Me fascinan las artes de ciertas mujeres hechas a sí mismas, feministas según con qué diría yo, que se dejan invitar en los taxis y en los bares y restaurantes, halagadas por la caballerosidad del tonto maromo. Para demostrar su aparente solvencia o independencia de género, suelen hacer uso de un estudiado amago de pagar (abriendo la cremallera del bolso), pero apenas insisten cuando él se adelanta y paga (cerrando al instante la cremallera del bolso). Consideran tal detalle (lo veo en sus ojos de princesa y en su tierna sonrisa) un gesto de protección varonil digno del más azul de los cuentos de hadas.
Acaba la noche y él echa cuentas: Dos taxis, cena con velitas y seis copas: 160€. Al final hubo sexo, pero también lo tuvo con la falsa Carla en el Club Colours por 40€ menos. Carla, incluso, se mostró más atenta.
El tonto maromo me cuenta esto, en confianza, mientras le llevo en mi taxi desde la cama de la princesa hasta la humilde morada de él. El tonto maromo se muestra contrariado. Feliz por su descarga genital; cabreado por su escuálida VISA. Por suerte, el maromo no se podrá permitir volver a quedar con ella y, por lo tanto, ser susceptible de enamorarse. Apenas es mileurista: tendría que ahorrar para una siguiente cita.
– Todas putas – sentencia antes de pagarme el último taxi.
Por supuesto, no todas son putas. Ni mucho menos. Pero no perdamos de vista a las putas encubiertas. Las otras, al menos, son honestas.
Leyendo algunos comentarios (e incluso el propio post), parece que hemos vuelto a lo años 70 del pasado siglo… Y no se trata de feminismos, pero lo de llamar puta a la mujer, lo de irse de putas, lo de pagar el hombre, lo de pagar el hombre sólo por conseguir sexo… no sé, me parece un tema un poco anticuado…
A mi me incomoda en general el momento de pagar, salvo con amigas, amigos o pareja «formal» con los que tengo confianza de sobra para decir quita que pago yo, o venga pagamos a medias, o paga tu anda… me pasa que cuando salgo a tomar algo con otra persona (sea hombre o mujer) a la que hace tiempo no veo o es la primera vez que salimos y se produce el momento ese en que el otro dice al camarero cuanto es, yo saco la cartera y me dice, no no, pago yo, y yo digo, no hombre pago yo, y vuelta que no.. mi pregunta es ¿cuánto debo insistir? ¿queda mal que guarde la cartera? ¿debería seguir insistiendo produciendose una situación ridícula? en serio, este tema me preocupa…jeje. Yo lo que suelo hacer es proponer ir a otro sitio diciendo; venga vale pero a la siguiente invito yo…
Por otro lado cuando he tenido pareja, soliamos pagar cada vez uno, pero si es cierto que muchas más veces él, entonces lo que yo hacía era «compensarlo» siendo más esplendida en detalles y regalos, y no sólo en que los regalos fueran más caros, sino más creativos y originales… y he comprobado que eso era más gratificante para los dos que pagar las cenas.
Ay madre, los quebraderos de cabeza que da el dinero. Saludos!
28 octubre 2011 | 12:56
Eres tan predecible como el que más y tan humano como el que más grandullón.
Yo no dejo que ningún valiente me pague nada a no ser que me convenza diciendome que gana más que yo, generalizando claro. El comentario de Comino Mayor de lo más acertado.
Besitos
28 octubre 2011 | 13:05
Yo partiendo del que el que dice «todas putas», se merece todo lo que le pase, que con ese pensamiento no creo que saque mucho buenos de las mujeres, al final ese tipo de hombres «bocas» va ha amortizar muy bien el dinero, porque si te lo ha contado a tí, sus queridos amigos, tendrán todos los detalles y seguro con otra versión mucho más explosiva donde el quede como un conquistador de damas caras.
Y si no le compensa pues que se ajuste a su bolsillo la próxima vez.
Algunos buscan lo que se merecen, y para lo demás creo que con un poco de sentido común, se pueden resolver muchas cosas, a veces te invitan, otras pagas tú, yo creo que la justa medida es que nadie sienta que el otro es un aprovechadillo, y por supuesto hablar, hay muchas fórmulas y todas válidas.
Y no dar nada por sentado, yo creo que las primeras citas son muy difíciles, porque claro apenas te conoces y no sabes por donde pisas, y bueno yo por lo menos cuando he aceptado una cita era porque el otro me atraía, si no a santo de qué, y a la hora de pagar pues igual intentado utilizar la intuición, yo intentaría pagar a medias, si él me ha invitado y si insiste pues que pague él, si hay una próxima pues pagaría yo y si no me deja, tendriamos conversación acerca de eso para que sepa mi postura y no haya malos entendidos.
Yo siempre he sido muy práctica y si había algún tipo de relación, he optado por juntar lo suyo con lo mío y a ver hasta dónde nos llega, así más ocio y todos contentos, y así sigo lo que entra en casa para los dos, uno gana más que otro pero eso para nosotros, por lo menos hasta ahora, no es importante.
Besos Manchegos y buen puente.
28 octubre 2011 | 13:11
Creo que las conclusiones de tu post son un tanto desafortunadas. Mezclar la idea de prostitución con no pagar una cena… pues qué quieres que te diga. El tío también podría sugerir pagar a medias, si la tía merece la pena no solo aceptará, le parecerá mejor.
28 octubre 2011 | 13:47
Anda que no hay tíos con morro por la vida. Un montón! de esos que se echan mano al monedero y nunca les da tiempo a encontrar el dinero. Si es verdad que hay ciertas ideas preconcebidas relacionadas con la caballerosidad y tal y pascual. Por eso quizás el morro se de más entre féminas.
28 octubre 2011 | 14:13
Estoy totalmente de acuerdo con lo que comentas de este tipo de tías, sin duda.
Pero otro tema, ¿no es triste que los tíos sólo queden para follar y encima saquen cuentas de cuánto les cuesta? ¿qué hay de conocer a la persona y tal????
Sí, ya sé que este comentario es ñoño etc. y que en qué mundo me creo que vivo etc etc, pero es que me voy cansando ya de gilipolleces e hipocresías.
Los tíos quieren putas, profesionales o no. Quieren pagar, en dienero o con favores, amabilidad, una sonrisa o lo que sea a cambio de follar.
Es que soy de las que pagan su parte, y me voy cansando de comentarios por el estilo. ¿Por qué no fijarse en una tía normal y con la que se tienen cosas en común en vez de en la niña mona tonta del culo??? Porque lo que los tíos buscan son putas, no mujeres. Pues a pagar toca.
28 octubre 2011 | 14:19
Yo le cambiaría el nombre al post de hoy. Más bien le pondría «los principes tontos de los cuentos de hadas». Y me explico: lo más normal es salir, tomarse algo, pagar a medias, como mucho dejarte invitar a la primera copa (porque realmente ellos suelen insitir en esto mucho) para acabar paganado tú la segunda y luego si se folla o no depende de como haya ido la noche y del feeling y demás cosas. Esto lo hacemos las personas «normales».
Lo que le he pasado aquí al amigo es lo que suele pasar con las tías cara-duras que nos dan mala fama a las demás, pero, oye, ellas siguen triunfando como la coca-cola y eso será porque a los machos os encantan, así que no os quejéis si os sacan los cuartos, porque estáis encantados de que os vean con «la princesita».
28 octubre 2011 | 14:46
O sea que una mujer que se deja invitar por un hombre y luego acaba en la cama con el, es una puta ?
Y el qué espera ? que se lo ofrezca todo gratis ? o que encima le invite ella a el, porque él le hace el favor de de acostarse con ella ?! Por Dios, señores ! el que algo quiere, algo le cuesta. Muy cómodos, muy rácanos y muy de doble moral son esas ideas machistas. Y eso de llamarlos «señores» solo es un decir, porque esos hombres no tienen nada de señores ni de hombres, son unos desgraciados calzonazos tacaños con ganas desesperadas de echarse un polvo, encima mal hecho y esperan que una se rinda agradecida a sus pies. Sepan esos personajes que a una mujer se le brindan 100 veces mas oportunidades de tener sexo que a un hombre, pues el mundo está lleno de hombres deseosos. Y aparte de eso, gracias a Dios, también está lleno de caballeros y verdaderos señores, no solo de pobres que no llegan a finales de mes y le regatean cada céntimo a la mujer que desean conquistar. Para los que piensan que esas mujeres son unas putas, solo hay una palabra: desgraciados !
28 octubre 2011 | 15:49
Soy la única a la que no le salen las cuentas?? El maromo tonto es además un roñas de tomo y lomo. Una cena a la luz de las velas + dos taxis + seis copas = 160 euros en Madrid?? baratísimo 🙂
Seguro que tomaron al menos un taxi, el tuyo, tu taxi (el post lo confirma) pero cenaron en el chino de la calle Toledo y las copas en el Charada con la oferta 2×1 a partir de las 2 je,je….
No necesito un príncipe que me pague nada, pero tampoco soy una sobrada femitonta que está dispuesta a pagarlo todo y que él se vuelva a casa, con la cartera llena y las criadillas vacías 😀
Muchas de vosotras confunden ser independientes y modernas, con hacer el primo (la prima). No está nada mal, que el chico en la primera cita se curre las cosas en el mejor plan que pueda, incluso siendo caballeroso…
Quedó alguno por ahí?? Me lo reserven, gracias!!!! 🙂
Lobo, va, seré tu fan Nº2 🙂 🙂 🙂
Buen puente a tod@s
28 octubre 2011 | 15:51
Si hay que pagar, lo mejor es pagar por putas las cuales no son mejores pero al menos ofrecen algo a cambio del ninguneo.
A día de hoy, teniendo en cuenta el hembrismo porqueyolovalguista reinante, ser caballeroso es ser un pagafantas. La demanda de putas crece de la mano del rechazo a la mujer hispanistaní, que se ha vuelto intratable.
No me interesa ninguna mujer que espere de mí que sea su pagafantas-billetera. No follan bien, no follan mucho y están casi siempre de mal humor. No es negocio.
28 octubre 2011 | 16:02
Siendo yo del primer tercio
del siglo que ya pasó,
la cosa la veo diferente
y creo tener razón.
En mis tiempos de moceo,
al no trabajar las mujeres
y no percibir un sueldo,
pocas jóvenes tenían
en el bolso algún dinero.
Y menos para invitar
al maromo según lo llama,
algunos que me precedieron.
El hombre era quien pagaba,
no solo a la pretendida,
también corría con los gastos
de la impuesta carabina,
la guardiana del virgo,
que siempre iba acompañando
a la hermana prometida.
Esa era la costumbre
eso era lo normal,
raras veces era lo contrario,
se le trataba de chulo,
y eso se veía tan mal
que ella, el dinero al hombre daba
mucho antes de pagar,
sin que nadie lo notara.
Mis hijos sin ser machistas
lo mismo siguen haciendo,
es lo que ellos vivieron.
aunque yo empecé a romper
dando a mis hijas dinero
una paga cada mes,
mientras sus estudios hicieron
y aún, mucho después.
Mis nietos pagan a escote
eso es, lo que se ha impuesto,
y que lo veo muy bien.
Yo me niego el aceptar
que las mozas de mi tiempo
eran putas encubiertas,
(lo mismo que las casadas
que en sus casas se quedaban)
ya que al no trabajar
no disponían de dinero,
por no tener un salario
ni la paga de papá,
y se dejaban invitar,
por el pretendiente o novio.
28 octubre 2011 | 16:08
100×100 con Menstruator. Van en plan divas, follaremos cuando yo lo diga.
Luego se chinan cuando preferimos a las latinas y a todas las diosas las damos de lado. Al menos las otras le llaman al pan pan al vino vino y al follar por su nombre, además de follar como diosas sin tanto cuento de cenitas y paparruchadas.
Las hispanistanís treintonas de hoy, solteronas todas en la próxima década y pagando putos para que les hagan una puesta a punto. Sin pagar ya no van a follar y se van a tener que meter esos aires de superioridad, por donde amarga el pepino, al menos así les meterán algo jijijiji
28 octubre 2011 | 16:28
Para empezar:
¡Qué se joda, por capullo y boca chanclas!.¿De qué te las quieres dar? Pringado.
¿»Todas putas»? Eso dice mucho del tipo.
Nunca he salido de mi casa a cenar o de copas con alguien ( hombre o mujer) si no llevaba dinero en el bolsillo.No he tenido dinero, no he salido.
Me ha dado igual siempre quién pagará la cena.Lo normal es ir alternado el pago, hoy tu, mañana yo.
Relacionar este tema con el feminismo, me parece una gilipollez.
28 octubre 2011 | 16:44
Día si, día no, hay un tema de putas en este blog.
De tanto hablar sobre el asunto ya tengo máster , ahora voy por la tesis doctoral. No será fácil entre pagafantas-billetera, caballeros andantes, putas si, putas no, pero todo se andará, se andará.
https://www.youtube.com/watch?v=3-7FtgrHBz8
28 octubre 2011 | 16:47
Veis como de todo hay en la viña del señor…casi todos los comentarios que habeis hecho las mujeres aqui han sido en plan, yo no necesito a ningún macho que me page la cena, para que después espere desfogarse encima mio…porque gracias a Dios, las mujeres ahora tienen su indepencia economica, sexual y personal, no dependen del hombre, disfrutan del sexo igual…perdon…mas que cualquier hombre y son libres de elegir con quien, cuando y porque se acuestan con alguien. Tambien es cierto que hay mujeres que, en mi honesta opinion, esa realidad la llevan a un extremo feminista y utilizan su poder sexual erroneamente, complicando las relaciones en su capricho y tratando al hombre, como si fuera su juguete, un panoli y que piensan que todos somos gilipollas.
Pero despues de todos los comentarios vertidos por las mujeres modernas e independientes de hoy (muchos de ellos incomprendidos por algún macho-alfa de pacotilla), nos encontramos con el comentario de Elisa, que por ejemplo dice…»Y el qué espera ? que se lo ofrezca todo gratis ?»…y yo digo…¿acaso el sexo entre dos personas que se gustan no debe de ser gratis?, entonces…¿siempre que te acuestas con alguien es porque ha hecho algo por ti?, no lo haces porque te gusta el tio o aparte de gustarte tiene que hacer algo por ti. Añade «el que algo quiere algo le cuesta»…¿y vosotras que?…con poner vuestra sonrisa es ya suficiente ¿no?…»el mundo está lleno de hombres deseosos» asevera, ¿deseosos de que?…de hombres deseosos para currarselo y que saben que todo cuesta algo…flipante. Y para rematar dice «también está lleno de caballeros y verdaderos señores, no solo de pobres que no llegan a finales de mes y le regatean cada céntimo a la mujer que desean conquistar»…o sea, que un tio, un mileurista que es del que se habla en el post, es pobre segun ella y le parece fatal por lo que parece, que algunos no lleguen a final de mes, por que lo dice de forma despectiva…pues que sepas, que ahora con la crisis, hay muy mala gente por ahí, que no llega a final de mes. Tambien entiendo que para ser caballero y un verdadero señor, algo que me suena repugnante, si a mi alguien me llama «verdadero señor» salgo corriendo tan rapido, que no me alcanzaría ni el mismisimo «diabolo», imaginad si un tio le dice a una chica «eres una verdadera señora»…no digais nada, con ver vuestra cara me vale, pues eso, que según Elisa para ser un caballero y un verdadero señor (nos quedamos con que se supone que es algo alagador) hay una condición indisoluble y es que el tio tenga pasta, sino no puede serlo…
En definitiva, que hay gente para todo, que de todo hay en la viña del señor y veis que como decia yo antes, todavía hay gente que se cree «princesa» o «principe». De todas maneras creo que todos os habeis centrado en el tema del dinero, que si se tiene, que que se hace con el, si se debe invitar o no, ¡¡que si..que yo tambien lo he hecho!!, pero me he dado cuenta que en realidad, el verdadero trasfondo, no es si alguien es pobre o por contra puede invitar a «verdaderas señoras» a diestro y siniestro, no es la pobreza o la riqueza economica lo que aqui se debate, es mas bien….la pobreza de corazón y de alma que tienen algunos y algunas.
PD: Esto último, no va por ti Elisa, no te conozco para aseverar tal cosa…
28 octubre 2011 | 18:18
Arkangel
Plas plas plas plas…..
28 octubre 2011 | 19:16
Da un poco de pereza leer los comentarios de hoy, tenéis vidas muy complicadas o os buscáis personas complicadas. La vida es muchísimo más sencilla y placentera. Me han pagado la cena y las copas, he pagado cenas, copas y hoteles, me han pagado hoteles, he puesto yo el coche, me han ido a recoger a donde yo dijera… y otras muchas cositas de esas que hacemos por estar mejor que queremos
Todo con la mejor de las intenciones y con mil amores, hubo amores que duraron maś que otros, incluso perduraron historias sin amor entre facturas pagadas a medias o en su totalidad, lo mejor de todo es que guardo buenos recuerdos hasta de lo que pudo ser y no fue. La vida es maravillosa. 😉
—————————————————————–
Simp dice:
«Pero no perdamos de vista a las putas encubiertas. Las otras, al menos, son honestas.»
Supongo que será un recursillo literario, espero que no sea un trauma infantil mal resuelto. Tu dirás, simp.
28 octubre 2011 | 20:10
A lo mejor la chica se ha despedido del caballero pensando “la madre que me parió, 50 € en depilación, 20 en peluquería otros 20 en manicura y pedicura, modelito nuevo…, con esto podía haberme contratado a un hombre que por lo menos supiera follar”.
Por supuesto que habrá mujeres que se dedican a sablear a hombres como hay hombres que piensen que todas somos putas menos su madre. Pero la mayoría sale a cenar a tomar copas o a disfrutar del sexo porque sí, sin pensar en quien paga.
28 octubre 2011 | 20:48
Que somos putas sí o sí, no? ammmmmmmm. Evidente que con muchas no tiene que pagar el hotel y que con otras lo tendrá que pagar todo.
28 octubre 2011 | 21:33
No me he explicado, da igual. Yo me entiendo.
28 octubre 2011 | 22:15
Bravo a los comentarios de Purita de los recaos y Marcianita , han dicho exactamente lo que yo quería decir.
En cuanto al post, podría ser el guión de un capítulo de «Cuéntame «..Creo que entre dos adultos que quedan libremente a echar un ratito establecer este tipo de «análisis» es como mínimo reaccionario , pero bueno, supongo que será una cosa puntual o consecuencia de esa especie de confidencias que se dan entre cliente y taxista , cuando el taxista no tiene muy claro qué es lo que siente/piensa hacia las mujeres y el cliente es un palurdo emocional,porque entre personas honestas y de bien que salen para divertirse y no para descubrir la guerra de géneros , estoy segura de que esta charla no se daría.
Ojú qué pena.
Si esto sigue así , en veinte años vuelven Esteso, Alfredo Landa y Pajares …qué digo, a matar bisontes otra vez; nos cargamos el feminismo pero es que ya antes nos cargamos el humanismo.
En fin .
Es verdad que algo está fallando en EDUCACIÓN .
29 octubre 2011 | 01:49
Absolutamente de acuerdo.
El polvo mas barato es el que hechas con una puta, y encima es mas seguro, desenfadado y sin complicaciones.
Saludos.
29 octubre 2011 | 01:58
@Escorts madrid..
Si, y además, muy profesional.
29 octubre 2011 | 09:06
Y poco a poco…. algun putooo!!
y para follar de gratis… escucha esta coplaaaa!!!… la balada del paraisoooo!!!!
http://www.reverbnation.com/artist/song_details/5125174
y saludos tekiiiiiiiiiiiiiiii
y aparlaaaaaaaaaaaaaaaa!
29 octubre 2011 | 12:57
«Las otras son honestas»
Sí, esperando a que aparezca uno que no te llame «puta», se te acaban las ganas, dejas de creer en el amor y ves a tus antiguos amigos y amigas que siguen casados por dinero, todos haciendo, cada uno por su lado. Te llevas alguno y quizás mañana te sientas con ellos, o con su mujer que te cuenta que ha encontrado cosas de otra en su casa, o en no sé donde, tomas algo, la parte implicada te guiña el ojo, te pasa la mano por la pierna o quizás te hace un gesto, y luego se va a dormir a casa con ese mueble suyo que se compró del todo el día que dijo «sí, quiero».
Inamovibles en su rectitud con respecto a la apariencia, qué asco, y siempre dicen lo mismo: no me gusta el condón, y tanto que te va a gustar, un poco de lubricante y te lo voy a meter cuando estés despistado, es todo un arte que aprendí al separarme, ojalá lo hubiese aprendido antes porque lo que tenía en casa era de verdad preocupante. .
¿Y qué? Siguen casados por lo mismo, y definitivamente tú dirás lo que quieras, pero no se equivoca, ellas todas son esto y ellos son también todos lo otro.
Demuéstrame que me equivoco. Yo no trabajo de esto pero lo hago mucho mejor que cientos de miles de muertas de hambre que no tienen ningún agujero virgen, lo sé porque tengo muy buenos amantes y otros sencillos, de aquello tan cariñoso que creen en el amor, son jóvenes todavía, pero cinco de aquellos no me los quita nadie, cuidadito mañana: vuelven, sólo es cuestión de agenda y de posición económica por mi parte.
Si eres una princesa puta o un príncipe pagafantas, debes ser discreto, eso «no está bien visto», pero vamos, lo hace todo el mundo. No quedan, ya, de los honestos.
29 octubre 2011 | 13:12
@ una
Hija, tú estás especializada en tus propios defectos.
29 octubre 2011 | 13:45
@ Purita
Hija, a ti te follarán a oscuras.
29 octubre 2011 | 13:47
…
En este blog ha quedado demostrado
que caballeros hay a puñados.
Hay otros que no son tan caballeros y para muestra el botón de tu pasajero. Esos, para comerse un colín se tienen que enmacarar y en vez de caballeros son pagafantas en el mejor de los casos.
29 octubre 2011 | 18:28
Si tuviera sentido decir algo aquí, sería que me da miedo. Me da miedo la anécdota, me dan miedo muchos de los comentarios, me da miedo tener que pensar si el otro, va a pensar que soy una puta, si él va a pensar que yo creo que debe pagarlo todo o no.
Me da miedo sobre todo la amargura que destila. La decepción ante la vida, la visión deformada y oscura, como de espejo de feria de las relaciones entre hombres y mujeres que a fin de cuentas son seres humanos y que pertenecen a la misma especie. Con su corazón, su sangre, sus venas y su cerebro.
Saco en claro leyendo post y respuestas que el idealismo y el buenhacer no es moneda corriente en nuestros días.
No creo ni en princesas ni principes. No juzgo la prostitución pero recuerdo ahora un documental sobre «el oficio» en el que una mujer que se dedicaba a ello, decía que a pesar de llevar mucho tiempo trabajando aún tenía pesadillas en que cientos de manos la tocaban y como la hacían sentir. Me parece que la justificación que se hace aquí del oficio es casi demencial. Yo misma las he visto algunas noches al regresar a casa en coche, en pleno invierno, ligeras de ropa, con una fogatilla mal encendida, acuclilladas cerca para entrar en calor, en medio de la oscuridad de la noche, expuestas a lo que cualquiera quiera hacer con ellas por dinero. Así que no digo lo que pienso sobre la frase: sale más barato ir de putas y son más sinceras. Siento tristeza al leerla.
Todos vamos en el mismo barco y quizá deberíamos mirar al otro con la complicidad de ser compañeros de viaje.
30 octubre 2011 | 09:20
Y yo he oído a unas cuantas de esas prostitutas, a las de los descampados y las fogatas, que con esa protección, esa mínima dignidad, esa seguridad, ese control, que desearíamos para ellas, en un local regulado, llámalo burdel, llámalo prostíbulo, llámalo casa de citas, llámalo habitaciones alquiladas por horas…SE GANA MENOS, así que prefieren seguir, más que en la calle, en las cloacas, porque se lo llevan limpito. Asi que, ya puestos, prefiero que, ya que es su gusto, se vayan bien lejos de cualquier concentración humana, y que la gente se evite tener que ver espectáculos denigrantes a la puerta de su casa, que incluyen la propia chulería, los malos modos y hasta las agresiones de esas mismas putas que están tan a gustito al raso, quizás porque consideran que LA CALLE ES SUYA, como los indignadillos.
Lo cual: que cada quién opine lo que le dé la gana y, en última instancia, que cada palo aguante su vela y que sarna con gusto no pica. Supongo que, al final, todos acabamos teniendo lo que nos merecemos.
30 octubre 2011 | 11:30
De entrada, el maromo es gilipollas; y lo peor, no tiene clase. Mira que invitarla a una «cena con velitas» en lugar de llevarla a un brunch; patético!!!!.
30 octubre 2011 | 20:43
Estas nuevas mujeres, si uno logra amarrar y poner bajo control al burro machista que llevamos dentro, son las mejores parejas.
A los hombres machistas, que somos como el 96 por ciento de la población masculina, nos molestan las mujeres de carácter áspero, duro, decidido. Tenemos palabras denigrantes para designarlas: arpías, brujas, viejas, traumadas, solteronas, amargadas, marimachas, etc. En realidad, les tenemos miedo y no vemos la hora de hacerles pagar muy caro su desafío al poder masculino que hasta hace poco habíamos detentado sin cuestionamientos. A esos machistas incorregibles que somos, machistas ancestrales por cultura y por herencia, nos molestan instintivamente esas fieras que en vez de someterse a nuestra voluntad, atacan y se defienden.
La hembra con la que soñamos, un sueño moldeado por siglos de prepotencia y por genes de bestias (todavía infrahumanos), consiste en una pareja joven y mansa, dulce y sumisa, siempre con una sonrisa de condescendencia en la boca. Una mujer bonita que no discuta, que sea simpática y diga frases amables, que jamás reclame, que abra la boca solamente para ser correcta, elogiar nuestros actos y celebrarnos bobadas. Que use las manos para la caricia, para tener la casa impecable, hacer buenos platos, servir bien los tragos y acomodar las flores en floreros. Este ideal, que las revistas de moda nos confirman, puede identificarse con una especie de modelito de las que salen por televisión, al final de los noticieros, siempre a un milímetro de quedar en bola, con curvas increíbles (te mandan besos y abrazos, aunque no te conozcan), siempre a tu entera disposición, en apariencia como si nos dijeran “no más usted me avisa y yo le abro las piernas”, siempre como dispuestas a un vertiginoso desahogo de líquidos seminales, entre gritos ridículos del hombre (no de ellas, que requieren más tiempo y se quedan a medias).
A los machistas jóvenes y viejos nos ponen en jaque estas nuevas mujeres, las mujeres de verdad, las que no se someten y protestan y por eso seguimos soñando, más bien, con jovencitas perfectas que lo den fácil y no pongan problema. Porque estas mujeres nuevas exigen, piden, dan, se meten, regañan, contradicen, hablan y sólo se desnudan si les da la gana. Estas mujeres nuevas no se dejan dar órdenes, ni podemos dejarlas plantadas, o tiradas, o arrinconadas, en silencio y de ser posible en roles subordinados y en puestos subalternos. Las mujeres nuevas estudian más, saben más, tienen más disciplina, más iniciativa y quizá por eso mismo les queda más difícil conseguir pareja, pues todos los machistas les tememos.
Pero estas nuevas mujeres, si uno logra amarrar y poner bajo control al burro machista que llevamos dentro, son las mejores parejas. Ni siquiera tenemos que mantenerlas, pues ellas no lo permitirían porque saben que ese fue siempre el origen de nuestro dominio. Ellas ya no se dejan mantener, que es otra manera de comprarlas, porque saben que ahí -y en la fuerza bruta- ha radicado el poder de nosotros los machos durante milenios. Si las llegamos a conocer, si logramos soportar que nos corrijan, que nos refuten las ideas, nos señalen los errores que no queremos ver y nos desinflen la vanidad a punta de alfileres, nos daremos cuenta de que esa nueva paridad es agradable, porque vuelve posible una relación entre iguales, en la que nadie manda ni es mandado. Como trabajan tanto como nosotros (o más) entonces ellas también se declaran hartas por la noche y de mal humor, y lo más grave, sin ganas de cocinar. Al principio nos dará rabia, ya no las veremos tan buenas y abnegadas como nuestras santas madres, pero son mejores, precisamente porque son menos santas (las santas santifican) y tienen todo el derecho de no serlo.
Envejecen, como nosotros, y ya no tienen piel ni senos de veinteañeras (mirémonos el pecho también nosotros y los pies, las mejillas, los poquísimos pelos), las hormonas les dan ciclos de euforia y mal genio, pero son sabias para vivir y para amar y si alguna vez en la vida se necesita un consejo sensato (se necesita siempre, a diario), o una estrategia útil en el trabajo, o una maniobra acertada para ser más felices, ellas te lo darán, no las peladitas de piel y tetas perfectas, aunque estas sean la delicia con la que soñamos, un sueño que cuando se realiza ya ni sabemos qué hacer con todo eso.
Los varones machistas, somos animalitos todavía y es inútil pedir que dejemos de mirar a las muchachitas perfectas.. Los ojos se nos van tras ellas, tras las curvas, porque llevamos por dentro un programa tozudo que hacia allá nos impulsa, como autómatas. Pero si logramos usar también esa herencia reciente, el córtex cerebral, si somos más sensatos y racionales, si nos volvemos más humanos y menos primitivos, nos daremos cuenta de que esas mujeres nuevas, esas mujeres bravas que exigen, trabajan, producen, joden y protestan, son las más desafiantes y por eso mismo las más estimulantes, las más entretenidas, las únicas con quienes se puede establecer una relación duradera, porque está basada en algo más que en abracitos y besos, o en coitos precipitados seguidos de tristeza. Esas mujeres nos dan ideas, amistad, pasiones y curiosidad por lo que vale la pena, sed de vida larga y de conocimiento.
Vamos hombres, por esas mujeres bravas!!!!!!!!!!
Héctor Abad
30 octubre 2011 | 21:56
A Sara:
Es lo mismo ser macho que hembra, en el código genético de machos y hembras está programado reproducirse, eso es todo. Te lías y lo complicas sin necesidad.
30 octubre 2011 | 22:46
JAJAJA! Resumiendo: ¡CUTRE! RATA!¡ ROÑOSO! ¡PUTAÑERO DESENCUBIERTO! Lo ideal es una puta profesional que además te pague la cena a tí o mejor que te ponga un piso.
Y si te parece un comentario injuriante yo considero que tu conclusión es insultante y demagógica.
31 octubre 2011 | 01:24
Me parece bastante bulgar el blog de hoy……. una mujer no es puta cuando un hombre le dice: NO YO INVITO.
SI luego vas a llamarla puta más vale que te quedes en tu casa.
Si no tienes para pagar una cena romántica llevalá a un burguer, telepizza o a tomar un kebab.
Si quieres impresionarla………. ganateló y luego no la llames vulgarmente puta porque no creo que se portara de ese modo contigo…..
Y si no tenías para un taxi haber pedido a domicilio.
Son síntomas de inmadurez, machismo, etc……… Espero que ese hombre (si se le puede llamar así) cambie su forma de ser, porque las cosas también se pueden hablar.
A mí personalmente, no me gusta que me vayan pagando las cosas, pero……. hay de todo. Siempre hay personas a las que no terminas de conocer, seguramente como éste que no sabe realmente ni lo que quiere.
31 octubre 2011 | 11:25
Muy desafortunado el blog, aun hay gente que vive en la epoca del cromañon, somos muy europeos para lo que nos comviene, para tener una mentalidad mas abierta esta claro que no. Seguimos con una tradición muy de aqui, el aparentar, vivir por encima de nuestras posibilidades, yo aparento una posición que no tengo e invito a una mujer a una cena cara con tal de llevarmela a la cama, y luego echo cuentas y veo que el polvo me ha salido por un pico, haberlo pensado antes cateto, que falta de respeto para con la mujer y si ella por lo menos se lo ha pasado bien, le ha gustado la cena y el cateto ha sido algo mañoso, cosa que no ocurre la mayor parte de las ocasiones, pues muy bien por ella, lo mismo se ha quedao a gusto con la cena y muy insatisfecha con el resto. Todos queremos igualdad pero no nos la van a regalar, es como la confianza , no se da, se gana.
http://www.resistencia-libertad.blogspot.com
31 octubre 2011 | 15:48
Me sorprende ver tantos comentarios de gente enfadada con lo escrito en el post. Entendería tanto cabreo si hubiese generalizado, pero precisamente termina la entrada diciendo: «Por supuesto, no todas son putas. Ni mucho menos.» ¿A qué viene tanta indignación? El post se refiere a «cierta clase de» mujeres que siempre, por norma general, se dejan invitar aunque hagan amago de abrir su cartera. Mujeres que si, el hombre en cuestión aceptase su amago y se dejase invitar, probablemente se molestarían. Mujeres que, en ocasiones y para más inri, se declaran feministas (pecando por tanto también de hipocresía).
No veo que el post critique o se refiera a mujeres que en ocasiones se dejen invitar. Ni siquiera trata el tema de «quién debe invitar a quién», ni si eso es machismo o feminismo o qué. Sólo habla de cierta clase de mujeres que se acuestan con hombres que las inviten a cosas, y sólo si las invitan a cosas. Punto.
01 noviembre 2011 | 12:41
Ejem… disculpen los que opinan como Iderina, como parece que no captan la manera en que precisamente los machistas más recalcitrantes acusan de machistas o putas (o insulto a elegir según conveniencia) a las mujeres si se dejan invitar o ayudar de alguna manera por los hombres, es decir, su discurso es: «Ala guapa, ¿no eras feminista? pues ahora pagas la cena y luego me la chupas, que si no vas a quedar de reaccionaria, dependiente e inútil, (pa qué repetir lo de puta.) »
Es lo que se llama arrear en la cabeza a la mujer con el feminismo, para que de una forma u otra ella se lo tenga que currar absolutamente todo, ahora por quedar de moderna y progresista. Y me parece que las tías no despiertan cuando asienten a semejante retorcimiento del argumento del feminismo, y me parece extremo que tenga que sentirme mal por aceptar una invitación, o dos o cien si le da y me da la gana, porque nos sale de los cojones y de las tetas.
A ver si nos escribe un post el misógino este explicando para qué mierda sirven los tíos, que para insultar a las mujeres siempre encuentra argumentos. Tronco, ya huele…..
01 noviembre 2011 | 18:19
Iderina : las mujeres como tú me dan vergüenza ajena. Piensa con la cabeza hija.
Este post es una puta mierda claramente enfocado a tirar por el suelo al resto de mujeres que no sean la enamorada del taxista… y lo más seguro es que «la afortunada» haya leído esto y se infle a costa de «chafar» a las demás mujeres que sin comerlo ni beberlo se convierten en lo que no son. Apañado va el tipo que necesite tirar por tierra a otras mujeres para ensalzar lo que no tiene otra y, apañada va la «afortunada» si necesita de toda esta mierda para creerse mejor que nadie.
Utiliza la inteligencia, si puedes, y si no tranquila que aquí estamos las más observadoras, para dejar constancia de que nadie tiene por qué llamar «putas encubiertas» a las mujeres.
El taxista podrá llamar putas a quienes cobran porque lo son pero NUNCA debe llamar putas a quienes no cobran por su vida sexual. Así de claro lo tengo yo y no pienso pedir disculpas por discurrir más y mejor. Este es mi punto de vista. El taxista se ha pasado un rato de largo, lo que ocurre es que después cada una lo interpretamos como nuestra inteligencia nos deja.
01 noviembre 2011 | 19:53
Esta conversación no merece seguir. Ni el propio peseto se ha molestado en aclarar o pedir disculpas a las mujeres que con razón se hayan podido sentir ofendidas por semejante acto generalizado de misogínia. Solo le importa que suba su audiencia y que los post se multipliquen para seguir pareciendo lo que no es y para seguir conservando su empleo.
Este post ha sido una puta basura y las gravísimas blasfemias contra el género femenino han pasado totalmente desapercibidas para buena parte de mujeres pero, alguien tiene que soltar las verdades con inteligencia.
Me he enamorado de un hombre que respeta a las mujeres y que sería incapaz de soltar semejantes garruladas. No había sentido nada igual nunca. Ten por seguro que si estoy en una cita con él y me suelta un argumento como este, no solo paga él si no que además intento pedir lo más caro y costoso para luego dejarle plantado, por burro.
Somos mujeres inteligentes y parece que alguno lo olvida.
01 noviembre 2011 | 20:12
yo puta, y tu hijo de puta. 😉
10 noviembre 2011 | 11:04