BecConsejo: «Conoce tus posibilidades (y tus límites)»
Agosto agoniza y dicen que septiembre es mes de bodas. El calor empieza a desaparecer, las lluvias aún no aprietan, muchos han podido guardar unos días de vacaciones y, aunque el bolsillo suele estar tiritando, todo lo demás parece compensar.
Sin embargo, no todos piensan así y los hay que prefieren el cálido agosto para su enlace. Un ejemplo de ello son los estadounidenses Brittany Lurch y Arthur Phillips, que se casaron recientemente y decidieron que para el banquete estaría genial robar la comida en vez de pagarla (claro, con la pasta que se va organizando una boda, no me extraña). Lo que probablemente no entraba en sus planes es que la fiesta no se celebrara y que ellos pasaran la noche en el calabozo, según publica la prensa local.
Decía en el titular que robaron para su boda y no es exactamente así, perdón por no concretar. Lo cierto es que la robaron para celebrar un banquete con los amigos y la familia en lo que suponía su primera fiesta como casados. Allí (en Estados Unidos) lo llaman «wedding reception», pero yo lo voy a llamar «banquete de bodas», pese a que ya estuvieran casados desde un día antes.
En cuanto a su problema… es lo que tiene no planear las cosas con tiempo. Horas antes de celebrar la comilona fueron a comprar, pero cuando se dieron cuenta en el carro llevaban más de 700 euros en alimentos y claro, no llevaban suelto. Total, que decidieron que lo ideal era salir del comercio despacito con sus carros, montar en el coche y marcharse. No contaban con que las cámaras de seguridad les grabarían y terminarían detenidos.
La Policía les detuvo, no pudieron estar en su banquete (supongo que si alguien fue no podría comer más que latas de conserva, porque la compra la tendrían que devolver, digo yo) y su luna de miel se verá trastocada después de que hayan tenido que pagar unos cuartos (los que no se querían gastar en comida) para pagar la fianza.
Para colmo de males, encontraron una pipa para fumar marihuana en el coche de Arthur (él tiene 32 años y ella 22, que no os lo dije y le empapelaron más aún por ello. Seguro que si lo hicieran ahora, montaban una boda pequeñita y ponían de menú filete empanado.
PD: Cuando yo me case, me parece que lo haré en septiembre. En agosto hace mucho calor, ¿no?
me encantan q se inventen los titulares xa q la gente acceda a leer la noticia chorra del día…viva el periodismo sesudo!!
30 agosto 2011 | 13:04
Rednecks, white trash
30 agosto 2011 | 13:20
La estupidez humana no tiene límites…..
30 agosto 2011 | 13:34
¿Vas muy deprisa, no?…. es estresante.
Desde mi nombre puedes ir a mi blog de cachorros en adopción.
30 agosto 2011 | 14:57
jajajajaja, muy bueno bec
30 agosto 2011 | 15:01
madre mia…hay que terner jeta XDD si no tienes dinero pues haces un acuerdo con los amigos para celebrarlo cuando andes mejor de pasta
Eso si….me parto de risa imaginandome la conversación entre ellos cuando les vino la idea
30 agosto 2011 | 15:24
Que triste es que tu tengas trabajo y yo amigos con 2 carreras que estén en el paro
30 agosto 2011 | 15:42
@Pedro, lo triste es que vengas aquí, a un Blog, a lloriquear.
¿De que te sirven las 2 carreras si crees que el único trabajo de Bec es esto?
@Nenu: tres cuartos de lo mismo, no se si es trolleo o de verdad crees que la sección de Bec es el Times
En fin, Saludos!
30 agosto 2011 | 15:53
Lo hicieron muy mal esta pareja, si hubiesen hecho como unos conocidos mios nada de esto hubiese ocurrido.
Se casaron hace un par de meses en el juzgado. Unos dias mas tarde recibo una invitacion para la «wedding reception» que se celebraba en su casa, donde se pide a los invitados que contribuyan a la fiesta con un «side dish», yo lleve tortilla espaniola, ademas de traer su propia bebida: BYOB ( bring your own bottle).
No contentos con eso, habia una nota escrita a mano: No tenemos lista de boda pero Tarjetas de regalo de Wall-Mart seran muy apreciadas.
Hay quien de mas?
30 agosto 2011 | 18:13
Mi boda fue muy cutre, había cero presupuesto, nos lo habíamos gastado todo en comprar el piso y amueblarlo lo justo. Así que no hicimos fiesta, cada uno de nosotros invitó a sus amigos más íntimos a una cena, y nada más. El día de la boda, mis suegros ofrecieron un pequeño refrigerio en su casa. La escasez de medios no impidió que 35 años después aún sigamos unidos.
31 agosto 2011 | 10:40