Entradas etiquetadas como ‘nueva york’

Aparcando por lo civil o por lo criminal

Una de las cosas que más rabia da cuando vas en el coche, además de tener un coche delante que se cambia de carril sin usar los intermitentes, es ir buscando un aparcamiento y encontrarlo… demasiado pequeño para tu coche. Estás haciendo maniobras y llega un momento en el que te tienes que rendir y admitir que, como decían en La cosa más dulce: «No puede caber aquí».

Eso ocurre en España, porque nuestros carriles son estrechos y en cuanto tardas más de 30 segundos en aparcar tienes a cuatro o cinco personas fuera de sí pitando y dando voces, pero… ¿y si nos vamos al extranjero? ¿Qué ocurre en Nueva York cuando un hombre encuentra un sitiazo? Pues que allí son mucho más duros de mollera y además los carriles son más anchos. Conclusión… lo vemos:

Por si vais con prisa y no tenéis tiempo para echarle un vistazo, os resumo que el dueño del coche se prepara para aparcar en un espacio justito y a base de maniobras y besitos a los coches que ya estaban aparcados lo consigue. No solo eso, sino que además la cámara de circuito cerrado que capta la escena continúa grabando y podemos ver cómo el conductor saca el coche a base de las maniobras que había usado para clavar ahí su coche.

Los hechos sucedieron en Brooklyn (Nueva York, Estados Unidos, planeta Tierra) y en poco más de una semana el vídeo ya está rozando el millón de visitas en YouTube. Parte del éxito está en que la prensa internacional se ha hecho eco (una de esas frases hechas que solo se escriben, nadie las dice en voz alta) de las imágenes.

No es el único caso, lo sé. Seguro que en España también ocurrirá y a poco que buceemos por Internet encontramos más vídeos similares en la Gran Manzana, aunque a cámara rápida hacen más gracia.

Porque cuando un neoyorquino quiere aparcar, aparca, os lo aseguro. Allí es bastante complicado encontrar un aparcamiento como para dejarlo pasar por unos cuantos centímetros. Pasa ahora, como en el primer vídeo, y pasaba antes, como en el vídeo que os pongo a continuación, que está fechado en 2008.

PD: Ya sabéis que en situaciones como ésta solo puedo parafrasear a Manquiña y decir eso de… «Profesional, muy profesional».

Una española perdida en… Nueva York

BecConsejo: «No lo dejes para mañana, por si acaso»

¿Os acordáis de cuándo viajábamos todos los lunes a visitar algún lector del blog? Ahora solo nos quedan tres viajes. En éste visitaremos Nueva York. Visitantes, por azar o a conciencia, os presento  Lucía, que quizás nunca me perdone el retraso con el que publico esta historia.

– 

1) Nombre

Lucía

2) Edad

25 años.

3) En España vivía…

En Alcalá de Henares, Madrid

4) Ahora vivo…

En Nueva York.

5) Me mudé…

Me mudé a Boston en agosto del 2008, y a Nueva York en otoño de 2009.

6) ¿Por qué me fui?

A Boston fui con una beca para estudiar un curso de mi doctorado en una universidad privada, al final estuve trabajando allí dando clases, conocí a mi novio y me busqué cualquier excusa para regresar con él.

En 2009 me vine con la beca de auxiliar de conversación a Nueva York, a Brooklyn.

7) La mejor comida de aquí es…

Lo famoso es la CheeseCake, pero lo cierto es que hay millones de restaurantes de todo tipo.

Si se quiere uno americano, las típicas cadenas como TGI Friday’s (están presentes por todas partes), el Hollywood de Michael Jordan también es famoso pero mucho más caro, y típico típico y recomendable es comer «street meat», es decir, de un carrito de estos de por la calle.


 

1) De España añoro…

Mi gente, lo que más, mi familia, mis amigos, aunque con Internet, las distancias no existen. Echo de menos los horarios, sobre todo para salir por la noche, las horas de las comidas me dan igual, comes cuando todos, cuando te permite tu horario de trabajo… pero eso de cenar con los amigos a las 8 (como tarde tarde) y salir pitando para el bar a las 10 porque cierran a la 1 o las 2… me cuesta, y bastante.

2) En España no tenía y ahora sí…

¡¿Además de un marido?! Yo aprecio la variedad, tener opciones, todas las opciones del mundo. En Estados Unidos en general, las opciones son siempre muchas más, pero en NYC son todas las que uno pueda imaginar. Es una ciudad donde si no quieres, no paras de hacer cosas. Eso sí, se necesita mucho dinero, porque los famosos shows de Broadway, los musicales, conciertos, espectáculos, son todo bastante caros. No obstante, la opción existe y no es imposible.

3) De Nueva York no me gusta…

El tiempo. Tanto en Boston como en Nueva York hace mucho frío, mucho mucho. En Boston comienza a nevar en noviembre y la última cae en abril, y en ningún momento se ha deshelado. Eso para mí fue duro, aunque en un principio parecía divertido, pero que estuviera permanentemente haciendo mal tiempo (no solo frio) se llegaba a hacer un poco intenso.

4) No puedes dejar de visitar…

Es típico, pero hay dos cosas que aunque ya había estado muchas veces en Nueva York me siguen impresionando: Times Square y el Empire State Building, por la noche eso sí.


Ahora probablemente Lucía está en Baltimore, pero hagamos un viaje temporal y transatlántico (¿cuántas veces tendremos ocasión de hacerlo?) para conocer la Gran Manzana. Bienvenidos a Nueva York. ¿Ampliamos un poquito su historia? Venga, os dejo con ella:

La comida

«No añoro la comida. En América se come bien. Es un dogma que no me canso se repetir, porque no sé de dónde viene la idea de que en los Estados Unidos sólo comemos perritos y hamburguesas. Es el país de la variedad, de las opciones, y, sobre todo, un país consumista, en el que la oferta y la demanda lo dominan todo.

Los restaurantes no son menos que las tiendas de moda. Las opciones son infinitas, infinitos estilos, infinitos lugares de procedencia, infinitos rangos de precio, infinitos restaurantes en cada calle… Y en el supermercado las opciones continúan y se disparan, las carnes son buenísimas, el pescado es muy popular (especialmente en la costa este), la variedad que hay de complementos para la comida es mucho mayor que en España, muchos más aderezos, salsas, condimentos, verduras preparadas… puede que no sean los mismos (en ningún otro país he conseguido un tomate frito como el nuestro de los tetra brik pequeñitos) pero son más y no necesariamente para ayudar a la obesidad. Así que no echo de menos nada de la comida española, aquí se puede hacer prácticamente lo que sea que echas de menos de casa».

Los horarios

«Lo que sí añoro son los horarios. En España yo cenaría a las 10, tranquilamente a las 12 se sale y a la 1 llegas al bar o discoteca y hasta que el cuerpo aguante. Cuando allí ya llevamos unas cervezas y decimos que nos vamos a casa, miro el reloj y son las 12.30, la verdad que me da un pellizquito por dentro, echo de menos la cultura mediterránea donde socializamos más, apreciamos más la vida que se puede hacer por la noche. Ellos echan el cierre al día mucho antes, días de diario o fines de semana (aunque también madrugan más en los días de fiesta de lo que hacemos en España)».

Multiopción

«En NYC si lees que una famosa se ha puesto pestañas postizas y quieres tenerlas tú también, no hay problemas, puedes estar 100% segura de que va a haber varios sitios en la ciudad donde están deseando hacerse la competencia en ponerte tus pestañas postizas. Es decir, en esta ciudad lo tienes todo, lo buscas en Internet y lo tienes a la puerta de tu casa.

Estados Unidos es un país muy grande y muy diverso, no se puede decir lo mismo de un sitio que de otro, pero lo que sí se puede extender a todo es que tienes opciones, tienes variedad. A mí me gustan mucho los yogures, por ejemplo, bueno, pues no solo hay muchas marcas y muchos tipos (más o menos grasa, con fibra, con vitaminas, con trozos, con cereales, para beber, con calcio…) sino que, además, cada marca tiene innumerables sabores; Yoplait que era una marca que estaba en todas partes hace años en España y hace ya tiempo que cuesta encontrarla, en USA tiene 27 sabores estándar, que se suelen complementar con los de esa temporada (los de verano, ediciones de Halloween, de Navidad o de la fruta de la temporada. Lo que más me gusta es que aunque a veces lleguen a ser demasiados o estrafalarios, siempre tienes opciones, siempre hay algo nuevo».

Tiempo, transporte e impuestos

«El frío y la nieve son a veces es un problema. En parte por lo que eso supone a la hora de transportes, aeropuertos cerrados, carreteras atascadas… aunque es cierto que están sumamente preparados (¡¡lógico, les pasa todos los años!!).

No obstante, de Nueva York me gusta casi todo, me gusta que tiene buen transporte público, y que las zonas buenas y malas están bien delimitadas, no como en Baltimore.

No me gusta que los impuestos son caros, y aquí el precio que ves nunca tiene eso incluido, y hasta un paquete de chicles en el supermercado te sale más caro de lo que esperabas y en NY resulta ser bastante mas caro».

Las visitas obligadas

«Como os decía, es típico, pero hay dos cosas que aunque ya había estado muchas veces en Nueva York me siguen impresionando: la primera es Times Square por la noche.

Cuando está oscuro, llegas a este cruce de avenidas y es diferente a ninguna otra cosa. Es mucho más que Londres, es más que Tokyo, y además te ves flasheado por las luces, las pantallas gigantes, los titulares, los anuncios… y piensas «esto es Times Square». A mí por lo menos me hace sentir pequeña, el ritmo del lugar con la gente deprisa, las luces y los anuncios cambiando cada segundo, te transmite la energía de la que estás rodeado.

Y la segunda es el Empire State Building, por la noche eso sí. Subí hace años por el día y fue bonito, pero después subí por la noche y fue impresionante. Cada vez que subo se me encoge el estómago. Todo eso que se extiende alrededor lleno de lucecitas, los puentes, los rascacielos… todo eso es Nueva York, y a mí se me pone la piel de gallina».

Bueno, le damos un besazo enorme a nuestra genial guía y nos preparamos para los dos últimos viajes. Descansad, familia, que lo tenéis merecido.

PD: Las fotos son de Lucía.

PD2: Bético, te guardamos el sitio por si te toca volver.

Lo más raro de la semana (6-12 de junio)

BecConsejo: «Resume lo mejor que puedas»

Esta semana me he dejado muchas cosas por contar, así que mejor voy directamente al lío en vez de enrollarme como hago de costumbre.

¿Qué es lo más raro de la semana? ¿Que nos hemos dejado por contar?

1. Un policía incapaz de dirigir el tráfico

A mí me hace gracia ver cómo Ramiro dirige el tráfico, pero supongo que a los conductores que tienen que atender sus instrucciones no les gustará tanto.

Lectores (habituales y ocasionales), les presento a Ramiro, el policía más famoso de Filipinas. Tiene 54 años y trabaja en Pásay, Filipinas.

Quizás le hayáis visto en la tele pero si no… amigos, merece la pena que gastéis unos minutos de vuestro tiempo en observar cómo ¿dirige? el tráfico entre bailoteos.

Digo en el titular que es incapaz de dirigirlo porque creo que resulta imposible dar instrucciones con algo de criterio mientras tratas de no perder los pasos de baile, pero también es cierto que, como no se ven accidentes a su alrededor, podemos decir que cumple su trabajo a la perfección.

Diría mi padre (que me dio el chivatazo) que al menos no entorpece el tráfico. Diría también que ya podríamos ganar nosotros el dinero así de fácil.

Lleva seis años como policía de tráfico y practica los movimientos en casa, según publica Sky News. Y todo porque se marca como objetivo llevar felicidad a los conductores y peatones. Ojalá y lo esté consiguiendo.

2. Grabó su venganza en vídeo

dutx12 me pasó el otro día un vídeo en el que veíamos cómo multaban a un ciclista neoyorquino por no ir por el carril bici y éste demostraba a los agentes que no se puede ir por el carril bici en Nueva York.

Cualquier persona habría intentado hacer entrar en razón a los agentes pero Casey Neistat no es cualquiera. Es un cineasta tozudo que pensó que la mejor forma era grabarlo todo.

Así pues, ha subido un vídeo en el que se ve cómo intenta no salirse del carril bici… sin conseguirlo. Como lo bueno es el vídeo, aquí va:

3. El Titanic II se hunde en su viaje inaugural

Algunos nombres traen consigo el gafe. No, no me refiero a Ricardo Rocha o Doofenshmirtz, sino al del Titanic (siempre digo que es estúpida esta incertidumbre cuando ya os he dado la clave en el titular.

Os cuento: Mark Wilkinson compró un yate y lo llamó Titanic II, para hacer la broma. Lo que no esperaba es que cuando se disponía a realizar su primer viaje el barco éste se hundiera obligando a las autoridades portuarias a rescatar tanto a Mark como a su capricho.

Dice el pobre (porque al final un poco de lástima sí que te da) que ya empieza a estar harto de las bromas de la gente. Yo le diría que no hubiera tentado a la suerte, que es como si acampas en una lancha llamada «el barco de Chanquete» (o La Dorada) y te desaloja la Policía. Las risas iban a llegar hasta Condesa de Venadito 1.

4. ‘Shrek’ ha muerto

La oveja más famosa de Nueva Zelanda ha muerto, tal y como me informaba recientemente Pedro, expatriado por aquellas tierras.

No sé si conocéis su historia, pero si no, como os la voy a contar, ya tenéis excusa para visitar el Museo Nacional de Wellington (Te Papa) que será a donde la lleven.

Bueno, mejor que os la cuente el propio Pedro, que es un pedazo de crack:

«Era una oveja como otra cualquiera hasta que un día vio que venía un esquilador y aquello no le dio muy buena espina, así que decidió que, por si las moscas, se daba el piro y se escondió por unas cuevas. Tan bien lo hizo que no la encontraron, y pasó el tiempo, pasó el tiempo, hasta que, por fin, en el 2004 encontraron a la oveja.

Habían pasado nada menos que seis años desde que la oveja hizo mutis por el foro, y, efectivamente, ningún esquilador la había encontrado, ¡¡porque llevaba ella sola 27 kilos de lana acumulada de esos seis años!! Tal fue el acontecimiento que hasta la esquilaron en directo por la TV».

PD: Con tanto lío, no he podido ni hablaros de la broma del champú que me pasó la argentina más guapa del mundo (Gaby).

Esto es lo que hay en el agua del grifo

BecConsejo: «Que la razón nunca sea ‘porque sí»

Si yo os digo «como el agua», muchos pensaréis: Camarón. Pues bien, si os dijera que ambos conceptos («como el agua» y «Camarón», por si os habéis perdido) están estrechamente relacionados, más allá de una simple canción, ¿qué me diríais? Que no os importa, ya, pero bueno, estáis dentro del blog, tenéis que seguir leyendo porque ya no tenéis escapatoria (bueno, ahora que lo pienso… sí, podéis cerrar la ventana, pero ¿vais a ser tan crueles?).

Resulta que @tinoserrano me vio beber agua del grifo y me dijo: «¿Has leído lo que tiene el agua del grifo de Nueva York?» Y yo… «pues nop» (sí, dije «nop»… culpable). «De todos modos», proseguí, «seguro que no está tan buena como el agua de Madrid» (aquí somos estúpidamente chovinistas con el agua del grifo… a los tontos por donde les da por algo será).

Cuando volvimos a nuestros respectivos asientos me pasó un enlace de The Times y me dijo que lo leyera. Una vez lo había leído me dije que tenía que hacer un post contándolo, porque yo no leo nada gratis, de lo contrario sería alguien inteligente y preparado.

Así fue como me enteré que el agua del grifo en Nueva York tiene buena fama, casi tan buena como la de Madrid. Lo que pasa es que («lo que paj que», como decimos aquí) en el agua del grifo de Nueva York hay unos camarones microscópicos (los que véis en la imagen) que quizás le den el toque maestro que toda buena agua del grifo necesita.

Los camarones que veis son fruto del análisis microscópico y es posible que su labor sea la de comerse las larvas de los mosquitos (al menos, eso dicen).

En cualquier caso, no los busquéis cuando abráis el grifo porque, primero, es posible que no las encontréis (ya sea porque no existan o porque aunque existan no tenéis súpervisión -sí, sé que he puesto dos tildes-) y, segundo, porque… ¿realmente tienes necesidad de saberlo? Yo, con esto, vivo la mar de feliz en mi ignorancia.

PD: No suelo escribir más de seis párrafos porque, aunque tenga muchas cosas que contaros, entiendo que no a todo el mundo le apetece leerlo. Así seguimos con la tradición de los posts de usar y tirar, de consumo rápido y poco esfuerzo mental.

Dos profesoras desnudas en el aula y otra que ‘tontea’ con un alumno

Una cosa es mandar unas fotos picantes a Penthouse y otra muy distinta es lo que ocurrió en el James Madison High School, en Brooklyn (EE UU). Es sin duda el colegio más extraño que he conocido y se parece más a una versión erótica de Al salir de clase que a la solemne institución a la que yo fui de pequeño. Voy a ir por partes, para que nos quede todo ordenadito.

Alini y Cindy

Alini Brito (29 años) es profesora de español y Cindy Mauro (33 años), de francés. Ahora son famosas en todo el mundo porque mientras los alumnos estaban en el auditorio viendo un espectáculo de talentos, ellas estaban desnudas en un aula vacía pasando un rato… divertido.

Fueron pilladas por un conserje y ahora son la comidilla de la escuela. Robert Colantuoni, bedel del colegio, no quiso comentar el suceso y el marido de Alini Brito, que fue telefoneado por la prensa americana, dijo no saber nada de las acusaciones.

Los alumnos, que cuando pasan estas cosas se vienen arriba, dicen que Cindy Mauro vestía «como un adolescente» con «escotes, pantalones cortos…». Al parecer tiene varios tatuajes sugerentes: un sol en la zona lumbar, una flor en la pierna y una estrella en el pie.

Allison

Después de la polémica desatada por Alini y Cindy llegó Allison Musacchio (31 años), a la que está investigando por tener una relación inapropiada con el alumnado masculino.

No sé si se habrá sobredimensionado el asunto después de lo que había pasado con las otras dos profesoras o realmente era para tanto: el caso es que una estudiante vio una llamada de la profesora en el móvil de su ex novio y de ahí todo el follón.

Las autoridades encontraron más de 200 mensajes y llamadas entre la profesora y el alumno en cuestión. El novio de Allison, al igual que el marido de Alini, dijo no saber nada de los hecho.

FOTO: Allison Musacchio (izq), Cindy Mauro (centro) and Alini Brito (der)

PD: Ya no hay profesoras como las de antes…

Hoy hace un año…

Tenía un problema con el cruising

Larrosa necesitaba ayuda

– Envía el post:

Bookmark and Share

Un español perdido en… Nueva York

En Aerolíneas Bec no hay puente y, un lunes más, tomamos un avión virtual. Dejamos Penzance, donde Ali se portó la mar de bien con nosotros, y nos ajustamos bien el cinturón porque espera un viaje largo.

No os preocupéis, porque no cambiamos de idioma. El viaje es largo pero volamos a… ¡¡¡NUEVA YORK!!!. Allí nos espera Jorge, que es un tío bien majo.

En el avión nos espera Snatch (cerdos y diamantes) y Aventura de Joselito en América, qué demonios.

1) Nombre

Jorge.

2) Edad

29 años.

3) En España vivía…

En Madrid.

4) Ahora vivo…

En Manhattan, Nueva York (Estados Unidos).

5) Me mudé…

He vivido aquí intermitente desde el año 2004.

6) ¿Por qué me fui?

Por seguir a mi mujer por el mundo y buscar alguna oportunidad que me solucione la vida.

1) De España añoro…

¡¡Al Real Madrid!! Aquí se puede ver el fútbol, pero no es lo mismo. También a la familia y amigos, claro, y sin duda alguna, el jamón serrano… cuando te vas de España te vuelves muy típico, por lo visto.

2) En España no tenía y ahora sí…

Mi mujer está aquí y mi nivel de inglés ha mejorado. Además, los salarios son mejores.

3) De Nueva York no me gusta…

El frío invernal. A veces llegamos a 10-12 grados bajo cero.

4) Recomiendo que visitéis…

Nueva York es muy atractiva para los turistas. Tienes el Metropolitan museum, la ópera en el Lincoln Center y un buen número de museos dignos de visitar como el MOMA y el museo de ciencias. Por supuesto puedes gastarte un montón de dinero en buenas ofertas, sobre todo ahora que el dólar está tan barato. Century 21 es un centro comercial con muy buenas ofertas y está justo pegado a la zona cero. Central Park es un parque muy agradable para visitar.

5) La mejor comida de N.Y. es…

La comida internacional. Puedes encontrar restaurantes de casi cualquier parte del mundo.

Bueno, esto es Nueva York y aquí está Jorge. Os dejo con él para que os cuente un poco cómo funcionan aquí las cosas.

El frío de Nueva York

«La primera vez que viajé a Nueva York fue en febrero de 2003. Hacía tanto frío que, esperando a coger el taxi en el aeropuerto, las orejas empezaron a dolerme. Sin duda alguna, el frío es lo peor de Nueva York (desde mi punto de vista). Si a eso le sumas la nieve se te presenta un invierno bastante desagradable.

Mucha gente en España piensa que la nieve es fantástica, que es preciosa y que hace que la gente sonría. La verdad es que la nieve deja de ser divertida cuando te tienes que levantar a las 6.30 horas de la mañana con 10 grados bajo cero para limpiar tu coche antes de ir a trabajar.

Una vez que la nieve empieza a derretirse empieza la parte realmente divertida. Primero se convierte en nieve negra (por la suciedad de la ciudad) y después, por las noches se congela por la bajada de las temperaturas. En este punto es cuando tienes que andar con mucho ojo para no partirte la crisma en un mal resbalón.

Es muy curioso ver las grandes avenidas después de que los quitanieves la hayan empujado la nieve hacia los coches aparcados. Se forman verdaderas murallas de nieve que bloquean los coches. Un consejo, si vienes a Nueva York durante una nevada no aparques tu coche en una de las avenidas.

El transporte

El metro es el medio de transporte más eficiente Funciona bastante bien durante la semana, pero es mejor que vayas con tiempo si quieres ir en transporte público un domingo.

Los autobuses son bastante frustrantes ya que paran cada dos esquinas. En algunas ocasiones puedes incluso ver la siguiente parada desde la parada anterior.

Los taxis son una buena elección si no es hora punta, además tienen su gracia porque casi todos los conductores son indios o pakistaníes y siempre están hablando con el manos libres. Las primeras veces que usé un taxi tuve problemas porque no sabía si el taxista estaba hablando conmigo o por teléfono.

Si tienes coche, aparcar puede ser un serio problema dependiendo del barrio donde vivas. En mi barrio es medianamente complicado aparcar y si quieres tener el coche en un aparcamiento todo el mes te sale por la módica cantidad de 500-800 dólares mensuales. Lo bueno de aparcar en la calle es que te puedes cruzar con algún famoso rodando una serie o una peli (es bastante común ver rodajes por mi barrio).

La gente

Nueva York es una jungla de acero, cemento y gente rara. Es bastante común cruzarte con gente que está hablando (o gritando) sola, o entrar en un vagón de metro abarrotado de gente y que alguien empiece a dar un sermón sobre lo maravilloso que es Jesús y lo horrible que somos todos los pecadores. También puedes encontrarte a un cowboy en calzoncillos en Times Square y sacarte unas fotos con él.

A los americanos parecen encantarle los deportes (ahora mismo estoy escuchando el himno americano en el sexto partido de la final de las ligas mundiales de béisbol. Filadelfia contra los Yankees de Nueva York, si ganan vamos a tener fiesta). Tienen béisbol en verano-otoño, baloncesto y fútbol americano en otoño-invierno y hockey durante invierno-primavera.

Desde luego tienen variedad durante todo el año. También tiene liga de fútbol durante la primavera y el verano pero nadie le presta la más mínima atención en Nueva York.

Los famosos

Si hay algo abundante en Nueva York son los famosos. Me he cruzado con unos cuantos, Natalie Portman, Hugh Grant, Anthony Edwards (de Urgencias), “recluta patoso” de La chaqueta metálica (no me acuerdo de su nombre), pero mi favorito es Denzel Washington.

Fue una tarde al salir de la consulta del médico. Aquí muchas consultas están en apartamentos ya que suelen ser médicos privados. Al salir a la sala de espera, que estaba en el hall del apartamento, me paró Denzel para decirme que tenía el bajo del pantalón metido dentro del zapato. La verdad es que se me debió quedar cara de tonto porque desde luego no me esperaba que un actor famoso fuera al mismo médico que un currante. Que majete Denzel.

Dentro de Harlem

Otra experiencia curiosa fue mi primera incursión en Harlem por la noche. Íbamos mi mujer y yo a buscar el coche de una amiga a eso de las 11 de la noche. No sabíamos dónde estaba el coche exactamente así que tuvimos que pasearnos bastante por la zona.

Era como estar en una peli, grupos de afroamericanos (aquí hay que ser políticamente correcto) jugando al baloncesto en canastas con redes hechas con cadenas y otros grupos en la puerta de tiendas haciendo vete tú a saber qué. He de reconocer que en ese momento todas las pelis en las que empiezan los tiroteos y secuestran al pobre extranjero se me pasaron por la cabeza, pero no pasó nada. Seguramente estaban todos allí charlando sobre la última peli de Amenábar pero yo que soy un mal pensado siempre me espero lo peor.

De compras

Ir de compras en Nueva York puede ser toda una aventura, sobre todo si decides ir en Navidades al Soho o a Rockefeller center. Jamás en mi vida he visto tráfico de viandantes para poder cruzar la calle (tuve que esperar tres semáforos para cruzar).

En las tiendas de ropa siempre tienen una sección de rebajas, normalmente porque tienen nueva mercancía cada poco tiempo. Si no te importa llevar lo último que ha salido a la venta puedes conseguir ropa de calidad por un precio bastante razonable.

Curiosidades

Algunas curiosidades que se me ocurren: La gente no le quita las pegatinas y en ocasiones el precio a las gorras de equipos deportivos, supongo que para demostrar que son originales. La verdad es que es bastante ridículo.

Puedes identificar a un español en el soho por que son los que más bolsas de Levis llevan.

Los anuncios de la tele suelen ser sobre coches, comida basura o medicamentos como viagra. Curioso».

Bueno, Jorge os acaba de demostrar que no mentía, es un tío simpático y muy atento. Aún así, creo que ya le hemos robado bastante tiempo, así que vamos a dejarle descansar.

Las fotos del post son propiedad de Jorge, que amablemente me las cedió para que las usara. Ya sabéis que si vosotros también sois españoles expatriados podéis escribirme a elblogdelbecario@gmail.com y os cuento cómo funciona esta sección.

PD: ¿Algún español en Nueva Zelanda?

Hoy hace un año…

Conocíamos a un armario empotrado de 85 años

Un gato nos volvía locos

– Envía el post:

Bookmark and Share


Gossip Girl: Serena no pasa por 16

Me he enganchado a Gossip Girl, de hecho me he comprado la primera temporada para poder verla en versión original (subtitulada, claro) y sin anuncios. No digo que esté bien hecha porque a mí eso suele darme igual. Lo único que me interesa de una serie es que me entretenga, y esta lo consigue.

Dicho esto, a mi juicio, hay un gran ‘pero’. Los que dirigen el cotarro han hecho verdaderas tropelías al elegir los personajes. Cada vez que veo a Serena van der Woodsen (encarnada por la actriz Blake Lively) me pregunto quién fue el genio que decidió otorgarle el papel de una muchacha de 16 años. La chica es una monada y en realidad no está tan lejos de su personaje (tiene 21, pero los capítulos que están poniendo son de 2007, es decir, que sólo estaba tres por encima), pero tiene un handicap: aparenta 28. Una chica así no va al instituto si no es para dar ella la clase. Todos sabemos que lo normal es dar este tipo de papeles a actores más mayores… pero que aparenten menos de su edad real (que luego pasa como con Fran Perea en Los Serrano), y más si tienen amigas como Jenny Humphrey (Taylor Momsen) que tienen que pasar por dos años menos cuando en pantalla parecen diez.

Y es que Serena parece mayor que todos, incluidos su querido Dan Humphrey (Penn Badgley) y su extrañamente inseparable Blair Waldorf (Leighton Meester), en mi opinión la mejor caracterizada (y eso que es un año mayor). Serena podría ser tranquilamente la novia de Humphrey padre, que tampoco aparenta tener hijos adolescentes (este es al revés), y la madre de su hermano, que para colmo parece mucho más canijo de lo que dan a entender.

PD: Por cierto, ¿por qué en las series estadounidenses el protagonista lleva mal puesto el uniforme del colegio? Esta moda empezó en el Príncipe de Bel-Air.

( FOTOS: The CW/Andrew Eccles/Frank Ockenfels)

Envía el post:

http://www.wikio.es