Como en la famosa y archiconocida frase de la película Casablanca. «París lo hemos perdido hasta que llegaste tú «(en referencia a la llegada de Lisa a Casablanca), pues bien, vistos los altos índices de contaminación del aire que está viviendo estos días la capital gala, bien podríamos decir que «Perdimos París bajo la contaminación hasta que llegaste tú «(coche eléctrico)».
Las autoridades parisinas han decidido restringir la circulación de vehículos de combustión por las calles del centro de la ciudad, limitando su acceso en función del número de matrícula (alternando el acceso un día a las matrículas pares y otro a las impares). El controvertido «pico y placa» que se aplica en algunas ciudades de Latinoamérica.
Esta medida ha propiciado que muchos ciudadanos hayan conocido (a través del carsharing eléctrico de París) las ventajas y virtudes de los coches eléctricos. Muchos de ellos se han dado cuenta de que no son solo una realidad, sino que también funcionan perfectamente y son muy eficientes en la lucha contra la contaminación y en definitiva para nuestra salud (ver post sobre la temática).
No quiero decir con todo esto, que los coche eléctricos sean totalmente ‘limpios’, pero si son en la actualidad, junto con el transporte público y otros vehículos «ECO» (bicicletas, motos eléctricas), una de las mejores estrategias para la reducción de la concentración de contaminantes en el aire de nuestras ciudades.
La decisión de las autoridades parisinas demuestra que la planificación para la mejora de la calidad del aire no se está llevando a cabo de forma ordenada y que por tanto sería necesario estructurar propuestas que no tuvieran un impacto tan contundente en la ciudadanía. Las medidas en este sentido, no deberían quedarse solo en limitar el uso de los vehículos contaminares y la gratuidad del transporte público, sino en legislar decididamente hacia una transformación industrial, que nos permita ejercer nuestras libertades en materia de movilidad, sin que ello implique comprometer algo tan fundamental como la salud.
Siempre me ha parecido curiosa la campaña anti tabaco (reconozco que hemos salido ganado en los espacios cerrados), pero no se imponga el mismo criterio respecto a la irrespirable atmosfera de la ciudad.
Por cierto, pido un pequeño espacio a los que nos llamamos José y a los que les toque, ¡un feliz Dia del Padre!
Tambien queria dedicar esta historia a todos los padres y sus hijos, a las madres, la familia y a los amigos…
http://lacasadelcomicduendeverde.blogspot.com.es/2014/03/el-cuento-de-la-caja-de-los-besos.html
No he conseguido saber quien es el autor de esta historia, pero a mi me ha emocionado…si os gusta podeis pasarla a quien querais tambien.
Saludos
19 marzo 2014 | 08:13
Trabajo en una ingeniería y os puedo asegurar que el coche eléctrico hay que mejorarlo todavía mucho para que sea una alternativa que merezca la pena http://xurl.es/urogv
19 marzo 2014 | 08:39
Sin duda al coche electrico le falta si, pero más a las infraestructuras, tanto publicas como privadas. En un parking privado donde tengo una plaza de aparcamiento hay un vecino que ha pedido adaptarlo porque se quiere comprar un electrico… y la misma gente le ha tratado de loco.
en fin, es lo que hay
http://pruebacochesgratis.blogspot.com.es/
19 marzo 2014 | 08:56
Una nota para el autor, una moto con motor de combustión genera menos contaminación que la emitida por persona en autobús. Por lo tanto no hay por qué resaltar que la moto tiene que ser eléctrica, para temas de contaminación, mejor ir en moto que en autobús.
19 marzo 2014 | 09:31