Reportero: periodista que a fuerza de suposiciones se abre un camino hasta la verdad, y la dispersa en unatempestad de palabras (Diccionario del diablo - Ambrose Bierce)El cómo se hizo de los reportajes de 20 minutos...

Uter Chocobom (¡qué bueno!) O el Estado del parto o el parto de Estado

…Finalmente hablé con la SEGO. «Por dios, las gasas y el rey». Al teléfono, su presidente, el doctor José Manuel Bajo Arenas. Muy a la defensiva (o será su carácter, y yo un sensiblón). Algo me decía que no íbamos a tener una conversación agradable. El teorema de la pitbulización de las masas, ya saben. Pero las cosas no salieron tan mal:

«¡Hombre, me alegra que ya no lo llamen parto natural sino respetado! ¿Qué diablos es eso del parto natural?. Es cómo decir que el cuerpo es natural y por ello no necesita medicamentos, ni cirugía, en caso de problemas», suelta con voz ronca y agresiva.

Tiene lógica. A los 12 años me operaron de apendicitis. Imagínense si hubiera sido un Neardenthal. Habría engrasado las filas prehistóricas de mortalidad infantil. Enterrado en mi cuevecita entre llantos tribales. Mi padre inmortalizándome con enorme cabezón en las paredes. Y miles de años más tarde, Arsuaga especulando sobre mí. «Este niño fue devorado por su propia familia, ¡canibaaaalismo!» «Coño, no, Arsuaga, que tenían hambre y yo ya estaba muerto»

«¿Qué me dice del elevado número de episiotomías?», insisto, luego existo.

«¿Las han contado o qué? Nadie puede saber si un parto se va a torcer a priori. Lo único importante es la seguridad de la mujer. ¿Qué quieren, que se mueran como en el Tercer Mundo?», arremete.

Tenemos ya algunos elementos críticos en este puzzle: la seguridad y el miedo. Eros y Tánatos. El miedo de los médicos para que no les corneen y los inhabiliten de por vida. El miedo de muchas mujeres que les hace confiar ciegamente en el sistema médico y no en su cuerpo. Y en tiempos del miedo siempre prima la seguridad. Es comprensible y lógico. Miren sino la pax romana de EEUU.

Seguimos con la conversación…

«Ni que nosotros defendiéramos las episiotomías…», insiste Bajo Arenas, luego también existe.

Ya me imagino, eso de rajar por rajar, es propio de Jack el Destripador o de los Tutsis y los Cut-sis…(pienso)

«El tipo este de la OMS, el de las famosas recomendaciones, lo expulsaron de la organización por malversador de fondos».

Falacia ad hominem. Ay, pillín. Las recomendaciones siguen allí.

«¡Que vengan los señores de la OMS y vean un parto real! Ellos buscan un ideal. Si viene todo bien, el niño sale de su placentilla, etc… vale. Pero cuando empiezan los líos…»

La conversación acaba pronto. El doctor tiene prisa. Promete enviarme todo lo que ha escrito sobre el tema, y así lo hace al día siguiente. Estoy agradecido. Pero sigo preocupado. Dos posiciones enfrentadas, a priori… Escribo esto para empezar a entenderme a mí mismo y al reportaje:

Regresar al útero. No para hallar la paz, sino para encontrar respuestas (el origen de la polémica). ¿Nacemos mal? Numerosos colectivos denuncian la excesiva medicalización del parto y que no se cumplen las recomendaciones de la OMS.

¿Se pueden cumplir con estos protocolos en España: disminuir el uso de cesáreas, más protagonismo de la madre, evitar la episiotomía (corte en el periné para impedir desgarros)…?

Volver a nacer. «Pedimos un parto respetado para la madre y el bebé. Que se cumpla lo que dice la OMS, el parto no es una enfermedad, y no debe ser tratado como tal», sintetiza Ibone Olza, médico psiquiatra, y autora del libro ¿Nacer por cesárea?. Es la fundadora de El Parto es nuestro, una de las muchas asociaciones que han dilatado sus acciones en los últimos años gracias a Internet.

En la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (Sego), en cambio, consideran estas denuncias un desgarro utópico. «La OMS busca un parto ideal. Que vengan y vean uno real. Lo importante es reducir la mortalidad, y tenemos unas tasas bajísimas», alega su presidente, el doctor José Manuel Bajo Arenas. Contracciones, dolor, oxitocina ideal…

¿Qué hacer? Necesitaba un punto de vista aleatorio y neutro. Un punto de vista (experto) pero que me hablase desde su posición personal, gratuita, su experiencia sin tapujos. ¿Dónde encontrarlo? Es cuando empiezo a pensar… un momento, yo no nací por generación espontánea, no soy una mosca de la carne (si acaso cojonera), estuve en un útero, sí ¡pasé por el mismo trance…! Ommmm. Ay, madre ¿seré un malnacido….? De ahí el irónico título del reportaje.

Dos posiciones, a priori, enfrentadas. Por eso lo de regresar al útero. Romper a llorar como en la primera vez. Mi nacimiento…9.00 horas. Huesca. Estamos en el 9 de noviembre de 1978. Llamo a la puerta magenta. Maribel Escartín ha roto aguas. Pertenece a la generación del anestésico Pentotal. Pronto se producirá un parto definido por el ginecólogo como «estándar».

Javier Rada

10 comentarios

  1. Dice ser javier

    Olé, me ha parecido iluminador. Sólo una cosa, lo entendiste a la segunda lectura 😉

    13 julio 2006 | 2:56

  2. Dice ser Sonrisa Radiante

    A favor del parto natural, mi abuela tuvo 10 hijos en su casa de forma natural con una matrona y algunos con complicaciones en el parto todos vivieron uno murio muy temprano y otro por enfermedad pero ya de adulto.Así que desde auí reivindico el parto natural, fuera epitosomías y césareas en casos que hagan falta por supuesto por la salud de la madre y el bebe.Gracias por el texto de hoy y dale ánimos a José Ángel que se de un paseo por el retiro se relaje, cante su cancion favorita.Sonrisas para todos.

    13 julio 2006 | 6:38

  3. Dice ser irene

    Gracias Irene (que raro me suena, parece que me doy las gracias ami misma:))esque no tengo ni puñetera idea de como funciona, de hecho se lo que es una episiotomia porque he visto el dibujo que si no ni eso…yo siempre lo habia pensado, ¿parir en esa postura no debe ser muy comodo ni muy propio, lo logico seria parir de cuclillas ¿no? lo vi en la peli de «en busca del fuego» que se supone son homo sapiens o neandertales y la tipa pare en cuclillas, la vi muy pequeña y se me quedo grabado pero luego vi un reportaje sobre namibia y habian dos mujeres cuidadas por ancinas que parian en cuclillas tambien apoyandose en arboles y las matronas cuidaban de que el bebe no cayera de cabeza al suelo….tambien me han dicho lo de parir en el agua…no se, debe ser toda una aventura…a mi me gustaria parir uno y adoptar otro…asi solo sufro el parto una vez..jejejej no se, da un pelin de miedo cuando ves un paritorio con esas luces, el instrumental, todo el mundo envuelto en scotex y todo verde…no se..gracias por la clase magistral amiga (esque lo de tocaya me suena mu mal)

    13 julio 2006 | 10:18

  4. Dice ser La otra Irene

    Lo entendí a la primera ;), la segunda ya fue por pura obsesión, jejeje, claro, que yo ya llevo mucho background del tema. También conozco alguna mujer que parió a sus hijos bajo los efectos del pentotal. Dale muchos besos a tu madre.La postura, Irene, es una de esas cosillas que la OMS califica como «claramente perjudiciales y que deberían eliminarse», pero nada, aquí seguimos pensando que lo de la OMS sólo son recomendaciones de mínimos y que por tanto sólo valen para el tercer mundo. Desgraciadamente en cuestión de partos estamos mucho más cerca del Tercer Mundo que del primero, aún así, a los tocólogos españoles les pasa algo raro y si los usuarios no demandan un cambio de actitud, está visto que ellos no van a dar el primer paso, con recomendaciones de la OMS o sin ellas, se sienten cómodos, ganan dinero, ganan demandas por negligencia (ellos mismos son los peritos) y siguen usurpando a las mujeres el poder de parir y a las matronas el poder de realizar su trabajo. Como eres muy joven te recomiendo que cuando quieras tener hijos te informes mucho, ahora con internet es muy fácil informarse, sólo hay que querer, la información quita muchos miedos.Y ayer se me olvidó decir, que, pese a quien pese, en el «primer mundo» nuestro la principal causa de muerte materna intraparto son las cesareas y las complicaciones debidas a las anestesias, pero principalmente las cesareas.Más saludos.

    13 julio 2006 | 10:55

  5. Dice ser La otra Irene

    Hola, me daban ganas de dejar el post así «sin comentarios», (dedicados al Dr. jeje), pero soy una charlas y nunca me puedo resistir. A ver que puedo yo decir para continuar con el debate, que, me encanta, lo reconozco.Para empezar, gracias por el artículo, lo he tenido que leer dos veces porque la primera me pareció un poco caótico :P. Algo malo pasa en España con los partos y lo peor no es que el Sr. Bajo Arenas lo niegue una y otra vez, lo peor es que la mayoría de la gente no lo sabe. Algo malo pasa porque en España se medicaliza el 90% de los partos, el 90% van con episiotomía de regalo y un 40% o más de ellos acaban en intervenciones muy gordas, como cesáreas o fórceps, (datos que ofrece la SEGO en su web) y que, afortunadamente suelen no tener consecuencias fatales, por suerte la medicina ha avanzado mucho. Pero no son justificables, es imposible que un 40% de las mujeres que paren en España, sean de donde sean, no puedan parir sin intervenciones casi divinas que además no son ningún chollo, ni son el precio que hay que pagar por tener hijos sanos, y por eso no deberían ser el precio que hay que pagar por tener hijos, sean como sean. Comentando el otro post, lo del taller mecánico, no se trata de reducir la mortalidad materno-infantil al mínimo industrializando los nacimientos, se trata de manteniendo esa mortalidad mínima, reducir la morbilidad. No es lo mismo y España con su 40% de partos distócicos y su 90% de episiotomías gratuitas tiene una morbilidad muy muy alta, que además sale muy muy cara y es muy muy desagradable. Eso se consigue desmedicalizando el parto. Muchos países de nuestro entorno hacen esfuerzos para ello y algunos hospitales españoles incluso lo están consiguiendo, a pesar de las presiones para extender el uso de la epidural, a pesar de los miedos de las mujeres y a pesar de los prejuicios de los médicos. Medicalizar TODOS los partos por rutina es caro y es perjudicial y sólo responde a necesidades económicas o logísticas del sistema o del profesional que te atiende.El Sr. Bajo parece no recordar que los señores de la OMS no son unos viejos cascarrabias malversadores de fondos que tienen una tirria especial a los españoles y que, como no saben en que entretenerse, se dedican a reunirse de cuando en cuando para ver cuánto más se puede rebajar la tasa de cesareas innecesarias y cómo de mucho nos van a fastidiar, siempre suena un poco el Sr. Bajo a «mamá, la seño me tiene manía» y «antes sí que estabamos peor». Resulta que los señores de la OMS se reunen, comparan datos científicos, que salen de estudios hechos en países desarrollados, miran a su alrededor a ver qué ocurre, y luego van y piensan «Si los noruegos pueden, cualquiera con sus mismos medios, puede». Y los muy espabilaos van y lo cascan, y el Sr. Bajo se rebota y empieza a soltar lo típico sobre los partos naturales en África, sobre lo de parir en la selva y blablabla. Va a ser que existen las utopías, sólo que, como siempre, están al Norte de los Pirineos.Y por último a mi tocaya, no tengas miedo, mujer, la desproporción cefalo-pélvica es algo muy raro en un parto desmedicalizado, en el que te puedes mover y adoptar las posturas que te de la gana, se respetan tus tiempos, no se usan drogas acelerantes y sobre todo, no se te hace parir tumbada patas arriba. Y además, la DCP no tiene nada que ver con la talla del pantalón, tiene que ver con el hueco de la pelvis y con la cabeza del feto, no con la grasa acumulada alrededor de las caderas, ni siquiera con lo ancho que sea el hueso.Y ya me callo.Saludos.

    13 julio 2006 | 12:56

  6. Dice ser javier

    Yo en cambio no tengo tan claro una total desmedicalización del parto. El parto es casa es una realidad ascendente en nuestro país, y hay buenos profesionales (ver…www.nacerencasa.org), pero puedo comprender el miedo, lo que decía mi madre (nacer sin dolor y dejarse llevar), intentar rebajar los riesgo de este trance. Por lo dicen muchos colectivos la medicalizacion excesiva crea más problemas de los que soluciona, sin embargo, es utópico que todo el mundo tenga que irse a nacer en casa, porque eso no va a ocurrir. ¿Un equilibrio? ¿Un punto de retorno? ¿un regreso al entendimiento entre la práctica médica y los sujetos activos del parto: madre y bebé? La mayoría de ginecólogos o matronas con los que hablé estaban de acuerdo en las reclamaciones de asociaciones como El parto es nuestro. Sin embargo, tal como está montado el sistema sanitario les parecía muy difícil hallar soluciones…Gracias una vez más por vuestra opinión… y por los besos a mi madre y a José Ángel. Creo es el momento del último post sobre este tema… mi nacimiento, Casilda Rodrigáñez y mi ginecólogo (bueno el de mí madre)

    13 julio 2006 | 13:36

  7. Dice ser andorra2004

    No creo que la intención sea volver al parto en casa como norma. Eso ocurre en Holanda porque nunca se fue a los hospitales, salvo en casos de riesgo. En los países donde se hizo el camino completo, de casa al hospital y luego ofrecer el retorno a las casas, siguen habiendo un porcentaje bajo de mujeres que acceden al parto en casa, aunque sólo sea porque requiere una cantidad de matronas disponibles que no hay prácticamente en ningún país.La solución pasa por cambiar mentalidades, cambiar paritorios por habitaciones en el hospital o en una casa de partos adosada al hospital, y, sobre todo, acabar con la violencia de género que supone el actual sistema contra la mujer. Que los ginecólogos dejen de ver a la mujer de parto como una bomba a punto de estallar que hay que desactivar cuanto antes y usando cualquier medio, y que aprendan que hay otra forma de relacionarse con sus pacientes sin imponer la jerarquía médico/matrona/enfermera/celador/mujer de parto.Cuando nos quejamos de que si una mujer va con un infarto o piedras en la vesícula a un hospital, es muy probable que se vuelva a casa con una receta de ansiolíticos o antidepresivos (le ha pasado a una amiga el otro día, le costó tres visitas al hospital, unas cuantas dosis del ansiolítico tomadas para comprobar que no funcionaba y mucho apoyo de su marido el conseguir que la tomaran en serio y vieran las piedras), estamos hablando exactamente de la misma discriminación de género. El dar por sentado que la mujer no puede opinar, por sistema exagera ante el médico sobre lo que le pasa, y que sus males siempre son «menores».

    13 julio 2006 | 14:49

  8. Dice ser La otra Irene

    Andorra wapa, mi madre estuvo cinco largos años diagnosticada de «gases», con tres cólicos al mes durante esos cinco años hasta que ella misma decidió que le hicieran una eco y que le diagnosticaran de una vez por todas que tenía la vesícula con más piedras que la catedral de Burgos.La cuestión no es parir en casa/parir en el hospital, vamos que no es blanco o negro. La cuestión es poder parir en el hospital para no tener que asumir los riesgos de parir en casa pero sin tener que asumir los riesgos de parir en el hospital. Hoy por hoy, me atrevo a decir que para una embarazada de bajo riesgo es menos arriesgado parir en casa que tener un parto medicalizado a lo bestia en un hospital (mucho peor en una clínica privada, donde por desgracia te hacen más caso, en este tema hay que diferenciar muy bien cantidad de calidad), y dado que la mayoría de los partos en España están medicalizados a lo bestia, pues debe ser menos arriesgado parir en casa, la mortalidad es la misma, la morbilidad es menor, como poco te ahorras la episio, ese bonito ritual misógino con el que nos recuerdan quien manda sobre nuestros genitales. La cuestión es poder elegir, parir en casa, tener un parto medicalizado con epidural a saco en un hospital mega-enorme con 500 cunas en la UCI para neonatos o parir en un centro especializado, o sea parir en un hospital como si estuvieras en casa. Libertad de elección, eso es lo que ahora mismo no tenemos en España y sí tienen en el resto del mundo civilizado (más o menos). Sinceramente no creo que sea tanto una cuestión de medios, como una cuestión de voluntad y de cesión de parcelas de poder. La logística se cambia si se quiere, se tarda más o menos en cambiar pero se acaba cambiando, tenemos muchos ejemplos alrededor de países que medicalizaron el parto a tope y que están tratando de devolverle su papel a la naturaleza, siempre controlando/observando que no pase nada pero sin tener el control/dirección sobre lo que está pasando (me explico fatal- es primero observar y luego actuar, no como el del chiste que primero te matan y luego cuentan a ver si tenías tres). Son las mentalidades las díficiles de mover. Es curiosa la incidencia de cesáreas tan alta en países católicos y como los países protestantes (a excepción de EEUU, donde la religión es el dolar) han sido capaces de hacer ese cambio. Es curioso que el protocolo de parto dirigido, que es lo que se aplica aquí, se inventara en Irlanda.No todas las lokas del parto queremos parir en casa. Yo no quiero parir en casa, me temo que sería imposible que me liberase de mis propios miedos y de mi faceta de controladora obsesiva, pero tampoco quiero arriesgarme a entrar en un hospital y simplemente por el hecho de que estén saturados, el personal esté desmotivado, no haya camas, sea víspera de puente o lo que sea, me apliquen un protocolo obsoleto y perjudicial que me ponga a mí y a mi hijo en un mayor peligro del que entraña un parto de por sí. No quiero arriesgarme de nuevo, ya lo hice una vez y perdí :).

    13 julio 2006 | 16:39

  9. Dice ser mari

    Bueno me he quedado un poco plasmada porque la verdad estoy de 4m y estoy preparandome fisica y mentalmente para un parto natura pero para asistir a un hospital pero por lo que acabo de leer parese que te lo ponen un poco dificil,grasias por esta publicasion me va ha venir muy bien grasias a dios tendre tiempo para escoje el centro donde permitan mi desicion ya sea publica o plibada,ahuque no deberia ser asi nuestras desiciones tendrian que valer ya que somos nosotras las que pasamos por ese momento.

    08 julio 2007 | 3:47

  10. Dice ser MedusitaRous

    Este señor,Bajo Arenas,no debería estar presidiendo la SEGO,sino la OMS,qué argumentación,oh oh oh,él sí que sabe más que nadie.Desgraciadamente,mientras personas como él sigan con esa actitud desfasada y de desinformación total lo tenemos claro,nosotras,vosotros y nuestros niños y niñas.Es una pena que actualmente,una embarazada tenga que luchar para que se respeten sus derechos y los de sus hijos.Más que a personas,se nos trata como a animales.Y no se nos cuida,se nos tortura.

    03 agosto 2007 | 20:24

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