Runstorming Runstorming

Poner un pie delante de otro nunca tuvo tanta trascendencia.

Abrazos

Domingo 10/05/09. Sesenta o setenta personas se abrazan a lo largo de 1207 metros de circuito. Acaba de sonar el segundo pistoletazo de los jueces que han medido durante 24 horas, 0 minutos y 0 segundos el girar de los participantes de Las 24. Podría haber sido una quedada organizada desde twitter o una gran boda. Bueno, no tan grande, hoy día quien no mete cien personas en un banquete no es nadie. Era la segunda vez que los eñes organizábamos las cosas de aquella manera. ¿De qué manera?

Tras las semanas y semanas de gestiones anteriores, presupuesto cero y cruce de camiones con vallas, emails, de ver volar las inscripciones y de ver volar a muchos preinscritos a otras pruebas, la familia del club estaba el sábado a las 9 de la matinée en el ferial adjunto a la plaza de toros de Torrejón. Día soleado, amenaza de tormentas, alivio momentáneo para los organizadores (el año pasado tuvimos una cuadrilla entera de desaguadores) y para las familias que en este mayo matritense celebraban bodorrio o comunión (¿existe despectivo para comunión?). Todos de tiros largos, todos presentes. Los silenciosos componentes de la fila que recogía el dorsal llevaban el gesto de la res que pasará al matadero. Los ruidosos organizadores eran el contrapunto vocinglero, plusmarca de decibelios de la IAAF y mención de honor de la república cantonal suiza. Lo menos. O sea.

A las seis de la tarde unos llevaban 50 kilómetros, otros 30, otros se miraban los pies, otros hacían la digestión del menú a trois que nos apretamos a la sombrita y alguno intentaba echar un sogato o colgar los pies del palo mayor para que bajara la sangre. Valencianos, británicos, canarios o madrileños iban sembrando la arena de la plaza de pisaditas, continuaban labrando en el cemento del circuito con un lijado permanente de suelas vibram y sistemas de control de amortiguación y pisada. Todavía nadie pensaba en los abrazos del mediodía sino en la charla con el ocasional compañero de vuelta; en mirar abajo cuando los primeros remolinos levantaban arena o en cómo empezaría su crónica.

Serían las ocho cuando nos trajeron una ración de croquetas y otra de migas. A unos pocos, escogidos. Pero sobre esto poco hay que mencionar. A esa hora los sesenta restantes estaban pensando en sus cosas o llamando a casa o se cambiaban de ropa en rituales repetidos, mil veces hechos en carreras cortas pero extrañamente nerviosos dentro de un túnel de giros que los llevaba a la noche. La noche, en ultrafondo, es la incógnita. Los que lograron un temprano 100km y terminaron por irse a casa desconocen qué hay más allá. Pues no hay nada. Después de la vuelta 83 viene la 84, el sueño, los ojos rojos y las rondas de café con artinatas y los bailes de la magnífica cuadra de avitualladores del club. Pero de la nada se pasa al nacimiento.

No es mística; el running es running (y walking, o plodding, o crawling) aquí y ahora y en cualquier lugar. Mas la aparición de las luces del día convierte las piernas en esponjas y dentro de uno se reinicia la vida. Permiteme que me explique: uno va jodido y le duelen n partes del pie y posiblemente el ano esté irritado por el rozamiento. Pero los ojos se van abriendo y huele de otra manera. No mirar al reloj es el truco. Llevas 18 horas en marcha -con sus dormiditas, conste- y por un momento no sientes nada. Echas un ojo al cielo tras 89, 102 o 185 kilómetros en tus piernas y un pensamiento acude a tu cabeza unas décimas de segundo: abrazar a ese cadáver que corretea o camina a tu lado y a quien llevas viendo desde el dia de antes.

Pensamiento que lleva a leer de nuevo el comienzo de esta entrada. Círculo cerrado. Pitido de la alfombrilla del chip. Otra vuelta. Nog een rondje.

DSC_9863

6 comentarios

  1. spanjaard

    Estadísticas absurdas horarias.

    Hora a hora. Km recorridos. 8-7-6-4-8-7-6-6-4-4-5-2 (12h 67km), 0-0-1-8-5-0-5-6-5-5-9-3 (12h-24h 46km). La hora más rápida, de la 22ª a 23ª.

    11 mayo 2009 | 10:15

  2. Dice ser efejota

    Luis como ya te dije, esta prueba me ha robado el corazon y deberias pensaros el cambiarla de nombre como por ejemplo «Hamter’s Race».
    Vete poniendo ya mismo la preinscripcion que para el proximo año hay cola.
    Acuerdate que yo hoy mismo solicito la inscripcion para el año que viene.

    11 mayo 2009 | 14:26

  3. spanjaard

    Jámsters turnamén. Quedaría entre verbena castiza y finales de la NBA, ¿que no?.

    11 mayo 2009 | 14:35

  4. Dice ser Yoku

    ¡Coño, si me has puesto en portada!

    Me has hecho muy feliz este fin de semana (y que sepas que es la primera vez que le digo esto a un tío…).

    11 mayo 2009 | 16:17

  5. Dice ser Bandoneon

    ¿Ultramaratones emocionales? A lo mejor esa es la clave del asunto. Ir por la vida coleccionando fines de semana felices a pesar de los dolores y los ardores. El año que viene me hago las 24hs y le voya robar la primer vuelta a Vilches.

    11 mayo 2009 | 20:08

  6. Dice ser Guille

    Me alegro que todo haya salido bien. Un abrazo fuerte, Luis

    11 mayo 2009 | 21:13

Los comentarios están cerrados.