¿Cuántas veces has entrado en una casa y has pensado que la tele parecía un pegote en medio del salón? ¿O cuántas veces te has preguntado tú mismo qué hacer con la tuya para ahorrar espacio e integrarla en tu decoración?
Reconozcámoslo, la caja tonta ha adelgazado con el paso de los años, sí. Pero también ha ganado en ancho y alto mientras que muchos pisos encogían, haciendo más evidente y tosco el contraste entre aparato y entorno.
Muchos hogares son “telecéntricos”, pero hoy nos vamos a plantear mejorar la coherencia y el equilibrio visual entre pantalla y salón/dormitorio.
Y para eso os traemos unas cuantas ideas geniales que conjugan decoración, camuflaje, estilo y mucho, mucho ingenio. Algunas incorporan pequeños trabajos profesionales de carpintería o incluso albañilería. Otras, sencillas composiciones ornamentales con marcos, mapas… ¡y hasta caballetes!
Y, como siempre, queremos saber cuál es tu favorita y por qué 😉
Fotos: www.elbauldecolette.com, www.schmittcompany.com, blog.crisparchitects.com, houzz.com, www.bhg.com, trumarkhomes.com, www.hvtvmounts.com, www.smittenstudioonline.com, skonahem.com, olaimar-decor.blogspot.com.es, nosdecoramosblog.com, casasugar.com, petitecandela.blogspot.com.es.
Nos encantan esos mapas vintage enormes que parecen recién rescatados de un aula de EGB. Y nos parecen una cortina genial y de tendencia para esconder la caja atontadora cuando no la estás viendo.
Esta foto, al igual que la que encabeza el post, pertenecen a un estudio en alquiler del madrileño Barrio de Las Letras. Una delicia de ambientación esmeradísima, con una pantalla plana situada originalmente sobre un caballete. ¿Qué te parece?
Más ejemplos de teles montadas sobre caballetes. A juego siempre con una decoración rústica (y algo más cargada en este caso).
Y otro caballete. Esta vez conjugado con un aire ligeramente más moderno y colores mediterráneos.
Hablando de entornos rurales, también los hay que, en lugar de tratar de ponerle puertas al campo, le colocan contraventanas a la tele.
Otros esconden la pantalla tras un cuadro, como si de una caja fuerte se tratase. ¿Imaginas esconder el LCD tras tu obra de arte favorita? A nosotros nos encanta la idea.
Otra puerta corredera, para no romper la estética campestre salvo en las noches de Champions o para ver las noticias.
Efectivamente, es una chimenea y no una pantalla. La tele de verdad está escondida tras el cuadro de arriba, también corredero.
Sin protestas por nuestra parte: es verdad que hay series, como The Wire, que son para enmarcar. ¿Cuál sería tu motivo para enmarcar tu tele?
Comenzamos con una tendencia que nos ha parecido soberbia: integrar la figura del televisor en una composición de marcos con láminas, dibujos o fotografías. Chapeu!
Ahora, sobre un color pastel y en una disposición más apretada y cuadriculada. ¿Qué te parece a ti? ¿Saturación o elegancia?
Importancia, la justa. Como un elemento más entre los estantes.
Figuras en el cielo. Más marcos de fotos rodeando al universo de ficción.
Formatos más grandes y una elegante combinación de mapas, fotos en blanco y negro, lienzos e imágenes de naturaleza. Entre eso y el armario retro, nos ha dado en el corazoncito.
El estilo salpica a la pared entera, que fagocita a la televisión como un motivo más entre otros de su mismo tamaño.
Y para terminar, tecnología sorprendente: estos dos modelos que esconden la televisión tras un cuadro en la pared, para después girarse y colocarse, bien sobre tu cabeza, en el dormitorio, o bien en el salón.
¿Qué te parece, ávido televidente? ¿Por cuál apostarías tú para esconder tu tele?
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Existen zócalos de madera (normalmente de la misma que las puertas del mueble), también metálicos (en distintos colores, principalmente tonos de aluminio) y de PVC (con acabados similares a los metálicos). Y últimamente se llevan mucho los zócalos útiles, extraíbles y con compartimentos, como el de la imagen.
