"El deseado bien último se alcanza mejor mediante el libre comercio de ideas".(1919) Juez O. Wendell Holmes del Tribunal Supremo de EE UU

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La bronca de mañana

Los toros este año han ido bastante bien, al menos por lo que se lee en los periódicos, por el tono de los críticos que este año vienen menos pesimistas que en temporadas anteriores. Han reaparecido figuras y han surgido promesas, incluso dicen que los toros son menos desastrosos que antes. Pero para corridas decepcionantes las de la política, por ejemplo la de la pasada semana en el Congreso, que iba a girar sobre Europa, sobre el nuevo proyecto de actualización de los Tratados, pero que lo hizo sobre los soldados caídos en Líbano, casi sin margen de respeto al duelo. ¡Qué vergüenza de debate!

Pero la corrida política de la temporada será mañana por la tarde, en torno a las cinco, tras la réplica del jefe de la oposición al informe matutino del presidente. Rajoy y Zapatero preparan sus respectivas intervenciones, y las posteriores réplicas y dúplicas, con sus correspondientes efectos especiales y frases prefabricadas para distribuir en esos “argumentarios” que luego cada club de fans convierten en titulares.

¿Habrá sorpresas? Por lo que se lee en los medios no parece: por lo que se escucha en los estados mayores de ambos partidos, tampoco. Todos andan fijos en sus trincheras, como los contendientes de la gran guerra, confiando en el agotamiento del contrario.

Del debate interesa la apertura a los grupos minoritarios, a los nacionalistas que darán la gobernación a uno u otro partido tras las próximas elecciones.

Y del debate interesa el discurso que presente Zapatero respecto a su estrategia antiterrorista: ¿será capaz de explicarse? ¿le entenderán esos de los suyos que aun no han captado el mensaje? Porque a los que no va a convencer es a sus adversarios, diga lo que diga.

Las peleas de Zapatero y Rajoy

Rajoy y Zapatero se pelean habitualmente en diferido, con intervenciones públicas en ausencia del otro. En ese marco suelen ser bravos en la critica. A veces se encuentran en persona, normalmente en el Parlamento, con sus respectivas claques haciendo el gamberro. Allí son menos bravos pero se zurran de lo lindo, especialmente el de la oposición que suele ser de verbo menos contenido y juicio más suelto. Finalmente hay veces en que se ven a solas; no hay noticia fidedigna sobre cómo trascurren esas entrevistas, pero deben estar presididas por una gélida educación.

La próxima semana, como guinda del curso parlamentario, está convocado el debate sobre el estado de la Nación que será la última oportunidad para la confrontación cara a cara de ambos líderes. Las siguientes serán en campaña electoral. Los populares ya han dado por ganado ese debate y ocurra lo que ocurra en él, ya tienen una conclusión. Así mismo hicieron en los debates anteriores en los que dieron ganador al suyo por goleada aunque las encuestas posteriores no ratificaron esa impresión.

El aperitivo de ese debate tendrá lugar el miércoles a primera hora de la tarde. Zapatero informará al Congreso del desarrollo de la Cumbre de Bruselas. Rajoy ya tiene conclusión sobre la misma: agradecimiento a los gemelos polacos. Rememora los comentarios de Aznar contra González, tras la cumbre de Edimburgo, la de los fondos de cohesión, cuando le llamó pedigüeño”. Aquello fue desmedido y bobo, tanto como la felicitación a los polacos.

En esta cumbre Zapatero ha sido coherente con sus postulados que pasan por consolidar el eje central europeo, ese consenso franco-alemán que Merkel y Sarkozy han decidido reeditar como antes hicieron sus predecesores. ¿Pretende Rajoy aliarse con los gemelos polacos?

Las generales en marzo

La reunión en la Moncloa de los jefes del gobierno y la oposición pasó sin más novedad que el despliegue táctico de Rajoy, un tono tolerante que supone cierta tregua, un punto y aparte en eso que llamamos crispación. Una tregua que se pondrá a prueba pasados quince días, cuando toca el debate del Estado de la Nación que cerrará la temporada parlamentaria y que, previsiblemente, tendrá como platos fuertes el caso navarro y las fechorías de los etarras.

Mientras llega ese debate se van cerrando los efectos de las elecciones del 27M con saldo negativo para los populares en cuanto a poder efectivo municipal y autonómico y cierto avance socialista, inferior al que esperaban y a base de alianzas.

Pero es agua pasada, no quedan citas intermedias hasta las generales, que sigo viendo en el horizonte de marzo, con agotamiento de mandato, como hizo Aznar las dos legislaturas anteriores. Las siete anteriores (incluida la Constitucional de 1977, tan celebrada estos días), duraron entre 21 y 44 meses. Felipe González, con mayorías absolutas en la 2ª, 3ª y 4ª legislatura disolvió las cámaras entre cuatro y ocho meses antes de plazo. Y con mayoría insuficiente convocó elecciones en 1996 con año y medio de adelanto, cuando Pujol le retiró el apoyo parlamentario.

Aunque la disolución es prerrogativa del Presidente agotar mandato es indicador de estabilidad. Disolver en septiembre o enero tanto da, los Presupuestos pueden prorrogarse sin problema. De las nueve citas electorales entre 1977 y 2004, siete fueron en primavera y dos (1982 y 1989) en otoño. Zapatero puede adelantar, disolver este verano, pero sus gestos indican que agotará el plazo, más aun ante la insistencia de los populares para que eche el cierre.

Zapataero, Rajoy, una pareja aburrida

Octava reunión litúrgica Zapatero-Rajoy en la Moncloa, cumbre inútil entre los jefes del gobierno y de la oposición que no puede llegar con peores augurios. Se trata de una pareja obligada a verse pero que no se aguantan Las posibilidades de entendimiento son cercanas a cero, no está en la naturaleza de las cosas que en vísperas de elecciones los contendientes pestañeen, se toleren y se comprendan.

El PP basa su oposición en zurrar a Zapatero sin parar, éste ha recibido descalificaciones aun peores que las que cayeron sobre el hoy venerado Suárez durante sus cinco años de presidencia. Y al PSOE le interesa fijar a los populares en la bronca, a lo Pujalte, para que movilicen a sus votantes perezosos.

Zapatero ha citado a Rajoy cada seis meses, y de las siete entrevistas no ha salido nada. La primera versó sobre la reforma de la Constitución y los Estatutos, abrió alguna puerta, pero en el PP aspiraban a elecciones anticipadas y no estaban para consensos, eran tiempos de “leña al mono” y nada ha cambiado.

El consenso entre gobierno y oposición forma parte del mito. ¿por qué… para qué…? Entre adversarios lo natural es el disenso, lo contrario parece tongo. El problema de la política española no está en ese disenso, sino en el contenido de los debates que son de bajo vuelo y están envenenados por consignas y manipulaciones.

La cita política relevante será el debate sobre el Estado de la Nación la primera semana de julio, última oportunidad preelectoral para el cuerpo a cuerpo de los jefes.

PD.- Las municipales las ganaron los populares a los puntos, pero a medida que llega la hora de hacer saldo, de constituir los consistorios, los socialistas encuentran bálsamo y alivio para sus penas: perdieron, pero muy poco, en realidad van a disfrutar de más poder del que tenían antes de las elecciones, así que perdieron, o quizá no perdieron.

Rajoy anda eufórico

Los señores del PP proclaman tanto su triunfo electoral del pasado 27 de mayo que han convencido a una mayoría de que es así. Pero hay tantos elementos para sostener esa hipótesis como para refutarla. Sumar el número total de votos es tan impreciso como sumar alcaldes o concejales, o hacer un saldo de pérdidas y ganancias en ediles sobre anteriores comicios o ponderar el desplazamiento de porcentajes de gasto publico a favor de uno u otro partido, aspecto este último pendiente de pactos y enredos varios.

A la postre es mejor preguntar a los contendientes quien ha ganado. Por lo escuchado a los del PP, especialmente a Rajoy, su victoria fue concluyente. Como prueba sirve que nadie en el PP ha declarado crisis en su zona de influencia, ni siquiera los “zaplanistas” o los de la boina en Galicia. Sin embargo entre los socialistas las federaciones abiertas en canal son, por lo menos, las de Madrid, Valencia, Murcia y Castilla León, un tercio de España.

Tanto las encuestas conocidas como la traslación de los resultados del 27M a unas generales siguen dando ganador por puntos a los socialistas, pero se percibe que estos empiezan a no creer en su propia victoria. Mientras entre los populares anida la euforia, decididos a aparcar diferencias hasta la victoria, entre los socialistas se nota desaliento.

Los socialistas del aparato no van a desalojar, están mejor en la oposición que en el retiro. Los Simancas, Acosta, Pla, Villalva … quioeren aguantar abrigados en el Presupuesto y bajo unas siglas que garantizan confortable viático y poco riesgo; buscarse la vida, a estas alturas, resulta más penoso.

P.D. La visita a la reunión del círculo de Economía celebrado en Sitges ha tenido entre los principales a Rajoy y a Zapoatero, a este último se le notó descompuestos o despistado, fuera d efoco; al primero se le notaban ganas de ganar. ¡Aldan de libranza en moncloa¿ ¿?Como es que aun no han colgado en la web la intervención del presidente en sirges? ¿tan mala es?

Urnas cerradas… a esperar

La participación electoral puede superar ligeramente el 60%, siete puntos menos que en las anteriores municipales, tres menos que en 1999, en vísperas de la mayoría absoluta popular del año 2000. Las municipales del 2003 cursaron con la guerra de Irak y el Prestige al fondo que, seguramente movilizaron a los votantes de izquierda tanto como ahora el debate sobre el terrorismo ha movilizado a la derecha y desmovilizado a la izquierda.

Les recomiendo que no pierdan el tiempo con las encuestas salvo para circunscripciones donde las diferencias sean rotundas, por ejemplo Madrid, Murcia, Castilla-León, Castilla-La Mancha, Extremadura y Aragón. Mientras no lleguen los datos definitivos eviten conclusiones precipitadas.

El caso de Madrid es como para que los socialistas se lo piensen porque ni con un candidato del aparato (Simancas) ni con una ocurrencia como la de Sebastián salen del suelo del treinta y pocos por ciento. Y frente al éxito rotundo del PP en Madrid parece que los socialistas van a lograr un abrumador poder municipal en Cataluña.

Respecto a Navarra, el escenario más complicado de estas elecciones, en tanto no acabe el recuento, conviene evitar especulaciones. Estas elecciones son de muchos detalle, el análisis requiere muchos datos y por tanto hasta mañana, hasta disponer de datos definitivos y de barrunto de alianzas, parece prudente o aventurar juicios.

Les recomiendo que se fijen en dos datos: primero quien pierde o gana poder y cuánto y segundo cuales son las diferencias absolutas de voto. Pero para eso tienen que pasar muchas horas.

Europa, en al agenda

Con Sarkozy y Gordon Brown al frente de los gobiernos francés y británico la agenda europea entra en otra velocidad, no menos incierta que la anterior pero con más posibilidades. Chirac no era menos europeísta que su sucesor (que no heredero) pero con cuentas pendientes con sus electores y un inmovilismo y agotamiento que el nuevo presidente no tiene, tal y como acredita desde el primer día.

Sarkozy quiere avanzar el proceso sin mirar atrás, ha archivado la Constitución que fracasó, para ir a fórmulas más prácticas que pongan la maquinaria en marcha. Para eso cuenta con la señora Merkel que tampoco se siente vinculada por la fracasada Constitución y que también quiere salir del bloqueo.

El otro actor, el británico, va a remolque, con habilidad para parar más que para acelerar en asuntos europeos. El relevo de Blair no ayuda a la construcción europea, y su enigmático sucesor estará más pendiente de unas elecciones que pueden mandarle a casa, que a ejercer de europeista, De manera que poco cabe esperar de él.

Los socios del sur, Italia y España (y Portugal que preside el Consejo el próximo semestre), estarán a favor de la opción franco-alemana y tratarán de aparentar que son el tercer socio del eje Merkel-Sarkozy. Los problemas vendrán del este, especialmente de Polonia cuyos dirigentes son el “pepito grillo” en esta ronda, hasta que alguien de el puñetazo en la mesa que ponga punto final a la regla de la unanimidad. Ser miembro de un club obliga a hacer concesiones a las mayorías, más aun los recién llegados.

La posición española es la tradicional, a favor de franceses y alemanes, así ha sido siempre excepto en esos pocos años durante los que Aznar se sintió atlántico de las Azores.

Municipales : cambios marginales

Esta costosa, laboriosa, penosa… campaña electoral que tiene a todos los políticos en carteles, y de teatro a polideportivo, para convencer a los convencidos, dará como resultado que casi todo siga como está. Los cambios que se apuntan en las encuestas son marginales, sólo en aquellas plazas donde el poder depende de unos pocos miles de votos, allí donde las diferencias reales son de más de un par de puntos o de dos asientos no parece que vaya a cambiar nada.

De manera que una vez más ganarán todos, por alguna razón, por alguna estadística, como si del análisis del EGM se tratara. Los unos dirán que han tenido más votos que nadie, los otros que han obtenido más diputados autonómicos o más concejales que los demás; habrá quien compare con el pasado para concluir que mejora y quien compare con el adversario para lucir lo que más le favorezca.

De estas elecciones próximas (estamos a trece días de ir a las urnas) el dato relevante será, inevitablemente, quien obtenga el poder, eso es siempre lo significativo, pero además habrá que reparar en algunos detalles que también son relevantes:

El primero la participación, ¿serán estas las elecciones municipales con mayor absentismo de la historia de la democracia? Si así fuera convendría que alguien tomara nota y se aplicara el cuento, porque los ciudadanos pueden hablar en susurros pero cuando hablan hay que escucharlos.

El segundo se conocerá días después y girará en torno a las alianzas postelectorales. Quien va a pactar con quien. Sostengo que las alianzas no suelen ser ideológicas, ni siquiera las queridas, suelen ser las que la aritmética permite y manda. ¿Con quien pactará cada grupo nacionalista o minoritario en Navarra, Cantabria, Canarias, Baleares, Euskadi, …Esa será la letra menuda a analizar con rigor y buen juicio.

Francia…. ahora legislativas

Tras la elección de Sarkozy, los francess preparan las legislativas del próximo 10 de junio. El nuevo Presidente tratará de revalidar su victoria con una mayoría parlamentaria. Para vello prepara un gobierno de seamnas que anticipe la materialización de su programa para remover Francia hasta sacarla del estancamiento, que tanto han criticado los dos candidatos. Sarkozy tiene a favor el gobierno que ahora puede remodelar a su medida, un gabinete para alejarse a marchas forzadas de su viejo y poco amado patrón: de un Jacques Chirac que camina hacia el exilio interior en su nuevo domicilio a la otra orilla del Sena.

Francia va a conocer un relevo político sin cambio del partido en el gobierno. Sigue la derecha, gana el mismo partido, pero poco será igual. La participación, la movilización política que han traído estas elecciones obligan al ganador a actuar inmediatamente, sin dejar para mañana lo que pueda hacer hoy, sin frustrar expectativas aunque los frutos de su política tarden en llegar.

Sarkozy tiene mayoría holgada en la Cámara, dominio total del partido que la sustenta y la fuerza de la presidencia. Pocos franceses han dispuesto de semejante acumulación de poder, desde luego ninguno de sus predecesores en esta V República. También disfrutará de una oposición que tien4e que asimilar el resultado de ayer y lanzarse a fondo para que el 10 de junio no signifique el dominio total de esa derecha sin complejos que encabeza Sarkozy.

El socialismo francés no se ha renovado lo suficiente, anda aun a la mitad de la digestión del desastre de las primarias del 2002 cuando le Pen les desplazó de la carrera final por la presidencia. Meses después, el electorado les dejó en la profunda oposición. Ahora tendrá que definir su estrategia y destino, con (o sin) la señora Royal, tienen cinco años para criticar a Sarkozy y escribir otro guión.

Los desengañados de ZP

El presidente Zapatero, ingenuo o insensato, se ha metido en demasiados jardines durante la legislatura, tantos que cuando haga balance seguramente lamentará más de una de esas ocurrencias. No está saliendo bien de muchos de ellos, al menos eso cuentan sus compañeros de viaje.

Maragall, uno de sus aliados de primera hora, se siente traicionado y lo dice; más aun, confiesa que el azaroso viaje estatutario que emprendieron juntos no ha merecido la pena.

Artur Mas, el que un día pareció el confidente de Zapatero, colegas de generación y talante, tampoco prodiga ni la más tenue lisonja al inquilino de la Moncloa, con el que compartió unos cigarrillos un fin de semana para dar luz verde a un estatuto que agonizaba.

Y algo semejante le ocurre con Imaz, el joven primus inter pares del PNV, al que Zapatero elogia sin reserva, pero que tampoco se muestra satisfecho de los resultados del discreto pero intenso recorrido que ha hecho con Zapatero.

Ninguno de ellos es hoy aliado del gobierno, sus votos no son decisivos para sacar adelante las leyes, ni siquiera para evitar el bochorno de un rechazo parlamentario del candidato a presidir la atormentada CNMV. Pero los dos partidos nacionalistas vasco y catalán suelen ser decisivos para la gobernación.

A Zapatero le redime la oposición popular, esa prueba para cualquier valoración que responde a la pregunta “comparada con quien…”. ¿Hubiera llegado a término la legislatura si los populares hubieran articulado una oposición más moderada, más incluyente de los demás grupos? El contrafactual es teórico y, seguramente inútil. Pero los hechos merecen alguna meditación, especialmente por parte de Zapatero, ¿por qué sus aliados de cabecera, los que ha tejido en conversaciones discretas y efectivas, se declaran tan escamados?