Sus orgasmos tenían, sin lugar a dudas, un rasgo muy marcado de su personalidad. De carácter sumiso, callada y vergonzosa, al llegar al orgasmo, Francisca inclinaba la cabeza hacia abajo, cerraba los ojos y sonreía con dulzura. Sonreía como si estuviese en un sueño. Sonreía como quien añora. Se relajaba sobre mi cuerpo y se dejaba llevar, moviéndose pausadamente como el trigal en la brisa. Luego se recostaba a mi derecha, usaba mi brazo como almohada y se acurrucaba. Yo la abrazaba todavía agitado, deseando que me diga lo mucho que me amaba, lo mucho que disfrutaba revolcarse sobre mis sábanas, lo mucho que me extrañaba cuando no estaba conmigo. Y esperando, entregado a su maquiavélico silencio, me quedaba dormido y soñaba con ella. Al despertar, Francisca siempre estaba a mi lado y en la misma posición. Cuidadosamente, sin que ella se despertara, yo volvía a guardarla en su caja.
¿Tamaño natural?
https://www.youtube.com/watch?v=qiYjct2OseA
09 agosto 2011 | 15:42
Que sea amor, puédase,
lo que este hombre sentía
por su callada muñeca
la que en silencio lo hacía,
y que llegado al orgasmo
levemente sonreía,
como un poco avergonzada,
con la cabeza inclinada
mirando fijamente al suelo
quizás a la lejanía.
Nunca un beso suplicaba,
tampoco caricias pedía.
Dormía acurrucada,
toda la noche de un tirón
y sin cambiar ella de postura,
sin protestas por ronquidos,
sin decir no, si él insistía
el repetir varias veces.
Ella, como lo era siempre
dejándose de querer,
calladita, complaciente
y sin perder esa sonrisa,
que siempre en su rostro tiene,
incluso en la caja metida.
Solo tiene dos inconveniente;
no se la puede morder,
nada de hincarle un diente,
ni arañarle las espaldas,
se te irás por la ventana
mientras, va perdiendo el aire.
09 agosto 2011 | 16:08
Qué triste es tener que recurrir a una muñeca hinchable… pero si ella hablara aún estaría más triste por ser utilizada, elevada casi al nivel humano y luego verse reducida a permanecer en una caja hasta la próxima vez…
09 agosto 2011 | 16:08
No digo yo que lo de la caja no funcione, pero mejor un par como este: http://www.xxminutos.com/2011/07/lesbianismo-artistico.html para cumplir lo de la variedad y el gusto.
09 agosto 2011 | 16:29
Jjejejejeje, que bueno Walter.
…Qué más se le puede pedir hombre. Pues como tú dices, acorde a su personalidad. Ahora, con lo de sus orgasmos, no hay que obsesionarse, creo que debe ir en la gama que uses, las silenciosas son las más baratas, pero seguro que por algo más, los chinos ya las hacen que aullan y hasta arañan.
Buena sorpresa final.
Es triste tener que recurrir a esto, sí, pero no por ser una muñeca hinchable que al fin y al cabo es un juguete diseñado para dar placer.
¿Qué juguete no estaría satisfecho de saberse exitoso? Bueno, al menos los de Toy Story es lo que daban a entender. Es que si no, no tendría sentido que existieran los juguetes sexuales, pero si hay demanda es porque cumplen su labor.
Eso sí, no me veo yo hacendo un trío como dice el de MEJOR A PARES.
09 agosto 2011 | 16:49
Hay que tener mucha imaginación y fantasía para abrazar a una muñeca y esperar que te diga que te ama.
Yo creo que fue aproximadamente a los 7 años de edad cuando desistí de que algo artificial e inerte me demostrara emociones.
Esta claro Francisca hace un buen apaño.Pero no dejará de ser eso, un apaño.
09 agosto 2011 | 20:10
Yo tengo la sensación de que ella no te dice cuanto te quiere y lo bien que se lo ha pasado contigo porque tú eres muy serio al decir su nombre.
Quiero decir que si en lugar de llamarla Francisca, que parece el nombre muy….. a ver como lo digo, así como muy formal, muy de DNI, nómbrala de otra forma. Cari, cielín podrían servir, aunque puedes ir a sus diminutivos. Por cierto que hay unos cuantos.
Podías decirle Paquita, o Currita o Kika, o Franqui. Suena más tierno y a lo mejor ella te siente más cariñoso e íntimo. Vamos que le da un ramalazo de vida a la muñeca y se torna humana.
Prueba, prueba, que a lo mejor esa es la clave para tornarla humana. Cosas más raras se han visto
09 agosto 2011 | 20:27
Bueno esto hoy no tiene desperdicio… ni el post, ni el enlace, ni los comentarios
Definitivamente la soledad no es buena consejera.
A mi me parece triste y a la vez egoísta llegar a esos extremos., por mas que me digan que este tipo de “cositas” tienen demanda y cumplen su labor.
Es triste porque hay un montón de gente esperando una palabra, un gesto de cariño por parte de cualquier ciudadano (un alto porcentaje de los sicópatas sufren o sufrieron de abandono familiar y social) y al no obtener nunca nada, se vuelven unos seres egoístas (esto en el mejor de los casos) que no dan ni exigen y llenan esa carencia afectiva con lo que sea.
…“entregado a su maquiavélico silencio”…
Marisa, ¿te imaginas que en ese momento la «niña plástica» diera un profundo suspiro y con ojos tiernos le dijera a Walter lo bien que la pasó? jo— 🙂
10 agosto 2011 | 02:18
debe ser triste tener que recurrir a la muñeca,…
–
pincha y consulta regalos por la nomina que dan los bancos
10 agosto 2011 | 09:20
Eso es lo bueno del sexo, que con la mente lo podemos disfrutar siempre que queramos…
http://rockefellerinternet.blogspot.com/
10 agosto 2011 | 13:33
Gracias por este maravilloso blog que me parece también muy interesante, con una interfaz agradable, fácil navegación. Es realmente genial! Felicitaciones y buena suerte
amistoso
10 agosto 2011 | 13:35
ana… estoy contigo en el aspecto de que es un tanto egoista, no sé si vamos por el mismo camino, pero al fin y al cabo es un juguete y el hecho de que se le de forma y cuerpo femenino, no debería de animar el producto más de lo que su fin persigue. Creo que todas las chicas os lo habéis tomado como un desperdicio emocional cuando es puro sexo. En caso de que se lo llegara a tomar por otro lado, sí sería para ver a la persona como enferma.
Para el sexo femenino, sin embargo ha habido toda la vida juguetes incluso hortalizas y nadie se ha enamorado de un pepino. 🙂
De todas formas, está claro que hay quien recurre a algún apaño de este tipo, personas inseguras, despechadas, aburridas de su vida sexual o simplemente inadaptadas.
Lo curioso es que, ahora, en la era en que más está el sexo al alcance de todos, sea la era del Tupper-sex.
¿Simbolo de liberación, o de soledad?
10 agosto 2011 | 15:50