"El deseado bien último se alcanza mejor mediante el libre comercio de ideas".(1919) Juez O. Wendell Holmes del Tribunal Supremo de EE UU

La asignatura de ciudadanía

Los cardenales Rouco y Cañizares están movilizados y publican libros, pronuncian conferencias y sermones, dirigen cursos, participan y convocan manifestaciones contra la política del gobierno. Esta semana ambos cardenales participan en un curso de verano de la Universidad madrileña Rey Juan Carlos titulado “la enseñanza de la religión” con Mariano Rajoy como ponente destacado (también José Bono). La enseñanza y la familia forman parte de la agenda de preocupaciones de la jerarquía católica en confrontación con el gobierno Zapatero.

Uno de los objetivo de los cardenales es esa nueva asignatura denominada “Educación ciudadana” que forma parte del concepto de “patriotismo constitucional” querido por el líder socialista (también lo fue por el anterior presidente Aznar) que lo toman prestado del filósofo alemán Habermas. Se trata de un concepto valioso para las naciones democráticas del siglo XX y XXI, que comparto plenamente.

La derecha, en sentido muy amplio, se ha alineado decididamente contra esa asignatura de “valores ciudadanos”, que tendría que ver con la ética y la urbanidad. Si en los Estados Unidos o en Francia negaran la capacidad (el deber) del Estado de promover una asignatura semejante muchos se escandalizarían; tanto como si una religión pretendiera monopolizar la moral. Negar al estado democrático sentido ético y el deber de enseñar y promover valores democráticos y ciudadanía responsables me parece una barbaridad. Otra cuestión es que quienes dirijan el estado abusen a la hora de fijar el contenido de la asignatura. Para evitarlo hay procedimientos de control.

Uno de los problemas de nuestra vida política es el déficit de valores y de buenas formas (urbanidad). Ayer se hizo evidente en los abucheos a Rajoy y a diario se nota en las declaraciones desmesuradas e insultantes de muchos líderes (?) políticos de todos los colores. Ni la Iglesia puede aspirar al monopolio de la moral ni el Estado debe ser inane en la promoción de valores éticos. Esa asignatura de valores ciudadanos es necesaria y conveniente; debe contribuir a regenerar valores ciudadanos y precisa de una gestión inteligente y responsable. No debe ser asignatura para adoctrinar ideológicamente sino para educar en el respeto, que es posible y deseable.

14 comentarios

  1. Dice ser luz

    Pena de historia que marcó de tal modo la razón… tan acostumbrados estamos en este país al adoctrinamiento que no se concibe la posibilidad de que la educación pública intente desterrarlo, ¿tan dificil es entender que puedan respetarse las ideas y palabras de los otros sin imponer un dios o una doctrina?. Respeto el derecho de los padres a educar a sus hijos en la religión o ideas que consideren apropiado, que lleven a sus hijos a misa y al rosario me parece perfecto… pero considerar ‘adoctrinamiento’ el aprender a respetar a los que opten por otros planteamientos… ¡uf! qué dificil librarse de tanta sinrazón que nos legó la historia…Educación para la ciudadanía, ya!, imprescindible…

    30 noviembre -0001 | 00:00

  2. Dice ser Arantxa

    Creo que muchas veces el problema es que esa urbanidad de la que hablas, y que debería ser inculcada por los padres a sus hijos, se ha delegado, sin razón alguna, en los profesores. Y los maestros enseñan, pero quienes educan son los padres…Y es hora de que se recuperen valores como el ceder el asiento a las personas mayores o a las mujeres embarazadas

    19 julio 2006 | 09:06

  3. Dice ser javitrino

    quizá lo que pasa es que el despotismo sufragista (también denominado en los medios como «democracia» a pesar de su etimología) ya no sabe ni cómo explicarse. generalmente, en un supuesto teórico que comenzase desde cero, el sentido común dictaría el aprendizaje a través de la observación del entorno. el problema quizá sea el tiempo en que vivimos y lo limitado de la visión individual en una sociedad saturada de información demasiado retocada, desde mensajes comerciales hasta propaganda disfrazada de información (o distintas variantes como publicidad disfrazada de información o información moralizada disfrazada de objetividad… por poner algunos ejemplos). que la nueva asignatura pueda convertirse en un medio más de propaganda disfrazada de algo es más que probable, pero siempre tendremos en cuenta que la iglesia y la derecha (tanto la tradicional como la pretendidamente «nueva») siempre inculcaron autoritarismo disfrazado de caridad y bienes sociales en los casos en que necesitaban disfrazar su corriente descendente y contínua de poder en ejercicio flagrante. quizá la vieja receta de «ni unos ni otros» o aquél «los mismos perros con distintos collares» sea una aparente respuesta fácil o la llave maestra para el juego del politiqueo (no confundir con política o problemática social que envuelve cualquier acto no individual situado en un contexto común). quizá el juego del politiqueo sea sólo un complejo de ataques retóricos y triquiñuelas legales en busca del eterno fin y objeto de deseo: el poder…la educación quizá sea responsabilidad de los irresponsables padres, la escuela quizá esté demasiado cargada con problemas que recorren todos los estratos a través de una cultura que busca más exprimir un frenesí comercial y un flujo contínuo de poder hacia caminos que los individuos no comprendemos. la pérdida de valores y de respeto quizá lleguen de los mensajes egoístas y hedonistas transmitidos contínuamente a través de los medios que conforman nuestra «personalidad» como sociedad, quizá la «tabula rasa» que son los niños sólo refleja el estilo consumista de consumir la vida, de ser eternos clientes en un mundo donde la esclavitud, la subordinación, las órdenes y los imperativos están al orden del día. quizás la gente no comprende en medio de todo este ruido que el respeto es un regalo que se da con generosidad pero que no se puede infundir, reclamar, robar o forzar. quizá ese miedo que impusieron autoritariamente a generaciones anteriores se traduce en agresividad parental transmitida en los dramas familiares contínuos de quienes tienen demasiado peso en la vida para poder mantener la higiene «moral» como personas… quizá, esta asignatura bien entendida fuera necesaria no sólo en las escuelas, sino en la vida pública o en el carnet por puntos de quienes no pueden dejar de agredir porque han renunciado a tomar la responsabilidad de sus vidas y la encomendaron hace tiempo a poderosos, a líderes, a dioses de cuento que tiran rayos desde las nubes…

    19 julio 2006 | 10:57

  4. Dice ser Johnymepeino

    Anda , no teneis más argumento que sacar el Coco de los Obispos y los curas para sostener al insostenible.Este verano podrías ver en DVD la película «NAPOLA» ¡Y claro que Aznar quería la asignatura de Educación para la ciudadanía!, ¡Y Franco la del Espíritu NAcional!, y los Taliban la instrucción coránica.Pero es que a mí los lavados de cerebro no me van: Ni con la Zafra de Fidel, ni con la de Franco, ni con la de Zapatero.Luego, otro día, hablas de los obispos, pero no nos quieras hacer comulgar con ruedas de Zapaterino que no nos van.

    20 julio 2006 | 03:03

  5. Dice ser Klausewitz

    No se pretende enseñar urbanidad, ni etica,ni tan siquiera todas las religones que existen en el mundoo una introducción a la filosofia. Se les pretende instruir en la llamada progresia del psoe, que no es más que un conjunto de trasnochadas bobadas.

    20 julio 2006 | 22:23

  6. Dice ser luz

    Johnymepeino: y qué se supone según tú que debe hacer una sociedad ¿no trasmitir valor alguno a los niños? ¿no es importante aprender a respetar a otros seres humanos y aprender a expresarse con libertad? ¿eso es adoctrinamiento? ¿mejor dejar que la violencia invada las aulas y la sociedad entera?. En mi opinión esta asignatura es imprescindible, y defiendo una educación en el respeto democrático independiente de cualquier dios. Los obispos deberían ocuparse de sus fieles y sus iglesias y no de dictar la política educativa de un estado aconfesional.

    20 julio 2006 | 22:26

  7. Dice ser PITUCOLON

    Soy padre y profesor de secundaria.Esta asignatura como esta planteada solo pretende cambiar la moral catolica por la moral laica.Si hay que enseñar que representa un estado democratico y un estado de derecho,desde un punto de vista teorico ya existen asignaturas que lo incorporan o pueden hacerlo en sus temarios.Si lo que se intenta es evangelizar a los niños en la biblia laica para eso estoy yo en mi función de padre.

    20 julio 2006 | 22:50

  8. Dice ser Pipina

    Puesto que una educación necesita transmitir valores para ser algo más que adiestramiento, lo lógico es que esos valores sean los que los padres quieran. De ahí la necesidad de la asignatura de Religión -evaluable y equiparable a las demás- para los padres que la pidan para sus hijos.Pero como la libertad les duele a los políticos, lo que quieren es café para todos. Aquí se va a enseñar la moral progre por narices, quieran los padres o no quieran. A los niños se les educará en las consignas progres de pansexualismo, tercermundismo y panteísmo ambientalista….Claro que no nos vamos a dejar. A mis hijos los educo yo, señor Zapatero, no usted.

    21 julio 2006 | 10:34

  9. Dice ser javitrino

    lo malo de esto es lo contradictorio de la situación, con muchos padres demandando más contenidos educativos a las escuelas y otros tantos demandando menos condicionamiento de los valores. quizá si los niños reciben mucha información de distintos vectores ideológicos aprendan a elegir el suyo con libertad. total, para elegir siempre hay que conocer al menos dos opciones…por otro lado, está muy bien que los padres se vuelquen en la educación de los hijos. esto complementa muy bien la labor de la escuela… o era al revés? quizá la escuela es un buen complemento a la manera de ver el mundo que es responsabilidad de los padres enseñar… condicionando a los hijos lo menos posible, que a muchos se os ve el plumero, eh? sin adoctrinar… catoliquillos!en fin, tras este tironcillo de orejas cariñoso a los domadores de niños, creo que habría que garantizar la objetividad de contenidos en una asignatura que debería sustituir a la religión (que eso ya se aprende en las respectivas catequesis o lo que cada iglesia tenga) que si que está fuera de sitio en las escuelas.

    21 julio 2006 | 11:16

  10. Dice ser la que todo lo sabe

    Me parece a mi que estais adornando demasiado algo tan sencillo como SOCIALIZAR AL PUEBLO CON EL IDEARIO DEL GOBIERNO…si esto lo hace Franco no nos escandaliza, pero que lo haga un gobierno democrático…es una verguenza.¿Para que están los padres?¿Qué harán los hijos, denunciarán a los padres cuando no sigan el ideario nacional?¿volveremos a la comuna china?A estos «democratas» cada vez les gusta más Franco.

    25 julio 2006 | 11:06

  11. Dice ser luz

    la que todo lo sabe: ya nos hubiera gustado que Franco hubiera hecho algo remotamente parecido, ¡pero claro… si hubiese respetado las ideas y creencias de los demás no hubiera sido el ‘Franco’ q tú mencionas ahora!…….una penita que no le hicieran cursar de niño la asignatura de educación para la ciudadanía…lo mismo con eso había conseguido ‘apreciar y respetar’ la democracia…. 😀 ¡vacunémos a los pequeños dictadores ya!

    29 julio 2006 | 01:03

  12. Dice ser ENRIQUE

    luzO en vez de vacunarlos… ¡fusilarlos!, ¿no?…¡es más eficaz!Lo que tu plantéas es lo mismo que bautizar a los niños e inmediatamente matarlos y ¡derechitos al cielo!… ¡pero al revés!.La «grandeza» de la Democracia es que los demócratas tienen que respetar la opinión de los demás… no así los radicales, que por definición no aceptan más que su «idea»…Por desgracia hay muchos «demócratas» que piensan aquello de: ¡VIVA la libertad de pensamiento y MUERA el que no piensa igual que pienso yo!… Los verdaderos demócratas son aquellos que están dispuestos a hacer CON GUSTO lo que NO LES GUSTA, simplemente porque lo haya dicho la mayoría (que por otra parte puede estar equivocada).De todas formas todo esto es teoría, al final nos toman el pelo y lo único que quieren es «adoctrinar» para perpetuarse en el poder…, porque hacer a la gente solidaria etc., solamente lo puede hacer el entorno y «algo» que se nos va de las manos, la prueba es que hasta dentro de una misma familia y viviendo en las mismas circunstancias, cada uno es como es… Y el que tenga varios hijos sabe de lo que estoy hablando… Dichosos los creyentes que por lo menos pueden rezar, porque muchas veces parece que es la única solución y ¡que sea lo que Dios quiera!…

    31 julio 2006 | 15:02

  13. Dice ser ENRIQUE

    Talán T.Veo que tienes TALANTE, pero del «bueno»…, porque también puede uno tener «mal talante» (que parece que el ZP no lo sabe… o nos la quiere meter doblada y por eso no lo adjetiva)

    08 agosto 2006 | 09:18

  14. Dice ser Talán T.

    Me parece patético que un comentarista como usted, Sr. Urbaneja, a la hora de analizar un asunto tan importante como la implantación de una asignatura como EDUCACIÓN PARA LA CIUDADANÍA encabece sus argumentaciones con referencias a Rouco o Cañizares, que por otra parte, hacen muy bien en criticar la aparición de esta innecesaria asignatura. Vayamos al mundo civil y hagámos un análisis desde el punto de vista de una democracia sana.Vaya por delante que soy profesor de la Enseñanza pública desde hace más de 30 años. He vivido y sufrido, como alumno, la asignatura de FORMACIÓN DE ESPIRITU NACIONAL. Hay similitudes inevitables en el planteamiento. No deben olvidarse frases repetidas cientos de veces por la Vicepresidenta del actual Gobierno desde los primeros dias de su mandato: Tenemos que hacer mucha pedagogía en esta sociedad : ¿ Qué significa?. Uniendo esta expresióna otras muchas del Ejecutivo… creo ver una intención de mentalización, de ideologización de la sociedad… en un determinado sentido, claro. ¿ Y me dice usted que eso es democrático?. Se logró hacer optativa la asignatura de Religión y se viene ahora imponiendo como obligatoria ésta, que – por las filtraciones salidas de la Jerarquía idológica de la Universidad Carlos III – va a parecerse bastante a una RELIGIÓN DEL GOBIERNO. ¿ Me quiere alguien convencer de que debe enseñarse a no tirar papeles en la calle el dia que toque ese tema de la nueva asignatura. Eso debe enseñarse en casa y exigirse desde el primer momento en un Centro educativo… Pero ese no es el tema. Todos estamos de acuerdo en esas cosas. Donde ya se complica la cuestión es en otros contenidos más controvertidos y opinables. Si usted, señor Urbaneja, defiende que yo , como profesor de la Enseñanza Pública tenga que verme abocado a explicar a unos niños que la unión legal de dos hombres es un Matrimonio, cuando a mi – y a otras muchas personas de nuestra sociedad – esa afirmación ideológica choca con mis principios y mi conciencia, repito, si usted está a favor de que se produzcan situaciones como esa, le consideraré un columnista nefasto para la democracia y afín a idologías que desean la «formación de un espírutu nacional». ¿ No es usted capaz de pedir que esto no se produzca, o que – cuando menos – sea una asignatura voluntaria y los profesores podamos acogernos a la objeción de conciencia ?. Creo que debería estar escribiendo en tal sentido, favoreciendo la libertad y la democracia. El mimetismo ideológico es algo que se da en algunos columnistas y comentaristas , pero en ocasiones eso supone alejarse de la decencia moral. No juzgo casos concretos, pero le agradecería que defendiese la libertad de elección ( de padres, profesores, alumnos… ) ante medidas como esta que se avecina… Conviene estar a la altura de las circunstancias aunque a veces esto no sea fácil, pero es lo que marca la diferencia y el tiempo se encargará de demostrarlo.Tal vez porque explique Historia en mis clases me inclino a pensar que en todo momento – al menos las personas que gobiernan, crean opinión o educan – debemos tener visión histórica de los acontecimientos que se producen o pueden producir en nuestra sociedad. De no ser así caeremos fácilmente en la mezquindad y seremos cómplices culpables de errores históricos. Asi lo creo y procuro evitarlo.

    08 agosto 2006 | 12:21

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