Juan Carlos Escudier

El último que dé la luz

Los peritos que debían poner luz sobre el tipo de explosivo que estalló en los trenes son ocho señores muy solventes que no son capaces de ponerse de acuerdo sobre el punto de fusión del nitroglicol, aunque hay consenso en que la nitroglicerina lo alcanza a los 13,3º centígrados, exactamente. Estas eminencias son capaces, por ejemplo, de debatir animadamente un par de horas sobre las posibilidades que tiene el polvo de un extintor metido en una bolsa de plástico de contaminarse de restos de explosivo, o de cómo hay que hacer una cromatografía de capa fina, que no es como la de gases aunque se llame parecido. De acuerdo, lo que se dice de acuerdo, no llegan a ponerse, pero da gusto oírles del lavado con acetona y de la generación espontánea de la metenamina. De momento, voluntad no les falta, aunque luz ponen poca.

De los ocho expertos que comparecen desde hoy ante el tribunal en la fase pericial correspondiente a los explosivos, dos pertenecen a la Guardia Civil, dos a la Policía y cuatro acuden en representación de algunas de las partes personadas. Días atrás entregaron un informe con 222 folios de conclusiones, que era bueno para un roto, para un descosido y hasta para un ‘agujerólogo’. Como sería la cosa que no hubo unanimidad ni para poner nombre al explosivo no estallado: cinco dijeron que era Goma 2 Eco y tres se limitaron a llamarla Goma 2. Del análisis de los focos de las explosiones, cinco sostenían que no se podía saber con exactitud qué había estallado y tres hablaron directamente de titadyne. Los señores de la luz son los que ahora nos alumbran.

Pues bien, a los ocho peritos fijos en la alineación, se han ido sumando otros con los que han polemizado, especialmente con la jefa de laboratorio de los Tedax, una señora química con más de 20 años de experiencia que ha afirmado que después de una explosión no se puede determinar la marca comercial de lo que ha estallado. Es decir, que uno puede saber que los terroristas robaron cajas de Goma 2 Eco y EC de una mina, puede encontrar una de las mochilas bolsa que no explotó con 12 kilos de Goma 2 Eco, pero la química de los Tedax le dirá que de lo que está realmente segura es de que aquello es dinamita.

Con la perito en cuestión se ha formado cierta polémica por su forma de lavar las muestras con agua y acetona y porque en una de ellas, la numerada como 1, perteneciente al foco 3 de la Estación del Pozo, que correspondía a los restos de polvo de un extintor, sus ocho colegas hallaron componentes de explosivo y ella no. Entre bostezos, hemos presenciado una viva polémica sobre si había habido o no contaminación del dichoso polvo, lo cual parecía evidente, incluso para un profano.

La perito del Tedax ha querido poner a salvo su profesionalidad explicando el método que había seguido para guardar las muestras del 11-M, al estilo de las matriuscas rusas: las metía en un plástico, luego en un sobre, después en una bolsa, a continuación en una caja de cartón, nuevamente en bolsa cerrada con cinta aislante y, de ahí, en un armario metálico de dos puertas. Impresionante despliegue.

La polémica ha continuado con el dinitrotolueno (DNT), que no fue detectado por la química, entre otras razones porque su laboratorio es un poco castaña. El DNT es un componente de la Goma 2 EC y del Titadyne. Y ha continuado con la presencia de la metenamina, una sustancia que, según los propios peritos han concluido, puede generarse a determinada temperatura. Bueno, todos menos uno al que hoy le entraron las dudas y nos ha tenido en un sinvivir hasta que, al final, ha reconocido que la Goma 2 Eco puedo contaminarse de DNT en Mina Conchita.

Nadie discute la pericia de estos señores, aunque nos hemos enterado que los cuatro ‘civiles’ del grupo han visto explosivos en pintura porque jamás habían tenido contacto con ellos hasta la fecha. Los encargados de iluminarnos nos tienen en tinieblas. Tanta luz puede resultar cegadora.

TODO SOBRE EL JUICIO DEL 11-M

2 comentarios

  1. Dice ser lukas

    Pues, ya solo nos queda Del Burgo. El es el que tiene todas las claves y ya está en contacto con el ufólogo Juan José Benítez para preparar un guión para el cine. Los ejecutores materiales del atentado, según sus últimas investigaciones, son extraterrestres procedentes del planeta Ummo, en combinación con el comando Txintxurreta, de Eta, naturalmente. O sea, una conspiración inter-galáctica-etarra contra Aznar. Y todo por joder a Bush, ya véis. Creo que lo va a llevar a la gran pantalla Santiago Segura.

    30 noviembre -0001 | 0:00

  2. Dice ser Saltaparapetos

    Aaaaahh.Por favor que alguien apague la luz.zzzzzz

    28 mayo 2007 | 22:27

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