Un cuento corriente Un cuento corriente

Se llama a la Economía (más aún en estos tiempos de crisis) la "ciencia lúgubre". Aquí trato de mostrar que además es una de nuestras mejores herramientas para lograr un mundo mejor

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Alerta en la banca española: Bruselas investiga el rescate encubierto de los DTA

Hace año y medio ya, este periodista explicaba en un post de este mismo blog que el Gobierno había aprobado todo un rescate encubierto para la banca española. No era una provocación: El Estado le garantizaba a la banca (y por lo tanto a los acreedores) los llamados activos fiscales diferidos (DTA en inglés), que ocupaban en sus balances más de 30.000 millones de euros y se contabilizaban como capital a efectos regulatorios. Son, en esencia, pérdidas del pasado que permitirán deducirse impuestos en el futuro.

Activos fiscales diferidos en las principales entidades financieras

Activos fiscales diferidos en las principales entidades financieras

España, con el fin de evitar que las entidades financieras españolas tuvieran que recapitalizarse aún más, consintió en garantizar que los DTA se hicieran efectivos. Es decir, que aún en caso de que la entidad no solo no generase los suficientes beneficios como para activar esos DTA, sino que incluso fuera liquidada, los acreedores podrían contar con esos activos fiscales como si de un capital cualquier se tratara. Vamos, fue un rescate (indirecto, pero rescate) en toda regla —recapitalización vía aval— al que, aparentemente la Troika había dado su visto bueno.

Pero parece que ese visto bueno ha sido puesto en cuestión. Varios países miembro de la UE han denunciado ante la Comisión Europea la forma en que cuatro países del sur (Italia, Grecia, Portugal y la propia España) habrían concedido estos créditos fiscales a sus respectivos bancos privados. Las autoridades comunitarias de Competencia han reconocido este martes lo que el lunes había adelantado el Financial Times: Que han iniciado una investigación «exploratoria» para determinar si efectivamente se incumplió la normativa europea de ayudas de estado al garantizar los DTA de la banca.

Bruselas ha enviado un requerimiento por carta a estos cuatro países para que éstos les remitan toda la información respecto a los DTA de sus bancos. «No se trata de una investigación formal, sino que ha habido contactos a nivel técnico para tratar de saber si ha podido tratarse de una ayuda de estado irregular o no», han explicado este martes los portavoces comunitarios.

Si finalmente Bruselas determinara que estas ayudas fueran ilegales, o hubiera que devolverlas, tanto España como la banca española se meterían en un lío tremendo, que podría suponer una situación práctica de insolvencia para más de una entidad. Tal como señalaban los analistas de Fitch en un informe de diciembre sobre los bancos del sur de Europa, «Los regímenes fiscales en Italia, España, Portugal y Grecia, los bancos deben esperar mucho más tiempo que sus homólogos del norte de Europa antes de poder contabilizar sus gastos como deducciones fiscales. Esto significa que los DTA en el sur de Europa son típicamente más altos», explicaban.

Los DTA solo pueden contabilizarse como capital regulatorio si no dependen de los beneficios futuros. Es decir, si están garantizados de alguna forma. Ante el alto número de DTA en poder de los bancos del sur, estos cuatro países acabaron modificando sus legislaciones al respecto con el fin de permitir que estos DTA se convirtieran en créditos fiscales; es decir, que tuvieran el aval último del contribuyente.

En España, solo el Banco Santander tiene más de 21.000 millones de euros en DTA. Caixabak tiene más de 10.400 millones y BFA (matriz de Bankia) otros 10.360 millones (ver gráficos inferiores). La importancia de los DTA en la solvencia actual de los bancos españoles es casi absoluta, tanto que «sin estas medidas de compensación las entidades del sur se habrían visto severamente perjudicadas» en los últimos test de resistencia llevados a cabo por el BCE y la EBA.

DTA

 

DTA 2

 

Las sustanciales pérdidas reportadas por los bancos durante la crisis conllevaron pérdidas fiscales que reducirán los ingresos por impuestos de los gobiernos durante muchos años a partir de ahora, sobre todo en función de las facilidades que ponga cada Hacienda nacional a la hora de diferir estos créditos en el tiempo en relación a beneficios futuros. Pero esto no está en cuestión. Lo que está en cuestión no es más que la posibilidad de que estos DTA garantizados por España hayan sido una ayuda de estado, y por lo tanto hayan supuesto una alteración de las reglas de libre mercado y competencia que consagra Bruselas.

Sea como sea, parece que nos saldrá caro…

El Gobierno liquida Banco de Madrid, impondrá pérdidas a sus clientes y no da una sola razón que lo justifique

Lo que está pasando desde la semana pasada con el escándalo de Banco de Madrid no tiene nombre. No tiene nombre porque se están tomando decisiones con una enorme trascendencia para miles de ciudadanos (clientes y ahorradores) sin las más mínimas dosis de transparencia y explicaciones. Una transparencia, creo, imprescindible para poder aceptar que lo que está pasando es lo correcto. Recapitulemos:  banco madrid

-Como ya contamos en el anterior post sobre este asunto (que os recomiendo leer), el Gobierno tuvo la increíble suerte de anticiparse 24 horas a la Reserva Federal de EEUU, que situó a la matriz de Banco de Madrid como una entidad preocupante para las autoridades estadounidenses debido a sus malas prácticas en materia de prevención del blanqueo. Desde entonces, el Banco de España intervino la entidad, sustituyó al consejo de administración, y todo ha ido a peor.

-Obviamente, las noticias aparecidas, y la falta de mensajes tranquilizadores hacia los clientes provocó una fuga de depósitos del Banco de Madrid que las autoridades no supieron o no quisieron evitar. Como casi todo el mundo debería saber, una retirada masiva y continuada de fondos acaba con cualquier banco, por muy sólido que sea. Banco de Madrid era extraordinariamente solvente, pero como ya he dicho no hay entidad que aguante varios días de colas en las puertas, y acabó por ello sufriendo un «fuerte deterioro». Ante esta realidad, y con la aparente tranquilidad de Gobierno y BdE, se declaró un concurso de acreedores en el banco, ante el grave empeoramiento de su situación, que hacía más costoso en la práctica continuar.

-Esta situación ha tenido su momento culminante este miércoles por la noche. El FROB (es decir, el Gobierno) y el Banco de España han decidido no llevar a cabo un proceso de resolución en Banco de Madrid. Es decir, que no piensa rescatar la entidad, y que la aboca a una liquidación más o menos ordenada. En la nota de prensa no se aporta ni una sola explicación. Ni hay programada una rueda de prensa para explicar los motivos, que me imagino que los habrá. Así, asistimos a unos hechos gravísimos: la imposición de pérdidas a depositantes (un máximo de 100.000 euros garantizados), bonistas y demás acreedores de un banco que hasta hace un par de semanas presentaba unas cuentas auditadas envidiables, con unos ratios de solvencia muy por encima de la media. Se hace, vuelvo a repetir, sin aportar ni una sola razón que lo justifique. Es entendible no utilizar dinero público para rescatar entidades no sistémicas, pero lo que no es tan entendible es tener que imponer pérdidas a clientes sin explicarles el por qué.

-El proceso de liquidación, como no puede ser de otra forma, supondrá vender todos los activos del Banco de Madrid (una entidad hasta hace una semana perfectamente solvente) al mejor postor. No hace falta ser un genio para adelantar que se venderán a precio de derribo, a una fracción de su valor real, lo que en la práctica supondrá que los activos no sirvan para cumplir con todos los pasivos. Es decir, que los ahorradores e inversores por encima de los 100.000 euros garantizados se enfrentan a un gran riesgo de perder una gran parte de su patrimonio. Y, repito, sin una sola explicación convincente.

-Llevo varios días oyendo decir que cómo el Gobierno y el Banco de España (durante el anterior mandato de Zapatero) pudo admitir que un banco andorrano como BPA adquiriera una entidad española como Banco de Madrid. Pues se hizo, lógicamente, porque la normativa española al respecto, al igual que la europea, no puede ni tiene que autorizar ninguna operación de compra. Como mucho, lo que se puede hacer es oponerse a esa operación, pero ello tiene que estar fundamentado con argumentos y motivos. Las normas de libre mercado de Bruselas no permiten impedir fusiones y adquisiciones así como así. Si BPA cumplía con las normas (o eso parecía en 2011), las autoridades españolas no eran nadie para vetar una compra si no afectaba directamente a la solvencia del sistema financiero. La normativa, en este caso, se ha mostrado insuficiente.

-Creo que tanto el Gobierno, como el FROB, como el Banco de España, harían bien en justificar y explicar los motivos que han llevado a tomar, en cada momento, las decisiones que han acabado con la liquidación del Banco de Madrid. No es que dude de que esta ha sido la mejor decisión. Es que la misma ha tenido un coste millonario para muchos ahorradores de buena fe y creo que lo mínimo es que todos sepamos por qué.

*Nota: He editado el post tras su publicación para matizar algunas de mis explicaciones. No he cambiado nada sustancial, solo que creo que quedan mejor así.

El ruinoso rescate público a Novagalicia se vuelve un inmejorable negocio para sus nuevos dueños en solo un año

No se puede decir que algunos no lo advertimos. Lo hicimos. El pasado día 26 de febrero, Abanca (la nueva marca comercial de Novacaixagalicia) presentó un adelanto público de sus resultados: Ganó 1.157 millones de euros el pasado año, elevó su ratio de solvencia al 15,5% y redujo en casi un tercio su tasa de morosidad. ¿Un milagro? ¿Acaso la gestión de sus nuevos dueños (el venezolano Banesco) ha logrado no solo volver viable, sino tremendamente rentable una entidad que hace tan solo unos años era aparentemente lo peor de lo peor, y un ejemplo de cómo no se tenían que hacer las cosas?

Oficina de NCG

Oficina de NCG

Va a ser que no. Va a ser que, como algunos nos temíamos, el contribuyente saneó una entidad nacionalizada como Novagalicia más allá de lo razonable (si su intención era deshacerse de ella inmediatamente) y va a ser que, ayudada por la absoluta falta de transparencia en estas operaciones del FROB, se vendió a precio de saldo una entidad que prácticamente tenía así garantizados los beneficios a poco que la economía española no se derrumbase con estrépito.

En su momento algunos denunciamos que el Estado, tras inyectar más de 8.981 millones de euros en capital pública en Novagalicia, había vendido por poco más de mil millones una entidad saneada y provisionada hasta los topes a inversores privados. Pero es que además, por si no fuera bastante regalo (como se pregunta John Müller en su columna), se añadió un paquete de garantías públicas por si ciertas operaciones concretas salían mal: reajustes de los precios de transferencia de activos al Sareb, los canjes de preferentes, las cláusulas suelo…

Y así ha sido: La economía española ha iniciado la senda de la recuperación, y por lo tanto los activos en poder de los bancos han empezado a revalorizarse o simplemente han dejado de deteriorarse. De ahí a empezar a liberar las provisiones (puestas con dinero público) solo hay un paso. Y de ahí a que esas provisiones se apunten como un beneficio neto para sus nuevos dueños hay otro paso más. En solo un año, los nuevos dueños de Novagalicia-Abanca ya han logrado un retorno mayor que su inversión inicial y al contribuyente se le ha quedado una cara de gili*****s que no se puede aguantar.

El grave problema es que el caso de Abanca-NCG no es el único. A lo largo de la reestructuración del sistema financiero español, los contribuyentes han perdido por ahora más de 38.000 millones de euros con la venta, a precio de saldo, de entidades que se entregan limpias de polvo y paja a inversores privados. Banco de Valencia a Caixabank por un euro, CAM a Sabadell por otro, Unnim a BBVA por uno más y Catalunya Banc a este mismo por algo más de 1.180 millones. Casi imposible perder más.

El Banco de España defendió esta estrategia escudado en que hay que premiar «al que lo hace bien», y no al que lo ha hecho mal, mientras que el FROB alega que claro, que las ventas han sido tan malas porque no había nadie que presentara ofertas mejores. Es lo que tiene vender durante la peor crisis de confianza sobre España que hemos vivido en décadas. ¿Era completamente imprescindible vender? ¿De verdad que no había otro remedio? ¿Eran tan improbable pensar que unas entidades saneadas pudieran revalorizarse y presentar beneficios recurrentes una vez el ciclo económico remontase?

La reprivatización del antiguo sector de las cajas sigue su curso. Y lo peor no solo es que nos hemos quedado sin unas entidades que aportaban mucho más que solo las obras sociales. Lo peor es que su rescate y posterior venta apresurada solo nos ha dejado agujeros. Ni siquiera se ha podido recuperar parte de lo inyectado. Nuestra única esperanza es BFA-Bankia. Pero eso ya lo contaremos.

Algunas claves del duro interrogatorio de más de 5 horas del FROB y BFA a los peritos del ‘caso Bankia’

Segundo día de testificales para los peritos designados por el Banco de España para el caso Bankia (aquí un breve análisis sobre el día 1). En esta ocasión, los abogados del FROB y de BFA (matriz de Bankia) han interrogado durante más de 5 horas a ambos inspectores, y según fuentes jurídicas presentes en la cita ha sido una sesión durísima, con los representantes de ambas entidades públicas (el FROB hoy por hoy es dueño de BFA) preguntando sobre todo tipo de asuntos técnicos y tratando de hace caer en contradicciones a los dos expertos.

Bankia

Bankia

¿Por qué esta dureza del FROB-BFA? Están dispuestos a todo con tal de evitar una hipotética responsabilidad civil subsidiaria para los accionistas de Bankia. Y es que estamos hablando de muchos miles de millones que tendría que afrontar el contribuyente. Sea como fuere estas son algunos de los temas claves que se han tratado en las declaraciones de este martes:

1) Dudas sobre los cobros irregulares. Especialmente llamativo, por el seguimiento y el morbo mediático que tiene, es el asunto de los presuntos cobros indebidos por parte de directivos y consejeros de BFA-Bankia. Los expertos del BdE han reconocido, tras recibir aclaraciones por parte de BFA, que quizás puedan haberse equivocado al apuntar a posibles cobros irregulares por parte de los miembros del consejo. El de las remuneraciones de los altos cargos es uno de los temas que provoca más rechazo entre los ciudadanos, así que estaría bien confirmar o desmentir cuanto antes la existencia o no de estas irregularidades.

2) No se tuvieron en cuenta todas las provisiones. Como ya hemos contado en este blog, las provisiones son reservas propias (genéricas o específicas) destinadas a servir de colchón de capital o para tapar posibles deterioros contables. Por ejemplo: si doy un crédito a un empleado de la construcción y luego este sector se va a pique, tendré que destinar un % de mis beneficios a provisionar al menos en parte aquellos préstamos concedidos a trabajadores de la construcción. Pues bien, en el caso de BFA-Bankia, en el momento de la fusión de las 7 cajas el BdE exigió que se saneara la entidad y que se dotara una provisión genérica de 9.000 millones de euros, algo que la entidad recién creada hizo. Pero en sus informes, los peritos obviaron contabilizar estas provisiones, con el argumento de que «no se tratan reservas destinadas a dotaciones futuras». Es decir, que según su criterio eran unas provisiones que no se podían usar para provisionar pérdidas. No parece tener demasiado sentido, pero en cualquier caso tendrá que ser el juez Andreu el que determine qué versión le parece más sólida.

3) El lío de los activos fiscales. Uno de los puntos polémicos del caso Bankia está relacionado con los llamados créditos fiscales (ese tipo de activo que se genera cuando tienes pérdidas en el presente que se supone que te permitirán pagar menos impuestos en el futuro). En esencia, el problema radica en que Deloitte se negó a firmar el informe de auditoría de las cuentas formuladas de 2011 entre otras cosas porque (según dijeron) se dudaba seriamente de que los créditos fiscales que se contabilizaban se llegaran a cobrar algún día. Sorprendentemente (o no), con la llegada del presidente Goirigolzarri y la ayuda de 17.000 millones estos créditos fiscales sí se contabilizaron, por lo que BFA-Bankia recuperó su solvencia. Los anteriores gestores han discutido estas decisiones toda vez que argumentan que no es creíble pensar que en 20 años BFA-Bankia no iba a generar beneficios ningún año, con lo que los activos fiscales no se llegarían a contabilizar. Cuestionados por este asunto, los peritos han detallado que es necesario un plan de negocio creíble para poder contabilizar los créditos fiscales, y en su opinión las cuentas presentadas por el equipo de Rato no lo eran. La idea es simple: como les inyectaron dinero público éste forzosamente posibilitaría la generación de beneficios y, por tanto, de impuestos que pagar y reducir gracias a los activos fiscales.

Seguiremos informando…

El fiscal destapa nuevas contradicciones, pero los peritos del caso Bankia se reafirman: «No se dio una imagen fiel»

El pasado lunes comenzó la semana en la que los peritos designados por el Banco de España para investigar el caso Bankia declaran judicialmente para ratificar sus durísimos informes, en los que resolvían que las cuentas de la entidad desde su salida a Bolsa no reflejaban la imagen fiel de la misma. Es decir, que según su criterio básicamente se engañó a los millones de accionistas que compraron las participaciones en base a una contabilidad errónea o falseada. Pese a que ambos inspectores en todo momento han confirmado las mismas conclusiones que en los informes periciales, dos horas de interrogatorio con el fiscal de la Audiencia Nacional, Alejandro Luzón, han dado para encontrar varias vaguedades y contradicciones en los informes de los peritos del Banco de España:

Bankia

Bankia

– Cuando el fiscal ha resaltado el hecho de que había un seguimiento y control constante por parte de un equipo de inspección ‘in situ’ en BFA-Bankia y que éstos no detectaron las irregularidades contables, uno de los peritos respondió que para elaborar sus informes sólo se han tenido en cuenta los acuerdos de la Comisión Ejecutiva del BdE. Es decir, solo las decisiones de la cúpula del supervisor y no los borradores de informe de los equipos de inspección. Y aunque tampoco alertaron de nada, para los peritos, que en el BdE «que no dijesen nada sobre ciertas cuestiones no significa que las aprobasen», han señalado. Una cuestión un tanto espinosa, toda vez que es obligación del supervisor detectar y sancionar las conductas bancarias incorrectas.

Las compras «forzadas» de acciones que no lo fueron tanto. Especialmente llamativo me ha parecido la matización (casi una enmienda a la totalidad) que han hecho los peritos a uno de los asuntos más escandalosos encontrado en sus informes: El supuesto sostenimiento artificial del precio de la acción durante la salida a Bolsa gracias a empresas deudoras o vinculadas a BFA-Bankia. El fiscal les ha preguntado concretamente por el Grupo Mapfre (socio estratégico de Caja Madrid y Bankia desde hace años). Los peritos han respondido que no son «tan aventurados» como para señalar que ambas entidades se habían puesto de acuerdo de forma irregular de cara a la OPV, e incluso han reconocido que el hecho de que una compañía responda a la llamada de otra puede constituir un criterio profesional con sentido empresarial, desde el punto de vista de las relaciones de negocio entre las mismas. Es decir, que como es lógico y entendible era del máximo interés de Mapfre que la salida a Bolsa de Bankia saliera bien, y por lo tanto colaboró activamente en ello. Posteriormente, y en respuesta a la pregunta sobre cuál sería el porcentaje de participación de inversores institucionales adecuado, reconocieron no tener «ni idea. La CNMV fijó un 40% y se cumplió», añadieron. Ambos peritos admitieron además no tener experiencia ni conocimientos especializados en relación a las salidas a Bolsa. En relación a las empresas presuntamente refinanciadas a cambio de comprar acciones en la OPV, los inspectores reconocen que la propia Bankia niega que se hayan producido estas operaciones. Sorprendentemente le dicen al fiscal que les «llamó la atención» que hubiera empresas que sin razón aparente, y a pesar de sus problemas financieros, decidieran entrar en el capital de la entidad. «Efectivamente, no puede decirse que se las refinanciara a cambio de que fueran a la salida a Bolsa; no hay pruebas», añaden.

– En relación a las cuentas de Bankia previas a la salida a Bolsa, los peritos ratificaron sus conclusiones y explicitaron que en su opinión estaba constatado que era evidente que a finales de 2010 existía un deterioro conocido en la entidad. Se basan, entre otras cosas, en que la información a partir de la cual se reformularon las cuentas en mayo de 2012 ya estaba disponible entonces y era existente. También se basan en un acta del 12 de diciembre de 2011 en la que el entonces vicepresidente de Bankia, José Manuel Fernández Norniella, reconoce que la entidad tiene una exposición al riesgo inmobiliario de 20.958 millones de euros que serán necesario sanear en ese mismo ejercicio, si bien se estaba negociando con el BdE una dilatación y un fraccionamiento del mismo. Esto, unido a que ya se habían detectado préstamos refinanciados desde 2008, les lleva a considerar que había deterioros no contabilizados en las cuentas de BFA-Bankia.

El impairment, «un debate contable». En sus informes, los peritos destacaban que el hecho de que BFA tuviera que aceptar un fuerte descuento en el precio de las acciones de Bankia ocasionó el llamado impairment, una situación en la que las acciones en poder de la matriz están valoradas tan por encima del valor de mercado que se pone en cuestión la viabilidad de la misma porque los ingresos por las mismas se ven muy disminuidos. Algunos de los altos cargos de Bankia imputados alegaron en su defensa que la normativa contable permite no valorar a precio de mercado este paquete accionarial si no se prevé sacarlo a la venta. A preguntas del fiscal los peritos reconocieron que este segundo criterio es posible y entendible, ya que se trata de un debate contable legítimo. A preguntas sobre este mismo tema del abogado de UPyD, Andrés Herzog, los peritos afirman que en su opinión el efecto del impairment suponía una disminución de capital tan importante que no solo obligaba a BFA a recapitalizarse (hasta 5.000 millones de euros), sino que podía suponer su disolución.

– ¿La evolución de la economía no afecta al valor de los activos? Especialmente llamativa me ha parecido la afirmación de los inspectores del BdE referente a que la evolución macroeconómica en España durante la crisis no ha tenido una influencia sustancial en que las cuentas de BFA-Bankia necesitaran o no un saneamiento. Tal como me cuenta un catedrático de Economía, «resulta inaceptable en términos de evidencia empírica y desafía los principios más elementales de la economía financiera y de la empresa negar categóricamente la influencia de estas variables en la evolución del valor de los activos empresariales». Por ejemplo, ¿es lógico afirmar que un mercado laboral que pasa del 10% al 25% de paro no afectará a la calidad crediticia de los bancos? ¿Es eso creíble?

El impacto del rescate público a Banco de Valencia, «más cualitativo que cuantitativo». El fiscal Luzón especificó que no haría preguntas sobre la antigua entidad participada por Bancaja (y por tanto, por BFA-Bankia), si bien los propios peritos quisieron explicar que el posible deterioro causado tras el rescate de la entidad fue más «cualitativo que cuantitativo», en la medida que se mandó un mensaje negativo al mercado: La imposibilidad material de Bankia de rescatar con sus propios recursos al BdV, que acabó por necesitar una recapitalización de más de 6.000 millones de euros.

– También a preguntas del abogado Andrés Herzog, los peritos reconocen que si bien las cuentas no reflejaban la imagen fiel de la entidad, no se puede afirmar a partir de esto que la entidad fuera por ello necesariamente inviable.

La ‘confesión’ de De Guindos: reconoce que él cambió a Rato por Goiri y que el FROB «es» el Gobierno

La entrevista de este domingo en El Objetivo entre Ana Pastor y el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha dado varias respuestas esquivas, un puñado de preguntas y repreguntas que no han quedado en nada y un potencial falso testimonio del antiguo directivo de Lehman Brothers.

Rato y Goiri

Rato y Goiri

De Guindos ha sacado pecho ante la periodista de La Sexta sobre los éxitos de la reestructuración financiera en España y ha confesado que él fue el responsable de cambiar al equipo gestor en Bankia. Es decir, que suya fue la intervención decisiva que supuso la dimisión de Rodrigo Rato (el 7 de mayo de 2012) y la posterior llegada de José Ignacio Goirigolzarri (el 9 de mayo siguiente). Y tras ello, un rescate público con más de 22.000 millones de euros comprometidos.

Esta ‘confesión’ me parece especialmente relevante no solo porque reconoce que intervino para forzar la dimisión del presidente de una entidad que entonces, a todos los efectos, era privada (la nacionalización fue posterior), sino porque supone toda una contradicción respecto a lo que el propio ministro declaró en sede judicial a raíz del caso Bankia.

Tal como reflejó este periodista, a partir de la declaración testifical por escrito remitida a la Audiencia Nacional, el ministro De Guindos negó haber tenido nada que ver con la dimisión de Rato. Por aquel entonces lo máximo que se atrevió a reconocer es que aceleró las gestiones para que se resolviera la crisis de Bankia, toda vez que estaba recibiendo presiones en este sentido de organismos internacionales como el FMI, la Comisión Europea o el propio Tesoro de los Estados Unidos. Esta noche de domingo, sin matices, ha reconocido sin embargo que él es el responsable de quitar a Rato y poner a Goiri. ¿Hizo por lo tanto un falso testimonio en sede judicial (no olvidemos que los testigos tienen la obligación de decir la verdad, a diferencia de los imputados)? No soy yo quién para decidirlo, mucho menos.

El titular de Economía, para reivindicar su descubrimiento de escándalos financieros en las cajas, se vino arriba y reconoció también ante los espectadores que «el FROB es el Gobierno». A ver, es algo que muchos sospechábamos, pero en teoría, y solo en teoría, el FROB es un organismo público independiente, encargado de de gestionar con criterios independientes la reestructuración bancaria española.

Puede que para muchos las declaraciones de esta noche de De Guindos no supongan ninguna sorpresa. Para mi, al menos, sí.

Llegan las primeras alegaciones al informe de los peritos sobre Bankia: Las cuentas eran «perfectamente coherentes»

Apenas un mes después de que el informe de los peritos del Banco de España sobre las cuentas de BFA-Bankia diera un vuelco a la causa judicial que instruye el magistrado Fernando Andreu, llegan a la Audiencia Nacional las primeras alegaciones sobre el mismo. La verdad es que plantean serias y razonables dudas metodológicas y de fondo sobre muchas de las interpretaciones y conclusiones de los dos expertos independientes. No lo tendrá nada fácil el juez para tomar una decisión.

Torre Bankia

Torre Bankia

Especialmente interesante me parece la alegación presentada por la exconsejera de Bankia Araceli Mora, algo de que lo ya se ha hecho también eco Jorge Zuloaga en Expansión. Interesante porque ella fue la única consejera que se negó a avalar la reformulación de cuentas aprobada por Goirigolzarri el 25 de mayo de 2012 (que pasaba las cuentas de 2011 de un beneficio de unos 300 millones a pérdidas por más de 3.000) y porque es una de las mayores expertas españolas y europeas sobre materia contable (es catedrática universitaria en esta materia). El texto que sus abogados han solicitado que se incluya a la instrucción es por tanto el de una especialista con tanto conocimiento sobre la materia (o más) que los propios inspectores.

Ya existían unas cuentas previas: Para empezar, esta exconsejera sitúa lo que ella considera que es la responsabilidad de cada uno. Así, explica que cuando llegó a la entidad (el 16 de junio de 2011) ya existían unas primeras cuentas auditadas previamente por Deloitte (correspondientes al primer trimestres de 2011) y, presumiblemente, avaladas tanto por los órganos de control internos, como por expertos independientes y los propios reguladores. Estas primeras cuentas ya habían servido además «para la conformación de los estados contables incorporados al folleto de emisión previo a la salida a Bolsa de Bankia», argumenta. Es decir, que los nuevos administradores independientes llegados a Bankia con la salida a Bolsa ya debían trabajar sobre unas cuentas, en teoría, sólidas y visadas, y todas las cuentas que habrían de llegar posteriormente a la fuerza deberían guardar una cierta coherencia con las mismas. No olvidemos que para conformar estas primeras cuentas se contó con la ayuda de dos entidades independientes como Analistas Financieros (AFI) y BDO, además de la propia Deloitte.

¿Quién hizo las cuentas y quién debió haber detectado los errores? Especialmente interesante es también la alegación que la exconsejera Mora desarrolla sobre las posibles responsabilidades de unos y otros acerca de la elaboración de las cuentas y la posible detección de errores en las mismas. Los peritos apuntaban a que los administradores y gestores tenían la experiencia y capacidad de detectar si los deterioros crediticios eran mayores de los realmente reflejados. Sin embargo, tal como explica esta antigua administradora de Bankia, no estaba entre sus atribuciones «clasificar los créditos ni calcular su potencial deterioro, ni por supuesto hacer tasaciones de inmuebles». Era esta una responsabilidad en todo caso de los departamentos de Auditoría Interna, Intervención General y Seguimiento y Recuperaciones. Curiosamente, y tal y como resalta esta académica en su escrito, estos departamentos internos no sufrieron cambio alguno* entre la formulación de cuentas del 28 de marzo y la reformulación del 25 de mayo. El único cambio entonces fue en el comité de dirección, con la llegada del presidente José Ignacio Goirigolzarri y su mano derecha, José Sevilla. En todo caso, dice, los errores en las cuentas los cometerían estos departamentos, y era responsabilidad de los consejeros el comprobar si las cuentas en su conjunto guardaban coherencia con los datos, en relación a las cuentas presentadas anteriormente y después de haber conocido las conclusiones de los auditores. «Muy sorprendente» en este sentido es a su entender, además, que los peritos en su informe no mencionen entre quienes presuntamente podrían no haber detectado los errores contables que ellos sí detectaron a los miembros del equipo de inspección del Banco de España empotrado en Bankia. Y es que tal como muestran los informes de entonces y tal y como declararon sus responsables ya en sede judicial, los inspectores que trabajaban diariamente en una planta del banco consideraban que las cuentas presentadas y formuladas por la entidad eran fundamentalmente correctas y estaban ajustadas a la normativa. De esto mismo más o menos hablé yo en un anterior post; y es que el BdE ha estado detrás de todo lo ocurrido en BFA-Bankia desde el principio, lo que provoca una especial sorpresa si de lo que hablamos es de unas cuentas falseadas.

Según Deloitte, la entidad estaba «¡sobreprovisionada!». Uno de estos misterios que no sé si llegaré a entender algún día. Resulta que en las alegaciones presentadas por Deloitte en relación al expediente abierto por el ICAC ante su supuesta falta de independencia en BFA-Bankia (ya que auditaba y a la vez hacía labores de asesoría), la firma auditora explica que las carteras de créditos de Bankia a 31 de marzo de 2011 y a 30 de junio de 2011 no solo no estaban mal contabilizadas, sino que a la luz de las exigencias regulatorias de entonces y de los datos que se conocían, estaban incluso «sobreprovisionadas». Es decir, que al contrario que lo que concluyeron los peritos en sus informes, entonces el ladrillo de Bankia estaba valorado incluso por debajo de lo que era estrictamente legal. Otra de las afirmaciones que se ponen en cuestión es la de que las valoraciones de las carteras inmobiliarias en Bankia no estaban actualizadas, lo que según los peritos llevó a que estuvieran sobrevaloradas. Pues bien, según consta en la alegación de la propia Deloitte (que curiosamente luego suscribió la reformulación) los «activos correspondientes a inmuebles se habían valorado en un periodo de tres a seis meses anteriores» y por tanto provisionados o reclasificados de acuerdo a estas valoraciones.

Las cuentas que ahora se cuestionan eran «perfectamente coherentes». La antigua consejera independiente de Bankia asegura que tanto el auditor como la propia Comisión de Auditoría y Cumplimiento (CAC) a la que pertenecía consideraban que las cuentas relativas al ejercicio 2011 (que posteriormente fueron reformuladas por Goirigolzarri) eran «perfectamente coherentes con la información auditada de partida». Esto puede parecer una chorrada, pero es básico que las cuentas, los deterioros y las provisiones de una entidad financiera guarden cierta coherencia y una evolución lógica (por muy negativa que sea) en el tiempo. Por ejemplo: es lógico y coherente que el deterioro (y por lo tanto las pérdidas) de una cartera crediticia tan grande como la de Bankia evoluciones más o menos en paralelo a la del conjunto del sector bancario, o de sus principales competidores. Una evolución muy distinta, tanto para un lado como para el otro podrían ser signos de un exceso de optimismo o de pesimismo en las valoraciones de esos créditos. Por contra, Araceli Mora explica que, tal como la propia Deloitte señaló ante el ICAC, «el incremento de activos dudosos de Bankia-Bancaja durante el segundo trimestre de 2011 se encontraba alineado con el crecimiento de activos dudosos experimentado por el sistema financiero español en dicho periodo».

En resumen, la conclusión es similar a la que mantuve yo desde que conocimos los informes de los peritos: Que si lo damos por bueno, es gravísimo lo que afirman, ya que no se trataría tan solo de un falseamiento de las cuentas de BFA-Bankia desde su misma creación, sino que implicaría necesariamente la colaboración por acción y omisión de decenas de organismos y entidades independientes, así como de cientos de personas. Queda poco para que los peritos comparezcan ante el juez y puedan testificar, ratificar sus argumentos y ser sometidos a preguntas de las partes. Ese sí que será un momento decisivo en esta instrucción (me temo).

*EDITO: En realidad, con la llegada de Goirigolzarri sí que hubo cambios en departamentos internos de BFA-Bankia. En concreto, los directores de Auditoría Interna y de Riesgos fueron cesados el 16 de mayo de 2012. Además, cabe aclarar que el interventor de Bankia llegó a la entidad en agosto de 2011, después de la salida a Bolsa. Es decir, que las cuentas visadas por éste no tenían relación con las anteriores.

La ampliación de capital del Santander: Una obligación de los mercados y un varapalo para los test de estrés del BCE

Pasado este mediodía la CNMV cancelaba temporalmente la cotización de las acciones del Banco Santander. El motivo: evitar especulaciones y movimientos con información privilegiada ante el inminente anuncio de una ampliación de capital de 7.500 millones de euros. Esta operación, que se realizará por medio de una venta acelerada (en pocas horas se debería llevar a cabo) supondrá incrementar en alrededor de un 10% el capital principal de la entidad presidida por Ana Patricia Botín.  ana botin

Así a bote pronto, diría que la ampliación supone un primer cambio en la dirección tras el nombramiento del nuevo consejero delegado, José Antonio Álvarez. Todo nuevo alto cargo quiere dejar su impronta y ésta no ha sido la excepción: Se asume que hace falta nuevo capital para aumentar la solvencia del banco y se restringe la política de dividendos, que se reduce nominalmente un 66%, si bien ahora se pagará en efectivo, y no en acciones como hasta ahora.

No deja de llamarme la atención que el Santander, el banco más grande y poderoso de España, vaya a emprender esta enorme ampliación de capital apenas dos meses después de que los test de estrés realizados por el BCE dijeran que la entidad estaba perfectamente capitalizada en sus cuentas referentes a 1 de enero de 2014 (11,05% en el escenario base y 8,95% en el escenario adverso). Y apenas dos meses después de que la propia entidad publicara que gozaba de «elevados ratios de solvencia, apalancamiento y liquidez» (11,44% de CET1 a 31 de septiembre de 2014, ver pantallazo).

SAN

 

Es decir, que mientras públicamente la entidad decía al mundo que la entidad gozaba de una solvencia de Champions League, lo que realmente ocurre es que los inversores mantenían serias dudas al respecto y han forzado de una manera indirecta a que los nuevos gestores reconozcan la realidad: Que para estar en línea con los principales competidores y por lo tanto ni verse penalizados hacía falta recapitalizarse y pasar por caja.

Como ha apuntado el compañero Nuño Rodrigo, de Cinco Días, en su twitter, ya había unas ciertas sospechas previas, toda vez que Santander fue el único gran banco que en sus últimas cuentas no publicaba todos los datos de capitalización principal (aquellos recursos internos más líquidos, pensados para protegerse de las pérdidas).

Hace unas semanas escribí un post sobre la aparente discrepancia entre las cuentas consolidadas que publican Santander y BBVA y las oficiales que presentan ante la patronal AEB. Este nuevo capítulo parece incidir en esa tendencia de nuestros campeones nacionales de mostrar siempre solo su cara más fotogénica. No es la mejor de las prácticas, en mi opinión.

Las remuneraciones de altos directivos en Caja Madrid: Un sistema en el que Blesa repartía y el BdE debía supervisar

El FROB continúa en su cruzada por denunciar todo lo denunciable en Caja Madrid y BFA-Bankia. Este martes hemos conocido que se ha remitido a la Fiscalía un expediente sobre el sistema retributivo de la Alta Dirección en el que estiman que se podría haber causado un quebranto de unos 14,8 millones de euros a la caja ahora nacionalizada (después de una recapitalización con fondos públicos de más de 22.000 millones de euros). Pero, ¿Cómo funcionaba y estaba diseñado el sistema de retribuciones de los más altos directivos? ¿Quién lo había aprobado? ¿Quiénes disfrutaban de él? Aquí algunas explicaciones:  blesa

  • El sistema de remuneraciones puesto ahora en cuestión fue propuesto por la propia Dirección de Caja Madrid (entonces liderada por Miguel Blesa) a la Comisión de Retribuciones, que lo estudió en noviembre de 2005. A pesar de que entonces en la caja había 250 personas consideradas «altos directivos», tan solo una docena de personas entraban en el reducido grupo de privilegiados de «Alta Dirección» (el presidente y los directores de unidad-directores generales).
  • La decisión de quién entraba dentro de este selecto colectivo correspondía enteramente al presidente. Era él quien proponía a los órganos de Gobierno de la caja los cargos de director general, director general adjunto o subdirector general.
  • Tal como muestran los documentos internos de retribuciones a los que ha tenido acceso este periodista, los miembros de la Alta Dirección gozaban de seis elementos distintos que conformaban su sistema retributivo: Salario (dividido entre retribución fija y variable a corto plazo), retribución variable a largo plazo, previsión social complementaria (plan de pensiones y seguro de vida), beneficios sociales (cesta de Navidad, préstamo vivienda habitual, seguro de accidentes, seguro médico, exención de comisiones bancarias, coche oficial y chófer, tarjeta visa, teléfono móvil, plaza de párking…), retribución flexible (el directivo decidía cómo cobraba una parte de su salario mediante un seguro médico familiar, un curso superior, guarderías… de forma que se podía recibir una mayor cantidad neta con una misma retribución neta) e incentivo a largo plazo.
  • Cada año, el presidente de Caja Madrid (Miguel Blesa) contaba con una masa salarial predeterminada por el Consejo de Administración para repartir entre sus más altos directivos. Él, de forma discrecional, repartía esa cantidad prefijada entre esa docena de ejecutivos, a los que premiaba o apercibía así en función de su rendimiento y su desempeño (a juicio del presidente, su jefe). Este curioso sistema de funcionamiento creó no pocos quebraderos de cabeza en los altos escalafones de la entidad, toda vez que a unas hipotéticas bases objetivas para dirimir la labor de cada cual, se unía una cierta dosis de arbitrariedad, toda vez que Blesa no rendía cuentas ante nadie por esa decisión. Existía además la norma no escrita de que el presidente cobrara de forma general un 15% más que el alto ejecutivo mejor remunerado.
  • El Consejo de Administración de Caja Madrid era el que decidía el conjunto de la masa salarial que cobraría la Alta Dirección, pero sin embargo no conocía la retribución total de estos altos ejecutivos. Había una serie de conceptos que no conocían los administradores «porque estaban especificados dentro de los contratos, que eran privados: indemnizaciones, cláusulas de no concurrencia, fondos de pensiones…», según explica un antiguo alto cargo de la caja a este periodista.
  • El que sí que conocía los contratos de los altos ejecutivos era el Banco de España. Y es que el supervisor bancario español tenía entre sus obligaciones específicas la de controlar «los sistemas de retribución e indemnización de la alta dirección, así como los sistemas de incentivos de los gestores». ¿Insinúa así el FROB que el BdE no fue capaz de detectar o que ignoró las irregularidades que ahora denuncia ante la Fiscalía? Una vez más el FROB, controlado por el Ministerio de Economía, vuelve a poner en la picota (no sé si voluntaria o involuntariamente) la labor y la profesionalidad del Banco de España.
  • No fue hasta el año 2009 en el que las autoridades reguladoras tomaron conciencia de lo sumamente importante que es el modelo de retribuciones a corto y largo plazo para el sostenimiento y la sostenibilidad de un sistema financiero. Tal como consta en la memoria de supervisión de 2009, no fue hasta entonces que se obligó a la entidades a disponer de una comisión independiente de retribuciones que trabajara en coordinación con la comisión de riesgos. Da la impresión de que hasta esos años en España (y en el mundo) ha podido existir una cierta manga ancha respecto a la supervisión y los métodos de control interno de las remuneraciones de los peces gordos de la banca.

¿’Embellecen’ Santander y BBVA las cuentas que presentan a la prensa?

*(Este post está escrito gracias a la colaboración de Javier Santacruz, economista actualmente en la Universidad de Essex)

Hace meses que varios economistas y analistas del mercado financiero me vienen alertando de un hecho que les ha llamado la atención: Las cuentas que Banco Santander y BBVA presentan a los medios no coinciden con las que luego se publican en los informes oficiales de la Asociación Española de Banca (AEB). Y no estamos hablando de unas décimas arriba o abajo, o de un redondeo. Las diferencias entre unas y otras suponen a veces cientos de millones de euros.

Empecemos por el Banco Santander, que al presentar sus datos consolidados (es decir, sumando todo el perímetro corporativo, incluyendo sus inversiones en el extranjero) referentes al tercer trimestre de 2014 se constatan fuertes diferencias entre las cuentas publicadas para periodistas e inversores y aquellas que se incluyen en los Estados Financieros (página 7) del conjunto de la patronal bancaria. ¿Dónde están las diferencias?

A pesar de que el margen bruto, la generación de negocio, es el mismo (31.572 millones de euros) como se puede ver en las imágenes inferiores (hacer click en ellas), el resultado consolidado del ejercicio varía en uno y otro documento: De 5.252 millones de euros (cuentas para prensa y accionistas) a 5.190 millones (cuentas para la AEB). Pero también de cara al público se muestran unos resultados globales con menores pérdidas por deterioros de activos (8.110M€ frente a 8.157M€), prácticamente la mitad de provisiones reconocidas (1.275M€ frente a 2.002M€) y un menor pago de impuestos (1.882M€ frente a 2.598M€), entre otros.

resultados SAN

resultados SAN AEB

 

En el caso del Grupo BBVA, el lío es aún mayor, ya que la reciente incorporación de la filial turca Garanti supone todo un vuelco contable: Las cuentas del tercer trimestre incorporan los resultados de esta entidad mediante el método de «integración proporcional», que supone incluir el peso de esta entidad en todo cada apartado de los gastos e ingresos, mientras que en las cuentas presentadas ante la AEB el resultado de Garanti se integra mediante la conocida como «puesta en equivalencia» (solo incluye el resultado final y se suma). Esto supone que todas y cada una de las partidas de la cuenta de resultados de BBVA están «distorsionadas», en opinión de Javier Santacruz, lo que supone además una menor cantidad de ingresos y unos mayores gastos reconocidos en la contabilidad remitida a la AEB respecto a la presentación ante la opinión pública.

resultados BBVA

resultados BBVA AEB

Cierto es que en la página 47 del mismo informe para inversores se muestran las dos cuentas y los cambios que se producen en las mismas por la incorporación del banco Garanti en función de la metodología. Pero claro, no es lo mismo la página 7 que la 47 (ver imagen inferior). Como me dice un antiguo alto cargo del sector financiero (que prefiere no ser identificado) «no me parece normal informar con una cuenta fabricada, aunque al final del folleto pongas la información buena«.

resultados BBVA por dos métodos

Es decir, grosso modo, que las cuentas publicitadas por los dos grandes bancos españoles ante medios e inversores muestran, de forma general, unas entidades más rentables y solventes que las que evidencian las cuentas que por otro lado publica la patronal bancaria. ¿Cuáles son las buenas? Los analistas y economistas financieros consultados por este periodista reconocen que ninguna de las dos opciones es falsa, aunque sí que la contabilidad mostrada al gran público está hecha «a la medida».

Que conste que no digo que esto sea una práctica ilegal, ni denunciable. No soy yo quién para decirlo, pero sí que creo que mi labor es dar a conocer que se llevan a cabo estas prácticas. Llevamos varias semanas «escandalizados» por el informe de los peritos del Banco de España que dice que las cuentas de BFA-Bankia no reflejaban la situación real de la entidad, y resulta que nuestros dos principales bancos tienen dos contabilidades públicas paralelas. Quizás, no sé, la CNMV tenga que imponer un criterio estandarizado para estas prácticas y así eliminamos riesgos futuros. ¿Cómo lo ven?

EDITO: Tras preguntar directamente a estas entidades sobre la existencia de discrepancias entre unas cuentas consolidadas y otras, desde el BBVA me han respondido que «es una cuestión puramente contable» sin más implicaciones ya que se llega al mismo beneficio después de impuestos. El tema es que en unas cuentas deciden integrar a Garanti «proporcionalmente» y en el informe de la AEB lo hacen «por el método de la participación y con operaciones interrumpidas». Se mantiene lo dicho: Que la contabilidad más bonita es la que se usa para comunicar resultados a los inversores.