Todo lo que sube, baja.
La piscina da hambre.
Los tomates de hoy ya no saben como los de antes.
Y cualquier sitio por el que pasa agua, se termina atascando.
Son verdades universales, impepinables. Por eso hoy vas a aprender una fórmula mágica para ahorrar en disgustos, en fontaneros, y en dolores al Medio Ambiente. Además de tener tu ducha que ya la quisiera ver tu madre tan limpia y tan arreglá.
¿Cómo evitar atascos en el cabezal de tu ducha o bañera?
La cal y otros sedimentos se van acumulando inexorablemente en el interior de la alcachofa. Lo comprobarás porque el agua deja poco a poco de salir uniformemente, y los chorros empiezan a cobrar diagonales extrañas.
Es el momento de operar. Y, de paso, hacerlo con sentido y sensibilidad. Con maña. Y sin productos y contaminantes, innecesarios y mucho más caros.
El remedio casero que te recomendamos pasa por poner a hervir una parte de vinagre por cada dos de agua, añadiendo al mejunje un buen chorro de zumo de limón.
Bien caliente, introduciremos la alcachofa en la solución. Si es de plástico, deja que baje unos grados antes de la inmersión. Para que haga efecto, déjala ahí dentro no menos de un cuarto de hora, que puedes aprovechar para ver estos fantásticos vídeos.
Que no, que no lo digo porque los hagamos hecho nosotros.
¿Y cómo evitar atascos en el desagüe?
Los restos de jabón son los culpables en gran parte de las mal llamadas “tuberías lentas”. La terminología precisa aplicable es “tuberías guarras”. Y un alambre puede ayudar con la parte más gruesa del problema.
Después, prepara esta mezcla: 250 gramos de bicarbonato sódico, 250 gramos de sal gorda, y 25 centilitros de vinagre blanco. Bien calentito, y al agujero.
Si el atasco fuese tan fuerte que estos trucos domésticos no surtiesen el efecto esperado, no te queda otra que llamar a un fontanero para remediar tu problema. Eso sí un profesional te lo hace en un periquete 😉
Y así, tan contento con tu ducha como nueva, le echas un vistazo a estos 8 muebles de exterior alucinantes para ser la envidia del vecindario, y ya la felicidad pasa a nivel Nirvana.
