de Junts pel Sí, más 7-8 de la CUP podrían salvar la mayoría absoluta y dar un golpe fuerte a los partidos no independentistas: Ciudadanos (Inés Arrimadas), PSC (Miquel Iceta), PP (Xavier García Albiol) y la coalición que presenten Catalunya en Común, Podemos e Izquierda Unida, que liderará Xavier Doménech.

El plan B de Oriol Junqueras, en caso de quedarse a las puertas de la mayoría absoluta, sería convencer a Pablo Iglesias y a Ada Colau de un gobierno de izquierdas.

Pero ahora, el objetivo de ERC es allanar el camino a un nuevo Junts pel Sí (el plazo para decidirlo concluye el 7 de noviembre), con el PDeCAT sumiso a Junqueras para vencer a los partidos que defienden la legalidad y la unidad de España. Si lo logran, exigirá al Estado español un referéndum pactado para lograr la independencia y la creación de la ‘República Catalana’.

Guerra en el PDeCAT: Rull (duro), Vila (moderado) y Munté (dúctil) quieren ser candidatos a presidente de Cataluña

Las elecciones autonómicas del próximo 21 de diciembre han cogido al PDeCAT (a las que se presentará pese a que suponen reconocer la legalidad española) en completo fuera de juego, con el partido a un paso de la fragmentación ante la falta de un liderazgo claro.

Mas y Puigdemont

Los ex presidentes de la Generalitat, Artur Mas, y Carles Puigdemont, respectivamente. (EFE)

Por un lado, el ex conseller de Territorio, Josep Rull, pretende ser el candidato con el argumento de mantener la línea dura independentista. Hoy ha hecho un gesto simbólico yendo a su despacho supuestamente a trabajar para desafiar la aplicación del artículo 155 de la Constitución, un gesto que no ha sido secundado por ningún otro de los consellers destituidos. Incluso, la presidenta del Parlament de Catalunya, Carme Forcadell, ha acatado la orden del 155 y ha dado por disuelta la cámara autonómica.

Rull es un perfecto conocedor del aparato del PDeCAT. No en vano, fue elegido secretario de Organización de CDC en 2011, y posteriormente coordinador general en 2014. Era un de los preferidos por Artur Mas, ex president de la Generalitat, para sucederle al frente del partido. No obstante, con los resultados de las elecciones autonómicas de 2015, en los que la CUP tenían la llave del Govern, el partido anticapitalista exigió que Artur Mas no fuera de nuevo el president, sino Carles Puigdemont, entonces un diputado por Girona y ex alcalde de esa ciudad. La CUP no quería a Artur Mas por su vinculación con la época de corrupción de Jordi Pujol y el caso 3%, y también porque consideraba que Puigdemont estaba mucho más comprometido con la independencia que Artur Mas.

Josep Rull

El ex conseller Josep Rull

Rull, ahora, pretende optar a ser el candidato del PDeCAT a president de la Generalitat, pero hay sectores del partido que consideran que su perfil duro y su talante poco pactista con los partidos no independentistas no es el idóneo ni el conveniente -a diferencia de Oriol Junqueras (líder de ERC), que sí tiene vías de comunicación abiertas sobre todo con Podemos, pero incluso con la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría-.

En el lado contrario estaría Santi Vila, el ex conseller de Empresa que dimitió el día que Puigdemont descartó convocar elecciones autonómicas y optó por seguir adelante con la votación de la DUI. Su perfil sería el de un PDeCAT que volvería a la línea moderada, capaz de pactar con casi cualquier partido del arco parlamentario y defensor de un referéndum legal pactado con el Estado.

Vila ha defendido la línea histórica de CiU como partido de mayoría social y transversal catalanista, y ha elogiado la posición actual del PNV de Íñigo Urkullu e incluso el perfil centrista de Alberto Núñez Feijoo. No obstante, la deriva independentista de Junts pel Sí le ha llevado a secundar posiciones que no compartía, y finalmente decidió dimitir. Ahora, pretende devolver al PDeCAT a la centralidad y moderación que históricamente había tenido. Si no lo logra, no es descartable que se produzca una escisión en el partido y que Vila arrastre con él a alcaldes, concejales y militantes partidarios de volver a la moderación.

Neus Munté y Santi Vila

Los ex consellers Neus Munté y Santi Vila

Otra aspirante a liderar el PDeCAT es Neus Munté, que sería una vía intermedia entre Rull y Vila. Munté, ex consellera de Presidencia en el gobierno de Puigdemont es también la vicepresidenta del PDeCAT. Una histórica de CiU que incluso estuvo entre quienes optaban a presidir la Generalitat cuando la CUP vetó a Artur Mas.

Tres políticos resultarán decisivos para declinar quién puede llevarse el gato al agua y ser el candidato del PDeCAT a la presidencia de la Generalitat son Marta Pascal, actual coordinadora general, y el ex president Artur Mas. Este último, que no puede ser porque resultó inhabilitado por la consulta del 9N, quiere evitar que salga adelante la opción moderada de Santi Vila, y, si no puede ser él, preferiría a Rull o Munté. No obstante, Artur Mas es consciente de que cualquiera de los dos logrará un resultado muy pírrico en unas elecciones en las que, según las encuestas, gran parte del voto independentista se concentrará en Oriol Junqueras (ERC).

Por su parte, Marta Pascal es más partidaria de una vuelta al pragmatismo histórico de CiU, consciente de que el proceso se está llevando por delante al PDeCAT con constantes rupturas internas y, especialmente, con miucha pérdida de respaldo social. Además, Pascal cree que la imagen del PDeCAT junto a la CUP, anticapitalistas, no conviene más a su partido, la casa histórica de la burguesía catalana. De hecho, agradeció a Santi Vila su dimisión tras intentar por todos los medios evitar la ruptura del diálogo entre el Govern y el Estado.

Y en tercer lugar la presidenta de la Diputación de Barcelona y alcaldesa de Sant Cugat, Mercé Conesa, quien también es partidaria de volver a una senda de pragmatismo, viendo que la línea independentista está arrasando al PDeCAT y que el sueño de la república catalana se ha desvanecido (ningún país la ha reconocido), las empresas más importantes han huido y la sociedad catalana está más fracturada que nunca. Conesa, según fuentes del partido, se estaría debatiendo entre la opción de Neus Munté o Santi Vila, aunque también recibe peticiones de alcaldes que la animan a ella a dar el paso. Conesa, no obstante, prefiere reservarse, consciente de que optar ahora a presidenta de la Generalitat sería prácticamente dilapidar su carrera política en vista de los malos resultados que auguran las encuestas para el PDeCAT.

El partido ha acordado presentarse hoy a las elecciones autonómicas del 21 de diciembre, sin nombrar candidato todavía, y con Carles Puigdemont en Bélgica previsiblemente pidiendo asilo.

Ahora, la batalla interna en el partido heredero de CiU es total entre tres almas: la independentista radical (Josep Rull), la moderada partidaria de poder entenderse con el Constitucionalismo (Santi Vila) y la media Cataluña no independentista, o una síntesis entre estas dos posiciones (Neus Munté).

Al borde del precipicio… algo se empieza a mover en Cataluña y España

En una situación de máxima tensión en las calles de Cataluña y gran preocupación en el resto de España. Con un Govern en rebeldía amenazando con una declaración unilateral de independencia y un Gobierno de España que no está logrando ni aplacar la insurrección ni encontrando vías de entendimiento y diálogo. Con decenas de miles de catalanes independentistas protestando en las calles frente a la «represión policial» y con decenas de miles de catalanes no independentistas indignados con la deriva ilegal del Govern. Con el Jefe del Estado, Felipe VI, llamando al respeto del orden constitucional, apoyado por el PP, Ciudadanos y gran parte del PSOE, y cuestionado por los nacionalistas, Podemos y algunos socialistas.  Con el conflicto copando las portadas y las televisiones de los grandes medios de comunicación mundiales. Con los grandes organizaciones empresariales muy preocupadas y algunas empresas catalanas cayendo con fuerza en la bolsa y otras migrando a otras regiones. Con Cataluña al borde del caos y el enfrentamiento social… parece que algo se mueve a nivel político.

Rajoy y Puigdemont

El presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, regala un facsímil de El Quijote al presidente de la Generalitat Carles Puigdemont en La Moncloa. Paco Campos/EFE

El president de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha dejado pasar unos días antes de aprobar la declaración unilateral de independencia (hasta el próximo lunes), seguramente esperando una vía de diálogo con el Estado español, exigida por la Unión Europea. Pero al mismo tiempo hace declaraciones en medios de comunicación internacionales pronosticando que declarará la independencia. Puigdemont confía, probablemente, en buscar un acuerdo que se base en un referéndum de independencia pactado con el Estado. Legal y vinculante. La CUP de Anna Gabriel exige la declaración de independencia ya, el lunes a más tardar, mientras ERC de Oriol Junqueras quiere forzar la máquina al máximo, pero, en la línea de Puigdemont, creen que la más deseable sería un referéndum pactado con el Estado, si Rajoy (más Sánchez y Rivera) se aviene forzado por la amenaza de ruptura y la presión internacional.

El presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, busca que la presión de Alemania y Francia, y del Vaticano fuercen a una negociación pero siempre en el marco de la Constitución Española. El acuerdo se basaría en una reforma de la Carta Magna con un nuevo sistema de financiación autonómica que beneficiaría a Cataluña y otras CCAA, pero sobre la base innegociable para el PP de que la soberanía nacional seguiría siendo del conjunto del pueblo español.

Rajoy ha frenado la tesis del presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, de aplicar ya el artículo 155 de la Constitución para convocar elecciones autonómicas anticipadas en Cataluña. Solo lo haría, la aplicación del 155, si Puigdemont declarara la independencia de forma unilateral. Llegado a ese extremo de ruptura total, el Gobierno de España, según fuentes del PP, haría valer toda la fuerza coercitiva del Estado, con el apoyo del PSOE y Ciudadanos, y el beneplácito de la Unión Europea (Merkel y Macron piden a Rajoy que agote las vías de diálogo, pero le apoyarán en la opción de restituir por la fuerza el orden constitucional si Puigdemont rompe la baraja).

Pedro Sánchez con Pablo Iglesias

Pedro Sánchez con Pablo Iglesias. EFE

El PSOE de Pedro Sánchez está apoyando al Gobierno de España, pero sigue haciendo gestos hacia el Govern en busca de un posible acuerdo para desbloquear la complicada situación. Fuentes de Ferraz aseguran que Sánchez rechaza aplicar el artículo 155, como sí exigen ex dirigentes socialistas como Alfonso Guerra, e incluso ha pedido reprobar a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría por la actuación «desproporcionada» de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil para evitar el referéndum del 1 de octubre. No obstante, existe división interna en el PSOE. La presidenta de Andalucía, Susana Díaz, está en desacuerdo y pide centrar la crítica en quienes considera que han quebrado la ley, Junts pel Sí y la CUP, y no en el Gobierno de España. En cualquier caso, Pedro Sánchez quiere dejar una puerta abierta al diálogo con los independentistas en busca de un acuerdo hacia una España federal, descentralizada, en la que Cataluña tendría un reconocimiento como nación, dentro de una España nación de naciones. También apuesta por conceder un estatus especial a Cataluña, con competencias blindadas a nivel cultural, como le ha pedido Miquel Iceta, líder del PSC. Pero, como Rajoy y Rivera, Pedro Sánchez apuesta por una reforma constitucional en la que no se pusiera en cuestión que la soberanía nacional reside en el conjunto del pueblo español.

Manifestación independentista

Senyeras y esteladas en la movilización de la ANC y Òmnium el 11-S en Barcelona. (ACN)

Pablo Iglesias y Ada Colau rechazan tanto la declaración unilateral de independencia como la aplicación del artículo 155. Apuestan por una mediación internacional en busca de un referéndum pactado y vinculante, en la línea de lo que reclama Carles Puigdemont. Pero, eso sí, sin aprobar en ningún caso una independencia sin celebrar antes un referéndum con garantías y acordado con el Estado español.

Podemos apuesta por primera vez por un diálogo directo entre el presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, -no pedirá su dimisión si hay opciones de diálogo- y por el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, así como entre todas las fuerzas políticas españolas. Socios de Podemos como Izquierda Unida o Compromís discrepan con Iglesias en cuanto a la mediación internacional y creen que deben ser los políticos españoles quienes sean capaces de solucionar el problema. Así lo ha manifestado Alberto Garzón.

Pablo Iglesias quiere una reforma de la Constitución hacia un Estado federal español y plurinacional, que reconociera el derecho de autodeterminación también a Euskadi y Galicia.

Rajoy con Urkullu

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, con el lehendakari, Íñigo Urkullu.

Y otro actor clave es el Gobierno vasco de Íñigo Urkullu y el PNV, que se ha ofrecido como mediador entre las dos partes, el Gobierno de Rajoy y el de Puigdemont. Urkullu apuesta, como Iglesias, por un referéndum pactado como fórmula para superar el conflicto, aunque cree que Euskadi podría sentirse cómoda en España si ésta pasa a ser un Estado plurinacional.

Sobre toda esta complejidad surge, pese a todo, una pequeña esperanza de abrir vías de diálogo en busca de una solución que, en ningún caso, pasara por la balcanización de España. Al borde del precipicio, algo empieza a moverse. Ojalá sea positivo.

Sánchez quiere a Lastra de portavoz en el Congreso y a Ábalos en Organización

Lastra y Ábalos

Los diputados Adriana Lastra y José Luis Ábalos, coordinadores de la campaña de Pedro Sánchez (EFE).

Si Pedro Sánchez logra remontar la pequeña ventaja en avales que tiene Susana Díaz, y vence a la lideresa andaluza y a Patxi López en las primarias este domingo 21 de mayo, será proclamado secretario general del PSOE.

Posteriormente, se celebrará el congreso del PSOE los días 16, 17 y 18 de junio en el que los delegados votarán los documentos políticos, los estatutos y los nuevos órganos de dirección. En teoría, el congreso será una ratificación de la línea que marque el nuevo secretario general elegido por los militantes, aunque no es descartable que hubiera una mayoría de delegados, en principio, afines a Susana Díaz.

No obstante, fuentes de la candidatura de Pedro Sánchez dan por hecho que si vence a la presidenta de la Junta de Andalucía en las primarias habrá «muchos delegados de los diferentes territorios, que en teoría apoyarán a Susana, que en el Congreso cerrarán filas con el próximo secretario general, es decir, con Pedro».  Además, Pedro Sánchez prevé integrar a Patxi López, a quien incluso podría ofrecer el cargo de presidente del PSOE, para dar una imagen de apuesta por la unidad interna (y también para amarrar el congreso federal y fortalecerse de cara a los congresos regionales).

Pedro Sánchez y Susana Díaz

Pedro Sánchez y Susana Díaz en un acto del PSOE. EFE

Pero para los puestos clave, el exlíder del PSOE, que aspira de nuevo a serlo, quiere a dos políticos de su estricta confianza, que le han sido leales a las duras y a las maduras, y que le han aportado muchos militantes en territorios supuestamente susanistas: Adriana Lastra y José Luis Ábalos.

La diputada asturiana logró que el ‘pedrismo’ se impusiera en la región que preside Javier Fernández, presidente de la gestora y afin a Susana Díaz, con 3.100 avales frente a los 2.400 que logró la presidenta andaluza, pese a contar con el apoyo del aparato del PSOE regional.

Un roto aún mayor le hizo el pedrista José Luis Ábalos, secretario general del PSOE de la provincia de Valencia, al susanista Ximo Puig, presidente de la Generalitat Valenciana y líder de los socialistas de la Comunidad: 8.100 frente a 5.300 avales. La diferencia a favor de Pedro Sánchez se dio especialmente en la provincia de Valencia, liderada por Ábalos, mientras que los afines a Ximo Puig lograron una pírrica victoria de Susana Díaz en la provincia de Alicante. En Castellón también se impusieron los pedristas.

Pedro Sánchez tiene claro que, si es refrendado como líder del PSOE por los militantes, Adriana Lastra y José Luis Ábalos, a quienes nombró coordinadores principales de su campaña de primarias, serán sus dos principales personas de confianza.

La asturiana Adriana Lastra sustituiría a Antonio Hernando

La diputada asturiana tendría todas las papeletas para ser la nueva portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso en sustitución de Antonio Hernando, a quien en las filas del pedrismo se considera un «traidor» y «vendido» al susanismo, pese a llegar a haber defendido el «No es No» a la investidura de Mariano Rajoy.

Pedro Sánchez y Antonio Hernando

Imagen de archivo de Pedro Sánchez y Antonio Hernando en el Congreso de los Diputados. EFE

Por su parte, el valenciano José Luis Ábalos se perfilaría como el próximo secretario de Organización, el hombre fuerte del partido, en sustitución de César Luena -no ejerce desde la creación de la gestora-, secretario general de La Rioja y alineado ahora con Patxi López.

Los pedristas tienen claro que quieren recuperar a muchos cargos posicionados con el ex lehendakari vasco, pero no es el caso de Luena, a quien se considera uno de los principales causantes de las malas relaciones de Pedro Sánchez con barones como Guillermo Fernández Vara, Emiliano García-Page o Javier Lambán, por su falta de mano izquierda.

Ábalos, un histórico del PSOE, tendría la misión, por un lado, de tender puentes con los barones afines a Susana Díaz con el fin de sellar la paz interna y, por otro lado, la de poner en marcha de inmediato la maquinaria interna en el partido, prácticamente parada desde la derrota electoral en las generales de junio de 2016. El objetivo sería que el PSOE estuviera en condiciones de plantar cara al PP y a Podemos ante un eventual adelanto electoral de los comicios generales o, en cualquier caso, preparado para afrontar con éxito las elecciones municipales, autonómicas y europeas previstas para mayo de 2019.

Otra política afin a Pedro Sánchez que sería integrada con un cargo relevante en la futura Ejecutiva del PSOE es la catalana Núria Parlón, alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet, quien, junto a Miquel Iceta en la sombra, son considerados las figuras clave para que Sánchez logre una victoria rotunda en Cataluña este domingo frente a Susana Díaz.

Pablo Casado, el preferido por Génova para candidato a alcalde de Madrid

Pablo Casado

El vicesecretario general del PP, Pablo Casado. (EFE)

La dimisión de Esperanza Aguirre como portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid era algo esperado por la dirección nacional del Partido Popular tras estallar el escándalo de corrupción que ha llevado a Ignacio González, ex presidente de la Comunidad de Madrid, a la prisión de Soto del Real.

Aguirre ya tenía escasas posibilidades de repetir como candidata del PP a la alcaldía de Madrid en los próximos comicios municipales previstos para mayo de 2019, pero su dimisión por el ‘caso Lezo’ despeja el camino a la dirección nacional del PP que preside Mariano Rajoy para ‘limpiar’ el grupo municipal de los sectores aguirristas y apostar por una cara joven que simbolice una apuesta por la regeneración.

Cristina Cifuentes, apoyada por Rajoy, logró el gobierno regional con el apoyo de Ciudadanos tras los comicios autonómicos de mayo de 2015, después de que Génova descabalgara a Ignacio González como candidato. Posteriormente, tomó el control en febrero de 2016 de la gestora del PP de la Comunidad de Madrid tras la dimisión de Aguirre como presidenta regional por otro escándalo de corrupción que afectaba a una de las personas de máxima confianza de la ex lideresa, el ‘caso Granados‘. Y finalmente, Cifuentes fue refrendada como presidenta del PP de Madrid en marzo de 2017 con el apoyo del 93% de los militantes.

Sin embargo Cifuentes pasó a convertirse en una poderosa dirigente territorial que, como ya había hecho anteriormente Esperanza Aguirre con Rajoy, empezaba a volar sola, en muchas ocasiones desmarcándose de la línea oficial del aparato de Génova, como por ejemplo apoyando una mayor democracia interna en el partido o mayor contundencia contra la corrupción.

Cifuentes y Aguirre

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, y la dimitida Esperanza Aguirre. (EP)

Contrapoder a Cifuentes

Por ello, en Génova se considera que no es conveniente que el posible próximo candidato, o candidata, a alcalde de Madrid sea un político sumiso a Cifuentes, sino todo lo contrario, alguien con ambición que pueda marcar perfil propio y, si es necesario, convertirse en un contrapoder al frente de la capital de España a la propia Cifuentes, como lo fue Alberto Ruiz-Gallardón con Esperanza Aguirre.

En la cúpula del PP, según fuentes de la dirección nacional, se cree que es factible recuperar la alcaldía de Madrid mediante un pacto de gobierno con Ciudadanos, ya que se da por seguro que Manuela Carmena, con una importante valoración social, no volverá a presentarse al frente de una confluencia de partidos liderados por Podemos.

Además, el PSOE está inmerso también en una batalla interna entre afines a Susana Díaz, Pedro Sánchez y Patxi López que podría perjudicar los intereses electorales del Partido Socialista, así como la búsqueda de un candidato, o candidata, de garantías.

Pero en el PP creen que necesitan un candidato de primer nivel para optar a recuperar la alcaldía y por ello en Génova creen que Pablo Casado es la persona idónea para lograrlo. Casado, ex jefe de gabinete de José María Aznar, está siendo leal a Mariano Rajoy, quien lo designó vicesecretario general de Comunicación.

Casado, criado en el PP de Madrid

Aunque Casado es diputado por Ávila, en realidad es un perfecto conocedor del PP de Madrid, de hecho fue el presidente regional de Nuevas Generaciones justamente con Esperanza Aguirre al frente del PP regional.

En la cúpula nacional del PP no prevén que Cifuentes intente promover a ningún candidato alternativo, ya que consideran que es la principal interesada en que su partido presente a un aspirante de primera fila en Madrid capital que le ayude a ganar con el mejor resultado posibles las elecciones autonómicas.

Garrido, mano derecha de Cifuentes

No obstante, si Cifuentes intentara promover a algún político de su estricta confianza, como su consejero de Presidencia, portavoz del Gobierno y secretario general de Madrid, Ángel Garrido, en Moncloa y Génova están decidido a jugar muy fuerte la baza de Casado.

En Génova admiten que Garrido, mano derecha de Cifuentes, es un perfecto conocedor del Ayuntamiento Madrid (estuvo al frente de las juntas de distrito de Latina, Usera y Chamberí, Villa de Vallecas y Retiro), pero consideran que es un auténtico desconocido para el gran público, especialmente en comparación con Pablo Casado. Por ello, creen que la presidenta de la Comunidad de Madrid no planteará ningún tipo de batalla.

La ministra García-Tejerina

La ministra García-Tejerina (EP)

Otras posibles candidatas, como la ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina (número 3 del PP al Congreso de los Diputados por Madrid), son opciones que Moncloa se reserva ante eventuales cambios en la política madrileña y nacional, tan alterada por los escándalos de corrupción.

¿Por qué evitará el trullo con 15.000 € «la hija de puta de La Perla» (Bigotes dixit)?

El 3 de enero de 2009, en una conversación telefónica entre Álvaro Pérez El Bigotes, la persona de confianza de Francisco Correa en la Comunidad Valenciana, y Cándido Herrero, contable de Orange Market, El Bigotes admitió haber comprado un reloj a Milagrosa Martínez, ex presidenta de las Cortes Valencianas y ex consejera de Turismo en la época en que Francisco Camps era presidente de la Generalitat, como favor por recibir contratos públicos.

Milagrosa Martínez

Milagrosa Martínez, ex presidenta de las Cortes Valencianas, condenada por corrupción. EFE

Dicha conversación fue intervenida por los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. El Bigotes le dijo a Cándido Herrero: «Y luego tenemos que comprar un reloj a la consejera de, porque se lo compré a la hija de puta de la Perla, ¿no se lo voy a comprar a la de ahora, a la de Turismo?». Se refería a Angélica Such, la consellera de Turismo que sucedió a Milagrosa Martínez, y quien sí ha resultado absuelta.

Pero La Perla no, Milagrosa Martínez ha sido condenada a prisión, aunque eludirá la trena con una fianza de 15.000 euros.

La Perla siempre negó haber recibido un reloj valorado en 2.400 euros por parte de El Bigotes, a cambio de contrataciones para Fitur. Pero el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), en su sentencia sobre la pieza 3 del caso Gürtel, lo considera probado.

Según los magistrados del TSJ valenciano, en las fiestas navideñas de 2005, Francisco Correa, Pablo Crespo y Álvaro Pérez, puestos de común acuerdo, y para ganarse el trato de favor de la exconsellera, le regalaron un reloj de la marca Hublot por importe de 2.400 euros que Correa adquirió en una joyería de Madrid. Los tres han sido condenados y han ingresadon en la cárcel de Picassent.

Álvaro Pérez, El Bigotes

Álvaro Pérez, El Bigotes, miembro de la trama corrupta Gürtel.

El abogado de Milagrosa Martínez siempre negó tal acusación, e incluso la ex consellera dijo que era aficionada a los relojes de imitación y que no tenía amistad ni trato con los cabecillas de la trama corrupta Gürtel. Para ello se refirió a la forma insultante con que aludía a ella El Bigotes: «La hija de puta de La Perla». La exconsellera condenada a cárcel era conocida así por utilizar dicha expresión, ‘perla’, para referirse a mucha gente, aunque ella siempre ha dicho que se le conocía como «Mila».
La condena ha sido rotunda: 9 años de prisión, 6 de ellos por malversación de caudales públicos (delito por el que también se le imponen 10 años de inhabilitación absoluta) y otros tres años de cárcel por cohecho pasivo (además de 5.000 euros de multa y 8 años de inhabilitación especial).

¿Y por qué eludirá la cárcel con una fianza de 15.000 euros tras una condena tan clara? El tribunal ha tenido en cuenta que Milagrosa Martínez, a diferencia de Correa o El Bigotes, no está imputada en otras piezas del caso Gürtel.

Además, la defensa de la exconsellera ha alegado que su estado de salud es «delicado» y que carece de medios económicos, por lo que no existiría riesgo de fuga. Los jueces lo han tenido en cuenta pero, eso sí, está obligada a comparecer dos días al mes, se le retira el pasaporte y se le prohíbe salir de España, además de la fianza de 15.000 euros para eludir el ingreso en prisión.

La Perla, ex alcaldesa de Novelda (Alicante), fue promocionada por Francisco Camps tras significarse muy pronto en apoyo del expresidente de la Generalitat Valenciana en su particular batalla interna por el poder en el PP de la Comunidad Valenciana con el ex ministro Eduardo Zaplana que se desató tras las elecciones autonómicas del año 2003.

Patxi López publicará un libro donde explica su proyecto para liderar el PSOE

Patxi López, dirigente socialista vasco

Patxi López, dirigente socialista vasco. EFE

Patxi López, ex lehendakari y ex presidente del Congreso de los Diputados, está decidido a intentar liderar el PSOE. López considera, según fuentes de su entorno, que el enfrentamiento a cara de perro entre Susana Díaz, presidenta de la Junta de Andalucía, y Pedro Sánchez, ex secretario general del PSOE, conduce al Partido Socialista «a la división total, a la fractura absoluta y a seguir muchos años en la oposición», según fuentes de su entorno.

Por ello, López, arropado por gran parte de los socialistas vascos, está decidido a jugar fuerte para tratar de evitar el choque de trenes entre ‘susanistas’ y ‘pedristas’, que “sólo beneficia al Partido Popular y a Podemos”.

El dirigente vasco está ultimando un libro, de la editorial Los Libros de la Catarata, que se dará a conocer después de estas Navidades, en el que plasmará su proyecto socialista para los próximos años, según han confirmado fuentes cercanas a López.

En esta línea de postularse hacia el liderazgo del PSOE, Patxi López escribió en noviembre un artículo de opinión en El País en el cual llamaba a reconstruir el PSOE y a renovar el liderazgo en el partido, y daba pinceladas sobre su proyecto político para España en fiscalidad, economía y modelo territorial.

Pero para poder llevarlo a cabo, Patxi López sabe que antes debe evitar el enfrentamiento entre Pedro Sánchez y Susana Díaz, algo que sabe que es muy complicado hoy por hoy. Desde su entorno sostienen que la posible candidatura de la lideresa andaluza provoca un “enorme rechazo” en gran parte de la militancia del PSOE, mientras que la posibilidad de que Pedro Sánchez, a quien los socialistas vascos han apoyado, se vuelva a presentar “tampoco tiene sentido” porque, sostienen, ya ha perdido dos elecciones generales y también perdió, incluso, el apoyo del Comité Federal.

Susana Díaz con Patxi López

Susana Díaz, presidenta de la Junta de Andalucía y lideresa del PSOE andaluz, con Patxi López, exlehendakari. EFE

“Una victoria justa por cualquiera de los dos, Pedro o Susana, abocaría al PSOE a una fortísima división interna, que ahuyentaría todavía más a nuestros potenciales votantes”, aseguran los afines a Patxi López.

“Si ganara Susana, estamos convencidos de que habría cientos, miles, muchos militantes que se darían de baja del PSOE”, afirman. “Y si ganara Pedro, el enfrentamiento con varios presidentes autonómicos sería brutal e insostenible”, auguran, en alusión a Guillermo Fernández-Vara (Extremadura), Javier Lambán (Aragón), Ximo Puig (Comunidad Valenciana), Emiliano García-Page (Castilla-La Mancha) o Javier Fernández (Asturias), actual presidente de la gestora.

Por todo ello, desde el entorno de Patxi López creen que “lo más conveniente para el Partido Socialista y para España” sería que “tanto Pedro como Susana dieran un paso a un lado” en sus pretensiones. En esta línea estarían, aseguran, dirigentes como César Luena, ex número dos del PSOE con Pedro Sánchez y actual secretario general del PSOE de La Rioja, pero también “muchos dirigentes” opositores al ex líder socialista.

Patxi López en el Congreso junto a Pedro Sánchez

Patxi López en el Congreso junto a Pedro Sánchez, que renunció al escaño tras dimitir. EFE

La candidatura de Patxi López sería una apuesta por la “unidad”, por “cerrar heridas” y por “comenzar a presentar una alternativa de Gobierno muy seria desde un proyecto socialista cohesionado”.

En esta línea, el secretario general del Partido Socialista de Euskadi (PSE) de Vizcaya, Mikel Torres, aseguró públicamente que Patxi López «es la mejor opción» para liderar el PSOE y “podría ser un candidato de consenso” porque es “conciliador”. Además, resaltó que “los que se han enfrentado salen tocados”, en clara referencia a Pedro Sánchez y Susana Díaz.

Escaramuzas en el PP y C’s, batalla en Podemos y guerra civil en el PSOE

Los partidos políticos, después de un año con dos elecciones generales, van a cerrar 2016 inmersos en refriegas internas, (PP o Ciudadanos), en batallas orgánicas (Podemos), o casi en guerra civil (PSOE).

PSOE: la batalla pendiente entre Pedro y Susana

El Partido Socialista es, sin duda, el que vive la mayor guerra orgánica. La llamada ‘alianza de los barones’, encabezados por la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, consiguió derrocar a Pedro Sánchez, ex líder socialista, al forzar una votación en un Comité Federal, a mano alzada, sobre su propuesta de celebrar unas primarias para elegir al secretario general.

Sánchez fue derrotado por 132 votos en contra por 107 a favor. En una dramática jornada con insultos, amenazas, gritos y lágrimas, el ex dirigente socialista se vio forzado a presentar su dimisión, al quedar en minoría.

El argumento del sector de los barones para provocar el relevo de Sánchez fue que había cosechado dos derrotas electorales consecutivas al obtener solo 90 y 85 diputados, respectivamente, los peores resultados de la historia del partido por dos veces consecutivas.

Y también su intento de perpetuarse como secretario general convocando un congreso express, que fue considerado como una declaración de guerra por el sector de los barones, e incluso de tratar de lograr ser presidente del Gobierno mediante un pacto con Podemos, más los partidos nacionalistas (PNV) e independentistas (ERC y CDC). Alfredo Pérez Rubalcaba, también ex secretario general del PSOE, calificó ese hipotético intento de formar Ejecutivo como “investidura Frankenstein”.

Defenestrado Pedro Sánchez, el PSOE decidió abstenerse y facilitar la investidura de Mariano Rajoy, que logró los votos a favor de Ciudadanos y Coalición Canaria, además de los del PP.

El PSOE pasó a dirigirlo una gestora con mayoría del sector de los barones, y presidida por el presidente de Asturias, Javier Fernández, muy crítico con Pedro Sánchez y con Podemos.

Pero Sánchez, lejos de darse por vencido, ha iniciado una ronda de actos con militantes por toda España. El primero fue en Xirivella (Valencia), territorio de Ximo Puig, presidente de la Generalitat Valenciana que está alineado con Susana Díaz, quien no acudió al acto e incluso ninguneó la asistencia de Pedro Sánchez. “En la Comunidad Valenciana recibimos a siete millones de turistas”, recalcó.

Pero lo cierto es que el acto tuvo bastante éxito. Alrededor de un millar de personas ovacionaron a Pedro Sánchez y acudieron numerosos de sus afines: entre ellos el secretario general del PSOE en la provincia de Valencia, José Luis Ábalos, el diputado vasco Odón Elorza o José Antonio Pérez Tapias, de la corriente Izquierda Socialista y que se llegó a enfrentar a Sánchez y a Eduardo Madina en las últimas elecciones primarias del PSOE por el liderazgo del partido.

El próximo día 10 de diciembre Pedro Sánchez celebrará otro acto con militantes, esta vez en Asturias, el territorio de Javier Fernández, presidente de la gestora, en lo que fuentes del sector de los barones lo consideran como “otro desafío de quien no admite que su tiempo ha pasado tras dos fracasos electorales”. Fernández afirmó públicamente: “Él sabrá lo que hace”.

Los sanchistas, que cuentan con el apoyo de importantes secretarios generales regionales como Luis Tudanca (Castilla y León), Francina Armengol (Baleares), Sara Hernández (Madrid), Idoia Mendia (Euskadi), María Chivite (Navarra), Rafael González Tovar (Murcia) o César Luena (La Rioja), estarían preparando la batalla por la victoria en el próximo congreso federal. Está por ver si se presentará Pedro Sánchez u optará por apoyar a algún otro candidato de entre sus afines, tipo Patxi López, frente a, probablemente, Susana Díaz.

Por su parte, el sector que tumbó a Pedro Sánchez cuenta con la práctica totalidad de presidentes de gobierno socialistas (Andalucía-Susana Díaz, Comunidad Valenciana-Ximo Puig, Asturias-Javier Fernández, Aragón-Javier Lambán, Castilla-La Mancha-Emiliano García-Page y Extremadura-Guillermo Fernández Vara, todos excepto Baleares). Además, tienen el apoyo de los ex líderes del PSOE Felipe González, José Luis Rodríguez Zapatero y Alfredo Pérez Rubalcaba.

Ambos sectores se atribuyen importantes apoyos en los territorios en teoría controlados por sus adversarios.

Desde el sector ‘pedrista’ se reclama a la gestora que convoque cuanto antes el congreso federal del PSOE para elegir al nuevo líder… o lideresa.

Podemos: Pablo o la calle contra Íñigo o las instituciones

La batalla en Podemos tiene dos nombres: el actual líder, Pablo Iglesias, y el secretario de Política y Estrategia, Íñigo Errejón.

Errejón e Iglesias en el Congreso de los Diputados

Íñigo Errejón y Pablo Iglesias en el Congreso de los Diputados.

Iglesias defiende un Podemos completamente de izquierdas, de estilo duro, que recupere las esencias frente a lo que llaman “casta” y frente a los de “arriba”, después de considerar que la estrategia de avanzar hacia el centro-izquierda y hacia la moderación les hizo perder un millón de votos en las generales de junio de 2016, pese a ir en coalición con Izquierda Unida. “Se nos percibió mentirosos al decir que éramos socialdemócratas”, reprochó Iglesias públicamente en una crítica directa a Errejón, director de la campaña. El líder de Podemos prefiere llevar la protesta a la calle, defiende centrar la labor de oposición liderando las manifestaciones en las calles en detrimento de la labor política en las instituciones.

Por el contrario, Errejón apuesta por un proyecto transversal, más moderado, y que centre su labor de oposición en las instituciones y no tanto en la calle. Además, a diferencia de Iglesias, cree que el retroceso en las generales de 2016 se debió precisamente al pacto con Izquierda Unida, que ahuyentó a votantes de uno y otro partido.

En un artículo en 20minutos, titulado «Podemos ganar», Errejón apostó por que el partido busque la mayoría social y no sea «una minoría ruidosa». Pablo Iglesias, molesto con el artículo que suponía una enmienda a su proyecto de Podemos, criticó a Errejón en twitter por hacer «propaganda».

El liderazgo de Iglesias en Podemos no está en cuestión, pero sí el proyecto de partido y los miembros de la dirección. Desde el sector errejonista temen que en el próximo Congreso Pablo Iglesias, quien ha forjado acuerdos con antiguos sectores críticos como Izquierda Anticapitalista, con Echenique (secretario de Organización que sustituyó a Sergio Pascual, afin a Errejón y destituido por Iglesias), o con Teresa Rodríguez, dirigente de Podemos en Andalucía, trate de realizar una purga para laminar a los errejonistas de la dirección, «y silenciar así las voces críticas y la pluralidad».

Desde el núcleo afin a Pablo Iglesias aseguran que son Errejón y los suyos quienes relegan en cuanto pueden a los pablistas, y citan el ejemplo de la Comunidad Valenciana, donde el errejonista Antonio Montiel, secretario general de Podemos, destituyó a la pablista Sandra Mínguez como secretaria de Organización.

Ciudadanos: críticas a Rivera por falta de democracia

El liderazgo de Albert Rivera también parece incuestionable en Ciudadanos, pero los sectores críticos se están organizando en diferentes comunidades autónomas denunciando la falta de democracia interna en un partido que hace gala de ella, así como una supuesta tibieza frente al nacionalismo catalán y vasco, a diferencia de la frontal oposición con la que nació el partido.

Albert Rivera y Carolina Punset

Albert Rivera y Carolina Punset.

La cara visible de la oposición a Rivera la está representando Carolina Punset, la ex líder de Ciudadanos en la Comunidad Valenciana, quien está criticando abiertamente la estrategia de la actual dirección del partido. Ciudadanos ha cambiado sus valores por frases huecas, sostiene la eurodiputada, que dimitió de la cúpula pero no renunció al escaño.

Carolina Punset, hija del escritor Eduard Punset, denuncia que Ciudadanos ha incorporado a “despojos” y “rancios” procedentes de otros partidos mientras que han expulsado a militantes válidos por reclamar más democracia interna. Por todo ello, Punset reclama “juego limpio” en el próximo Congreso y no descarta enfrentarse a Albert Rivera con el apoyo de los sectores críticos que, según aseguran, se están organizando por todo el país.

Partido Popular: Aznar, el azote de Rajoy

Después de ser investido presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, afrontará en febrero un congreso tranquilo, previsiblemente. La suya es la única candidatura. Pese a la tranquilidad interna, en el PP también se están produciendo escaramuzas.

Aznar y Rajoy

Rajoy junto a Aznar durante la clausura del campus de verano de FAES. (EFE)

Hay quien, como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, defiende las elecciones primarias, frente la apuesta tradicional de elección por compromisarios que defienden Rajoy y su equipo.

Además, a raíz del fallecimiento de la ex alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, dos días después de comparecer ante el Tribunal Supremo investigada por un posible delito de blanqueo, hubo críticas directas a Rajoy del expresidente del Gobierno, José María Aznar, quien aseguró: “Ha muerto excluida del partido al que dedicó su vida”.

Además, sectores afines a Rita Barberá y de la vieja guardia del PP criticaron el “hostigamiento” que, en su opinión, sufrió la ex senadora durante meses por parte los nuevos dirigentes del PP, en concreto de los vicesecretarios Pablo Casado, Javier Maroto o Fernando Martínez Maíllo, quienes defendían que Barberá diera un paso atrás y renunciara ella misma al escaño para evitar dañar la imagen del PP.

El ex ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, amigo de Barberá, aseguró que la ex alcaldesa de Valencia “se sentía muy decepcionada por el comportamiento de algunos compañeros del PP”.

El ex presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, que tuvo que dimitir tras ser imputado por cohecho en el caso de los trajes de Gürtel (en el juicio fue absuelto), también ha reivindicado su figura, tras el fallecimiento de Rita Barberá, y ha insinuado que podría optar a alcalde de Valencia, aunque sus opciones reales son casi nulas, pues las candidaturas las aprueba la dirección nacional del PP.

Pese a la marejadilla interna tras el caso Barberá, Rajoy carece de una verdadera oposición interna (fuera de algunas críticas aisladas y ocasionales de Aznar o Esperanza Aguirre), mientras mira tranquilo cómo el PSOE sigue fracturado y sin líder y los dos líderes principales de Podemos se enfrascan en batallas tuiteras… e incluso a Albert Rivera, su socio de gobierno pero también su principal rival por el voto de centro-derecha, le aparecen sectores críticos de forma inesperada.