La organización comunica que esta madrugada un participante francés de la prueba más dura del desierto, el Marathon des Sables, las ha palmado a las 6am en su tienda. Se supone que el agotamiento extremo ha sido la causa por la que sus compañeros de tienda le han encontrado inerme.
De todos es sabido, como comenta Sergio, la ‘pantera rosa’, participante de raids y ultras brutales, que
en todas las carreras internacionales de este tipo en las que he estado, más de la mitad de los participantes iban a disfrutar del viaje y la experienca, llegando a lugares imposibles para un tío normal, bajo la cobertura de una organización, y apretándose un poco en lo físico, es decir, en nada parecido a nuestra mentalidad deportivo-competitiva.
Aunque la prensa amarillista de nuevo pondrá el grito en el cielo, es muy importante para el debate conocer que es una prueba brutal alrededor de la que no se puede construir un negocio. Esto incrementa enormemente el riesgo de fallecimiento en condiciones extremas de participantes NO acostumbrados a palizas extremas. No es un muerto entre 24.000 participantes de un maraton popular. Este era un payo que iba entre los 80 primeros. Más un caso de agotamiento extremo que de falta de preparación, supongo.
En todo caso una verdadera lástima, que por desgracia será usada, como bien dices, de forma torticera.Un saludo.
30 marzo 2007 | 16:15