Lázaro Crespo Ramas
Curiosidad, ansias de crítica, juicios, quinielas, quimeras, submarinismo en las biografías de los cardenales, lupa por cada metro cuadrado del Vaticano, micrófono a cualquiera que desee opinar de la Iglesia o alguna periferia aneja, revisión de la historia papal, del santoral o algún otro tema recurrente. Búsqueda de la contradicción, de posibles errores u horrores. 
¿La verdad? No me interesa, sólo quiero noticias, portadas, lo que llame la atención. Esta es parte de la labor de unos periodistas en la semana pre cónclave. Pocos van a la raíz, pocos quieren saber qué es la Iglesia, cuáles son sus fines o qué misión tiene. ¿Espíritu Santo? Algunos pensarán ¿en qué canal sale ese programa? No me suena.
Dicen que Dios creó el Sol, las estrellas y la luna el cuarto día, día después de crear la splantas verdes, luego no sabía que el Sol tenía que ver con el día y la noche. Entonces, aparte de tal error, ¿qué se entiende por la luz que hubo al principio, cuando dicen separó la luz de las tinieblas? Lo más lógico es pensar que la luz a la qu ese refiere es a la luz ambienta, que no es otra que la luz del sol. Posiblemente creyeran que la luz del día, que se nublaba y había, era otra cosa, y la noche otro mundo. ¿No sabía que la Tierra giraba y era el Sol el que daba toda la luz y sin él no había ni día ni noche?
¿Cuánta gente padeció por decir las verdades que los que piensan que las cosas son porque sí, porque estaban escritas así, eran las únicas verdades?
Me parece que es demasiado humano todos estos errores para ser propio de un ser todopoderoso y sabio, como dicen.
Del Espíritu Santo… ni idea. Si algún día me lo encuentro, auqneu para eso habré de ser católico o cristiano, de un areligión concreta, vamos, pues… no sé, eso de la universalidad de la salvación y del dios tendría que preguntárselo, porque no entiendo nada de nada.
09 marzo 2013 | 16:15