Es una de esas películas que pasa desapercibida entre la larga cartelera de las plataformas digitales. De calidad cuestionable, narra sin embargo un hecho muy singular. Un tiroteo puede parecer algo corriente en el «salvaje oeste» del siglo XIX, pero no era tan habitual como podemos suponer. Además en muchos de estos casos la prensa ensalzaba de manera artificial a algunos personajes en busca de un relato que pudieran vender. Un buen ejemplo de ello fueron Billy el Niño o Wyatt Earp.
La película, disponible actualmente en Amazon Prime, tiene por título Hide Park (el último hombre) (Nicholas Barton, 2018) aunque tanto en Filmaffinity como IMDb aparece con el título original, Deadman Standing.
Es lo que podríamos catalogar una película de serie B (os recomiendo el curioso origen de estas cintas ‘El nacimiento de las películas de serie B‘), con una trama algo lenta, pero que logró que me picara la curiosidad para saber un poco más sobre aquel tiroteo.
El guion, en el que también participa el director, se toma un nutrido número de licencias sobre lo que sucedió en realidad. Siempre decimos que los guiones deben tratar de hacer la trama más entretenida, pero los cambios que realizan no mejoran para nada la película y los errores son demasiado importantes.
La cinta trata de un agente de la ley, Mike McCluskie (Luke Arnold), que se enfrenta al poder de un ganadero texano, Hugh Anderson (M.C. Gainey), durante el periodo de elecciones locales. En una trifulca, el sheriff mata a uno de los hombres de confianza del terrateniente, «Billy» Bailey (Peter Douglas), al que habían ascendido a hombre de ley. Sus compañeros de fechorías claman venganza, lo que desencadena el tiroteo final. El personaje clave de la película es James Riley (Quinn Lord), un joven tuberculoso que es acogido por lástima por McCluskie como su ayudante y que se convierte en el gran el protagonista del tiroteo.
«The Stranger» (C. Thomas Howell) es un personaje que hace honor a su nombre ya que aparece en escena un tiempo después de los sucesos. El guion usa al «extraño» para explicar lo que ocurrió con flashback mientras charla con la dueña del salón, Rosie (Viva Bianca), la eterna Ilithyia de Spartacus. En realidad este personaje es Arthur, el hermano de Mike McCluskie, que no tiene el protagonismo que tuvo en la historia real.
Los hechos de Hide Park
Todo comenzó el 11 de agosto de 1871 en Newton, Kansas. Mike McCluskie, tras una discusión mató de un tiro en el pecho a William “Billy” Bailey. Ese suceso entre dos hombres de ley, desencadenó todo lo que vendría después. Entre los amigos de “Billy”, que clamaban venganza, estaba Hughie Anderson, Jr., hijo del poderoso ganadero Hugh Anderson.
El 20 de agosto, la banda de “Billy” encuentran a McCluskie en el salón y Anderson es el que aprieta el gatillo varias veces acabando con la vida del sheriff. Y aquí es donde llega James Riley, de unos 18 años y sin ninguna experiencia como pistolero. La leyenda dice que el propio Riley cerró la puerta del salón para que los pistoleros que habían matado a su mentor no pudieran escapar. Uno a uno disparó a todos los miembros de la banda, de los cuales tres murieron a causa de los disparos y los otros tres fueron heridos aunque lograron sobrevivir. Lo realmente sorprendente es que Riley, una vez vació sus revólveres, salió del salón y desapareció para siempre. Nunca se supo qué ocurrió con él, aunque dada la gravedad de su tuberculosis lo más probable es que muriera al poco tiempo.
Uno de los supervivientes fue precisamente Hughie Anderson Jr., el que habría acabado con la vida de Mike McCluskie. Pero no iba a quedar así. Pese a la protección de su poderoso padre, dos años más tarde Arthur McCluskie vengó a su hermano matando a cuchilladas a Anderson. Antes ambos habían vaciado sus armas sin acierto.
Pese a tratarse de uno de los tiroteos con más víctimas del viejo oeste, no alcanzó tanta fama como otros, probablemente porque no participaron en ella ninguno de los pistoleros de fama de aquellos tiempos. Por ejemplo si lo comparamos con el más legendario de todos, el tiroteo de O.K. Corral de los hermanos Earp, ha sido llevado al cine en numerosos ocasiones con actores de la talla de Kevin Cosner, Kurt Rusell, Burt Lancaster o Rock Hudson y sin embargo no tuvo tantas víctimas como Hide Park.
No creo que haya una película con al misma cantidad de besos que de tiros. Y si la hubiera igual la verían como maligna influencia.
30 junio 2022 | 11:21 pm