El universo de las apps se ha adaptado poco a poco a la afición a las series de televisión, al igual que las redes sociales, y el mundo en general: ya son una parte insustituible en nuestra vida diaria, en nuestro modo de relacionarnos y en nuestra cultura popular. Ya conocíamos aplicaciones tipo TVShow Time, que te ayuda a llevar un control de los episodios vistos y hacer recomendaciones, pero Linggers, que se lanzó en España y parte de Latinoamérica hace unos días, incluye una función nueva: conocer gente a través de chats en función de las teleseries que nos gustan, ya sea en grupo o de forma privada. ¿Pensabais que las apps de ligue ya habían dado todo lo que tenían que ofrecer? Esta al menos cuenta con un punto de partida original. Tal vez demonicéis estas plataformas o dudéis de que sirvan para dar con alguien interesante, pero si comentamos series en Twitter, ¿por qué no probar a hacerlo a través de Linggers?
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¿Una boda a lo ‘Juego de Tronos’? Ya se le ha ocurrido a esta fotógrafa
Ya sabemos que el mundo de las series de televisión puede inspirar las ideas más fascinantes de los fans. Hace solo unas semanas recordábamos los pósteres vintage, basados en portadas de cómics, que un diseñador había realizado a partir de cada capítulo de Black Mirror; o los famosos personajes simpsonizados de Adrien Noterdaem, aplicados a Westworld esta vez; o la cabecera setentera de Arrow, diseñada al estilo del Batman seriéfilo antiguo. Todo es posible en el universo del cosplay y la fanfiction, hasta una boda de Juego de Tronos. Esta celebración es algo peliaguda en el imaginario de los Siete Reinos, sobre todo porque una de sus uniones más famosas va acompañada de traiciones y puñaladas, pero seguro que a muchos incondicionales les encantaría enfundarse las pieles o casarse a lo Daenerys.
Si es vuestro caso, la frikada que se le ha ocurrido a esta fotógrafa estadounidense se colará en vuestro top 1 de opciones de bodorrio. Hablamos del trabajo de Katherine Elena, que recreó Poniente en Smithmore Castle, en Spruce Pine, Carolina del Norte, y desde entonces ha sido la sensación en redes sociales y en varios medios de comunicación. El equipo de esta profesional, especializada en reportajes fotográficos de bodas, no dejó al azar el más mínimo detalle: el vestuario está inspirado en personajes como Daenerys Targaryen y Sansa Stark (que hasta se ha traído su huargo), así como el diseño de las invitaciones, la vajilla, cubertería y cristalería, la decoración de las mesas… ¡Incluso la comida y la tarta nupcial! Echadle un vistazo a las imágenes más sorprendentes y al vídeo de preparación de la velada.
‘Sexo en Nueva York’: esta cabecera alternativa no contaba con el icónico tutú
Hay imágenes icónicas que pasan a la historia del cine y la televisión de la forma más improbable. Una de las escenas que han marcado el imaginario de las series modernas es esa en que Carrie Bradshaw camina por Manhattan, vestida con un tutú, y un autobús que anuncia su columna periodística la salpica de agua. En ese universo catódico alternativo formado por las decisiones que no se tomaron, esta cabecera de Sexo en Nueva York nunca existió, y sí la que ha desvelado el portal Entertainment Weekly, que además ha hablado sobre ello con Darren Star, el creador de la ficción de HBO, con Sarah Jessica Parker, la actriz que dio vida a esta particular heroína de los 90 (que hace unos meses pudimos ver en Divorce) y con Patricia Field, diseñadora de vestuario de la misma. Podéis echar un vistazo al vídeo, pero no intentéis subieron el volumen: no tiene audio.
En este otro opening que barajó el equipo de Sexo en Nueva York, Bradshaw aparece también por las calles de Nueva York, pero con cambios notables. «Había dos vestuarios. Uno era el tutú rosa, y otro del que pasamos en el que Sarah Jessica viste un vestido azul; el autobús no la moja, pero ella se tropieza al verse a sí misma en el anuncio», comenta Darren Star a EW. «Fue una gran elección [la cabecera original], ya que en cierto modo es como si la vida de Carrie fuera un baile a través de Nueva York». El mítico tutú tiene su propia leyenda, pues según cuenta la intrahistoria de la serie, fue un capricho de Patricia Field, que lo encontró a un precio rebajadísimo, cinco dólares, porque nadie lo quería. «Sara Jessica y yo luchamos por él, y Darren dijo ‘está bien, pero quiero otras opciones de vestuario», ha explicado Field. Sea como sea, acertada o no, es una secuencia inolvidable para los amantes de las series de televisión.
‘Twin Peaks’ desvela las primeras imágenes del regreso: ¿estará a la altura?
Si hay una fecha que guía nuestra esperanza friki en este 2017 tan prolífico en lo que a series se refiere es el 21 de mayo. En la noche de ese casi ya veraniego domingo Showtime estrenará la tercera temporada de Twin Peaks, el revival más esperado (con permiso de Expediente X) de los que se han anunciado en los últimos años. Lo cierto es que la noticia nos pilló de sorpresa, pues no pensábamos que David Lynch accediera a comprometerse en un proyecto cerrado casi 30 años después del debut de su serie maestra. Al parecer, fue Mark Frost, colega y cocreador de la ficción, quien le convenció de tal hazaña, y tras varios desencuentros con la cadena, el director se puso a los mandos de la coescritura y la dirección de los 18 capítulos que compondrán el regreso. ¿Qué encontrará el agente Cooper en su retorno a la ciudad maldita?
Pocos detalles argumentales sabemos sobre la entrega extra de Twin Peaks, pero las primeras imágenes oficiales nos dejan ver, al menos, qué actores y personajes aparecerán. La revista encargada de mostrárnoslas ha sido, cómo no, Entertainment Weekly, popular por sus portadas y reportajes exclusivos. El número de abril se ha lanzado con tres covers, una protagonizada por Dale Cooper (Kyle MacLachlan), Audrey Horne (Sherilyn Fenn) y Laura Palmer (Sheryl Lee); otra por Shelly Johnson (Mädchen Amick), Norma Jennings (Peggy Lipton) y Bobby Briggs (Dana Ashbrook); y la última por James (James Marshall), Big Ed (Everett McGill) y Nadine Hurley (Wendy Robie). Además, podemos echar un vistazo a otras fotos, ya episódicas, en las que también aparecen el propio David Lynch, que dio vida al agente del FBI Gordon Cole, el ya fallecido Miguel Ferrer, y David Duchovny en el papel de la agente Denise Bryson.
La peor escena de ‘Juego de Tronos’, según David Benioff y D. B. Weiss, sus creadores
En los últimos días nos han llegado varias noticias interesantes sobre las temporadas finales de Juego de Tronos, que han coincidido además con el panel de la serie en SXSW, South by Southwest, un festival de cultura popular que se celebra en Austin, Texas. Por un lado, sabemos que la última entrega de la ficción de HBO tendrá menos episodios que las anteriores, como ya imaginábamos, y que serán solamente seis; por otro, que el popular cantante británico Ed Sheeran participará de forma especial en la ficción, uniéndose a otros músicos que ya han hecho su particular cameo. Otra de las curiosidades que hemos conocido gracias a esta reunión de fans, a la que acudieron Sophie Turner y Maisie Williams, las hermanas Stark, junto a David Benioff y D. B. Weiss, sus creadores, es la escena que más les sonroja a estos últimos. Para sorpresa de muchos (o no tanto), no es ningún momento clave en el recorrido de la serie.
David Benioff y D. B. Weiss se refieren a esta confesión como «la peor escena» que han escrito «y probablemente una de las más vergonzantes». ¿Alguna apuesta? Hablan así del momento del primer episodio de la serie en que aparecen Jon, Robb y Theon semidesnudos, conversando mientras se afeitan. Lo que puede parecer una exigencia de HBO para meter algo de carnaza y enganchar a la audiencia desde el capítulo inicial era en realidad una maniobra de continuidad; como el episodio en cuestión fue regrabado un año después de la primera versión, los actores debían aparecer afeitados para que no se apreciara cambio físico. «Si te fijas bien, puedes ver que están los tres metiendo tripa. Estaban todo el día haciendo flexiones entre toma y toma», contó Weiss en su aparición en el SXSW. Podéis ver la escena comentada más abajo, con las bromas de los productores.
¿Qué podemos esperar de ‘Iron Fist’, la inminente serie de Marvel y Netflix?
La semana que comienza mañana será esa en la que por fin podamos echar un vistazo a lo nuevo de Marvel y Netflix. Iron Fist, la cuarta de las ficciones de la plataforma dedicadas a los personajes de la franquicia comiquera, la última antes del estreno del megacrossover The Defenders, se estrena el viernes 17 de marzo y lo único por lo que nos podemos guiar, aparte del propio tráiler, son las reviews que ya han publicado algunos medios anglosajones y españoles. Lo cierto es que las sensaciones no son buenas: el desgaste creativo de la saga, que a pesar de lo interesante de su tono adulto es algo redundante, además de las críticas raciales y de apropiación cultural de algunos sectores (ven una oportunidad perdida de haber fichado a un actor asiático para el personaje; no es white-washing como tal, ya que Danny Rand es en origen blanco), amenizan un lanzamiento que ya de por sí no generaba mucha expectativa.
¿Cuáles creo que son los principales escollos de Iron Fist (protagonizada por Finn Jones, al que conocemos de Juego de Tronos, y creada por Scott Buck, de Dexter), y por qué son motivos importantes por los que puede no funcionar? En primer lugar, la coartada política con la que se crearon las series de Netflix y Marvel ya no está existe; Daredevil abordó la corrupción institucional y moral, Jessica Jones el abuso y la violencia sexual contra las mujeres, y Luke Cage la discriminación racial y la blaxploitation. ¿Qué nos va a contar Iron Fist? En segundo lugar, que Netflix ya no nos la cuela en el género de superhéroes. Son series con premisas y debates estimulantes, pero que en las tres ocasiones han derrapado con conflictos repetitivos y capítulos de más. ¿Alguna esperanza? Que Luke Cage me gustó tanto o más que Jessica Jones, y que es un peaje necesario antes de ver The Defenders, proyectada para el verano.
‘Buffy Cazavampiros’ cumple 20 años: cinco motivos por los que fue una serie revolucionaria
Tal día como hoy, un 10 de marzo, en 1997 vio la luz en la cadena The WB Buffy Cazavampiros, una serie considerada en su momento minoritaria, por sus personajes y por sus coordenadas genéricas (fantasía, ciencia ficción y adolescente), a la que el tiempo, los fans y los académicos acabarían por poner en su sitio. Creada por el aclamadísimo Joss Whedon, la ficción que cumple 20 años se considera hoy un hito televisivo, por sus temas, por sus protagonistas, pero sobre todo por hacer de la diferencia una bandera de la que enorgullecerse. Repaso cinco de las razones por las que Buffy Cazavampiros fue una serie revolucionaria.
1. El protagonismo femenino
¿Una serie en la que la guapa del instituto se pone a dar mamporros a presencias diabólicas? Joss Whedon ha sido siempre ágil a la hora de reinventar ciertos arquetipos, y la protagonista femenina de Buffy Cazavampiros no solo es la más recordada de su trayectoria, también una de las más influyentes de la televisión moderna. Sarah Michelle Gellar dio vida a una heroína valiente y compleja que todavía hoy se reivindica desde los estudios feministas y de género.