Todo era de color de rosa en el Sevilla después del vencer por 2-1 al Real Madrid en el Sánchez Pizjuán. El equipo de Manolo Jiménez había presentado su firme candidatura al título de liguero y Jesús Navas había demostrado que era uno de los mejores extremos derechos del mundo tras ridiculizar a Marcelo.

Quizás fue la euforia que se desató esa noche la que le hizo a José María del Nido, presidente del Sevilla, precipitarse en sus declaraciones. «Navas está preparado para ir a la selección. Así nos lo ha dicho y se lo hemos comunicado a la Federación. Lo que falta es que lo convoquen».

Sólo un día después, el futbolista rectificó las manifestaciones de su presidente. «Ir a la selección es lo máximo. Es la ilusión de todos los futbolistas. Cuando llegue el momento se verá. Hay que tomárselo con tranquilidad. Estoy dando los pasos poco a poco y no quiero precipitarme. Me encuentro tranquilo en este sentido».

Y es que Navas sufre desde hace varios años problemas de ansiedad cuando se aleja del entorno familiar. El tratamiento que ha llevado hasta ahora parece que está dando buenos resultados, pero el futbolista no se ve aún capaz de dar el salto. Quiere seguir siendo durante algún tiempo más como Peter Pan en El País de Nunca Jamás.

No cabe duda de que si todavía no está preparado para afrontar el reto de la selección no se le debe forzar. Y así lo cree también su entorno. «Entiendo que hay que esperar«, ha dicho su agente, Jesús Rodríguez de Moya.

Sin Navas, el combinado nacional se está perdiendo el concurso de uno de los mejores extremos del mundo y una gran baza para el próximo Mundial de Sudáfrica en 2010.