Runstorming Runstorming

Poner un pie delante de otro nunca tuvo tanta trascendencia.

Aparta, sucia máquina

Que voy. Que llego lleno de goterones de sudor. Que anuncio el reposado de mis sudorosos contramuslos y peludas posaderas, apenas recubiertas por un pantalón de atletismo. Máquina, sucia, perra, asquerosa -comprende, querido diario, que esté aflorando ahora tanta espera, tantos años de tensión centrípeta- guarra combinación de poleas y sillín, aquí me tienes de nuevo. Vengo más grueso, más violento, vengo a tí, máquina babilónica, tortura inquisitiva, convertido en un conocido cacareador de mis experiencias. Me paran por la blogosfera y me piden que recuerde aquellas sesiones pornográficas contigo, empujón va y viene, preparando 101km de Ronda. De cómo, eso, de cómo nos enfrentamos. Ahora es como un nuevo episodio de Bola de Dragón.

Ha tenido que venir por mi camino, por mi escalada del zen absurdo de la vida, una estación de servicio de mi pueblo, del tuyo, claro, y digo que ha tenido que venir ofreciéndome un mes gratuito de masacre y sodomía cerdísima a cambio de 5 repostajes de más de 30 pavos. En dos meses tenía ya cumplimentado el proceso que me acercaría a tus bielas, sellado por el argentino más soso que ha logrado salir del país de Luis Migueles y de Gardel. Aparta porque tengo un bono de un mes entero para venir a encharcarte, maltratarte («hasta que digas sí», como decía el memo de Coque Malla) y no pienso tener compasión. Entre medias han de desaparecer mis nuevos solomillos, crecer mis espaldas, brazos brutales, quiero empezar diciembre con unos ¡brazoshbrutalefsh!). Tu querida cadena de gimnasios donde ya recalé gracias a vuestra disposición de abrir hasta las 23h, ese Fitness First de mi barrio, ha de transformarme, de permitirme lograr la forma física a base de escaquearme de correr.

Culos blandorros bajo -embutidos en- mallas blancas, monstruosos hombros articulados desde San Sebastián de los Reyes a las arenas romanas, latinas con el mp4 y sucesivas pero disimétricas marcas de maquillaje en su rostro, como marcas de agua de facturas del dentista. Solitarios que aprovechan horarios demenciales y horas de la siesta para entrar como yo, saludar desconfiado (y despeinado, sin afeitar y con un chandal estrecho para despistar), colocarme entre penes minúsculos comparados con las montañas de isquitibiales, cambiarne, y bajar a hacer un circuito de una hora sin descanso a la tríada de la Gomorra moderna: 2x[10 min de bici estática a potencia fuerte+ 1500m de remo (26spm, aprox 7:00 min)+10 min cinta de correr, 5’/km, terminando 1 min a 4’/km]. Ahí te quería yo ver, chirriando y resoplando por ese ventilador mientras tu ‘resistencia 7’ sufre los embates de mi cadera. Joder, casi escribo cafetera. Malditos dedos. Maldito cerebro. Eso, unos cuádriceps, unos isquiotibiales y 30 abdominales con su extra de pelos y una saunita turca posterior.

pd. El sabado, un nuevo descubrimiento en vivo (Beer Station): Luis Alvaro. Atención a este rapidísimo y futura estrella del humor.

3 comentarios

  1. Dice ser Mondo Gitane

    Y yo quejándome de la fauna afrikada (que no afrikana) del gym Conan de mis entretelas.

    03 noviembre 2008 | 15:19

  2. Dice ser spanjaard

    ¿Endevé usté va al Conan? Desde luego asoman por aquí las pasiones más bajas de cada uno.

    03 noviembre 2008 | 15:21

  3. Dice ser Guille

    Conseguirás quizás ponerte fuerte!!!!

    03 noviembre 2008 | 18:29

Los comentarios están cerrados.