¡Cuidado Alemania!
Lo menos que se puede decir de la «crisis del pepino» es que es lamentable. Una vez más, España ha sido víctima del prejuicio alemán sobre los países del sur y del celo con que se saltan a la torera las reglas europeas cuando se trata de proteger a sus habitantes. Es un país históricamente incapaz de asumir responsabilidades y especialista en buscar chivos expiatorios cuando su población o su prestigio entran potencialmente en riesgo.
El enorme daño para nuestra agricultura -en dinero y sobre todo en imagen- ya esta hecho, así que solo queda reclamar de forma contundente los perjuicios causados a los agricultores de Almería y Murcia, y a todos los que han perdido sus contratos a futuro. No olvidemos que el descrédito lo han extendido a todas las hortalizas y verduras de origen español, contagiando de desconfianza a muchos otros países.
¡Alemania se lo debería hacer mirar! En principio, nos han acusado de no tener los protocolos sanitarios adecuados. En realidad, los que han fallado han sido los suyos puesto que: ¿Cómo es posible que esos pepinos llegaran a las tiendas teutonas sin pasar por los preceptivos controles sanitarios fijados por la Union Europea y que en origen se han cumplido a rajatabla? La Sra. Prüfer-Storcks, cuyo apellido significa en español «investigadora de cigüeñas», debería dedicarse al análisis del crotoreo de esas aves ciconiiformes y no a mal meter con nuestras cucurbitáceas: los pepinos.
Espero que el gobierno español sea enérgico e intransigente con Alemania y que, como parece que harían las autoridades germanas, no les prohiba entrar en España por estar sus habitantes infectados de E. Coli, pero que paguen con creces el mal causado. Ellos con nosotros han sido y serian inflexibles. Una primera medida dura seria la de «llamar a consultas» a nuestro embajador en Berlín.
Nosotros tenemos nuestro caso «Gürtel» y Alemania, a partir de ahora, su caso «Gurken» (pepinos en alemán), que espero provoque alguna dimisión y caso penal, no como aquí con el Sr. Camps.
Auf wiedersehen Deutschland und viel Glück mit Gurken!
(¡Adiós Alemania y mucha suerte con los pepinos!)
Cornelia Prüfer-Storcks, qué oportunidad has tenido de seguir pasando desapercibida como hasta ahora.
01 junio 2011 | 01:08
Hay que darles caña y ponerles en su sitio. Ya esta bien de ese trato desigual.
Carla
http://www.lasbolaschinas.com
01 junio 2011 | 06:38
Yo cogia a los culpables y… ¿sabes por donde les metia los pepinos uno a uno sin pelas?
Pues eso.
01 junio 2011 | 07:39
Sólo espero que la bacteria esa que creían nuestra les devore uno a uno.
01 junio 2011 | 09:12
Me han cerrado la webpor tercera vez en lo que va de año, no cliqueis , estaré sin hacer comentarios hasta que me la dejen abrir , asi no molestaré a nadie.
01 junio 2011 | 10:46
hasta que no se recupere el comercio de las frutas y verduras a los niveles que estaba anteriormente deberiamos de hacer boicot a los productos alemanes.
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comparativa de mejores depositos junio 2011
01 junio 2011 | 11:00
que sinvergüenzas cantar a los 4 vientos que eran los pepinos españoles sin estar seguros y ahora lo desmientes, que hijos de su madre, asi se envenenen todos es lo que se merecen
01 junio 2011 | 11:52
Vaya entrada mas penosa.
…..»Es un país históricamente incapaz de asumir responsabilidades y especialista en buscar chivos expiatorios cuando su población o su prestigio entran potencialmente en riesgo.»……
puuhh…
…»La Sra. Prüfer-Storcks, que significa “investigadora de cigüeñas”»
sobre todo significa eso….. madre mia.
En fin. Aún te queda un largo y duro camino, amigo becario.
01 junio 2011 | 12:09
Cuando vengan para acá los alemanes en manada a nuestras playas, me hago con una cepa de ese bicho y se lo meto en las cervezas. No falla. Encima con lo guarros que son…
01 junio 2011 | 13:01
Es inaudito. Por esa regla de tres, no deberíamos nadie comprar productos alemanes ni ir al Lidl, no olvidemos que la bacteria está en Alemania en algún producto todavía no determinado pero no en nuestros pepinos. Así que ojo a productos alemanes.
Además el grave daño que nos han causado, deben pagarlo ellos y no la UE, porque solo ellos son resposables.
Espero que Rubalcaba reaccione como debe de hacerlo.
01 junio 2011 | 13:41
Cuanto menos irresponsable la actitud de la señora alemana. Si los pepinos no han hecho daño en España (con todos los gazpachos que comemos…) deberia de haberse callado.
Podemos concluir diciendo que hay que cancelar los viajes de vacaciones a Alemania, despues de todo alli la gente se muere y nadie sabe porqué. Luego con decir que habia que lanzar el aviso…..
¿La pareceria bien a esta señora?
01 junio 2011 | 16:50
Ya me han liberado la web . Ya se puede clicar sobre mi nombre
01 junio 2011 | 18:25
# Tonio
Gracias por el calificativo de «becario», pues me rejuvenece.
También quiero agradecerte tu comentario pues siempre se puede aprender de las personas doctas como tú. ¿Qué significa en alemán Storch? Si fuera cigüeña, entonces parece que la similitud con Stork(s) podría utilizarse como licencia fonética para hacer un símil que creía simpático.
También me encantaría conocer tu valoración critica de mi frase sobre Alemania.
¡Gracias por tu ayuda!
01 junio 2011 | 22:48
Cada día se me va poniendo la cara más atontada por los asombros que me producen las palabras que disparan muchas boquitas humanas….cada día desconfio más de todas las ocurrencias mundiales….estoy pensando….¿no será esto del pepino un asunto politico para distraernos?la gripe A,el sida…noticias que ocupan el miedo…esta bacteria parece una antigua conocida por los humanos….posiblemente esté en agua o en carne…no sé…no me gusta nada como estan encarando los conflictos los politicos mundialmente mundiales…es como si todos quisiera parecer «buenos» y realmente solo miran sus bolsillos o los intereses partidistas…al pueblo ¿¿¿¿¿ entretenerlo…que así está distraido con princesas,enfermedades,sangre,….
01 junio 2011 | 23:44
Lo más preocupante del asunto, María, es, que los medios de comunicación y las demás fuentes de información funcionan al unísono, atontándonos, provocándonos,…
Vivo en Alemania desde algunos años y no quisiera afirmar que aquí funcione de otra manera. Ni mucho menos. Pero he de indicar que el nivel de idiotez y chauvinismo de la prensa en mi propio país es descomunal. En vista de los muertos por E.coli, teniendo en cuenta la calidad de nuestra alimentación en toda Europa, abocada a los intereses empresariales y no al consumidor, recordando el contencioso del aceite de colza allá o el vino envenenado acá, el hecho de que los alemanes indiquen la procedencia de los pepinos con el nombre de mi país se me antoja muy relativo. Si hubieran dicho que fueran los pepinos de Holanda, la hortaliza de Italia o a lo mejor los espárragos de la Baja Sajonia, a los españoles no nos hubiera importado UN PEPINO. Pero a mí como español residente en este país, sí me interesa de dónde procede la fruta o verdura que pueda enfermar a mis hijos. No por desprestigiar al productor, sino simplemente por autoprotección. Desgraciadamente nuestra prensa incluso le sirve el pepino alemán para alentar nuestros instintos nacionales.
02 junio 2011 | 00:46
Alemania es otro «referente» mundial que se viene abajo. Después del desastre de Japón, con sus centrales nucleares colapsadas al borde dle mar (ellos, que inventaron la palabra Tsunami)… Ahora lo de Alemania.
Nuestro país ha perdido en exportaciones, mucho. Y costará volver a los niveles «normales». Pero… pensemos ¿y Alemania? ¿Qué queda de ese país supuestamente modélico donde todo funcionaba excepcionalmente bien?
Se lo diré yo: 3 semanas, 16 muertos, 1500 afectados y una epidemia que ¡¡¡no saben porqué está originada!!
Y claro, ya empiezas a tirar del hilo y te dar cuenta de que muchas veces… tras esa fachada de países módelicos en cuanto a funcionamiento… sólo hay fachada:
En 2007 España reportó 8’2 casos por cada 100.000 habitantes de afectados
por salmonella. Alemania, en ese mismo periodo, reportó 67’3 casos por
cada 100.000. Muy por encima de los 31.1 casos de media en la Unión
Europea.
Las fachadas… si carecen de consistencia… se vienen abajo.
Saludos.
02 junio 2011 | 01:42
La gestión de esta crisis por parte de Alemanía ha sido absolutamente imprudente. Pero de cara al exterior la cara de Alemanía es la que nos presenta su gobierno. Me resisto a pensar que los alemanes sean tan obtusos como lo son sus dirigentes. O prefiero pensar que no son así. Lo que me aprece evidente es que esta crisis está haciendo algo más que vaciar nuestros bolsillos. Esta consiguiendo que nos miremos de reojo y desconfiemos de todo y de todos. Y eso es así por que en el fondo, la mediocridad de nuestros dirigentes no se reduce a nuestras fronteras, es un mal de carácter global. Populismo, demagogia, simpleza.. suelen ser los modos de hacer de nuestros políticos, sean estos españoles, alemanes, representas europeos y demás.
04 junio 2011 | 10:09