—Hace ya tiempo que aquí nadie cree en los milagros —me dice el anciano que está a mi lado, encadenado de pies y manos, inmóvil, desdentado, pulgoso, famélico, harapiento, moribundo al igual que los demás prisioneros que desde hace tiempo descargamos nuestras heces en el mismo lugar. Nadie limpia los calabozos, nadie recolecta nuestros vómitos y el olor a excremento y muerte es tan penetrante que la falta de presencia de nuestros dioses, está justificada. Quién va a querer entrar a este infierno húmedo y oscuro donde los gemidos de dolor espantan incluso hasta las ratas que en un tiempo, fueron de gran ayuda para nuestros débiles estómagos. Morir en este lugar es un proceso lento, doloroso e inevitable y yo intento explicarle al anciano que si mi plan funciona, puedo hacer que nuestra muerte llegue más rápido. El anciano, quien ya ha intentado suicidarse varias veces, sigue sin creerme.
Adaptación de un microrrelato que participó sin éxito del concurso Relatos en Cadena.
Empiezo a pensar_
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18 julio 2010 | 10:54
¡Vaya, vaya! Parece que los demás también están pensativos; por mi parte sigo ensimismado y buscando a alguna de mis musas con el teléfono celular, como decís vosotros; en domingo se van a la playa y lo apagan. en fin sigo pensando.
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18 julio 2010 | 13:26
Los dos primeros comentarios son unos falsos. Yo soy el autentico Larrosa.
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18 julio 2010 | 15:23
me comeis la polla por tiempos los 3 primeros
18 julio 2010 | 16:00
Me encanta…..
sobre todo cuando en 20minutos quieres ver ampliada una imagen, ya te digan ellos ampliar o tu que lo intentas sobre la imagen y nada es lo mismo que veias
18 julio 2010 | 16:03
Ahí es donde los moñas deberian estar encerrados con sus inhumanidades
18 julio 2010 | 16:48
y te vas a morir sin que tu familia disfrute de tu fortuna, sin embargo yo podría hacer algo
.En el fondo del iris del moribundo adivino un rayo de curiosidad y me pregunta. ¿Que se te ha ocurrido?
Tardé mucho rato en contarle al viejo mi plan y falto de fuerzas, inundado por el sudor de la fiebre, sin voluntad, decidió ,hacerme participe de su secreto. (secreto que nadie, ni con torturas consiguió,sacarle)
Después de la muerte del anciano, todo rodó sobre ruedas `para mí, fue fácil ponerme en contacto con el jefe de la guardia y después con el de la prisión. Con argucias logré sembrar la semilla de la ambición en el corazón de aquel hombre.(Que murió en extrañas circunstancias unos días después de liberarme.)
Ahora soy dueño y señor de una gran fortuna, otra vez he vuelto a la política y aunque al principio el tesoro del viejo no era gran cosa, lo administré de tal manera y con mentiras ,que ahora soy el presidente del país, donde ya estoy dando ordenes para convertir las cárceles, y que se asemejen a hoteles de cinco estrellas, no sea que vuelva a caer por allí.
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18 julio 2010 | 18:54
Te mando mi comentario integro, pues antes me ha salido cortado.
El anciano, se esta muriendo, apenas le quedan unas horas de vida, debo darme prisa para ganarme su confianza y sonsacarle el secreto que se que esconde en el fondo de su conciencia, el lugar donde escondió el botín, un tesoro de joyas y dinero valorado en muchos millones.
Tienes razón ya no hay milagros y te vas a morir sin que tu familia disfrute de tu fortuna, sin embargo yo podría hacer algo
.En el fondo del iris del moribundo adivino un rayo de curiosidad y me pregunta. ¿Que se te ha ocurrido?
Tardé mucho rato en contarle al viejo mi astuto plan y falto de fuerzas, inundado por el sudor de la fiebre, sin voluntad, decidió hacerme participe de su secreto. (Secreto que nadie, ni con torturas consiguió sacarle)
Después de la muerte del anciano, todo rodó sobre ruedas para mí, fue fácil ponerme en contacto con el jefe de la guardia y después con el de la prisión. Con argucias logré sembrar la semilla de la ambición en el corazón de aquel hombre.(Que murió en extrañas circunstancias unos días después de liberarme.)
Ahora soy dueño y señor de una gran fortuna, otra vez he vuelto a la política y aunque al principio el tesoro del viejo no era gran cosa, lo administré de tal manera y con mentiras, que ahora soy el presidente del país, donde ya estoy dando ordenes para reconvertir las cárceles, y que se asemejen a hoteles de cinco estrellas, no sea que vuelva a caer por allí.
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18 julio 2010 | 18:57
No se oye nada porque hace tiempo que los carceleros abandonaron aquella prisión por la inminente amenaza de la conquista de un ejercito liberador. Ellos no lo sabían pero estaban a escasa horas de ser liberados.
!Joder vamos a darles esta oportunidad! que estamos en verano y no aguanto malas historias.
Carla
http://www.lasbolaschinas.com
18 julio 2010 | 22:12
Me parece que eso es el argumento de una película.
19 julio 2010 | 11:33
Hola buenos días.
19 julio 2010 | 11:34
Me parece que eso es el argumento de una película.
27 julio 2010 | 12:01