El nacimiento de la infanta Leonor está preñado de una normalidad que arruina un montón de hipótesis y rumores de esos avisados que se las dan de enterados. Ha sido niña, lo cual fuerza revisar aquela incongruencia constitucional que fue mantener la mala costumbre de la monarquía tradicional: preferir varón a mujer.
La reforma debe abordarse sin prisa (no hace falta) pero con normalidad y rigor. En vísperas de la disolución de las cámaras, cuando toque, el Parlamento deberá aprobar el texto de la reforma que revalidarán las nuevas cámaras unos meses más tarde y que será sometida a referendum poco después. La sucesión se rige por la Constitución, no por la monarquía vieja, ahora cuenta la monarquía parlamentaria y la ley constitucional.
Los partidos deben demostrar seriedad y madurez para conducir el proceso con neutralidad y normalidad, sin buscar ventajas ni oportunismos.
Los príncipes Felipe y Letizia se están comportando con seriedad, con mucha paciencia y templanza, haciendo normal la monarquia (para disgusto de los monarquicos viejos) y midiendo los pasos para transitar por emociones tan complejas como las que van del rosa al amarillo.
Pues a mi lo que no deja de sorprenderme es que un asunto como este levante tanto revuelo, mientras que las cuestiones realmente importantes se pasan por alto.Empiezo a estar cansado de tanto opio.
31 octubre 2005 | 22:13
La Monarquía es una institución totalmente desfasada en el tiempo, 100% antisocial. Me apena cerciorarme que un gran número de españoles todavía le rinden culto y, lo peor de todo, es que no todos tienen la excusa de la ignorancia o la incultura. Por ejemplo, si los millones que se invierten en toda la familia real se invirtieran en la Investigación contra el Cáncer, ya tendríamos la vacuna!! Si el dinero se invirtiera en Sanidad, los españoles en lista de espera podrían ser atendidos de inmediato. Si toda esa suma se invirtiera en Cultura, los padres no se verían obligados a explotar a los abuelos como niñeras a jornada completa y sin salario. Más cabeza, señores, que no merecemos vivir en peores condiciones sólo porque a unos se les atribuya un color de sangre distinto…
01 noviembre 2005 | 10:40
Sobre el artículo en sí sólo puedo decir que me suscribo a los comentarios que he leído en diferentes artículos de este periódico.Si se hace una reforma que sea para preguntar si el pueblo quiere una monarquía o una república y no sólo las reformas de la Constitución que, en particular, interesan a esta familia.La Constitución también dice que todos los españoles son iguales…salvo esta familia.Tarde o temprano tendrán que pensar en ponerse a trabajar y ser como los demás ciudadanos.Comparto el parecer de muchos compatriotas que cada vez piden más alto: ¡La República!
01 noviembre 2005 | 19:22
Les ha venido de perlas para aprobar lo del «estatuto» mientras que media España debate acerca de si dentro de cincuenta años la persona que reine será hombre o mujer (lo cual me parece absolutamente irrelevante).
02 noviembre 2005 | 20:31