Se nos ve el plumero Se nos ve el plumero

"La libertad produce monstruos, pero la falta de libertad produce infinitamente más monstruos"

«No recéis por mí, gracias» de Rojas Marcos

Este Rojas Marcos (Luis) siempre me hace pensar y, lo que es más importante, me hace sonreir.

Hoy recomiendo la lectura de este artículo delicioso, publicado en la página noble de El País. Tiene varias perlas. Una es del cómico Jay Leno:

«Se descarta el poder curativo de rezar… el fundamento ideológico del plan sanitario del presidente Bush, que quiere dejarlo todo en manos de Dios, se va a la porra».

Y otra es suya, que comparto desde antes de conocerle. Se la he leído en algunos de sus libros:

«Hoy sabemos que los frutos de las prácticas solidarias revierten a quienes las ejercen»

O sea que, desde el punto de vista de la racionalidad económica, nos conviene ser generosos.

O bien, somos generosos por egoismo.

Algo es algo.

Feliz fin de semana. (Y si conducen, no beban)

Copio y pego:

TRIBUNA: LUIS ROJAS MARCOS

No recéis por mí, gracias

LUIS ROJAS MARCOS EL PAÍS – Opinión – 29-04-2006

Rezar para que sanen personas enfermas es una de las prácticas más antiguas y universales. Incluso los no creyentes a menudo invocan la ayuda de Dios cuando se enteran de que un ser querido sufre una grave dolencia. Pese a esta extendida costumbre sólo en los últimos años se ha comenzado a examinar objetivamente la eficacia de estas oraciones piadosas. Precisamente, hace unas semanas salieron a la luz pública los resultados, ansiosamente esperados, de una rigurosa investigación sobre los efectos de las oraciones, por parte de terceros, en la recuperación de enfermos cardiacos, en su mayoría cristianos practicantes. Concretamente, tres congregaciones se encargaron de rezar durante 14 días por pacientes -empleando su nombre- sometidos a la operación a corazón abierto conocida en la jerga médica por bypass. Esta intervención consiste en recomponer con injertos las arterias coronarias obstruidas, y se realiza anualmente en unas 800.000 personas en el mundo.

La investigación, publicada en la prestigiosa revista de cardiología The American Heart Journal, fue llevada a cabo en seis hospitales estadounidenses por un amplio grupo de prestigiosos cardiólogos, encabezado por Herbert Benson, profesor de la Universidad de Harvard. Los resultados muestran que de los 1.802 participantes, el 59% de los pacientes que fueron informados, antes de la intervención quirúrgica, de que las congregaciones rezarían por ellos padecieron complicaciones serias, como ataques de corazón, apoplejías o infecciones. Por el contrario, sólo el 52% de los enfermos que fueron, sin saberlo, objeto de plegarias, y el 51% por los que no se dijeron oraciones, experimentaron complicaciones posoperatorias. Los expertos han llegado a la conclusión de que mientras los rezos a espaldas del doliente son inocuos, rezar por un enfermo que ha sido previamente avisado de las oraciones es, estadísticamente al menos, perjudicial para su salud.

Como ocurre casi siempre que se escudriña un tema tan delicado como las prácticas religiosas, este estudio pionero ha provocado intensas polémicas. Algunos críticos han rechazado el trabajo en su totalidad. Aducen que, por definición, los poderes sobrenaturales no pueden ser reducidos a las reglas del método científico. Otros se quejan de que los autores no consideraran la posibilidad de que los pacientes que se recuperaron saludablemente sin las preces de las congregaciones -la mayoría- quizá se beneficiaron de las oraciones espontáneas de sus familiares.

No pocos colegas médicos han respirado de alivio. Temían que en una sociedad tan litigiosa como la estadounidense, si se demostrase científicamente que las peticiones a Dios ayudan a curar enfermedades, todos los doctores estaríamos obligados a orar por nuestros pacientes -o a contratar a otros para este servicio- pues, de lo contrario, nos expondríamos a una demanda judicial por negligencia profesional. Los resultados de la investigación tampoco han pasado desapercibidos en el mundo del humor. Hace unos días escuché al conocido cómico de la televisión Jay Leno usar el estudio para mofarse del gobierno republicano: «Se descarta el poder curativo de rezar… el fundamento ideológico del plan sanitario del presidente Bush, que quiere dejarlo todo en manos de Dios, se va a la porra».

Pese a la posibilidad de que rezos bien intencionados puedan dañar sin querer a pacientes bajo ciertas circunstancias, estoy seguro de que este aviso de la ciencia no va a impedir que las personas religiosas sigan orando por sus semejantes desafortunados. Hoy sabemos que los frutos de las prácticas solidarias revierten a quienes las ejercen. Por ejemplo, en el caso del voluntariado, está demostrado que las personas que se involucran en actividades que tienen un impacto positivo en la vida de otros, disfrutan de una autoestima más alta, sufren menos de ansiedad, duermen mejor, abusan menos del alcohol o las drogas y persisten con más tesón ante los reveses cotidianos, que quienes rehúyen estas tareas altruistas.

El importante estudio de Benson y demás colegas tampoco va a eliminar la necesidad de los seres humanos desgraciados de buscar en otros una fuente de apoyo y esperanza. Las personas que se sienten parte de un grupo solidario superan las adversidades mucho mejor que quienes carecen de una red social de soporte emocional. Todos o casi todos, en momentos penosos buscamos aliento de nuestros seres queridos o promesas de alivio de expertos del dolor que nos aqueja. Con todo, para la mayoría de las personas que se enfrentan a las calamidades de la vida, los mensajes más reconfortantes proceden de sus propias voces internas, de su dimensión espiritual.

Si bien todavía nos queda mucho por aprender sobre los mecanismos que intervienen en la conexión espiritualidad-salud, numerosas investigaciones en Europa y Estados Unidos revelan que los sentimientos espirituales ayudan a superan mejor las enfermedades graves. Estos sentimientos pueden alimentarse de creencias religiosas; de causas como el amor, la libertad o la justicia social; o de alguna faceta del Universo, como la puesta del sol o la brisa del mar. El elemento terapéutico principal de cualquier tipo de espiritualidad es la esperanza, porque la confianza en que ocurrirá lo que deseamos nos protege del fatalismo y la indefensión.

En mis años de práctica he comprobado que, para ser eficaz, la espiritualidad no debe socavar el sentimiento de que el rumbo de nuestro barco está en nuestras manos. La conciencia de que ocupamos el asiento del conductor, aunque tenga una dosis de fantasía, nos motiva a vencer situaciones de riesgo. Si creemos que mandamos sobre nuestras decisiones y que nuestras acciones cuentan, tendemos a transformar nuestros anhelos en desafíos y a luchar con más fuerza contra los males que nos afligen, que cuando sentimos que la solución no depende de nosotros o «nada que yo haga importa».

Por todo esto, es comprensible que resulte contraproducente comunicar a un enfermo grave que terceras personas piadosas rezarán por él. El motivo no es el temor que pueda provocar esta noticia -«¿tan mal estoy para que tengan que implorar a Dios por mi recuperación?»- sino el peligro de que el doliente decida eludir su responsabilidad personal de combatir la enfermedad y opte por delegar a otros su salvación. Todos nacemos con dos nacionalidades: la del país de la vitalidad y la del estado de la invalidez. Aunque preferimos habitar en el país de la salud, tarde o temprano casi todos nos vemos obligados a vivir en el reino de la enfermedad. Llegado ese momento, pienso que si almas caritativas nos ofrecen plegarias a Dios para que sanemos lo más prudente es decirles, ¡no, gracias!

Luis Rojas Marcos es profesor de Psiquiatría de la Universidad de Nueva York.

13 comentarios

  1. Dice ser gret

    Ya lo dice el Dalai Lama » ser buenos aunque sea por egoismo» , pues te revierte luego todas tus acciones… tambien dice que hay que ser con tus tiranos compasivo… eso ya no lo comparto tanto, al menos a mi no me sale.Eso de no ser curativo el rezo no lo comparto… pero claro es que rezar hay muchas formas… como de querer, que hay algunas que » no me quiera tanto que ya me quiero yo solo»Desde luego que por la experiencia de gente que observo en mi alrededor, parecen que los espiritus son vengativos, y se haces algo mal al final sale a la luz. Y que es ser egoista sino una forma de prepotencia.. de creerse Dios y de dominar los parametros de la creacci´´on cuando uno no sabe de que va esto de nacer y morir…Como dice el Dalai Lama, hay que tener buen pensamiento…. y quiz´´as eso ya es una muy buena forma de rezar. Tambien dice que no hay que moverse mucho » No actuar para actuar» as´´i no cometes malas consencuencias con el efecto mariposa, buen ejemplo para la guerra de irak, ante la duda es mejor ser pasivo. Y la verdad que la gente que es m´´as callada es la m´´as buena generalmente, la menos cotilla y menos jueza; no se si es un efecto mariposa, pero es precisamente de la gente que menos se habla de ellas para mal.Pero qu´´e buenos que somos todos :PPPPPP; creo que hay un prejuicio de pensar que rezar es hacerlo de una determinada manera, al estilo apost´´olico romano sin pensar y todo deprisa y luego nada relacionado con las acciones personales… pero hay otras formas que tienen mucho que ver con el pensamiento, con el encontrar momentos… pr´´acticas, el » hare Crisna» ese tantra que repiten sin cesar los «hare» es muy beneficioso, algo parecido a lo que dec´´ia Francisco de Loyola, y te ayuda a ser introspectivo con las cosas… y predisponer el pensamiento en positivo…. en fin que aunque existen muchas formas de hacer las cosas bien, todas confluyen en la misma… el principio del bien es unitario, como dec´´ia Pitagoras, uno es aquello que es igual en un punto o en su todo… se lee uno a los grandes inteligencias de las historia, y se da uno cuenta que todos dicen lo mismo… yo no voy a ser soberbia de pensarme m´´as lista que ellos… aunque cada uno desde su libertad comparte lo que quiere, y esta de acuerdo o no.Eso que no tiene poderes curativos del hilo de lo de el tranta, porque os pensais que las canciones, que son otra cosa que aliteraciones, se repiten una y otra vez, y te crea un buen rollo alucinante…. ya digo todo es lo mismo, puedes vestir en negro o en blanco, pero eres la misma cosa, por mucho que te quieras diferenciar del resto resulta tanto que niegues el color porque no te guste el negro cuando adoras el blanco. Hubo un estudio hace tiempo sobre sus poderes, de concentrarse para orar… que era muy parecido a la buena energia de una gran fiesta y de ponerse varias personas a-religiosas a pensar en una misma persona…. la verdad que somos una mente colectivas, aunque a mi tampoco me mola los proreligiosos cat´´olicos, me mola m´´as lo oriental.

    29 abril 2006 | 14:30

  2. Dice ser gret

    No me extraña que no se me entienda, porque escribo r´´apido sin fijarme, y sin repasar y con muchos errores…Ahora me gustar´´ia saber estos supuestos de izquierdas que piensan que se debe hacer con Irak, mientras gastan gasolina en su coche, no desean otra cosa que una casa propia( para que los especuladores tiren de los pobres), se ponen las zapatillas venidas de oriente… y tienen una vida capitalista… se piensan que como las ratas, que deben ser las ´´ultimas en abandonar el barco capitalista e irse al ecologista, o que un papa Estados unidos, por lo guapos que son deben mantenerles en el Estado del Bienestar, por una idea ultraterrenal ingeniosa.Hay mucha perversi´´on, uno no debe ser generoso, no debe haber la posibilidad al arbitrio de la generosidad de nadie » si me caso que no me engañe, si me engaña que no me entere, y si me entero que no me duela» creo que estamos ya en otra era… a ver si la gente se pone las pilas, y se da cuenta que las ratas pueden cambiar el rumbo, que podemos porque tenemos ya el poder suficiente.

    29 abril 2006 | 14:43

  3. Dice ser gret

    quer´´ia decir con Iran…

    29 abril 2006 | 14:44

  4. Dice ser gret

    los gobernados deben unirse, estan perdiendo un tiempo precioso… dejamos que la inmoralidad nos acorrale… como gallinas… hoy en d´´ia el estado no se atreve a hacer nada impopular, somos una fuerza no controlable gracias a los medios( aunque a algunos se les da un chupachus para que chupen mientras otros maman)Cuando esta masa tome conciencia, entonces la democracia se habr´´a democratizado y estallado en miles de puntos…

    29 abril 2006 | 14:52

  5. Dice ser Plumérez

    Soler: se te ve el plumero. Y a Rojas Marcos, cómo te lo diría…

    29 abril 2006 | 18:11

  6. Dice ser Fernando

    No se cual es el plumero de Rojas Marcos… pero si ese plumero sirve para limpiar el polvo de las mentes pacatas, bienvenido sea¡.Sobre lo de la ‘energía cósmica’, el tantra y que Buda bien pero Jesucristo mal… creo que son excusas que se inventa la gente a la que le da vergüenza (intelectual) decir que cree en dios…Del artículo de Rojas Marcos yo al menos he sacado un par de reflexiones para madurarlas.Sobre la reversión favorable del altruismo, recomendaría esta web: http://www.hacesfalta.org/ :Tod@s podemos encontrar algo que podemos hacer

    29 abril 2006 | 19:57

  7. Dice ser imagina

    Creo que la oración (preferiblemente, para ateos), el mantra, y todos los mecanismos de introspección, son útiles para evitar que la mente se pierda en múltiples pensamientos inconclusos e inconexos y por ende son útiles para que el propio funcionamiento mental sea correcto.De eso a pensar que la oración dirigida a una determinada creencia o divinidad, pueda hacer algo por uno mismo o por los demás, entra dentro del fanatismo mitológico y religioso.Saludos

    30 abril 2006 | 16:05

  8. Dice ser Fran

    El señor Rojas Marcos está sufriendo una evolución notoria: está pasando de listo a «listillo». Se comprende que estudie el contenido de un artículo según el medio para el que escriba: si es para «El País», ridiculicemos la religión. Pero esto siempre suele hacerse a costa de la propia integridad y credibilidad personales. Tal vez un artículo como este nos indique que su autor ha iniciado una lenta muerte intelectual y moral provocada por el éxito( social, editorial, económico… ), que siempre ha sido la comida mas dificil de digerir.De los beneficios de las plegarias hay infinidad de testimonios: las argumentaciones que se leen en el artículo del señor Rojas Marcos son para echar a correr… Un ejemplo. ¿ Podía suceder que más del 50% de los pacientes que entran a un quirófano tengan un peor posoperatorio y que coincida con los que antes de ser operados sus familiares les hayan dicho que los querían ?. No suelo hacer afirmaciones como esta , pero lo que da a entender ( sobre todo al final ) el señor Rojas Marcos en su artículo es una gilipollez.Lo siento señor psiquiatra – estrella , pero con esto que ha escrito en «El País» para mi usted ha bajado muchos enteros, muchos. A partir de ahora en mi pensamiento y en mis conversaciones usted será «otro» Rojas Marcos. Ya lo siento, pero «ha empezado usted…»Admiro mucho a las personas que se dan perfecta cuenta de que con el paso del tiempo pierden facultades, sobre todo físicas, y se adaptan a la situación. Pero también es cierto que otros ( más torpes, aunque ellos se crean más listos ) no se dan cuenta … pero se les nota en lo que hacen … o escriben.

    01 mayo 2006 | 16:26

  9. Dice ser MH

    Me encantó el artículo de Rojas Marcos: y no porque ridiculice la religión –se suelen bastar para ello los sacerdotes– sino porque difunde una iniciativa que refleja lo que debe ser la actitud científica ante cualquier afirmación: someterla a prueba, si puede ser expertimental, mejor que mejor.Estoy seguro que entre los cardiólogos que realizaron el estudio hay muchos creyentes, y desde luego pocos o ningún votante del PSOE. También estoy seguro que la mayoría de ellos tenían a priori más fe (profesional) en la capacidad terapeútica del stent o el bypass que en la del Padrenuestro. Pero aún así realizaron el estudio conforme las prácticas y garantías del método científico.Así que me apunto: no recen por mi (y por favor, tampoco piensne por mí).

    02 mayo 2006 | 11:25

  10. Dice ser Darío

    Agadezco profundamente desde aquí y en este momento cualquier oración que alguien ofrezca por mí en caso de enfermedad, necesidad o muerte y yo, a mi vez , dentro de mis muchas limitaciones, no dejaré de hacerlo por todo aquel que me lo pida porque esté necesitado.Otro mundo es el de los autosuficientes , que necesariamente se verán solos, ya que no necesitan a nadie y creo que están seguros de ello: no les arriendo la ganancia…Vivir para ver… y en algunos casos … morir para no ver.La humildad abre los ojos pra ver las necesidades de los demás, unirte más a ellos , ponerte en su lugar e intentar ayudar en la medida de lo posible: te hace más humano. De la soberbia poco hay que decir: ciega, no deja ver la realidad.

    05 mayo 2006 | 20:59

  11. Dice ser Freeprayer

    ¿Que Rojas Marcos, Soler y no sé quién más no quieren oraciones? Pues, ea, marchando, que ya lo dice el dicho: «Tú lo quisiste, fraile mostén; tú lo quisiste, tú te lo ten».Pues anda que no hay intenciones por las que rezar para andar perdiendo el tiempo con tanto infatuado a punto de estallar…A mí, por favor, incluidme en las vuestras, que he tenido tiempo en esta vida de comprobar por mí mismo el inmenso poder de la oración y de la misericordia de Dios… para quien la quiere, claro, que la libertad es lo primero.

    09 mayo 2006 | 23:02

  12. Dice ser Peppus

    La religión es buena para la presión sanguínea19.05.06 @ 14:33:54. Archivado en EstudiosLo revela un estudio presentado este jueves en EEUU. Ir a la iglesia y rezar “puede proteger a los individuos expuestos al estrés y pueden demorar los efectos destructivos de la hipertensión”.El estudio incluyó a más de 5.300 personas de raza negra en EEUU, y fue realizado por expertos del Centro Médico de la Universidad de Misisipi, en Jackson.“Nuestras conclusiones –dijo Sharon Wyatt, miembro del equipo de investigadores– muestran que la integración de la religión y la espiritualidad pueden proteger a los individuos expuestos al estrés”.Y eso puede demorar la hipertensión, que es “un factor en el desarrollo de los males cardiovasculares entre los afroamericanos”, indicó.“Las disparidades cardiovasculares entre los afroamericanos están ampliamente reconocidas”, agregó Wyatt en la reunión de la Sociedad Estadounidense de Hipertensión, en Nueva York, donde fue presentado el trabajo.La cuestión de si las creencias religiosas y las oraciones –tanto de los pacientes como de otros en favor de ellos– tendrían algún efecto sustancial en la evolución de sus males, o en la recuperación después de operaciones, ha sido objeto de muchos estudios en los últimos meses. Y el debate está abierto.Por ejemplo, en marzo pasado, un grupo de científicos publicó un artículo en la revista “American Heart Journal” en el que afirmaban que la oración en favor de un enfermo no sirve para ayudar a su curación.Pero ahora también el Centro Nacional de Medicina Complementaria y Alternativa de EEUU. indicó en un comunicado que “algunas investigaciones anteriores han sugerido que la religión y la espiritualidad pueden tener un efecto protector de la salud en el resultado de las enfermedades”.

    21 mayo 2006 | 19:49

  13. Dice ser Cris

    La religión es una gran farsa de siglos y siglos de cultivo, que ha llegado a dominar todo el mundo. Con todos vuestros comentarios estais diciendo que si algún día sufris una enfermedades de dos pares de cojones vais a rezar y vas a «tener mucha mucha fe» y os vais a recuperar en un par de días, porque claro: «la religión es buena para la presión sanguínea». Por eso con el dinero y riqueza que hay sólo en el Vaticano se podría erradicar el hambre en el mundo… Yo no digo que la religión no fomente valores buenos, pero de ahi a creer que Cristo resucitó…No recéis por mí tampoco, gracias. Mejor confío en los verdaderos dioses, que en ese caso será el médico que me cure.

    23 marzo 2008 | 13:09

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