Y no, no me refiero a salir a un garito a tomar copas hasta altas horas de la madrugada (si yo os contara…). Me refiero a aquellas tareas que solemos hacer en horarios intempestivos.

Si hay algo que puede llegar a estresar al más tranquilo del lugar es mantener un sistema 24×7 en alta disponibilidad. Básicamente estamos hablando de un sistema que nunca se puede parar. Por poner un símil un poco exagerado, imaginad una carrera de Formula 1 (ahora tan en boca de todos) en la que los repostajes y los cambios de neumáticos tuvieran que hacerse en marcha. Para los repostajes, podríamos colocar la manguera a la par y hacerlo, pero para cambiar las ruedas no hay otro remedio que parar. Eso es lo que ocurre con los sistemas 24×7, como 20minutos.es.

Algunas tareas (generalmente las relacionadas con la aplicación que gestiona todo), se pueden hacer sobre la marcha. Pero otras (sobre todo las que implican cambios en servidores y/o arquitectura de la plataforma) requieren paradas. En ese caso, hay que hacerlo cuando se moleste lo menos posible, generalmente en la madrugada de los sábados o los domingos, que es cuando hay menos tráfico.

Supongo que habrá a algún administrador de sistemas que le gusten las intervenciones nocturnas. Pero son momentos duros, en los que hay que estar muy despierto y alerta, ya que se suelen hacer cambios críticos que pueden afectar seriamente al funcionamiento, y no parece que la noche de un fin de semana sea el momento más apetecible.

De todas formas, estos mantenimientos todavía ocurren con cierta frecuencia debido a que nos gusta afinar hasta el detalle más nimio. Además, de cara a todos los nuevos desarrollos y las propuestas arquitectónicas para el futuro, una de las variables que entra en juego es permitir realizar estas tareas de mantenimiento de una forma un poco más sencilla (eliminando puntos únicos de fallo, redundando elementos, etc.). Así que esperamos poder enfocar nuestra futura vida nocturna hacia aspectos más lúdicos.

En ese sentido, los compañeros del departamento encargados de gestionar toda la plataforma que da soporte a la edición impresa lo tienen (ligeramente) más sencillo. No necesitan una disponibilidad de 24×7, lo que les permite programar las tareas de mantenimiento de otra manera. En cualquier caso, ellos tienen otras problemáticas, que seguro irán describiendo próximamente en este blog.