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Poner un pie delante de otro nunca tuvo tanta trascendencia.

Dios salve al Conselleiro

Tardes de tertulia. Siniestro Total en el fondo de sonidos distorsionados por el vivo y el ruido de la vida madrileña, siempre en obras, siempre molestando. «Dios salve al Conselleiro / El no es un botafumeiro…»

– Maroto(*) es un especulador. Con los dineros ganados en el deporte se ha montado una inmobiliaria en la costa.
– ¿Especulador porque monta una empresa ha montado una empresa para ganar dinero? ¡Que lo echen de este mundo!, ¡Inconcebible!
– Oye -interpela el primero- la vivienda es un derecho reconocido constitucionalmente y no un privilegio que deba regirse por la lógica perversa del libre mercado. El estado debe ser garante de una vivienda digna para cada ciudadano o familia que lo desee…
– El estado o la administración – interpelo yo, que no se diga que no nos interpelamos en tropel- no puede permitirse que lo tilden de estalinista o maoísta por fijar un sistema de precios o que accedamos todos a una casa contra el mercado (vale, acepto mi casa estatal en ¿Villadangos del Páramo?). Pero sí que debería haber un precepto constitucional blindado respecto de los beneficios razonables de la promoción de suelo. Tal y como se ha hecho en los Países Bajos durante más de 80 años. Pero eso supondría machacar de un tirón una ladrillocracia terrateniente y por menos se han sacado los soldados a la calle. Como no veo todavía las condiciones de que nos liemos aquí a tiros, pues a tragar con la cultura de ‘invertir en un piso’ (técnicamente para el gremio del urbanismo y la vivienda, especular, generar una bolsa que no importa dejar improductiva porque adquiere automáticamente una plusvalía, por el mero hecho técnico y administrativo de la calificación de usos de suelo).
Así pues, Maroto, Iñaki, Florentino, Lorenzo Sanz, mi tia la del pueblo o Genaro el que vino de Alemania e invirtió sus ahorros, ESPECULADORES -eso sí- en legítima y absoluta legalidad. Y si no tenemos un tejido ni una cultura empresarial gracias a las ‘tres patas’ de la economía de Felipe González y sus teóricos, nos jodemos. Y nos metemos con el ‘y tu más’.

Dios salve al Conselleiro, siempre. El que al final tendrá la palabra para rubricar el sistema. Recuerden, amiguitos. Las competencias en Ordenación del Territorio y Urbanismo quedan para la administración autonómica.

Es solo un rianxeiro…

(*) Qué mas dará si es Maroto, Michel Salgado o Ricky Rubio. Lo interesante era el trasfondo.

2 comentarios

  1. Dice ser nachoenfuga

    Corro a ver a Leonidas,
    no me digas
    no me digas,
    con mi nuevo par de Adidas,
    no me digas
    no me digas.

    Yuri Andropov,
    Yuri Andropov,(…)

    Mucho mejor esta banda sonora sin cambiar de grupo, dónde va a parar. Zapatillas, correr,la cúpula del Kremlin,…

    Larga vida a Siniestro (y corta a Paco el Pocero, el especulador mediático que salva el culo a los especuladores anónimos).

    02 septiembre 2009 | 11:12

  2. Dice ser Landes

    Buena entrada ¡pardiez!

    03 septiembre 2009 | 10:21

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