Hay pocas cosas en una casa tan bonitas como un mueble de madera antigua y bien conservada. Claro, que esto se puede fingir. Y hoy, amigo manitas, vamos a aprender a falsificar cual película de ladrones de arte. Y vamos a tomar como ejemplo este proyecto de Paula, de Tres pompones.
Paula necesitaba una nueva mesa pero quería una antigua y con mucha presencia. Bueno, pues se lanzó a comprar un tablón de madera de pino nuevecito y a aplicarle un proceso sencillo y divertido de envejecimiento, para el cual necesitas:
-Un litro de vinagre.
-Lana de acero.
-Esmalte al agua blanco.
-Barniz incoloro.
La primera parte requiere una espera de unos días: mete la lana de acero en un tarro de cristal, añade el vinagre y espera 6 o 7 días para que se oxide, quedando el líquido oscuro que será el tinte de trabajo.
Con la madera a tratar sobre unos travesaños, taburetes o la superficie de apoyo que te resulte más cómoda, aplica a brochazos esta solución de forma siempre uniforme, la misma cantidad por toda la madera. Dependiendo del tipo de madera que tengáis, el efecto virará hacia uno u otro color. El pino de Paula se fue hacia el rojo, por ejemplo.
Aprovechando que el vinagre seca rápido, aplica las capas que quieras hasta dar con el color deseado. Si aparece repelo –el defecto de acabado de las piezas de madera que se produce por el cambio de dirección de las fibras, levantándose ante un corte, humedad, etc.- solo tienes que frotar con la lana de acero hasta hacerlo desaparecer.
Ahora llegan los efectos especiales de batalla: para darle más vida a la madera, déjale marcas. Las cicatrices de la madera son como las nuestras, denotan experiencia, personalidad. La hacen única. Así que lija partes independientes de tu pieza de madera, agrédela con un martillo, rasca con tornillos (pon uno antiguo en un lugar extraño, siempre será un misterio).
Una vez tu madera esté en el punto deseado de color, deja secar toda una noche.
Paula cuenta cómo, para unificar el color un poco y darle un tono aún más anticuado, aplicó una suave capa blanca, disolviendo una parte de esmalte blanco al agua en tres partes de agua. La aplicó con una gasa (sí, sumergiendo en la mezcla, escurriendo y, directamente, a la madera).
Para rematar la faena, siempre protege tu trabajo durante mucho tiempo aplicando un par de capas de barniz bien resistente. El mate respetará mejor tu objetivo de hacerla parecer viejuna, viejuna.
Tu madera vintage está lista. Ahora ya solo tienes que decidir a qué lugar de tu casa le dará la prestancia esperada. Remátala con patas o cajoneras que puedes encontrar en cualquier punto de bricolaje o tienda de muebles y, voilà!
¡Buen trabajo, Paula! ¿Y tú, querido lector? ¿Te atreves a envejecer con este truco alguna pieza de madera para renovar tu hogar?
Publicidad: mira lo que hacen los profesionales del hogar en su tiempo libre. Vas a alucinar…
Spoiler: a nosotros se nos saltaron algunas lagrimillas al ver este vídeo…
Y el betún de judea, diluido o no, ¿para que sirve?
14 octubre 2014 | 12:28
Te voy a decir una cosa, es la primera vez que escribo en tu blog, pero si la empresa reparalia es tuya(o trabajas en ella) ojala os forreis.
Ole vuestras narices!
14 octubre 2014 | 13:12
Muy buen artículo, mas de uno se aventurada a hacer lo mismo.
Saludos.
14 octubre 2014 | 16:35
seria mejor si se hiciera con una madera vieja. asi promovemos el reciclaje….
EFICIENCIA ENERGETICA:
http://energiasolaraislada.blogspot.com.es/2014/10/resumen-led.html
14 octubre 2014 | 22:21
Como dice alvaro, mejor con madera vieja, así aprovechamos todos los recursos que disponemos. Buena idea para tener muebles estilo vintage.
28 diciembre 2015 | 23:29