Ciencia, tecnología, dibujos animados ¿Acaso se puede pedir más?

El negocio solidario

Ahora que son comunes las ONGs haciendo lo que los gobiernos no hacen, y hasta se premia con el Nobel a bancos que piensan en el desarrollo y no en el beneficio, llegan las empresas benéficas. Sus productos están diferenciados, y una parte de las ventas se utiliza para ayudar al desarrollo. Y no se trata de ‘un euro por producto’, sino de un verdadero reparto de beneficios. Así Apple lanza una edición roja del iPod del que destinará 10 dólares por unidad a ONGs, mientras que Motorola venderá teléfonos de ese color y destinará 17 dólares por cada uno a la lucha contra el SIDA en África. Aunque eso no es nada; la telefónica móvil belga Ello Mobile, que destinará todos sus beneficios (si, el 100%) a causas solidarias. Ello es un operador móvil virtual (que alquila redes ajenas), y su único objetivo es la solidaridad. Ahora uno puede llamar por teléfono o escuchar música a la vez que regocija su alma. O al menos alivia su conciencia.

4 comentarios

  1. Dice ser nombre

    sin comentarios

    17 octubre 2006 | 22:02

  2. Dice ser perico

    Bueno nombre, ya hemos entrado todos en http://www.miweb.com/mibanknew/index.html. ¿Tienes algo más que aportar?

    18 octubre 2006 | 8:13

  3. Dice ser ::

    «Ahora que son comunes las ONGs haciendo lo que los gobiernos no hacen»¡Ni deberián hacer!, Las ONG son muy útiles mientras gestionen ellas mismas los recursos que adquieren, sin obligar a los gobiernos a ofrecer ese ayuda. Los sistemas de ayuda mutua más eficientes son aquellos en los que el estado no recauda ningun dinero para ayuda y son los propios ciudadanos quienes la ONG a la que va destinado sus dinero, puesto que asi se crea competencia entre las ONG por lograr más resultados con menos medios.

    18 octubre 2006 | 10:24

  4. Dice ser Camarada Bakunin

    Apple podía empezar por pagar e imponer jornadas laborales como Dios manda a los obreros de sus fábricas en China… Si después les sobra algo, que jueguen a las monjitas.

    21 octubre 2006 | 9:54

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