Byron Schlenker y su hija Emily tienen muchas cosas en común; pero lo que más llama la atención al resto de los mortales son sus descomunales lenguas. Y no es para menos, porque estos dos estadounidenses de Siracusa (Nueva York) se han ganado un lugar de privilegio en el Libro de los Récords por tener las ‘húmedas’ registradas más anchas del mundo.

La fama llamó a su puerta cuando el papá ayudó a su retoña con un trabajo para el colegio. En clase, Byron ojeó por azar un Libro Guinnes y encontró que la lengua más ancha era la de un muchacho australiano (7,9 centímetros). «En ese momento me pregunté si la mía sería más grande«, comentó en un medio local. «Se lo comenté a Emily, y nos fuimos con mi mujer al médico para que nos midiera las lenguas«, añadió. Lee el resto de la entrada »