"El deseado bien último se alcanza mejor mediante el libre comercio de ideas".(1919) Juez O. Wendell Holmes del Tribunal Supremo de EE UU

Archivo de marzo, 2008

Enigma Zapatero

Los segundos mandatos cursan con distintas claves, la experiencia y el aura de la doble victoria transforma a los personajes. Les ha pasado a todos quienes han pasado por ello. A Zapatero, que es muy celoso de su autonomía, que comparte poco y con muy pocos, se le nota estos días como templado y poco comunicativo, con ganas de no molestar. Desde la victoria del 9M apenas ha dicho nada, ni en público, ni en privado, o no se ha sabido.

Ha hecho un solo movimiento directo: designar portavoz parlamentario al amigo y colaborador de confianza, sin dejar sin empleo decoroso al sustituido. Portavoz Alonso, con encargo muy amplio, para mejorar el clima de entendimiento con la oposición en el Parlamento.

Ahora Zapatero necesita más a la oposición del PP que a los grupos pequeños, porque las decisiones relevantes hay que pactarlas con la oposición. Para el resto sobra con la aritmética: buscar los votos necesarios en cada caso. PNV y CiU van a notar que no son decisivos y que más que un pacto con compromisos de alcance, la legislatura va a ser mercadeo de pequeñas cosas para cada caso, con puja a la holandesa, a la baja.

Esta semana se despejará la composición de las mesas de la cámara. El PP parece no aspirar a nada más que mantener el porcentaje. Rajoy despeja dudas hoy, pero su estrategia está en el medio plazo y en las cosas de casa, en las caleras del PP que están que arden. Si los populares no ceden algo en la negociación de la mesa y las comisiones quedarán desvalorizados en cuanto a zonas de influencia. Y los socialistas verán mejorados sus pactos blandos y variables con los otros grupos.

La agenda del presidente esta semana está mitad en el Parlamento, mitad en la cumbre de la OTAN en Bucarest donde participan 60 jefes de gobierno. Allí Zapatero no tiene papel apreciable, pero llega con galones de reelegido que son un grado en ese club, que hasta ahora le veía como un pipiolo.

La educación del príncipe

La princesa de Asturias se ha expresado en catalán en un acto público celebrado en Barcelona. No me atrevo a juzgar la calidad de su acento porque cuenta más la intención que la precisión. Letizia Ortiz, hoy princesa de Asturias y mañana reina de España, sabe expresarse y sabe donde anda. Desde su matrimonio cuida sus presencias públicas que cursan con inevitable notoriedad; no ha cometido errores, todo lo contrario.

Que el Rey y los príncipes se expresen en todos los idiomas de un país como España forma parte de sus obligaciones. Deben hablar inglés y algún idioma más, pero también los idiomas nacionales. En la educación del príncipe ha faltado esa asignatura que no debería quedar ausente en la formación de las actuales infantas, y desde primera hora.

La decisión de la princesa hablando catalán en Barcelona debe repetirse por ella misma y también en el caso del príncipe Felipe. También en vasco y gallego. Ese conocimiento forma parte de sus deberes de estado. Hacerlo con naturalidad, mezclando lenguas que son oficiales y naturales.

España necesita dar carpetazo a la persecución de las lenguas propias, que es un juego de resta. Extrañar el español en Cataluña es una de esas estupideces que se pagan caras, pero esconder el catalán o el vasco o gallego forma parte del mismo mal.

Desde la casa del Rey de los españoles podría y debería darse buen ejemplo en este sentido, como hizo la princesa de Asturias ayer. .

Normalizar la justicia, como prioridad

Las cinco horas de despacho del presidente del futuro Gobierno y el portavoz del grupo parlamentario que le sustenta es una buena señal. Los minutos iniciales de la legislatura evidencian serenidad y buenas maneras. Para empezar el proceso electoral ha concluido sin impugnaciones, acusaciones desaforadas. El sistema ha funcionado y las actas de diputados se entregan sin cabos sueltos.

Incluso el antiguo portavoz popular en el Congreso, el diputado raso Zaplana, ha elogiado al nuevo portavoz socialista “de lo poco que salva del gobierno”, un comentario imposible durante la pasada legislatura.

El primer encargo que Zapatero ha hecho a su amigo Alonso ha sido que normalice los órganos judiciales, que negocie con los populares la renovación del Constitucional y del Consejo del Poder Judicial para abrir una nueva etapa en ese poder esencial en las democracias.

El encargo requiere sentido de estado y sensatez por parte de los líderes políticos que son los que deciden esos nombramientos. Luego los designados son libres para hacer lo que deben o para agradecer el cargo a quien les designó. Por eso es esencial elegir personas serias, con personalidad y carácter, que crean en la ley y la justicia.

Sin unos órganos judiciales profesionales y con reputación la democracia no puede funcionar bien, la sociedad no se sentirá amparada y protegida. Construir esa reputación empieza porque quienes ocupen esos cargos se sacudan la etiqueta partidista y actúen en conciencia, con independencia, sometidos a su buen criterio.

Para que esa utopía sea probable se requiere que los designados sean personas respetadas. No es eso lo que ha ocurrido hasta ahora. Esa es la responsabilidad de Zapatero y de Rajoy, que empieza en sus portavoces parlamentarios. Dar prioridad a la reforma de la justicia, materia a la que no dedicaron ni un segundo en los famosos y frustrantes debates electorales, es un buen comienzo. Mira que si esta es buena legislatura ejemplar. De momento no perdamos la esperanza, lo que bien empeiza puede acabar mejor.

Cabestro es un manso con cencerro

El portavoz peneuvista en el Congreso, Josu Erkoreka, es un profesor universitario con buen discurso, un economista con fundamento, y una persona correcta en sus actuaciones conocidas hasta hora. Esta tarde ha hecho un símil desafortunado con los toros como fuente. Ignoro si es taurino, que es una compleja asignatura que conviene manejar con prudencia, pero la figura de los mansos y los cabestros utilizada para encuadrar a José Bono es peligrosa, puede llegar a ser faltona y muy poco apropiada. Descortés e inadecuada. Además le pasará factura al ingenioso. Porque donde las dan las toman.

Aunque algunos pretenden que en sede parlamentaria se puede ser grosero, vociferar, abuchear, insultar… a Erkoreka ese papel no le pega. De manera que ha improvisado con los micrófonos delante que suele ser situación peligroso.

El portavoz del PNV con seis diputados y seis votos que valen para empatar y ganar va a apoyar al gobierno como lo hizo en la anterior legislatura y un poco más, aunque a veces un poco menos. De momento dice que apoyará la candidatura de Bono con un precio, con algún asiento en las instituciones que puede ir en contra de los catalanes que en estos trapicheos andan menos listos.

Pero para justificar y matar el gusanillo Erkoreka ha querido poner unas banderillas a Bono que excitarán al manchego, que ñuego pasará factura y cobrará presa. La tesis de Erkoreka es que hay mansos y cabestros, que a los primeros se les puede dejar en libertad, no molestan, y a los segundos hay que tenerles acotados, con ataduras institucionales para contener su boca.

Ignora Erkoreka que un cabestro es un buey manso con cencerro para avisar que llega y para guiar la manada. A Bono, que seguramente es más taurino y ganadero que Erkoreka, se le deben hacer los dedos huéspedes para cuando le toque lidiar al colega vasco.

Bono no es ni manso ni cabestro, es un político muy experimentado que va a ser presiente del Congreso y que va a dar mucha lidia por si mismo e inducida. Le van a votar los del PNV, que puestos a hacer el favor podían haber obtenido más rédito que el comentario peudoingenioso de los mansos y los cabestros, una parábola poco feliz. Bono puede ser muchas cosas… pero cabestro, más bien poco.

Dominó de cargos: Alonso portavoz socialista

Primero el Parlamento, luego el Gobierno. Los efectos prácticos de las elecciones del 9M empezarán a notarse hoy, cuando los líderes despejen opciones tras unas cortas y solitarias vacaciones. Los noticiarios de las televisiones estos días, ayunos de políticos y política, han sido interesantes, fabricados por periodistas que buscan noticias fuera de la agenda del día, sin cocina por los departamentos de efectos especiales.

Pero vuelve la agenda con los nombres de los portavoces de los grupos parlamentarios en primer plano, especialmente los de los dos grandes partidos, nombres que servirán para calibrar las intenciones de Zapatero y Rajoy. En sus portavoces parlamentarios descargan buena parte del talante y del trabajo político.

La pasada legislatura Zapatero utilizó a Rubalcaba primero y a López Garrido después. Rajoy aguantó toda la legislatura con Zaplana. Entre todos consiguieron sacar de quicio al Presidente del Parlamento y abortaron cualquier posibilidad de reforma del reglamento del Congreso, que anda muy necesitado de arreglos.

Para esta legislatura Zapatero va a confiar en un amigo personal, José Antonio Alonso, un juez de carrera que ha cumplido como ministro de Interior y de Defensa, sobrio y eficaz, que no arma bulla. Rajoy no ha desvelado su opción, pero será alguien de lo que llama “su equipo” y dará una señal sobre ese enigma. Los dos portavoces vana estrictamente leales a lo que quieren sus jefes.

Para el martes queda la composición de las mesas de ambas cámaras y la designación de sus presidentes. Todo apunta a que José Bono tendrá el premio de la presidencia del Congreso que le garantiza el protagonismo político que necesita su peculiar estilo de actuar.

Y también debe despejarse esta semana la composición del grupo mixto: once escaños de seis partidos políticos o coaliciones en busca de presencia en los debates y en las comisiones. La polémica del grupo mixto implica problemas financieros y de acción política, vitales para algunos de esos grupos.

El carisma de Obama

Meses atrás, el 4 de enero, escribí una nota titulada «mi voto por Obama». No me gusta mostrar preferencias, no creo que sea ese el oficio del periodista, prefiero describir y analizar, con posición lo más abierta posible. Pero el personaje Obama es peculiar y muy atractivo, suena distinto, habla distinto, apela a los sentimientos y es creible, mirá más allá, no stá atrapado en gráficas manipuladas o groseras.

Supe de él hace cuatro años, cuando la anterior Convención demócrata, la que eligió al senador Kerry que luego perdió frente a Bush. A Obama le encargaron el discurso de apertura, buscaban un personaje amable, llamativo, sin contraindicaciones y alguien señaló a un joven senador de color por Illiois que hablaba muy bien. Así fue, tanto que alguno de los asistentes (según recogieron los medios) dijo ¿por qué elegimos otro líder si tenemos éste?

Desde entonces Obama ha hecho carrera y se ha colocado como aspirante con más posibilidades. Por mucho que sorprenda puede ser presidente de los Estados Unidos en noviembre y dar un vuelco a las expectativas políticas globales.

Esta semana ha pronucniado uno de esos discursos que le hacen singular. En Filadelfia, cerca de la sala donde se aprobó la Declaración de Independencia 221 años atrás, en el estado de Pensilvania que el próximo 22 de abril puede determinar el candidato demócrata. Hablaba a la defensiva, para salir al paso de acusaciones de extremista peligroso, por cuanto su viejo consejero espiritual, su párroco, el jubilado reverendo Jeremiah Wright, tenga en su historia de predicador varios sermones extremistas.

Obama dijo, entre otras referencias las siguientes:

«No puedo renunciar al reverendo Wright como tampoco puedo repudiar a la comunidad negra o a mi abuela blanca. Todos son parte de mi mismo y de los Estados Unidos» … La ira racial «es real, es poderosa, y si nos limitamos a desear que desaparezca, a condenarla sin entender sus raices, solo ensancharemos la brecha de falta de comprensión entre razas»… «tengo hermanos, hermanas, sobrinas, tios, primos, d etodas las razas y colores, esparcidos por tres continentes. Y nunca olvidaré que en ningún otro país mi historia hubiera sido posible» «estoy casado con una mujer negra que lleva la sangre de esclavos y de amos de esclavos. Una herencia que transmitimos a nuestras dos hijas».

El enlace con el texto del discurso en inglés puede ser interesante para calar en el personaje. Hablar… habla seductor, con carisma. No se si será un buen jefe, un buen comandante, pero las ideas que fluyen de su mente son atractivas.

Muertes de tráfico: bajar de cien

Por las carreteras españolas circulan más de 30 millones de vehículos, el doble que veinte años atrás. El número de víctimas por accidentes de tráfico se ha reducido a menos de la mitad en ese período, de más de seis mil muertos a finales de los años ochenta (6.100 en 1989, el año más funesto desde el punto de vista estadístico) a menos de tres mil el pasado año. Con el doble de coches la mitad de víctimas mortales, no parece una corrección poco relevante.

Estos días, semana santa, se produce una movilización importante de vehículos y viajeros, algunos con poca pericia y también con prisas arriesgadas. Durante los cuatro años anteriores la cifra de muertos en accidentes de tráfico superó el centenar durante estos díez días. Aunque las cifras anuales registran caídas apreciables de la siniestralidad: de más de 3.500 vidas perdidas el año 2004 a menos de 2.750 el 2007, el período de Semana Santa fue ajeno a ese deseable fenómeno.

Bajar de cien muertes en las carreteras en el período que va del fin de semana pasado al martes de pascua parece objetivo encomiable, al servicio del cual merece la pena aportar recursos y habilidades. Criticar a los responsables de Tráfico forma parte del ritual, como enseñar a los entrenadores de los equipos de fútbol como deben alinear a sus jugadores. Sobran los especialistas de boquilla que lo arreglarían con dos de pipas.

Bajar de cien estos días es un buen objetivo, como lo ha sido bajar de cien accidentes mortales al año por cada millón de vehículos registrados. El pasado año ese índice fue de 92, veinte años atrás andaba por 400. A esa mejora han contribuido varios factores, es un fenómeno multicausal, como tantos otros. Significa que las cifras españolas encajan con la media europea, una cierta normalización, que no debería desalentar los esfuerzos para que las cifras sigan cayendo.

¿Podríamos concluir que las políticas de Tráfico durante estos últimos veinte años no han sido equivocadas?

Zaptero tiene manos libres en el PSOE

El PSOE es una balsa de aceite como nunca antes, no se notan ni sus tradicionales dos almas; ni siquiera tendencias, incluso la desavenencia con el sindicato hermano, con la UGT está superada. Felipe González, con todo su carisma y liderazgo, nunca tuvo un partido tan entregado como lo tiene Zapatero, ni siquiera en octubre de 1982 cuando cosechó 202 diputados. El Consejo Federal del sábado puso de evidencia esa entrega, los críticos estuvieron silentes o ausentes.

Tras las municipales de hace un año hubo quien pidió responsabilidades por el pésimo resultado de Madrid, pero ahora nadie ha dicho ni pío, más allá de recordar que algo habrá que hacer en Madrid y Valencia, donde las ventajas populares superan los diez puntos. Y en Castilla La Mancha que gira a favor de los populares, que ganarán ese gobierno el 2011.

Así que Zapatero tiene “manos libres” (es la expresión más utilizada estos días) para hacer el gobierno que le convenga y aplicar la estrategia política que le parezca.

Pero la legislatura no viene fácil: en el plano político llevará mucho trajín el nuevo modelo de financiación autonómica, que presenta más aristas que la revisión de los Estatutos. Y la situación económica deja menos margen para compensar las reivindicaciones políticas. Además la cuestión del agua (la sequía) y la energética (con el petróleo a precios imposibles) suponen desafíos incómodos para cualquier gobierno.

A más poder, más responsabilidad, más riesgo de que ante cualquier tropiezo o dificultad el culpable inmediato sea el que manda, es decir este Zapatero que acumula más poder que cualquiera de sus predecesores al frente del socilismo español.

El sistema electoral como excusa

El sistema electoral español nació de un consenso preconstitucional que habilitó las elecciones del 15 de junio de 1977. Fue uno de ,os sillares de la transición. Los muñidores tuvieron muy presentes los males del modelo pluripartidista de la Restauración que tanta inestabilidad política generó (menos de un gobierno por año entre 1876 y 1931) y evitaron los riesgos de un sistema mayoritario a la francesa. Optaron por un modelo proporcional corregido para propiciar estabilidad y mayorías razonables, que ha funcionado sin tropiezos ni enmiendas durante más de 30 años: 10 elecciones generales, 8 municipales y un centenar de autonómicas.

El sistema recibe críticas recurrentes y la acusación de causante de los males de la política. No comparto ese criterio, más bien todo lo contrario. Ningún sistema es perfecto de manera que el mejor es el menos malo. El nuestro es de los menos malos. De los diez partidos que han obtenido representación en el Congreso, ocho ajustan con bastante precisión porcentajes de votos y de escaños:

*PSOE 43,6% (votos) y 48,3% de escaños (prima de 16 asientos)

* PP 40,1% (votos) y 43,7% de escaños (prima de 14 escaños)

* CiU 3,05%(votos) y 3,14% de escaños (pérdida de 1 escaño)

* PNV 1,2% (votos) y 1,71% de escaños (prima de 2 escaños)

* ERC 1,17%(votos) y 0,86% de escaños (pérdida de 3 escaños)

* BNG 0,82%(votos) y 0,57% de escaños (pérdida de 1 escaño)

* Canarios 0,65%(votos) y 0,57% de escaños (efecto neutral)

* Na-Bai 0,24% (votos) y 0,29% de escaños (efecto neutral)

Sufren perjuicio los partidos con implantación nacional pocos voto disperso:

* IU 3,8% (votos) y 0,57 de escaños (pérdida de 11 escaños)

* UPD (Rosa Díaz) 1,2% votos y 0,29% escaños (pérdida de 3 escaños)

* Otras formaciones 7,12% de votos, ningún escaño (pérdida de 24)

Cualquier otro sistema, desde luego que el mayoritario, concluiría con desajustes semejantes y en muchos casos más graves. El sistema actual no prima a los nacionalistas que no serían excluidos (como algunos pretenden) con un distrito nacional, tal y como acreditan las elecciones europeas que utilizan esa modalidad.

Incluso el añadido al actual modelo de un distrito nacional para aprovechar los restos perdidos añadiendo más escaños no produciría cambios significativos. La Universidad de Granada ha estudiado ese efecto y el resultado final es semejante al vigente.

De manera que dejen en paz un sistema que funciona. Quizá lo más provechoso sea introducir democracia interna y transparencia en los partidos. Por ejemplo algo semejante a lo que se requiere a las sociedades cotizadas, que los anglosajones califican de públicas por su responsabilidad social.

Rajoy se pone gallego

En junio, la víspera del Congreso del PP (el que tocaba el pasado septiembre que se aplazó por las elecciones) el candidato Rajoy desvelará la composición de su equipo de dirección. Mientras tanto habrá oportunidades para que surjan otros candidatos y para que los pretendientes se coloquen y hagan méritos. Rajoy se ha dado un mus negro durante un par de días, habilitando un tiempo propicio para las conspiraciones, para que el personal enseñara sus cartas y se ofreciera, generoso, a rellenar el vacío, con afán de servicio para liderar el partido y levantar las banderas caídas.

Nadie se atrevió a moverse; por si acaso reiteraron que Mariano merece más tiempo, más oportunidades. Se movieron los subalternos, sobre todo los mediáticos, por cuenta propia o ajena. Pedro J y Anson, por ejemplo, en uso de su propio criterio, decretaron que Rajoy (a pesar de su honradez y bonhomía) tiene que irse a casa y dejar espacio a otro personaje. No desvelaron su candidato aunque cabe intuir por donde van sus preferencias.

Rajoy ha tomado su propia decisión, nadie le negará que abre el juego sometiéndose a un Congreso con barra libre para que salten competidores. No será fácil que salten, Rajoy es el candidato oficial y cuenta con el aparato. De manera que vamos a una revalidación del líder para disgusto de unos cuantos que aspiraban ascender, que estimaban que era su momento.

Estos días el candidato del PP se ha puesto enigmático, ha amagado varios movimientos para excitar a sus colegas. Ayer aludió a “su propio equipo” dando a entender que hasta ahora ha tenido otro equipo. Las conspiraciones más o menos sutiles, más o menos por personas interpuestas, van a estar a la orden del día en la sede del PP y en sus principales subsedes con poder lo largo de los próximos noventa días. ¿Donde se celebrará el Congreso? ¿Madrid, Valencia o Santiago? ¿Quién será el portavoz parlamentario? ¿Y el secretario general? ¿Que será de Acebes y de Zaplana? A Rajoy le quedan enigmas por despejar, incluso puede tropezar en el camino y ser víctima en su propio congreso de ratificación y rectificación.