Algunas palabras sobre Lengua geográfica de Marta Fuembuena Loscertales (2023)

Leo a Marta. La lee Ferrer Lerín. Él sabe la verdad. Él conoce los porcentajes mejor que yo. Una primera parte. Ella. Allí volvemos al terruño, a lo básico: «Granland ha aprendido rápida e inconscientemente/que los escarabajos tienen la fórmula de los caballos». Pienso que todo es combustible, metano orgánico, vida en disolución. Aquel lugar es maldito y es, también, familiar, es tan real como un sueño repetido: «Es posible entretenerse entre las ruinas».

Busca entre la geografía inexacta y encuentra una luz súbita entre las almas, que lucen azules como fuegos fatuos, como fósforos que crecen, pequeños brotes entre la tierra que se desmenuza: «Recordándonos que la ciudad vino para quedarse en nosotros». En la Gran Depresión, unos centavos, sopa para el dinosaurio de todos los hijos de Granland, el demiurgo perfecto: «Marchó al grito para regresar humana». Como aquella historia de una santa india laica Catherine Takakwitha, que en 1963 hizo que su hermano le lanzara tierra y ella buscó entre los osos una oportunidad para compartir el festín. Y pienso en el whisky que se fabrica en Yukón, cristalino y transparente, de un amarillo alma, madre superiora de todo lo nuevo, del giro innecesario y mareante de 360º: «Y la vida es un lugar donde jamás estuvo».

Llegará el enemigo y llegarán los lobos, porque Granland tiene que arder y llevarnos a la boca sus cenizas: «Estas criaturas van a quemarnos Granland/como los flacos héroes que somos». Flores muertas, flores de asesino que exhalan cianuro y monóxido de carbono y, en esa pelea, los muertos son los vencedores. ¿Quién eres? ¿Qué quieres? «Soy la cabra y su leche materna/la torre más alta entre todos los espejismos». Alguien perdido, un desconocido, niño que se resiste a ser hombre. Qué es el hombre, qué queda de él: «Suprimirse la lengua como se suprimen los días», y es inequívoca la lucha, «Permitir que el tiempo te soborne/con la boca babeantemente abierta».

Él es ella o, en realidad, ella es él. ¿Quién viene? La muerte, la vida, él, ella: «Un inundación del cuerpo decreciente». La soledad es una compañera inesperada mientras hacemos tiempo hasta la llegada de la muerta. Vivo y viudo, la bocanada que espero, Marta, es un verso, mañana llega la segunda parte.

En la segunda parte llega el mundo. La carne cruda se está acumulando, bajo mis uñas y en mis lecturas. Los insectos que se quedan atrapados en ella reciben el tratamiento de semillas y ahora son plaga: «A nombrar la palabra ausente/a batallar en ejército/contra lo que se obstina en matarnos». Personajes desaforados, una niña y los alcoholes, susurrada, supurada, destilada. Y el frío que es adjetivo de ausencia: «Lo sé/tuvimos que subir al tránsito frigorífico/para no pudrirnos/solo que de esta forma sacrificamos todos nuestros incendios» Sin ojos no hay más que una noche que sigue y sigue, que se construye sobre palabras, que se queda detenida: «Es cada vez que la ciudad está llena/y nadie responde».

EL final es el tercer acto, el tercer corte, el tercer mundo. Todos usamos vestidos anchos de pánico. Tropezamos en el barro de la saliva ajena. Jugamos, cuidado, en pasillos hechos a nuestra medida y escribimos en el vaho que dejan los ducados de otros poemas muertos: «De este mundo no nos vamos/nos echan».

Un maravilloso e hipnótico libro de Marta Fuembuena, su laberinto enésimo, el más complejo y bello hasta ahora. Cicatrizamos la espera con gusto ante el fuego de Granland, incorporado a nuestro panteón de personajes, de lugares, de ideas que nos permiten el sacrificio. Editado por RIL EDITORES

Escribe aquí tu comentario





    Normas para comentar en 20minutos.es

    • Antes de enviar su comentario lee atentamente las normas para comentar en 20minutos.es.
    • Esta es la opinión de los internautas, no la de 20minutos.es.
    • No está permitido verter comentarios contrarios a las leyes españolas o injuriantes.
    • Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
    • Por favor, céntrate en el tema.
    • Algunos blogs tienen moderación previa, ten paciencia si no ves tu comentario.

    Información sobre el tratamiento de sus datos personales

    En cumplimiento de lo dispuesto en el Reglamento (UE) 2016/679 del Parlamento Europeo y del Consejo de 27 de abril de 2016 relativo a la protección de las personas físicas en lo que respecta al tratamiento de datos personales y a la libre circulación de estos datos, y Ley Orgánica 3/2018, de 5 de diciembre, de Protección de Datos Personales y garantía de los derechos digitales le informamos que los datos de carácter personal que nos facilite en este formulario de contacto serán tratados de forma confidencial y quedarán incorporados a la correspondiente actividad de tratamiento titularidad de 20 MINUTOS EDITORA, S.L, con la única finalidad de gestionar los comentarios aportados al blog por Ud. Asimismo, de prestar su consentimiento le enviaremos comunicaciones comerciales electrónicas de productos y servicios propios o de terceros.

    No está permitido escribir comentarios por menores de 14 años. Si detectamos el envío de comentario de un usuario menor de esta edad será suprimido, así como sus datos personales.

    Algunos datos personales pueden ser objeto de tratamiento a través de la instalación de cookies y de tecnologías de tracking, así como a través de su acceso a esta web desde sus canales en redes sociales. Le rogamos consulte para una más detallada información nuestra Política de Privacidad y nuestra Política de Cookies.

    Los datos personales se conservarán indefinidamente hasta que solicite su supresión.

    Puede ejercer sus derechos de acceso, rectificación, supresión y portabilidad de sus datos, de limitación y oposición a su tratamiento, así como a no ser objeto de decisiones basadas únicamente en el tratamiento automatizado de sus datos, cuando procedan, ante el responsable citado en la dirección dpo@henneo.com

    Le informamos igualmente que puede presentar una reclamación ante la Agencia Española de Protección de Datos, si no está satisfecho con en el ejercicio de sus derechos.