Un año más la misa de Pacua ha reunido, sólo por unas horas, a la familia real con la reina emérita en Mallorca. Nuestros monarcas llegaban de algún destino desconocido, después de disfrutar de diez días de vacaciones, y la madre del rey, como acostumbra, había estado con su hermana, Irene, en la isla durante toda la semana.
Pero, a mi parecer, la única que ha prestado atención a su estilismo ha sido la reina Sofía que ha elegido un traje sastre en rosa fucsia con matices naranja y un divertido collar con huevos de pascua de colores.
El outfit de la reina podría pasar por uno más de sus tantos de ‘working girl’, que valen para cualquier estación. Letizia ha combinado un pantalón pitillo en gris marengo con una blusa de Hugo Boss y un blazer en azul jaspeado de Massimo Dutti, de hace un par de temporadas. La consorte ha lucido unos zapatos de ante en azul marino con tacón ‘complicadito’ para caminar sobre los adoquines de la entrada de la Almudayna, pero ella, como buena profesional, se ha desenvuelto con soltura. Su melena al viento lucía impecable, con volumen y muy cuidada, y su apuesta por un maquillaje sencillo eran la evidencia de que para ella la foto ‘pascual’ no requiere de gran esfuerzo.
Leti tampoco ha prestado mucha atención a los estilismos de sus hijas que repetían los invernales abrigos de Carolina Herrera que vistieron el pasado Día de la Hispanidad; esta vez las niñas los combinaban con manoletinas a juego. Las hermanas, Leonor y Sofía, que son ya igual de altas, han prescindido de sus trencitas y se han apuntado a la tendencia ‘raya ladeada’ que tanto gusta a la reina y de la que ha hecho gala en casi todos sus actos los últimos meses.
Y esto ha sido todo amigos, sin sorpresas y sin el rey emérito, que desde 2014 ya no viaja a Mallorca para esta foto que año tras año tiene menos sentido.
**Fotos: Gtres