Si por algo son conocidos mundialmente los japoneses, además de por su milenaria cultura, es por su original y exquisita gastronomía. Como no solo de sushi, yakitori, wakame o teppanyaki vive el ciudadano medio nipón, os presento el damukare: un plato que me ha llamado poderosamente la atención porque casi hay que ser un ingeniero para cocinarlo.
Aunque mi blog no trato normalmente contenido culinario, no he podido resistirme a mostraros varias representaciones de este curioso manjar. Elaborado principalmente con arroz y curry, esta receta siempre incluye una presa (tipo la de las Tres Gargantas o la de Asuán pero en miniatura). El cereal siempre actúa como muro para separar la riada de deliciosa salsa del resto de la guarnición que adorna el plato.