Por segundo año consecutivo voy al salón de loterías a contaros las tontunas que vaya viendo por allí. El año pasado me sirvió de entrenamiento, así que prometo esforzarme para mejorar los errores de antaño.
Os confieso una cosa, ahora que no me oye nadie… voy un poquito a ciegas. No he podido probar nada y todavía no sé la conexión no me traicionará a última hora (crucemos los dedos).
Por delante me espera un día de lo más entretenido: posts y tweets (o tuiteos) para contaros, de la forma más entretenida posible, algo que pasa todos los años y que siempre beneficia a otros que no somos nosotros.
En los comentarios os podéis desahogar, podéis llorar, podéis insultar… lo que queráis, vamos. Cualquier cosa con tal de que la mañana se os haga más entretenida.
Si estáis viendo el sorteo y os surge cualquier duda, preguntadme, que os la intentaré resolver.
PD: Entenderé entonces que todos los insultos vienen de personas a las que no les ha tocado ni un euro y que plasma su frustración aquí. A mí también me duele trabajar, ¡pero qué le vamos a hacer!