Juan Antonio Ruiz Román, Espartaco, está pasando uno de los peores momentos de su vida. El divorcio, aunque ya firmado tras un acuerdo, no ha sido un camino de rosas. El siempre lo había dicho bromeando: «Si algún día Patricia y yo nos separamos, no me lo va a poner fácil». No sabía cuanta razón tenía. Han llegado a un acuerdo porque Espartaco ha cedido en absolutamente todo lo que le ha pedido Patricia. Pero no es eso lo que más le duele al torero. El dolor le viene por el rechazo que ha recibido por parte de sus hijas, más en especial de Alejandra, la mejor amiga y apoyo incondicional de Patricia en estos momentos. La niña sólo tiene 18 años y ya ha entrado en un plató de televisión (Enemigos íntimos) para decir bien claro «Yo estoy con mi madre». Sus padres, habiendo tenido sus más y sus menos nunca habían llegado a esos niveles de ordinariez. Pues en mi opinión, entrar en un programa de estas características, sobra.
Esto es lo que hace que Espartaco esté destrozado. Con todo esto no quiero que parezca que estoy defendiendo a Espartaco. Me gusta defender al más débil porque siempre cada parte tiene su razón. Lo que es Espartaco y la vida que le ha dado a Patricia, la conozco perfectamente. Su pasión por los toros y las mujeres, también. Lo que no me parece es que se demonice a nadie. Cada uno tiene lo que quiere y permite y no está bien acumular mierda durante años para ahora lanzársela a la cara. Con esto quiero decir: los hijos tienen que permanecer al margen y esa responsabilidad la tienen los padres. Patricia en ese sentido se ha equivocado y se ha apoyado más de la cuenta en su hija.
Otra cosa no, pero un apasionado de sus hijos sí ha sido y no se merece de ninguna manera que se le pongan en contra. Patricia no permitas que esto ocurra por mucho odio y rabia que tengas acumulado. Ya tienes lo que querías, tranquilidad. No hagas ahora leña del árbol caído.
Pues toda la razón, si la hija va dando por ahí el cante en programas de tv pues es una ordinaria, por mi nieta de los Rato que sea: una ordinaria.
MADRID ocio gratis. Clica sobre mi nombre.
29 diciembre 2010 | 12:48
Me parece que la madre no tiene porque hacerse responsable de los comentarios vertidos por su hija en un plató de televisión, que para eso es mayorcita, y seguramente ni siquiera sabía que aquella iba a coger el telefóno y largar, es más, probablemente salió en antena sin premeditarlo, oyó comentarios, pilló el teléfono, y llamó.
Por otra parte, Espartaco es un mujeriego, y Patricia ha aguantado carros y carretas con él. Y todo lo que ha conseguido lo ha determinado un juez.
29 diciembre 2010 | 13:02
Hombres-Mujeres, que complicado.
http://www.iberica-adt.es
29 diciembre 2010 | 13:16
¿Pero esa niña no está estudiando en una Universidad super pija y exclusiva? Que ganas tienen algunas de protagonismo aunque sea levantando tempestades de m…. otra más que se apunta al carro del famoseo y el ganar dinero sin dar golpe.
29 diciembre 2010 | 13:32
A ver, nunca entendí que a esos grandes padres, los hijos les den la espalda.
¿Serà que no lo fueron tanto? ¿Serà que vieron cosas feas?
En fin que cada cual qiene lo que se merece ….
29 diciembre 2010 | 14:19
Pues que llame a la bazan para que le quite las penas.
29 diciembre 2010 | 14:48
esque espartaco,tiene tela y ademas supermachista
29 diciembre 2010 | 16:17
Pues si Espartaco le fue infiel a Patricia, también tiene ella su parte de culpa, por aguantar. Ella no es ninguna niña inocente que no tiene donde caerse muerta. Si bien es cierto que al principio su familia no aceptó el matrimonio, al poco tiempo las aguas volvieron a su cauce. Asi que si ella tuvo cuernos, en su mano estaba mandar al marido infiel a paseo y buscarse la vida. Nadie está obligado a aceptar vivir con un supuesto machista y mujeriego.
Digo yo….
Y si tanto le quería que soportaba lo que le echasen, bien feo es que ahora saque todo el rencor que pueda tener dentro. La ropa sucia se lava en casa. Tanta clase para eso….que parece una mosquita muerta, pero de las que hacen daño con sus silencios.
No voy a entrar a valorar si merecía lo que se ha llevado, o más, o menos, pues lo ha decidido la justicia y punto.
Pero desde luego creo que las mujeres no deberían ir por el mundo con esas caras de ñoñas doloridas. Por favor, si llevaban ya años haciendo vidas separadas.
Ni conozco a Espartaco ni a Patricia, pero no me gusta que las mujeres sigamos utilizando «las armas femeninas» para dar pena. Que trabaje y se busque la vida como cualquier hija de vecina.
29 diciembre 2010 | 16:26
LO QUE NO ME PERECE LÓGICO ES QUE UNA MADRE PONGA ENCONTRA A SUS HIJOS,SON SUS HIJOS TAMBIEN
Y NO CREO QUE ESTÉ BIEN,IR A LA TELE A CONTAR LOS , PROBLEMAS Y DE QUE PARTE ESTÁ,ESE HOPMBRE ES » SU PADRE».Y LA MADRE COMO DICE ,EL ARTICULO ANTERIOR ,MENOS FIESTAS Y MAS TRABAJAR.AUNQUE AHORA EL TORERO LA HA DEJADO BIEN «ALPARGATÁ».PARA QUE NO LLOREMÁS POR LOS RINCONES.
29 diciembre 2010 | 16:48
Yo tengo idea de lo que el esta pasando. Mis hijos, que son todos unos profesionales y sus mujeres me hicieron a un lado, o sea no cuento con ellos para nada. Siempre estoy pendiente de los santos de mis nietos, que son muy chicos todavia, mandando tarjetas, regalos, lo mismo para Navidad. a mi hasta este dia no me mandaron ni una cartita con sus letritas, Que Navidad tan horrible, que maldad, como llore, yo que creia ya no tener lagrimas!
29 diciembre 2010 | 16:56
Cada uno puede y debe hacer su vida como quiera pero si se tienen hijos debe asegurarse siempre un respetuo mutuo delante de ellos, y evitar fomentar odios filiales. Desgraciadamente, esto no siempre es así. Desconozco el caso de Espartaco pero espero que no sea uno más.
Carla
http://www.lasbolaschinas.com
29 diciembre 2010 | 17:04
Pues los hijos lo normal es que se pongan del lado del debil y en este caso sentimentalmente hablando es Patricia,y ademas es adulta y sabrá de cosas que hayan pasado y del sufrimiento de su madre .
Por todo se paga un precio y seguramente si ha sido el el que ha roto la familia es normal que tenga a sus hijos en contra.Es lo que se buscan algunos con su actitud
29 diciembre 2010 | 17:06
se lo ha buscado el sólo.
los hijos se ponen del lado de la madre xq habrán visto cosas q no le gustaron…se sabía y está saliendo q clase de tio era espartaco,un perla bueno..no creo q patricia se haya deducado a pober verde a espartaco,es él el 1º q manda un comunicado humillandola,ella aguantó x sus creencias religiosas y xq dio la cara x él ante la familia y le salió rana y ahí estubo aguantando carretas y carretones…y creen q eso no lo vio su hija mayor?..
29 diciembre 2010 | 18:19
Dania / no eres tu la sola, si yo te contara…. la vida va siendo distinta todo cambia, los valores se pierden, la dignidad ya no existe , ya como si fuéramos de otra galaxia , actualmente solo impera el interés
29 diciembre 2010 | 21:12
Quiero añadir algo, Patricia ha desmejorado mucho y Espartaco tiene la misma cara que hace 20 años, no tiene aspecto de haberlo pasado mal
29 diciembre 2010 | 21:15
que es muy bonito ponerse a dar tecladas y creerse el amo de todo ,Espartaco merece ser feliz y la estreñia de su mujer ya tiene para laxantes y no creo en lo de dar lástima nadie dá lastima
29 diciembre 2010 | 21:42
mas duelen las cosas que él hace a los toros
ke se joda
30 diciembre 2010 | 00:38
Cuando hay amor todo es fantástico y perfecto, pero cuando se acaba casi todo se convierte en odio.
30 diciembre 2010 | 13:59
Tristemente, cuando el dinero sale por la puerta el amor sale por la ventana. Y mientras tanto su hija por los platós recaudando…
30 diciembre 2010 | 16:46
Soy divorciado dos veces, casado tres.
Toda ruptura vá precedida de desencuentros y discusiones. Se bien de lo que hablo. Tres hijos del primer matrimonio que se identifican (todos con todos) como hermanos con la adolescente del actual. Y mi trato personal con y entre sus respectivas madres: normal, como debe ser.
Lo que creo es que la educación no vá por la universidad, ni menos se adquiere con fama o con dinero.
30 diciembre 2010 | 17:44
El Universo siempre te devuelve lo que has cosechado. Que cada uno mire sus conciencias, va por ti Espartaco.
30 diciembre 2010 | 19:44
Ni Espartaco está triste, que tiene con quien pasar las Navidades, ni Patricia Rato debió seguir con él silenciando la cornamenta. A partir de ahora serán más felices, ya no tendrán que mentirse mutuamente cada día.
30 diciembre 2010 | 20:57