‘Homeland’: Se acabó la felicidad, vuelve la Carrie guerrera

Atención: contiene spoilers de la quinta temporada

No sé vosotros, pero yo deseaba con todas mis fuerzas que llegara la quinta temporada de Homeland. Me moría de ganas de ver cómo evolucionaba la historia inacabada de Peter Quinn -mi grandísima debilidad, lo admito- y Carrie Mathison, y si esta última iba a ser capaz de desligarse por completo de la CIA.

Pues bien, la trama arranca dos años después del final de la temporada anterior. Y desde entonces han cambiado muchas cosas.

Nuestra rubia favorita se ha asentado en Berlín, donde tiene una vida ejemplar: un trabajo estable fuera de la CIA -ha logrado salir de ese nido de víboras sin alma, menos mal- y ahora ejerce de madre modelo de Franny.

Vamos a ver, esta no es la Carrie desequilibrada que conocemos, y esa, la de la bipolaridad y los pucheros (algún día deberíamos analizar esa manera de llorar tan suya), es la que queremos todos.

¡Qué manera de llorar!

Además de todo eso, ahora también ha asumido el papel de novia feliz y fiel. Ya no le van los ‘yogurines’, su nuevo fichaje es un pelirrojo (vaya obsesión tiene la muchacha) que bien podría ser el yerno que toda madre quiere para sus hijas. Es decir, todo lo contrario a Peter Quinn, «el hombre que mata a los tíos malos».

Pero esa estabilidad y vida perfecta se resquebrajará en el tercer episodio, que emite esta noche Fox, en el que volveremos a ver a la Carrie exagerada de los inicios tratando de averiguar quién intenta acabar con su vida.

Los primeros capítulos no han sido los mejores, pero tampoco lo fueron los de la cuarta temporada y luego me sorprendieron gratamente. De hecho, la cuarta se ha convertido en una de mis entregas favoritas de la serie. Así que tengo todas las esperanzas depositadas en los guionistas para que los episodios, que ponen el foco en la crisis de refugiados y en las filtraciones de documentos, vayan ganando ritmo y agilidad.

¡Os dejo el tráiler!

Almacenado en: Series extranjeras