Lo que para muchos será un ‘sin más’, un cambio sin importancia, para nuestra reina es algo así como el comienzo de una nueva era: por primera vez hemos visto a Letizia con las uñas pintadas de color grosella.

Y esto, queridos, significa mucho, autocontrol y disciplina especialmente, porque los que me seguís y seguís a nuestra consorte bien sabéis que suele esconder sus manos para desviar la atención de sus padrastros y uñas mordisqueadas.

Letizia cuando llevaba sus uñas al ras

Pero puede que ya no más. Yo nunca me he mordido las uñas pero imagino que dejar atrás un mál habito o una costumbre así cuesta y mucho, así que desde aquí aplaudo a nuestra reina y a su nueva manicura.

Puede también que pronto la veamos dar el siguiente paso y se lance a decorar sus manos con anillos, lo que no me extrañaría en absoluto, sabiendo lo que le gusta cambiar, estrenar e incorporar pendientes a su joyero.

La ocasión especial, fue la entrega de los Premios Acción Magistral, en la Fundación BBVA en las Tablas, al norte de Madrid. Letizia estrenó un nuevo top blanco con cuadros negros de Hugo Boss, de la colección otoño invierno 2016 (220 euros), lo combinó con unos de sus pantalones negros ‘básicos clásicos’, con sus eternos Magrit de charol al tono y el bolso de piel de avestruz de Mbubag que hacía juego con su laca de uñas.

Desenterró también de las profundidades de su caja de las alhajas unos pendientes que estrenó en 2008 y que se había puesto por última vez en 2015 durante la entrega de Los Premios Nacionales de Cultura.

Estoy emocionada con el sutil cambio de nuerstra Leti, ¿qué os parece?

**Fotos: Gtres